Este documento presenta una unidad didáctica sobre las misiones para niños de primaria. Tiene como objetivos mostrar a los alumnos cómo los misioneros son luz y palabra para los demás, animarlos a ser misioneros entre sus amigos y familia, e implicarlos en actividades misioneras. El contenido incluye referencias bíblicas sobre Jesús como luz del mundo y sobre los primeros discípulos, un texto sobre la vida de un misionero en China, y cuatro actividades para los niños.
2. I. A modo de presentación
El contenido de esta Unidad Didáctica, con ocasión del Domingo Mundial de las Misiones (DOMUND), está
inspirado en el lema de la Jornada: "La Palabra, luz para los Pueblos". En ella se trata de mos-
trar a los alumnos de estas edades cómo los misioneros son Luz y Palabra para los demás.
Nos proponemos como objetivos didácticos:
1. Presentar a los misioneros como la Luz y la Palabra para los que aún no conocen a Jesús y sus enseñanzas.
2. Animar a los niños a ser misioneros de Jesús en su familia, en la escuela y entre sus amigos.
3. Implicarles en las actividades que con motivo del DOMUND se organizan en su entorno.
II. Inicio
1. Escuchamos a Jesús
Jesús dice:
“Yo soy la luz del mundo. El que me siga tendrá la luz que le da vida y nunca andará
en oscuridad” (Jn 8,12).
2. Un misionero (Daniel Cerezo Ruiz, misionero comboniano en China)
“Son las cinco y media de la mañana y el despertador me da la bienvenida para el nuevo día. En la capilla me
encuentro en la oración con Aquel por quien estoy aquí; intento verme y ver las cosas del día que tengo delan-
te con los ojos de Dios. Le doy gracias por el nuevo día y le pido que pueda transparentarle a Él, ya que en defi-
nitiva esa es la tarea del discípulo. La hora de oración me lleva a la eucaristía que solemos tener con cinco o
seis cristianos que diariamente se acercan a la celebración eucarística de las 7,15 de la mañana.
Después del desayuno voy a la oficina de la Asociación de Servicios Diocesanos de Acción Social de Macau
toda la mañana. Con un grupito reducido de personas, la oficina realiza proyectos de solidaridad y promoción
humana en la China rural y montañosa, donde se encuentran los más pobres.
Después de la comida mi trabajo se realiza en la parroquia. Me toca preparar la homilía y liturgia dominical en
chino mandarín. No cabe duda de que lleva su tiempo, ya que hay que ver la forma más apropiada de compartir el
Evangelio con la gente que viene a la eucaristía el domingo a las 8,30 de la noche, en su mayoría mujeres que han
venido de China continental en busca de un trabajo mejor, para que puedan recibir la novedad de la Buena Nueva”.
3. Vemos la revista Gesto (portada y página 3).
Guión para la clase de Religión (E. Primaria) / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias
3. III. Desarrollo
A la luz de estas referencias vamos a descubrir al misionero como:
un amigo de Jesús que escucha su Palabra,
un discípulo de Jesús que sigue su camino,
un testigo de Jesús que lleva a los demás su luz,
un anunciador de Jesús que habla a los demás de Él.
1. Los misioneros, amigos de Jesús
A un amigo se le busca, se le escucha, se le hace caso, se quiere
estar con él…
Unos discípulos de Juan Bautista descubrieron que Jesús era un
personaje importante. Se sintieron atraídos por él y le siguieron...
“Jesús se volvió y, al ver que le seguían, les preguntó:
- ¿Qué estáis buscando?
Ellos dijeron:
- Maestro, ¿dónde vives?
Jesús les contestó:
- Venid a verlo.
Fueron, pues, y vieron dónde vivía; y pasaron con él el resto
del día, porque ya eran como las cuatro de la tarde”.
(Jn 1,38-39)
Los misioneros también sintieron interés por Jesús e hicieron lo mismo. De los primeros contactos con Él
nació una amistad que nada ni nadie ha podido romper. Podemos decir que ellos son los mejores amigos de Jesús.
Si somos amigos de otros, también podemos serlo de Jesús. Actividad nº 1
2. Discípulos de Jesús
El trato cercano con un amigo lleva a querer ser del mismo grupo de sus amigos...
