1. EVALUACION DE LECIONADOS
Tenemos la evaluación inmediata simultánea, es la evaluación en la que se determina en
un lapso no mayor a 10 segundos el estado general del paciente, estado de conciencia,
condición respiratoria y circulatoria, la manera como se realiza esta evaluación es sencilla
una vez en tu posición de seguridad se toca al paciente en los hombros y se le agita
levemente mientras se le pregunta cómo esta, así como se muestra en el gráfico.
Luego determinamos el estado de conciencia ubicándolo con método AVDI
A: La persona se encuentra alerta, habla fluidamente, fija la mirada al explorador y está
pendiente de lo que sucede al entorno suyo.
V: La persona presenta respuesta verbal, aunque no esta alerta puede responder
coherentemente a las preguntas que se le realicen, y responde cuando se le llame.
D: La persona presenta respuesta solamente a la aplicación de algún estimulo doloroso,
como presionar firmemente alguna saliente ósea como el esternón o las clavículas; pueden
emplearse métodos de exploración menos lesivos como rozar levemente sus pestañas o
dar golpecitos con el dedo en medio de las cejas esto producirá un parpadeo involuntario ,
que se considerará respuesta.
I: La persona no presenta ninguna de las respuestas anteriores, es decir esta inconsciente.
2. HERIDAS Y HEMORRAGIAS
Una hemorragia es la salida de sangre del los vasos sanguíneo de una persona debido a la
rotura de los mismo la cual puede ser debida principalmente por un traumatismo, rotura
de un vena, un corte.
Clasificación
Las hemorragias se pueden clasificar por:
Según su naturaleza
Externas: rotura de un vaso sanguíneo provocando la salida de sangre al exterior.
La rotura puede ser provocada por cortes, traumatismo o fracturas abiertas.
Internas: la sangre se queda retenida en el interior del organismo en alguna
cavidad, no sale al exterior.
Provenientes de orificios naturales: son como las internas pero exteriorizadas por
orificios naturales como pueden ser la nariz o el oído.
Según su procedencia
Venosas: salida continua, color rojo oscuro.
Arteriales: sangre con un rojo muy vivo y brillante, con un flujo intermitente y gran
presión.
Capilares: salida de sangre en poca cantidad, flujo en forma de pequeños puntos
sangrantes que confluyen.
La gravedad de la hemorragia dependerá del volumen sanguíneo que haya perdido,
velocidad en que sale y pierde la sangre y las condiciones del paciente (enfermedades,
edad, medicamentos que toma,…).
Primeros auxilios en las hemorragias externas
– Desinfecta tus manos, si es posible y hacer presión con la mano con una tela o gasa
limpia sobre la herida. Si se empapa la tela o gasa y sigue sangrando, colocar más encima
sin quitar el anterior y continuar presionando.
– Siempre que no haya fractura, levantar el miembro afectado en caso de brazo o pierna
por encima del corazón.
3. – En casos muy graves y que hayan fracasado las medidas anteriores, se tiene que realizar
un “torniquete”. Un torniquete hay que saber realizarlo bien puede provocar necrosis del
área afectada (muerte del tejido por falta de riego sanguíneo). Citaremos un vídeo al final
de este artículo con una explicación de cómo debe hacerse.
– Transportarla inmediatamente a un centro médico.
Primeros auxilios en las hemorragias internas
Sus síntomas suelen ser un hematoma (acumulación de sangre), palidez, sed, pulso débil y
mareos.
No hay que administrar líquidos ni medicamentos a la persona afectada.
Tiene que estar acostada en posición horizontal, elevando sus extremidades
inferiores (poner un objeto debajo de ellas) para que estas queden sobre la altura
de su cabeza.
Cubrir a la persona con una manta, chaqueta para evitar el enfriamiento de su
cuerpo.
