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Textos y Fotografías de Fernando de Alarcón
Nueva época - Vol. II No. 30 Abril-Mayo de 2012
Del Pensamiento a la Acción: El ejercicio de la Vida
Mientras más se vive, mejor se ve que casi no hay genio en lo extraordi-
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no se conforma con pesar vagamente lo que vamos a hacer en lo porve-
nir, sino que señala con exactitud el peso de lo que hicimos hoy. El más
alto ideal no es sino un ideal provisorio en tanto que no penetre familiar-
mente en todos nuestros miembros.
Es preferible obrar a veces contra el pensamiento, a no atreverse nunca
a obrar de acuerdo con los pensamientos. El error activo es raras veces
irremediable; las cosas y las personas se encargan de corregirlo pronto;
pero, ¿qué pueden hacer en contra del error pasivo, que evita cualquier
contacto con la realidad? Se necesita un mar de buena voluntad para
poner en movimiento el menor acto de justicia o de amor. Es preciso que
nuestras ideas sean diez veces superiores a nuestra conducta para que
nuestra conducta sea simplemente honrada. Es necesario querer enor-
memente el bien para evitar un poco el mal. Por eso se necesita ser
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hora primera de la tarde, que penetra hasta la médula. Todo parece vac-
ío, vano y pobre en nosotros cuando la naturaleza habla de amor. Los
libros nos repugnan, la acción nos hace sonreír con desdén. Sólo la
música, la poesía y la plegaria encierran la suficiente ternura para co-
rresponder a nuestro secreto deseo. Ellas son el único nido en que el
alma dolorida y sensitiva pueda reposar sin herirse. La ciencia es dema-
siado dura, la distracción demasiado insensible, el pensamiento dema-
siado rápido. Felices aquellos que saben cantar, porque adormecen el
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¿Es que nuestra vida corriente es falsa, o son sus impresiones las que
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Respeta cada nueva necesidad que aparece en tu corazón, porque es
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posa. No ahogues tus suspiros, no devores tus lágrimas, ambos anun-
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