En ocasiones Jesús pide aún más, dejar otras cosas, aunque sean buenas, para formar parte de los que van
a vivir la misma misión; dejarlo todo y seguirle:
“Jesús paseaba por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a dos hermanos: a Simón, también lla-
mado Pedro, y a Andrés. Eran pescadores, y estaban echando la red al agua. Jesús les dijo:
- Seguidme, y yo os haré pescadores de hombres.
Al momento dejaron sus redes y se fueron con él.
Un poco más adelante vio Jesús a otros dos hermanos: Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que
estaban con su padre en una barca reparando las redes. Jesús los llamó, y al punto, dejando ellos la
barca y a su padre, le siguieron”.
(Mt 4,18-22)
“Al salir Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado en el lugar donde cobra-
ba los impuestos para Roma. Jesús le dijo:
Guión para la clase de Religión (E. Primaria) / Domund 2009
4. - Sígueme.
Mateo se levantó y le siguió.
Sucedió que Jesús estaba comiendo en la casa, y muchos cobradores de impuestos, y otra gente
de mala fama, llegaron y se sentaron también a la mesa con Jesús y sus discípulos”.
(Mt 9,9-10)
Los misioneros, después de los primeros encuentros con Jesús, deciden dejarlo todo para incorporarse al
grupo de los elegidos para anunciar el Reino de Dios como lo hizo Jesús.
Para descubrir cómo es un discípulo de Jesús hacer la Actividad nº 2
3. Testigos de Jesús
Los amigos de Jesús no se contentan solo con hacer las cosas que Él hizo. Para ser buen cristiano no es
suficiente con cumplir los mandamientos y hacer cuanto Jesús desea. Sus amigos tratan de ser como Él; ser
sus testigos ante los demás. Así se lo pidió a San Pablo cuando se encontró con él:
“Levántate, ponte en pie, porque me he aparecido a ti para que me sirvas y para que seas testigo
de lo que ahora has visto, y de lo que aún te mostraré [...] Te envío ahora. Y te mando a ellos para que
les abras los ojos y no anden más en la oscuridad, sino en la luz”.
(Hch 26,16-18)
Los misioneros, cuando llegan a un lugar de misión, apenas saben el idioma y menos aún las costumbres de
ese pueblo, pero tratan de ser como Jesús: sirven en silencio. Ante sus obras los demás les preguntan: ¿por
qué lo hacen? Su vida -su testimonio- despierta el interés por Jesús.
En la vida nos encontramos con otros testigos de Jesús. Actividad nº 3
4. Anunciadores de Jesús
Quien ha tenido una experiencia gratificante la comunica a los demás. No puede callar. Proclama lo que le
ha sucedido. Así los cristianos se convierten en Luz y Palabra...
“Lo que os digo en la oscuridad,
decidlo a la luz del día; lo que os digo
en secreto, proclamadlo desde las
azoteas de las casas”.
(Mt 10,27)
Los misioneros, además de ser testigos,
proclaman la Buena Noticia del Evangelio.
Anuncian la Palabra de Dios con palabras y con
signos. Ellos son testigos de la Palabra y de la
Luz que es Jesús.
La Iglesia ha nacido en los países como fruto de la llegada de los misioneros.
Averiguar la relación entre el patrono de un país y su primer evangelizador. Actividad nº 4
Obras Misionales Pontificias
5. ACTIVIDADES
ACTIVIDADES
ACTIVIDAD 1
Desde la experiencia personal, completar este cuadro sobre la amistad con Jesús:
Con un amigo... Con Jesús...
Hablamos de nuestras cosas
Le escucho
Le pido consejo
Jugamos juntos
Realizamos nuevas aventuras o proyectos
ACTIVIDAD 2
El 11 de octubre Benedicto XVI declarará que el misionero de los
leprosos de Molokai, el P. Damián, es santo. Su vida fue como la
de Jesús: dejó su casa y fue a encontrarse con Jesús atendiendo
a los leprosos y conviviendo con ellos.
Comentar entre todos la vida de este santo misio-
nero que ha sido reproducida en la revista Gesto
(páginas 4 y 5).
ACTIVIDAD 3
Enumerar algunas personas que pueden ser consideradas como testigos de Jesús y señalar por qué lo son:
Nombre ¿Por qué es testigo de Jesús?
