2. Introducción
Habrá un día en que no se puedan leer los discos duros en los que actualmente se guarda
todo tipo de información, un escenario que los archiveros y conservadores de datos quieren
evitar, pues implicaría la pérdida del conocimiento acumulado por la humanidad. De ahí la
importancia de encontrar nuevas formas de almacenar información digital que permitan
preservar esos registros de cara a generaciones futuras.
Hasta el siglo XXI, las bibliotecas conservaban el conocimiento cultural en forma de libros. Sin
embargo, el modelo de almacenamiento y conservación cambió con la era digital, en la que el
volumen de información se ha multiplicado. El problema surge cuando los discos duros fallan,
las páginas web desaparecen o se pone en riesgo la información almacenada por una empresa
si quiebra. Y eso sin contar que aún sabemos cómo acceder a formatos obsoletos.
3. Utiliza las redes sociales para educar
Estas son algunas ideas para hacer uso de las herramientas como redes sociales y demás servicio en línea para
implementarlas en tu curso y aprovechar la tecnología para enseñar de forma más divertida e interactiva.
Facebook: es una de las redes sociales más populares en este momento, quizás no tengas ningún estudiante
que no la utilice. Entonces ya que ellos están tan familiarizados con ella, puedes desarrollar dinámicas de
trabajo que involucre su uso. Por ejemplo: crear un grupo de toda la clase en donde detalles tareas específicas
a través de él y te comuniques. Qué tal entregar tareas a través de está red social.
Twitter: encontré un artículo de Onlinecolleges en donde comparten 101 maneras de utilizar la red social de
Twitter para implementarlas no sólo en el salón de clase sino también a nivel de campus o bibliotecas
universitarias.
Blogs: revisa lo que estos 20 profesores han logrado al crear su blog para los cursos que imparten. Recuerda
que un blog es una excelente herramienta para crear proyectos, motivar a tus estudiantes a que investiguen,
escriban y brindarles la oportunidad de publicar su trabajo en un medio cada vez más accesible.
Youtube: es una herramienta que te permitirá crear un canal en donde puedes crear proyectos con tus
estudiantes. Recuerda que en la actualidad una cámara de vídeo es más accesible y fácil de usar, qué tal si
creas proyectos en grupo sobre temáticas para desarrollar en vídeo. Qué tal una exposición en vídeo o el
proceso de su experimento grabado para presentarlo en clase.
Flickr: enseña a tus estudiantes a tomar fotografías y crea una galería con ellos en donde aprendan sobre el
contenido de un curso. Qué tal ponerlos a realizar tareas utilizando su cámara de fotos y presentando sus
trabajos a través de este servicio.
4. No prohíbas el uso de laptops úsalas
Conozco profesores que prohíben el uso de laptops en sus clases, porque consideran
que quitan la atención al estudiantes. Sin embargo, debo recordarte que en algunos
países de nuestra región el tener una computadora personal es un lujo y si tienes la
oportunidad de tener a todos tus alumnos con la propia qué mejor oportunidad,
aprovechar el recurso para crear nuevas dinámicas de trabajo en clase y hacer uso de
herramientas para educar.
Es muy probable que si tu estudiante tiene su laptop con conexión a internet en tu
clase, seguro estará metido en el Messenger, Facebook, Twitter, Youtube, Flickr y su
correo electrónico. Lo que puedes hacer es utilizar precisamente esas herramientas
para educar, todo es cuestión de creatividad, contenido y conocimiento para hacer
que tu clase cobre otro sentido haciendo uso de esas herramientas.
5. En resumen, la metodología sobre la transmisión de los conocimientos debe dirigirse:
1. Hacia una formación integral del jurista de acuerdo con las circunstancias sociales, políticas y
económicas de nuestro entorno.
2. Buscando la individualización de la enseñanza impartida, en lugar de tratar al estudiantado
como un todo homogéneo. El uso de fichas individuales, la realización de trabajos, las consultas
en clase y en el seminario, y la existencia de actividades extracurriculares, junto con otros
métodos, deben permitir esta adecuación a cada persona, posibilitando la oferta de material
adicional, sugiriendo lecturas y ejercicios, pidiendo explicaciones, etc.
3. Ha de fomentarse la participación del alumnado, su aportación personal a la enseñanza de la
materia, y su contribución al curso.
6. 4. Ha de mantenerse un continuo seguimiento del grado de asimilación de las lecciones impartidas. Las preguntas
que se hacen en clase o las que se hacen en el seminario deben ser tenidas muy en cuenta. La atención al alumno
después de clase en sus consultas, a pesar de detraer tiempo al resto de las actividades, es útil por la información
que proporciona: permite ver lagunas o insuficiencias de la explicación dada por el profesor y le proporciona la
oportunidad para sondear las distintas variantes de enfoques, hasta encontrar el que sea más fácilmente
comprendido. En este sentido, las horas de tutoría después de clase pueden ser muy productivas, si bien hay que
reconocer que son muy pocos los alumnos que las utilizan de forma efectiva.
5. El programa ha de estar organizado de forma que la relación entre los diferentes temas muestre su sentido, su
capacidad para volver sobre los mismos temas con mayor profundidad o a situaciones de mayor complejidad o
realismo, de manera que la perspectiva de la asignatura no se pierda en una sucesión de temas cuya hilación no se
termina de comprender.
6. El examen es el exponente último de la calidad del profesor y del alumno. Es preciso poner en juego los diversos
elementos que permitan, con tiempo, evitar frustraciones y fracasos, tanto por parte del alumno como del profesor.
7. En suma, es necesario transmitir los conocimientos utilizando métodos docentes dinámicos y activos, en los que
se trate de eliminar el negativo efecto de la carencia de medios y masificación propias de la Universidad Española,
recalcando la función más activa que el profesor debe tener, especialmente a la hora de orientar, comentar y
discutir con los alumnos el contenido de las materias dadas, evitando que aquéllos se limiten a desempeñar con
carácter exclusivo un papel meramente pasivo, que prácticamente tan sólo se reduzca a preparar los exámenes “de
memoria.
7. En la educación
Los centros educativos están continuamente actualizando sus planes de estudios para
mantenerse al día con acelerados desarrollos tecnológicos. Esto a menudo incluye
computadoras en las aulas, la utilización de software para exponer los planes de estudio y
materiales de estudio disponibles on-line para los estudiantes. Algunas aulas están diseñadas
para utilizar pizarras digitales interactivas y dispositivos de respuesta de la audiencia (audience
response systems en inglés). Estos sistemas son muy efectivos cuando los profesores están
también digitalmente alfabetizados.
Los profesores habitualmente imparten enseñanzas de alfabetismo digital proporcionando a
estudiantes que utilizan las computadoras, las competencias y conocimientos necesarios para
comprender y beneficiarse de la sociedad de la información en la que viven actualmente. Estas
enseñanzas incluyen la habilidad para verificar la existencia de fuentes creíbles en la red y para
citar los sitios Web. Google y Wikipedia que son usados por los estudiantes para “las
investigaciones de la vida diaria”, así como los recursos que le ayuden a resolver problemas y a
desarrollar su competitividad continuamente[4]
A menudo se requiere que los educadores tengan certificados de alfabetismo digital para
enseñar cierto software y sobre todo para prevenir el plagio entre los estudiantes.
Las bibliotecas han aumentado el uso de juegos tales como la Digital Literacy Contest
(Competencia de Alfabetismo Digital) para incrementar la atención sobre el alfabetismo digital.