2. HERIDAS LEVES
Si la herida es en la mano,
procura inmediatamente
quitar anillos, pulseras u
otros objetos que puedan
obstruir la circulación
sanguínea.
Limpia la herida con agua
limpia y jabón, después con
un desinfectante limpia los
extremos cercanos a la
herida, evita que el
desinfectante entre en la
herida.
Lávate las manos con agua
y jabón, antes de iniciar los
primeros auxilios.
Evita poner pomadas o
polvos antibióticos.
Si la herida no sangra la
puedes dejar descubierta,
siempre y cuando no sea
expuesta a factores
infecciosos
También puedes cubrir la
herida con una gasa estéril,
puedes fijarla con una
venda (no apretada), o con
cinta médica adhesiva.
Cambia la gasa diariamente,
observa si la piel presenta
inflamación, enrojecimiento
o dolor. Si este es el caso,
comunícate con tu médico
para que te recete el
medicamento adecuado.
3. HERIDAS GRAVES
Por lo general una herida grave
requiere de atención médica
urgente, trata de localizar ayuda
médica de inmediato y prosigue
con los primeros auxilios.
Procura guardar la calma ante el
herido.
Lo primero que debes hacer es
evaluar el tipo de herida
Tomar signos vitales.
Tratar de detener la hemorragia
y prevenir el estado de shock.
Cubre la herida, de preferencia
con gasa estéril o de no contar
con ella, utiliza el trapo más
limpio que encuentres.
Cuando la herida fue causada por un
cuchillo, picahielos, etc. y el objeto aún
está clavado en el cuerpo, POR NINGÚN
MOTIVO LO SAQUES, debes tratar que el
objeto se mueva lo menos posible, puedes
improvisar una especie de dona con tela o
gasas y fijarla a la piel.
No des de beber nada a la
víctima.
4. Manipularlas, a no ser
que sean superficiales.
Limpiarlas con algodón,
pañuelos o servilletas
de papel: desprenden
hebras y pelusa que
pueden provocar
infecciones.
Emplear pomadas o
polvos con antibióticos:
pueden dar lugar a
alergias.
Utilizar alcohol o lejía:
queman la zona de la
herida.
Utilizar antisépticos
colorantes: violeta de
genciana,
mercurocromo
Extraer cuerpos
extraños enclavados,
cualquiera que sea su
localización.
NO SE DEBE HACER EN
CASO DE HERIDAS
5. HERIDA POR ARMA DE FUEGO
La dirección que tomó la
bala dentro del cuerpo es
impredecible a simple vista,
pero siempre hay que
pensar en órganos dañados,
fractura de huesos, etc.
Las heridas de bala deben
ser atendidas de inmediato
por un profesional médico.
Revisa el lugar de la herida
y procura detener el
sangrado con un trapo, gasa
limpia.
Acuesta a la víctima de
espaldas con las piernas
recogidas (Flexionadas),
colocando cojines debajo de
las rodillas.
Toma signos vitales Evita el estado de shock
Mantén a la víctima
acostada y cubierta con una
manta, mientras llega la
ayuda médica profesional.
No des de beber nada.
Si la herida es en una
extremidad (brazo, pierna),
cubre la herida, entablilla y
traslada al herido a un
centro médico.
6. HERIDAS DE CARA Y CRÁNEO
Generalmente estas heridas
son causadas por un golpe,
una caída, un accidente
automovilista; este tipo de
heridas, por lo general,
sangran mucho debido a la
vascularización de la zona.
A veces hay hundimiento del
hueso y se observan sus
bordes, hay salida de líquidos,
hemorragia por oídos y nariz.
La víctima puede manifestar
tener visión doble, presentar
vómito, cosquilleo,
adormecimiento o parálisis de
la cara.
Procura recostar a la víctima y
tranquilizarla.
Limpia la herida con una gasa
y agua limpia o suero
fisiológico, no uses
desinfectantes.
Cubre la herida con una gasa,
o tela limpia, evita ejercer
presión sobre la herida, ya
que puede haber fractura con
hundimiento del hueso.
7. HERIDA POR ANZUELO
En este tipo de heridas, lo
indicado es observar la
profundidad del anzuelo.
Nunca trates de tirar del
anzuelo.
Si la punta salió por otro
extremo, lo conveniente es
cortar el extremo puntiagudo
con unas pinzas o alicatas
limpias, y retirar el anzuelo
por el lugar por donde entró.
Si puedes cortar ambos
extremos del anzuelo, lo
puedes sacar por cualquiera
de los lados.
Lava y desinfecta la herida.
Si la herida fue muy
profunda y sangra mucho,
busca ayuda médica
profesional.