ACTIVIDAD 4
Averigua los países en los que anunciaron el Evangelio estos santos patronos:
Patrón Lugar
Santiago Apóstol España
Santo Tomás Apóstol
San Patricio
San Bonifacio
San Esteban
Santos Cirilo y Metodio
San Francisco Javier
Santo Toribio de Mogrovejo
San Carlos Lwanga y compañeros mártires
San Pedro Chanel
Tu diócesis
Juan Martínez Sáez, FMVD
Secretariado de la Comisión Episcopal de Misiones
Guión para la clase de Religión (E. Primaria) / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias
6. I. A modo de presentación
Tanto los misioneros como la celebración del Día de la Misiones, conocido como el DOMUND, son dos
realidades que suscitan una gran simpatía en todos los ciudadanos, incluso también entre los no creyentes o
practicantes.
Los pequeños y grandes núcleos urbanos sienten un cierto orgullo por la persona y el trabajo de sus con-
ciudadanos que un día “dejaron su tierra” para marchar a otros lugares sin otra razón, más que el amor.
Ante la figura de un misionero, de una u otra manera todos se preguntan: ¿por qué?
Antes de continuar la clase realizar la Actividad nº 1
II. Para empezar...
Miramos el cartel del DOMUND:
Un misionero: Con la Palabra de Dios en la mano
anuncia la Buena Nueva del Evangelio. Ni siquiera tiene un
templo o un recinto cerrado para hacerlo. Como lo hizo
Jesús, al aire libre.
La Palabra (en la mano y en el lema): Es la Palabra de
Dios proclamada a los hombres para que la escuchen,
mediten y acojan como la “carta” escrita por Dios para
cada uno.
La cruz: Clavada en la tierra. Es la señal de identidad
para aquellos que se han reunido en el nombre del Señor,
procedentes de todos los Pueblos.
DOMUND: Domingo Mundial de las Misiones para
recordar la actividad misionera de la Iglesia y unirse a
quienes lo han dejado todo para anunciar el Evangelio.
La entrevista con Gonzalo Garzo en Supergesto ofrece la dimensión humana del joven que
ha querido compartir un tiempo con los más pobres y necesitados. Actividad nº 2
Guión para la clase de Religión (E.S.O.) / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias
7. III. Necesitamos más información
Para entender el sentido de este día y su significado en la vida de la Iglesia buscamos más información en:
1. La Palabra de Dios
El libro de los Hechos de los Apóstoles narra cómo Pablo, misionero entre los Pueblos, sale de Tróade para
dirigirse a Macedonia. Así comenzó la evangelización de Europa. En el origen de cada comunidad cristiana
encontramos un misionero que llega de lejos a anunciar el Evangelio:
“Por la noche Pablo tuvo una visión. Un macedonio estaba de pie suplicándole: «Pasa a Macedonia y
ayúdanos». En cuanto tuvo la visión, inmediatamente intentamos pasar a Macedonia, persuadidos de
que Dios nos había llamado para evangelizarlos” (Hch 16,9-10).
2. La vida de los cristianos
Hace muchos años, en 1822, una mujer francesa, Paulina Jaricot, con un grupo de laicos en Lyon comenzó
una campaña de oración y de colaboración económica por las misiones. Eran grupos de diez personas, que rápi-
damente fueron multiplicándose. En poco tiempo se propagó por distintos países y continentes, hasta que el
3 de mayo de 1922 fue reconocida como Obra Pontificia por Pío XI, pasando su sede central de Lyon a Roma.
De esta manera se convirtió en un órgano oficial de la Iglesia para la cooperación misionera.
3. Las enseñanzas de la Iglesia
Con motivo del día del DOMUND el Papa envía un Mensaje a los cristianos para recordarles que la actividad
de las misiones es una tarea de todos, no sólo de los misioneros. En esta ocasión nos dice: “Pido por ello a
todos los católicos que oren al Espíritu Santo para que aumente en la Iglesia la pasión por la misión de difun-
dir el Reino de Dios, de sostener a los misioneros, a
las misioneras, y a las comunidades cristianas...
especialmente en esta época de crisis que está
atravesando la humanidad, para iluminar a los
Pueblos con el Evangelio de la caridad”.
