2. Este tipo de sistemas sustituye al silicio de los chips
convencionales por moléculas de ADN. Las hebras de
éstas (que contienen la información genética de los
seres vivos) funcionan como 'bits' (las unidades básicas
de la informática que asumen valores de 0 o 1 del
sistema binario) mediante reacciones químicas.
3. Los científicos pusieron a funcionar 130 hebras de ADN
de manera conjunta. Utilizando 'puertas vaivén', una
opción que permite organizar e intercambiar hebras de
ADN mediante dispositivos sencillos, comprobaron que
también pueden emplearse para crear puertas lógicas, el
elemento base con que la
computación electrónica manipula
la información.
4. Además pudieron multiplicar por cinco el número
de secciones de ADN, todo lo cual puede servir
para desarrollar dispositivos más complejos.
5. Así como los de computación basados en el silicio están
integrados a una gran variedad de productos
manufacturados, ofreciendo mejor funcionalidad,
comunicación y control, de manera análoga los sistemas
computacionales a escala molecular podrían
incorporarse a materiales biológicos como el suero,
células o tejido para detectar y tratar una enfermedad.
Estos sistemas están enfocados a resolver problemas
computacionales en contextos biológicos, por ejemplo al
interior del cuerpo humano.
6. Erik Winfree y Lulu Qian, quienes expusieron su trabajo
en la revista Science, señalan que el procesamiento en
este tipo de computación es aún lento (calcular la raíz
cuadrada de un número de 4 bits le toma a esta
computadora entre 6 y 10 horas), pero más que la
velocidad, dicen, el objetivo es enriquecer los procesos
químicos para poder programar el comportamiento
molecular; construir sistemas químicos capaces de
analizar los ambientes moleculares en los que se
encuentren, de procesar señales químicas, y tomar
decisiones y acciones a nivel de la química.
7. En el organismo humano, que es una computadora
biológica, el genoma es el software que indica a la
maquinaria celular y molecular del hardware qué hacer.
Pero en lugar de circuitos electrónicos, hay redes
bioquímicas, complejos circuitos de reacciones que lo
hacen funcionar.
8. Los investigadores construyeron en un tubo de ensayo el
circuito bioquímico más complejo jamás creado, con
dispositivos basados en el ADN análogos a los
transistores de la electrónica en un chip de
computadora.
9. En el futuro circuitos bioquímicos sintéticos, por
ejemplo, podrían ser introducidos, durante un
examen clínico, en una muestra de sangre,
detectar los niveles de una variedad de
moléculas, e integrar esa información en un
diagnóstico de la patología.