8. LEVANTAMIENTO DE PIEL (LACERADAS)
Pide ayuda de inmediato.
Si el aplastamiento es total
no levantes el peso, espera
a los equipos de
emergencia.
En este tipo de
emergencias, es de suma
importancia el tiempo que la
víctima estuvo aplastada,
toma el tiempo de la hora
del accidente (si te es
posible),
Controla las hemorragias
graves y cúbrelas con un
trapo limpio.
En caso de haber fracturas
procura inmovilizar la zona o
completamente a la víctima.
9. QUEMADURA
Protege la quemadura con
un apósito o gasa
esterilizada
Si tienes la mínima duda,
llama a tu médico.
Frente a una quemadura
grave, profunda o situada
en un orificio natural,
después de haber
apartado la causa de la
lesión y ponerla a salvo.
Tomar signos vitales.
Refrescarla
inmediatamente con agua
fría durante 5 minutos
Quitar la ropa o tejidos
que la cubran excepto si
están pegados
10. Tumbar a la víctima sobre la parte
del cuerpo que no esté quemada Llamar a los servicios de urgencia
Vigilar a la víctima hasta que sea
atendida
Las quemaduras graves no deben
cubrirse con nada; lo mejor es
esperar a que lleguen los
servicios de urgencia.
En caso de quemadura química,
también hay que ponerla bajo el
agua hasta que puedan
atendernos.
Si la quemadura es eléctrica, hay
que cortar inmediatamente la
corriente (en lugar de tratar de
separar al accidentado del
enchufe o aparato eléctrico) y
comprobar si está consciente, ha
sufrido algún tipo de insuficiencia
cardiaca o respiratoria.
11. HERIDAS ESPECIALES
Consideraremos
Las amputaciones traumáticas
Las heridas perforantes en el tórax
Las heridas perforantes en el abdomen.
Todas ellas son heridas muy graves, por lo que el traslado al
hospital, tras las actuaciones que a continuación se especifican,
es urgente.
13. AMPUTACIONES TRAUMATICAS
Implican importante pérdida de sangre.
Actuación:
• Cohibir la hemorragia (presión directa, elevación del
miembro, compresión de la arteria correspondiente, e incluso
torniquete si estimamos que existe riesgo de muerte; a 3 cm
de la herida y cada 5 minutos se afloja).
• Controlar constantes vitales.
14. Estas heridas pueden poner en peligro la vida del paciente si
llega a romperse la pleura y entrar aire en el interior del tórax, lo
que impide la respiración.
SÍNTOMAS
15. Estos últimos no solo penetran
en la cavidad torácica sino que
la atraviesan, y presentan un
orificio de entrada y otro de
salida casi siempre de mayor
tamaño; se les denomina
también perforantes o
terebrantes.
Las lesiones penetrantes son causadas
por fuerzas distribuidas sobre una
pequeña área, como en heridas por
armas de fuego (HPAF), por armas
punzocortantes, cuchillo, punzón
(HPAB) o por caídas sobre objetos
puntiagudos. En este tipo de lesión
cualquier estructura u órgano de la
cavidad torácica puede ser lesionado.
Superficiales en la piel, no
perforan ningún tipo de órgano y
no son tan profundas.
16. SÍNTOMAS
Dificultad respiratoria acusada:
el herido siente que se ahoga.
Dolor intenso en la herida que
aumenta al respirar.
Parece que el paciente
“respira” por la herida: salida de
sangre mezclada con aire,
espumosa.
Se oye una especie de silbido
en la herida.
Salida de sangre por la boca
con golpes de tos.
17. Tapar la herida con una gasa.
Colocar encima un trozo de plástico
o papel de aluminio (que actúa
como apósito impermeable) y fijarlo
con esparadrapo, celofán, etc. por
todos los extremos menos por uno.
Este pequeño hueco hará de válvula
que permita la salida del aire que
entró e impidiendo nuevas entradas
de aire.
Aflojar las ropas que opriman.
Vigilar las constantes vitales.
Si hay un cuerpo extraño enclavado:
NO extraerlo. Colocar al herido en posición semi-
sentado para facilitar su respiración.
18. Estas heridas pueden provocar shock por
hemorragias importantes externas e internas,
perforación del tubo digestivo y salida de asas
intestinales al exterior.
19. Cubrir la herida y cohibir la hemorragia con
apósitos.
Si hay salida de intestinos, cubrir con gasas o
paño humedecido sin presionar ni manipular:
no se debe NUNCA intentar reintroducirlos.
JAMÁS extraer cuerpos enclavados.
NO dar de comer, beber o suministrar
medicamentos al accidentado.
Colocarlo tumbado boca arriba con las
piernas flexionadas.