4. El testimonio de los
misioneros y misioneras
Muchos misioneros y misioneras al sentir en su
corazón la llamada de Dios parten para otro país
donde Jesús y su Evangelio aún no han sido anuncia-
dos. Así lo refiere un misionero al volver por segun-
da vez a la misión, en el Chad, de la que tuvo que
ausentarse por unos años:
“Encontré a Paulina, una excelente catequista, que muy feliz me dijo que su hijo está haciendo el noviciado
con los javerianos en Kinshasa. Luego a Gaby, pelo blanco, otro catequista feliz por los muchos jóvenes que ha
acompañado al bautismo y de cada uno de los cuales me dio noticias. Pero lo mejor fue cuando encontré a un
«abbé», sacerdote diocesano... Federic Senekna, y recordé a un adolescente, hijo de padre polígamo, que hace
muchos años se me presentó diciéndome que quería ser cristiano, pero que su padre no le dejaba. No os podéis
imaginar la alegría que tuve al encontrármelo ya sacerdote, y la alegría que tengo cada vez que lo encuentro y
me dice: «Lale, bunu» (Hola, papá). ¡Qué bueno es el Señor con nosotros!”.
Descubrimos algunos países donde trabajan los misioneros. Actividad nº 3
Guión para la clase de Religión (E.S.O.) / Domund 2009
8. IV. Estos hechos pueden comprenderse…
1. Desde el compromiso humanitario
La labor de los misioneros es un servicio a los más necesitados. La mayoría de los pueblos que desconocen
el Evangelio se encuentran en situación de pobreza y marginación. Cuando los misioneros llegan a un país sue-
len hacerlo con el pasaje de ida, nunca con el de vuelta. Van para que-
darse. Así sucede.
Un misionero en la misión se identifica de tal manera con las gen-
tes a las que sirve que se hace uno de tantos, se “encarna” como lo
hizo Jesús. “Es uno de los nuestros”, dice su gente.
2. Desde la fe
El misionero descubre que cada persona es amada por Dios. Eso
está por encima de su raza, su religión, su cultura... Estas realida-
des son amadas por el misionero, porque forman parte de la condi-
ción humana del pueblo al que sirve.
La fe le ayuda y le empuja a amar a los otros y compartir con ellos
la luz que ilumina su ser y su vivir. Desde esta experiencia de fe
ayuda a los otros a descubrir el sentido de la vida.
3. Desde el seguimiento de Jesús
El misionero ha descubierto en el Evangelio que Jesús sigue
teniendo predilección por los más pobres y necesitados.
Siguiendo su ejemplo, el misionero sana a los enfermos, acompa-
ña a los tristes, tiene hambre con los que padecen necesidad.
Como sucedió con Bartimeo a la salida de Jericó, así acontece en
la misión del misionero:
“Jesús, dirigiéndose a él, le dijo: «¿Qué quieres que te
haga?». El ciego le dijo: «Rabbuní, ¡que vea!». Jesús le dijo:
«Vete, tu fe te ha salvado». Y al instante recobró la vista y
le seguía por el camino” (Mc 10,51-52).
4. Desde la celebración de la fe
Los cristianos, después de escuchar la Palabra de Dios y meditarla en su corazón, celebran con la Iglesia el
misterio de la fe: la Eucaristía. Es el momento más importante de su vida. Por eso antes de partir recuerdan
el mandato de Jesús: “Id y anunciad el Evangelio...”. El “podéis ir en paz” sigue siendo el envío misionero.
Ha llegado el momento de formalizar nuestro compromiso. Actividad nº 4
V. Epílogo
Tú puedes ser misionero, siendo Luz para los demás.
“Nadie enciende una lámpara y la pone en sitio oculto, ni bajo el celemín, sino sobre el candelero, para que
los que entren vean el resplandor. Tu ojo es la lámpara de tu cuerpo. Cuando tu ojo está sano, todo tu cuerpo
está iluminado; pero cuando está malo, también tu cuerpo está a oscuras. Mira, pues, que la luz que hay en ti
no sea oscuridad. Si, pues, tu cuerpo está enteramente iluminado, sin parte alguna oscura, estará tan ente-
ramente luminoso como cuando la lámpara te ilumina con su fulgor” (Lc 11,33-36).
Obras Misionales Pontificias
9. ACTIVIDADES
ACTIVIDADES
ACTIVIDAD 1
El profesor puede iniciar una conversación con los alumnos para profundizar entre todos en estas u otras
cuestiones:
1. ¿Qué nos dice la palabra misionero o misionera?