Transportarla inmediatamente a un centro médico
4. PRIMEROS AUXILIOS PARA ESTADO DESHOCK
Primeros auxilios
Consejos para primeros auxilios en emergencias y accidentes
Un estado de shock puede ser consecuencia de un trauma, un golpe de calor, la pérdida de
sangre, una reacción alérgica, una infección grave, un envenenamiento, quemaduras
graves u otras causas.
Cuando una persona está en estado de shock, sus órganos no están recibiendo suficiente
sangre u oxígeno. Si no se trata, esto puede producir daños permanentes en los órganos o
la muerte.
Algunos signos y síntomas de que una persona está sufriendo un estado de shock:
La piel está fría y húmeda. Puede verse de color pálido o gris.
El pulso es débil y rápido. La respiración puede ser lenta y superficial, o puede
ocurrir una hiperventilación (respiración rápida o profunda). La presión sanguínea
es inferior a lo normal.
La persona puede sentir náuseas. Él o ella puede que vomite.
Los ojos carecen de brillo y mirar fijamente. A veces las pupilas están dilatadas.
La persona puede estar consciente o inconsciente. Si está consciente, la persona
puede sentirse débil o muy débil y confundida. A veces, el estado de shock hace que
una persona se ponga demasiado excitada y ansiosa.
Si sospechas que la persona está en estado de shock, incluso si la persona parece que está
normal:
5. Llama a tu número local de emergencias.
Haz que la persona se acueste sobre su espalda con los pies más altos que la
cabeza. Si al levantar sus piernas le duele o se hace daño, consigue que se quede
tumbada y quieta.
Comprueba si hay signos de circulación (respiración, tos o movimiento) y si no los
hay inicia la RCP (la reanimación cardiopulmonar).
Mantén a la persona caliente y cómoda, aflojando los cinturones o la ropa
apretada y que cúbrela con una manta. Incluso si la persona se queja de sed, no le
des nada por vía oral.
Gira a la persona hacia un lado para prevenir la asfixia si la persona vomita o
sangra por la boca.
Busca un botiquín y medicamentos si hay lesiones, tales como sangrados o huesos
rotos.
6. RCP BÁSICA
Primeros auxilios
Consejos para primeros auxilios en emergencias y accidentes
La reanimación cardiopulmonar o RCP básica, es una técnica de primeros auxilios que
puede ayudar a mantener a alguien con vida en caso de accidente el tiempo suficiente
para que llegue la ayuda de emergencia, pero los estudios muestran que una RCP
correctamente realizada, también ayuda a mejorar la calidad de la salud para las víctimas
de un ataque cardíaco después del accidente y puede mejorar significativamente su
recuperación.
Aunque muchos trabajos requieren la certificación de RCP y primeros auxilios, como
salvavidas y algunos puestos de enseñanza, el conocimiento de las técnicas básicas de la
RCP pueden ser útiles para todo el mundo en el caso de que un amigo o familiar sufra un
accidente.
Sin embargo, la práctica incorrecta de las técnicas de RCP puede causar daño a una
persona sana y podría complicar la ya situación potencialmente mortal. Como tal, los que
están CPR certificados deben mantener no sólo su certificado de papel, pero su memoria
hasta al día, y los que no se debe buscar una certificación antes de intentar realizar la
reanimación cardiopulmonar, si es posible. Recuerde estas reglas, en primer lugar, cuando
se enfrentan a una situación que podría requerir RCP.
Cuándo practicar una RCP básica
En primer lugar, sólo se recomienda que realices la RCP básica si se cumplen las tres
condiciones siguientes.
La respiración se ha detenido por completo.
Tras tomar el pulso, no hay señales de circulación y no responde a estímulos físicos.
Eres la persona más capacitada para realizar la reanimación cardiopulmonar.
7. Para aplicar la RCP, lo primero que debes hacer es liberar las vías respiratorias, ya que sin
una vía abierta, reanudar la respiración será imposible o muy difícil. Esto sólo es necesario
para tratar una persona que sufra un atragantamiento.
