1. Universidad Panamericana del Puerto
Facultad de Ciencias Económicas y Sociales
Escuela de Administración de Empresas
Diseño y Evaluación de Proyectos
ECONOMÍA NARANJA
EN LA ACTUALIDAD
AUTOR:
Alexander J Mirena S
CI: 17.067.850
Valencia, Febrero 2023
2. Economía naranja es como se denomina al conjunto de actividades que
consisten en la transformación de ideas en bienes y servicios de carácter cultural. En
este sentido, dentro de la economía naranja, el valor está determinado por su contenido
de propiedad intelectual.
La economía naranja hace referencia al mundo de la cultura, la industria
creativa y la creación de contenido. Se denomina, por tanto, universo naranja a todas
aquellas actividades que transformen el conocimiento en un bien o un servicio que trate
de fomentar, además del beneficio económico, el desarrollo de la cultura y la
creatividad. Es decir, actividades que, al igual que el cine, se encuentran dentro del
mundo de la cultura.
La economía naranja debe su nombre a la asociación que suele hacerse del color
naranja a la cultura y la industria creativa. Como decíamos, además del lucro, la
economía naranja persigue el desarrollo y el fomento de la cultura.
La economía naranja hace referencia a todas aquellas actividades que se
encuentren directamente relacionadas con el mundo de la cultura, el arte o la
creatividad. En este sentido, una serie de actividades que consistan en la transformación
de ideas en bienes y servicios relacionados con el mundo de la cultura.
Así, podemos resumir las actividades que integra esta economía en las siguientes:
Economía cultural.
Industrias creativas.
Soporte a la creatividad.
Productos, servicios o desarrollos que se encuentren relacionados con el mundo de la
cultura.
No obstante, al tratarse de un término que está en desarrollo, podrían
incorporarse más actividades a la relación.
El concepto se hace público por primera vez en 2013. Durante una conferencia
del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se presentó la publicación de un libro
que trataba sobre la economía cultural y creativa. Una economía que los autores de
dicho libro denominaron “economía naranja”. En este sentido, Iván Duque y Felipe
Buitrago, consultores del BID, daban forma a un concepto que, bajo su criterio, se
presentaba como “una oportunidad infinita”. Así, los autores resaltaban la necesidad
de, al igual que la economía verde, acuñar un concepto que tratase de potenciar la
cultura y la ideación en los países.
En dicha línea, se seleccionó el color naranja, dada la relación existente entre
dicho color y el mundo de la cultura.
3. Así nace lo que hoy, cada vez más personas, denominan economía naranja.
Siendo el objetivo de su nacimiento el potenciar una serie de sectores, entre los que se
encuentra el cultural y el creativo, que se consideraban poco impulsados por los
Gobiernos. Esto, con el objetivo de potenciar y fomentar dichos sectores, los autores
de dicho libro publicaron una serie de cifras que mostraban los grandes beneficios de
la economía naranja, así como los de potenciar el talento y la cultura en los países.
Especialmente en aquellas economías que están en pleno desarrollo, donde la cultura
sigue siendo un gran problema a la luz de los indicadores.
Lo que busca la economía naranja es el tratar de potenciar la cultura en aquellos
países en los que no se está potenciando. Dadas las necesidades de fomentar la cultura
que presentaban muchas economías emergentes, agentes del BID acuñaron el término
para tratar de desarrollar dicho déficit. En este sentido, fomentando la cultura y la
creatividad, lo que se persigue es profesionalizar un sector que, históricamente, nunca
ha estado profesionalizado. Máxime, teniendo en cuenta la necesidad de fomentar
dicho sector.
En definitiva, la economía naranja aparece como un movimiento que busca dar
voz a este sector. A través de este concepto, el BID, así como los autores, buscaban el
potenciar un sector de vital importancia para el desarrollo de las personas. Por esta
razón, teniendo en cuenta la capacidad de dicho sector, los autores propusieron el
desarrollo de planes de actuación y líneas de trabajo para fomentar el concepto en
aquellos países con mayor escasez de cultura.
Por último, en resumen, podríamos decir que la economía naranja busca el
profesionalizar la creatividad y la innovación. Además, fomentando la transmisión de
conocimiento, así como de la cultura a generaciones venideras. Así, la idea principal
se basaba en el desarrollo y la extracción del potencial económico del sector cultural y
creativo. A su vez, generando unas condiciones para la sostenibilidad de las
organizaciones y agentes que integran dicho sector. Muy en la línea de, también, como
afirmaron los autores, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).