2. ¿Conozco algún misionero personalmente o por referencias? ¿Qué recuerdos me evoca?
3. ¿Cómo entiendo el Día del DOMUND?
4. ¿Por qué un misionero hace lo que hace? ¿Qué razones le mueven para obrar así?
ACTIVIDAD 2
En la revista Supergesto se publica una entrevista con un joven que ha
vivido durante unos meses la experiencia de la misión en Etiopía. Sus res-
puestas pueden ayudar a comprender el sentido de la celebración del Día
del DOMUND.
Comentar cada una de las respuestas y relacionarlas con el men-
saje que se descubre en el cartel y el lema de esta Jornada.
ACTIVIDAD 3
Buscar información sobre la situación de la Iglesia en algunos países del mundo para completar este cua-
dro y orar por sus habitantes:
Ayuda de España La religión
País Habitantes Católicos más numerosa
(Rev. Illuminare)
Senegal 648.358,99 Islámica
Uganda 12.283.658
Etiopía 78.808.540
Guatemala 10.578.000 Católica
Sri Lanka 221.590,80
Nueva Zelanda 499.000
Bolivia 337.676,19
Myanmar 52.650.000 Budista
ACTIVIDAD 4
Entre todos podemos articular nuestro compromiso misionero en este mes de octubre o/y -¿por qué no?-
durante el curso.
1. Oración por quienes trabajan en la misión: oración de la “Reina de las Misiones” y Vigilia de la Luz.
2. Cooperación económica con nuestros donativos y la participación de los demás: tríptico, hucha, sobre...
3. Integrarse en grupos misioneros: Itinerario misionero de jóvenes y revista Supergesto.
4. Ser luz para los demás: “Porque en otro tiempo fuisteis tinieblas; mas ahora sois luz en el Señor. Vivid como
hijos de la luz; pues el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad. Examinad qué es lo que agrada al
Señor, y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, antes bien, denunciadlas” (Ef 5,8-11).
Anastasio Gil García
Secretariado de la Comisión Episcopal de Misiones
Guión para la clase de Religión (E.S.O.) / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias
10. Monición de entrada
La liturgia de este domingo nos invita a abrir nuestro corazón para dar cabida al amor
universal de Dios, que se extiende a todos los hombres: “El Hijo del hombre ha venido
para dar su vida en rescate por todos”. En las palabras de Jesús “por todos”, que tam-
bién resuenan en las palabras de la consagración, la Iglesia aprende a mirar con la mira-
da de Dios y a sentir según su corazón.
La celebración en este domingo del DOMUND refuerza esta mirada universal de la Iglesia, ya que su lema
(«La Palabra, luz para los Pueblos») nos hace comprender que Cristo quiere hacerse presente en todos los pue-
blos con su Palabra, para que le acojan con fe como Salvador, ya que Él ha dado su vida en rescate por todos.
Escuchemos su Palabra y acojamos el sacramento eucarístico con devoción y amor, para que nos dé el don
de un corazón misionero.
Acto penitencial
Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de su Hijo; en Él ponemos nuestra fe
y nuestra esperanza:
· Hijo de Dios, que te compadeces de todos. Señor, ten piedad.
· Salvador del mundo, que das tu vida en rescate por nosotros. Cristo, ten piedad.
· Señor resucitado, que iluminas a los pueblos. Señor, ten piedad.
Monición a las lecturas
El lema del DOMUND nos invita a reflexionar sobre el alcance universal que tiene la Palabra de Dios. Ella
es “luz para los Pueblos”, es decir, hace comprender cómo las aspiraciones y deseos que hay en el corazón de
cada ser humano y de cada pueblo alcanzan pleno cumplimiento en Cristo, la Palabra hecha carne.
Nosotros hemos recibido la luz de la fe en el bautismo y escuchamos la Palabra de Dios en cada celebración
litúrgica; por eso, somos especialmente agraciados y a la vez particularmente responsables de que esta luz lle-
gue a todos los hombres y pueblos en su camino histórico hacia Dios.
Sugerencias para la homilía
· Las lecturas de la liturgia de este día giran en torno al valor que tiene el sacrificio de Cristo. En él reco-
bramos la esperanza, porque Dios nos ofrece su alianza incondicional desde el perdón y la reconciliación. La
invitación es, pues, a “acercarnos al trono de gracia para encontrar la misericordia de Dios” (2.ª lectura).
