El jainismo enseña la búsqueda de la salvación a través de tres joyas: recto conocimiento, recta fe y no violencia. Los monjes siguen votos de no violencia, verdad, no robo, continencia y desprendimiento de las cosas materiales. Los jainistas practican la meditación y adoran imágenes sagradas en templos como el de Ranakpur, construido hace más de quinientos años.