2. ● Eco se refugió en una cueva, donde permaneció muchos días.
● Eco se refugió en la cueva, donde permaneció veinte días.
● Eco se refugió es su cueva, donde permaneció aquellos días.
3. Los determinantes son las clases de palabras
que acompañan al sustantivo para concretarlo
y completar su significado, indicando su
género, su número, su situación espacial, su
cantidad, a quién pertenece, etc.
4. Son palabras variables
● Tienen género y número.
● Concuerdan con el sustantivo al que
acompañan.
Una ninfa: femenino, singular
Varias ninfas: femenino, plural
Un dios: masculino, singular
Varios dioses: masculino, plural
5. Clases de determinantes
● ARTÍCULOS: La cueva
● DEMOSTRATIVOS: Esta cueva
● POSESIVOS: Su cueva
● NUMERALES: Dos cuevas
● INDEFINIDOS: Otra cueva
● INTERROGATIVOS: ¿Qué cueva?
● EXCLAMATIVO: ¡Qué cueva!
11. INTERROGATIVOS Y EXCLAMATIVOS
Para preguntar o hacer una exclamación sobre el
sustantivo
● QUÉ
● CUÁL, CUÁLES
● CUÁNTO, CUÁNTA, CUÁNTOS, CUÁNTAS
● Siempre llevan tilde.
12. Subraya y clasifica los determinantes:
1.Creo que hay bastante arroz para todos.
2.Yo ya te lo había dicho: ciertas cosas es mejor callarlas.
3.¿Este estuche azul de quién es?
4.Te voy a prestar el libro que más me ha impactado en años.
5.¡Qué cosas tan raras te pasan!
6.Esa es tu mejor virtud.
7.Hay que darse prisa, solo tenemos veinte minutos para llegar.
8.¿Y si vamos por aquel camino?
9.Hoy empieza a trabajar una compañera.
10.¿Cuánto tiempo calculas que os llevará acabarlo?
13. Subraya y clasifica los determinantes:
1.Creo que hay bastante arroz para todos.
2.Yo ya te lo había dicho: ciertas cosas es mejor callarlas.
3.¿Este estuche azul de quién es?
4.Te voy a prestar el libro que más me ha impactado en años.
5.¡Qué cosas tan raras te pasan!
6.Esa es tu mejor virtud.
7.Hay que darse prisa, solo tenemos veinte minutos para llegar.
8.¿Y si vamos por aquel camino?
9.Hoy empieza a trabajar una compañera.
10.¿Cuánto tiempo calculas que os llevará acabarlo?
14. Subraya y clasifica los determinantes:
● Estas ideas tuyas nos van a causar un problema
algún día.
● ¿Cuánto tiempo hace que no vamos con tus
amigos a la playa esa que tenía mucho oleaje?
● La primera vez que acudí al teatro, sentí que
había encontrado mi vocación.
15. Subraya y clasifica los determinantes:
● Estas ideas tuyas nos van a causar un problema
algún día.
● ¿Cuánto tiempo hace que no vamos con tus
amigos a la playa esa que tenía mucho oleaje?
● La primera vez que acudí al teatro, sentí que
había encontrado mi vocación.
16. El artículo neutro “lo”
● Lo grave de la situación es que no parecen ser
conscientes del riesgo que corren.
● Lo curioso es que fueron a la misma guardería.
● Transforma:
Belleza: Imposibilidad:
Terror: Bondad:
Admiración: Maldad:
17. El artículo neutro “lo”
● Lo grave de la situación es que no parecen ser
conscientes del riesgo que corren.
● Lo curioso es que fueron a la misma guardería.
● Transforma:
Belleza: lo bello Imposibilidad: lo imposible
Terror: lo terrible Bondad: lo bueno
Admiración: lo admirable Maldad: lo malo
18. Completa con el demostrativo adecuado:
● Recuerdo.............días lejanos como si fueran ayer.
● El problema de ...............días es que no tengo
tiempo para nada.
● Acércame .................lápices que tienes en la mano.
● ...............tarde no tengo ningún plan.
● .................torres del fondo son las de la catedral.
19. Completa con el demostrativo adecuado:
● Recuerdo aquellos días lejanos como si fueran
ayer.
● El problema de estos días es que no tengo
tiempo para nada.
● Acércame esos lápices que tienes en la mano.
● Esta tarde no tengo ningún plan.
● Aquellas torres del fondo son las de la catedral.
20. Escribe el numeral adecuado:
● Bienvenidos a la 50ª entrega de los Premios de la
Música.
● Soy el 1º de 4 hermanos.
● Ocupo el 12º puesto de la lista de espera.
● La esperanza de vida de este país ronda los 84
años. A principios del siglo XIX era menos de la
mitad.
● En su 11ª edición, el mercadillo logró reunir 1776
euros.
21. Escribe el numeral adecuado:
● Bienvenidos a la quincuagésima entrega de los
Premios de la Música.
● Soy el primero de cuatro hermanos.
● Ocupo el duodécimo puesto de la lista de espera.
● La esperanza de vida de este país ronda los
ochenta y cuatro años. A principios del siglo
diecinueve era menos de la mitad.
● En su undécima edición, el mercadillo logró reunir
mil setecientos setenta y seis euros.
22. El cíclope Polifemo, un gigante cruel que tenía solo un ojo, se había enamorado de
la nereida Galatea, pero su amor no era correspondido. Ella amaba a Acis, un joven de
dieciséis años, hijo de Fauno y de una ninfa. Polifemo, por mucho tiempo que pasara
acicalándose, no conseguía que Galatea se fijara en él. El odio que ella sentía por
Polifemo era similar al amor que sentía por Acis.
Polifemo subió, seguido de su rebaño, a una colina para cantarle a su amada
todas sus bondades como esposo.
—Te ofrezco esa cueva mía —le decía—, donde no pasarás ni frío ni calor. Te
daré alimentos de toda clase. Todo mi rebaño será para ti...
Pero a Galeta ninguno de estos ofrecimientos le interesaban lo más mínimo.
En esto, Acis llegó al encuentro con la nereida. Cuando lo vio, Polifemo encolerizó y
arrancó la cima de la montaña para arrojársela. Aquel enorme trozo de roca cayó sobre
Acis y lo mató.
La desdichada Galatea rogó a los dioses que la ayudaran y estos transformaron la
sangre del pastor en un río.
23. El cíclope Polifemo, un gigante cruel que tenía solo un ojo, se había enamorado de
la nereida Galatea, pero su amor no era correspondido. Ella amaba a Acis, un joven de
dieciséis años, hijo de Fauno y de una ninfa. Polifemo, por mucho tiempo que pasara
acicalándose, no conseguía que Galatea se fijara en él. El odio que ella sentía por
Polifemo era similar al amor que sentía por Acis.
Polifemo subió, seguido de su rebaño, a una colina para cantarle a su amada
todas sus bondades como esposo.
—Te ofrezco esa cueva mía —le decía—, donde no pasarás ni frío ni calor. Te
daré alimentos de toda clase. Todo mi rebaño será para ti...
Pero a Galeta ninguno de estos ofrecimientos le interesaban lo más mínimo.
En esto, Acis llegó al encuentro con la nereida. Cuando lo vio, Polifemo encolerizó y
arrancó la cima de la montaña para arrojársela. Aquel enorme trozo de roca cayó sobre
Acis y lo mató.
La desdichada Galatea rogó a los dioses que la ayudaran y estos transformaron la
sangre del pastor en un río.