· Cristo muerto y resucitado llena al cristiano y a la Iglesia de una nueva esperanza; es misión de la Iglesia “con-
tagiar de esperanza a todos los pueblos” (Mensaje de Benedicto XVI, n. 1). La obra de la reconciliación univer-
sal que Cristo lleva a cabo con su obediencia al designio del Padre es el “nuevo comienzo”, “el futuro de la nueva
creación… que brilla ya en nuestro mundo y enciende… la esperanza de la nueva vida” (Mensaje, n. 1). Por eso,
la Iglesia tiene la responsabilidad de que sea conocida y vivida por todos (cf. Mensaje, n. 2). El DOMUND es la
ocasión de renovar esta conciencia de la necesidad perenne de la misión ad gentes (cf. Mensaje, n. 3).
Liturgia / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias
11. · Signo de la salvación de Dios son las numerosas obras que la Iglesia y los misioneros llevan a cabo para
mejorar las condiciones de vida de las personas y los pueblos que viven en la pobreza. El Día Internacional para
la Erradicación de la Pobreza, que la ONU instituyó para ser conmemorado el 17 de octubre, nos debe recordar
a los cristianos cómo la Palabra de Dios nos revela su deseo de que nos amemos como hermanos y combatamos
toda desigualdad injusta o discriminación, así como que esto es parte irrenunciable de la misión.
· La Palabra impulsa a la misión y “este impulso misionero ha sido siempre signo de vitalidad, así como su
disminución es signo de una crisis de fe” (Mensaje, n. 5). Nuestras comunidades diocesanas y parroquiales tie-
nen que acercarse a la Palabra de Dios para vigorizar su fe y hacerse misioneras, iluminando a su alrededor con
la luz del Evangelio.
Oración de los fieles
Dios nos ama y sabe lo que más nos conviene. Por eso, le presentamos nuestra oración confiada de hijos suyos.
R. Padre de todos, escúchanos.
· Por la Iglesia universal, para que continúe ensanchando su corazón para acoger a todos los hijos de Dios
dispersos por el mundo. Oremos.
· Por el Papa, los obispos y los demás pastores, para que su ministerio sea en beneficio de la salvación de
todos los hombres y pueblos. Oremos.
· Por todos los fieles cristianos, para que en su vida cotidiana hagan suyas las perspectivas universales
de la Iglesia. Oremos.
· Por todos los que tienen responsabilidades de gobierno en los pueblos del mundo, para que el Día
Internacional para la Erradicación de la Pobreza, celebrado ayer, 17 de octubre, les lleve a pensar
también en los demás pueblos de la tierra. Oremos.
· Por los misioneros y misioneras, para que encuentren en la Palabra de Dios la luz para evangelizar a
los pueblos. Oremos.
· Por nuestra comunidad diocesana y parroquial, para que la escucha de la Palabra de Dios la mueva a
cooperar con las Iglesias más necesitadas. Oremos.
Dios, Padre nuestro, que nuestra oración y nuestra vida sean alabanza de tu gloria para que todos los pueblos
contemplen el rostro de tu Hijo, Jesucristo. Él que vive y reina por los siglos de los siglos.
Monición al ofertorio
Ofrecemos en primer lugar el pan y el vino, que se transformarán en el Cuerpo y la Sangre del Señor, para
que la comunión con Él nos llene de espíritu misionero.
También ofrecemos un cirio para que su luz resplandezca en esta celebración, significando nuestro compro-
miso de dejarnos iluminar por la Palabra de Dios; que ella cada día más sea “luz para nuestros pasos”, y noso-
tros, a la vez, “luz del mundo”.
Finalmente, ofrecemos la colecta, destinada a la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe: es la ayuda
fraterna y cristiana que damos para que la luz del Evangelio llegue a todas las personas y pueblos.
Oración sobre el pueblo y bendición
Dios, Padre santo, que en el bautismo nos has iluminado con la luz de la fe en tu Hijo, muerto y resucitado:
haz que la escucha de tu Palabra y la participación en tus sacramentos nos impulsen a ser, cada día más, luz
para todos los que han sido redimidos por su Sangre. Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor.
Juan Martínez Sáez, fmvd. Colaborador de las Obras Misionales Pontificias
Liturgia / Domund 2009 Obras Misionales Pontificias