Si aún está consciente, la maniobra de Heimlich es la mejor manera de liberar el bloqueo
de la tráquea (tráquea), pero si la persona está inconsciente, se debe evitar este método.
En este caso, has de proceder a la respiración asistida y RCP como primeros auxilios.
Procedimiento para RCP básica
Para realizar la reanimación cardiopulmonar o RCP básica a un adulto:
Antes de nada, llama al servicio de urgencias para que envíen un equipo de
emergencias mientras realizas la RCP básica. De esta forma, podrás aplicar los
primeros auxilios para evitar posibles daños cerebrales mientras llega la
ambulancia.
Si la persona no respira, presiona su nariz cerrando las fosas nasales, de forma que
las vías respiratorias de la nariz queden cerradas. Toma una bocanada de aire y
colocando la boca con fuerza sobre la de la persona, exhala el aire completamente.
Realiza este proceso dos veces.
Si la persona no respira ni tiene pulso, has de encontrar el punto exacto para hacer
compresiones de pecho. Sigue las costillas flotantes hasta el punto donde se unen
en el esternón. Una vez en el extremo inferior del esternón, mide tres dedos sobre
el extremo, en ese punto has de hacer la presión. Para hacer las compresiones de
pecho, coloque la palma de una mano encima del esternón y agarra esta mano con
la otra de forma que los dedos se mantengan atrás mientras presionas.
Realiza las compresiones de pecho. El número ideal de compresiones de pecho, es
de 100 por minuto, lo que equivale a un poco menos de dos por segundo. Realiza
quince compresiones de pecho seguidas, empujando enérgicamente y con firmeza
el esternón, de forma que se comprima entre 4 y 5 centímetros. Después de realizar
las quince compresiones de pecho, repite el proceso desde el principio.
Notas sobre la RCP básica en primeros auxilios
Por cada dos veces apliques la respiración artificial, realiza quince compresiones de pecho
y repite el proceso hasta que vuelva a haber signos de respiración o pulso o hasta que
lleguen los servicios de emergencias Verifica el pulso cada dos respiraciones y
compresiones para asegurarte de que no realizas compresiones innecesarias si la persona
recupera el pulso normal.
Recuerda que los métodos de RCP en niños y bebés varían de los utilizados en los adultos y
que el procedimiento de RCP en adultos no debe ser utilizado en bebés.
8. Al realizar la reanimación cardiopulmonar, debes ser plenamente consciente de su peligro
potencial si se hace mal y para practicarla, debes recibir la formación adecuada y si tienes
un trabajo en el que podrías tener que utilizar la resucitación cardiopulmonar, deberías
hacer un curso específico de primeros auxilios. La formación y certificación están
disponibles en numerosas organizaciones y suelen tener un precio asequible.
9. QUEMADURAS
El calor, el frío, la electricidad, las radiaciones del sol o ciertos productos químicos pueden
provocar una quemadura en nuestra piel. Conoce cómo debes actuar en caso de sufrir este
tipo de lesiones.
Escrito por Alicia Díaz, Enfermera, experta en Primeros Auxilios
Quemaduras
Por definición general, sabemos que una quemadura es una lesión en la piel debido al
contacto o exposición de un agente peligroso, como son el calor, el frío, la electricidad, las
radiaciones del sol o ciertos productos químicos.
El cuerpo humano tolera temperaturas de hasta 40º C; por encima se pierde la capacidad
natural de la piel de regenerarse.
Tipos de quemaduras
Una quemadura puede ser dolorosa o no, dependiendo de su grado. El grado de una
quemadura está determinado por su localización en el cuerpo y por la profundidad a la que
llega en la piel.
Quemaduras de Primer Grado: solo afectan a la capa más superficial de la piel, y
se caracterizan por un enrojecimiento de la piel que duele al contacto,
comúnmente las encontramos cuando la persona ha tenido una exposición
prolongada al sol. Son las más frecuentes de encontrar, sobre todo en el verano.
