Las virtudes de María incluyen su humildad, fe, caridad, paciencia, pobreza, esperanza, amor a Dios, modestia y pureza virginal. María es un modelo a seguir porque siempre fue obediente a Dios, creyó en sus planes aunque no los entendía, amó a todos incluso a los verdugos de Jesús, y soportó las dificultades con paciencia y fortaleza.
5. María al conocer el plan de Dios,
solo responde: “He aquí la esclava
del Señor, hágase en mi según tu
palabra” (Lc. 1,38)
María desde su infancia se mostro
obediente a sus padres.
6. HUMILDAD DE MARÍA
Ella siempre tuvo presente que el Hijo, al
cual había llevado en su seno, había sido
reducido por este hecho al último grado
de abatimiento.
El primer carácter de humildad de María
era formar un concepto verdadero de sí
misma; sin embargo al hallarse llena de
gracia.
7. Fe es un don de Dios que el Espíritu Santo nos
comunica para iluminar nuestro entendimiento
y animar nuestro corazón.
Ella creyó el misterio de la Trinidad; el ángel le
dijo que el niño que concebiría en su ceno, por
gracia del Espíritu Santo
8. Caridad solícita de María
Jesucristo nos regaló como madre a la Virgen. Si una madre se interesa tanto por
sus hijos, que no hará la Santísima Virgen por nuestro bien.
Una madre no tiene mayores enemigos que los que atormentan y dan muerte a
su Hijo, María al pie de la cruz ruega a Dios por los verdugos de su Hijo e implora
la conversión, el perdón y la gracia de Dios para ellos.
El amor que Dios infunde a fin de que le amemos es el mismo que nos impulsa a
amar a nuestro prójimo. "El que ama al prójimo cumple toda la ley” (San Pablo)
9. * La gracia de Dios la podemos dejar actuar más fácilmente si voluntariamente evitamos
caer en el riesgo de perderla.
* Como María procuremos el silencio para poder así escuchar la voz de Dios en vez de
la voz del mundo.
* Cuando el ángel fue a anunciarle la encarnación, la encontró en oración.
* Para que en corazón se a puro, los ojos deben de ser reservados, apartándonos de
todo aquello que sabemos puede poner en peligro nuestra pureza.
* La gracia de Dios la podemos dejar actuar más fácilmente si voluntariamente evitamos
caer en el riesgo de perderla.
* Como María procuremos el silencio para poder así escuchar la voz de Dios en vez de
la voz del mundo.
Sabiduría reflexiva
10. Piedad de María
La piedad es tener la voluntad pronta y fervorosa por todo aquello que nos encamina
al servicio de Dios.
La verdadera devoción no consiste
solamente en sentir consuelo, gusto y
atractivo por las cosas espirituales, sino una
voluntad dispuesta a entregarse a Dios
haciendo el bien en la práctica de las
virtudes en cada momento de nuestra vida
ordinaria; así también lograremos mantener,
conservar y aumentar nuestra piedad.
11. María con fortaleza afronta las penalidades, no duda en huir
a Egipto por su hijo, permanece firme en el dolor. Ejemplo de
paciencia y serenidad.
La paciencia nos hace soportar con resignación y calma los
males de esta vida, persecuciones, injurias, pérdida de bienes,
enfermedades y hasta la muerte (San Agustín).
Siendo las penas el patrimonio de las almas amadas por Dios,
no es regular que hubiese dejado sin ellas a ala que escogió
por madre.
Paciencia y fortaleza en el destierro y en el dolor
12. Pobreza
llevada con
dignidad y
confianza en
el Señor
Los que tienen bienes poseerlos como si no los tuvieran,
desprenderse de todo afecto, usarlo conforme a las
máximas del Evangelio, derramarlos entre los pobres, y
nunca adquirir un bien ilícitamente, cuando algo
perdemos conformarnos con la Voluntad de Dios. Hacer
de los bienes medios y no impedimentos para llegar a
Dios.
María entendió el “si quieres ser perfecto, vende todo lo que tienes y
sígueme” (Lc. 19,21)
13. .
•Esperanza es: virtud sobrenatural que Dios infunde en el alma cristiana para confiar en el auxilio del cielo y mediante las buenas obras alcanzar
la vida eterna.
.
•María vive en Jesús hasta las últimas consecuencias. Se esmera en el servicio de su hijo.
•“Yo soy la madre de la Santa Esperanza” (Eclo. 24,24)
.
•Debe ser firme y constante para que sea virtud cristiana, no excluye el temor o incertidumbre de nuestra salvación, pero cuanto mayor la
virtud, menor el temor. Produce confianza.
•María se entregó en manos de Dios cuando José quiso dejarla por ignorar lo de su embarazo, no dudó que esto fuera para mayor gloria de
Dios.
Esperanza de María
14. Amor
ardiente
de María
a Dios
El amor a Dios fue incomparable del amor de María a otras personas, conoció la bondad,
hermosura y perfección de Dios, cuanto más las conocía más las amaba, no hubo criatura que
hubiese conocido más perfectamente a Dios que María, nadie recibió tantas gracias como María y
nadie es tan agradecido con Dios como Ella, el amor era sin límites ni medida de ambas partes.
No hay que desear nada que se oponga a la Divina Voluntad, el amor ha de ser
nuestro motor de conducta, observando os mandamientos, viviendo una entrega total
al Señor.
15. Modestia de María
Modestia: Virtud que arregla el exterior el hombre y
emana de un interior bien arreglado.
La Virgen María fue un perfecto modelo de modestia;
sus sentidos los guiaba por la razón, los modales de
su cuerpo eran serios y decentes, San Epitafio dice:
“su modestia parecía ante los hombres un prodigio
que hacía decir que no se había visto otro
semejante”.
Ésta virtud resplandeció en María, sobre todo en su
amor al silencio, a fin de entregarse solo a Dios; sin
embargo, algunas veces interrumpía este silencio
para glorificar a Dios en el prójimo.
16. Pureza virginal de María
María desde pequeña se consagró enteramente al Señor mediante la
virginidad. Pues sabía que Dios es la misma pureza por esencia.
Este sacrifico resalta su generosidad, pues las mujeres estériles estaban
marcadas por la ignominia, a María no le importaba el que dirán, solo
le interesa la aprobación de Dios, pues Él es superior a todos los
hombres.
“María será virgen y madre a un mismo tiempo; será bendita
entre todas las mujeres y bendito el Fruto de sus castas entrañas”
(San Bernardo)