Quemaduras de Segundo Grado: son un poco más profundas, y su característica
principal es la aparición de ampollas. Las ampollas son un sistema de defensa ante
la quemadura: protege de las infecciones y, con el líquido que contienen, hidratan
la herida y ayudan a la cicatrización. Estas quemaduras son muy dolorosas.
10. Quemaduras de Tercer Grado: en estas quemaduras podemos ver tejido
carbonizado, las terminaciones nerviosas encargadas de transmitir el dolor se
destruyen, de ahí que se diga que las quemaduras de tercer grado no duelen.
Toda quemadura puede generar problemas y riesgos importantes para la salud, mucho
depende del total de la superficie corporal quemada, esto significa que una quemadura de
1er grado que tenga una superficie del 90% del cuerpo es igual o más peligrosa que una
quemada de 2º Grado con superficie del 20%.
Por ello, es importante considerar tanto el grado de la quemadura como la superficie del
cuerpo lesionado, y de ahí determinar si la persona requiere o no ayuda especializada en
un hospital.
11. TIPOS DE VENDAJES
De las varias clasificaciones que existen respecto a los tipos de vendajes, he elegido
la siguiente por considerar que es la más funcional y comprensible a efectos prácticos.
· Vendaje blando o contentivo: es usado para contener el material de una
cura o un apósito.
· Vendaje compresivo: es utilizado para ejercer una compresión progresiva a
nivel de una extremidad, de la parte distal a la proximal, con el fin de favorecer el retorno
venoso. También se usa para limitar el movimiento de alguna articulación en el caso de
contusiones y esguinces de grado I, por ejemplo.
· Vendaje rígido: para inmovilizar completamente la parte afectada (vendaje
de yeso).
· Vendaje suspensorio: sostenedor del escroto o la mama.
· Mención aparte merece el vendaje funcional que es una técnica específica
de vendaje que permite mantener cierta funcionalidad de la zona lesionada sin perjuicio de
la misma. El vendaje funcional es una especie de traje a medida.
Normas generales para realizar vendajes
La ejecución de un vendaje adecuado, de un buen vendaje, exige un entrenamiento
previo y continuado; aun así, consideramos que podemos realizar buenos y excelentes
vendajes de todo tipo que mejorarán el problema sanitario que presente el paciente, pero
que nunca alcanzaremos la perfección en el complejo ejercicio del desarrollo de nuestra
profesión.
Antes de explicar algunos tipos de vendajes, expondremos algunos principios
generales en la realización de vendajes:
· Lavado de manos antes y después de cada vendaje.
· Impedir el contacto entre zonas dérmicas aislándolas con gasas.
· Proteger las prominencias óseas antes de vendarlas.
· Utilizar la venda más adecuada para los fines del vendaje.
12. · Iniciar el vendaje sosteniendo el rollo de la venda en una mano y el extremo inicial con la
otra.
· No iniciar ni finalizar el vendaje directamente sobre una herida o un área sobre la que
sea posible que el paciente ejerza algún tipo de presión (p.e. cara posterior del muslo).
· Vendar de la parte distal a la proximal (de dedos a corazón).
· Vendar de manera uniforme y firme, cubriendo 2/3 del ancho de la vuelta anterior. La
tensión y la presión deberán mantenerse iguales durante todo el proceso.
· En caso de colocar un apósito, cubrirlo prolongando el vendaje unos cms. más en cada
extremo.
· Dejar el extremo distal de la zona vendada libre para comprobar la vascularización,
movilidad y sensibilidad.
· Fijar el vendaje con esparadrapo.
· Revisar el vendaje y buscar signos de alteración de la circulación.
· Registrar en la hoja de enfermería fecha, hora, tipo de vendaje y de venda utilizada y
demás observaciones pertinentes.
13. INMOVILIZACIÓN
La inmovilización es la prevención del desplazamiento de un hueso o de una articulación
lesionada mediante la utilización de otro segmento anatómico, una férula o un yeso.
PRINCIPALES LESIONES
Un esguince o torcedura
Es una lesión del ligamento (el tejido que conecta dos o más huesos en una articulación o
coyuntura) que resulta cuando éste se distiende o se rompe.
Causa de un esguince
Las causas de los esguinces son diversas. Algunas caídas, torceduras o golpes pueden
desplazar la articulación de su posición normal, distendiendo o rompiendo los ligamentos
que mantienen esa articulación. Un esguince puede ocurrir cuando uno se:
· Cae en un brazo
· Cae en un lado del pie
· Tuerce una rodilla.
¿Dónde ocurren generalmente los esguinces?
Los esguinces ocurren más a menudo en el tobillo. Los esguinces en la muñeca se pueden
producir al caerse sobre la mano. Los esguinces del pulgar son comunes en actividades
deportivas como el esquí.
¿Cuáles son las señales y los síntomas de los esguinces?
Las señales y los síntomas más comunes de un esguince son:
· Dolor
· Hinchazón
· Contusión o moretón
· Movimiento o uso limitado de la articulación.
A veces cuando ocurre la lesión se puede sentir un crujido o una ruptura. Un esguince
puede ser leve, moderado o fuerte.
14. Tipos de esguinces
• Grado I: desgarro leve de las fibras. Sin pérdida de función.
• Grado II: ruptura parcial del ligamento. Alteración de la estabilidad articular.
• Grado III: daño completo del ligamento, pérdida de la estabilidad articular.
15. TRASLADO DEL ACCIDENTADO
Al trasladar un accidentado o un enfermo grave, se deberá garantizar que las lesiones no
aumentarán, ni se le ocasionarán nuevas lesiones o se complicará su recuperación ya sea
por movimientos innecesarios o transporte inadecuado.
Es mejor prestar la atención en el sitio del accidente, a menos que exista peligro inminente
para la vida de la víctima o del auxiliador como en un incendio, peligro de explosión o
derrumbe de un edificio.
Una vez que haya decidido cambiar de lugar a la víctima, considere tanto la seguridad de
la víctima como la suya. También tenga en cuenta su propia capacidad, así como la
presencia de otras personas que puedan ayudarle.
METODOS PARA LEVANTAR A UNA PERSONA
Arrastre
Se utilizan cuando es necesario retirar una víctima del área del peligro, a una distancia no
mayor de 10 metros y cuando el auxiliador se encuentra solo. No debe utilizarse cuando el
terreno sea desigual o irregular (piedras, vidrios, escaleras).
Coloque los brazos cruzados de la víctima sobre el tórax. Sitúese detrás de la cabeza y
colóquele sus brazos por debajo de los hombros sosteniéndole con ellos el cuello y la
cabeza.
Arrástrela por el piso.
Si la victima tiene un abrigo o chaqueta, desabroche y hale de él hacia atrás de forma
que la cabeza descanse sobre la prenda. Arrástrela por el piso, agarrando los extremos de
la prenda de vestir (abrigo, chaqueta o camisa).
Si en el recinto hay acumulación de gas o humo, haga lo siguiente:
16. Si la víctima está consciente y no puede movilizarse, arrodíllese y pídale que pase los
brazos alrededor de su cuello, entrelazando las manos.
Si está inconsciente, sujétele las manos con una venda a la altura de las muñecas y
realice el mismo procedimiento.
Si la víctima es muy grande usted puede usar el arrastre de los pies, asegurándose que
la cabeza de la víctima no se lesione con un terreno desigual o irregular.
Cargar con los brazos
Cuando la víctima es de bajo peso.
Pase un brazo por debajo de los muslos de la víctima.
Colóquele el otro brazo alrededor del tronco, por encima de la cintura y levántela.