3. 1. Apostolado bíblico
El esfuerzo fundamental se concentra
en las traducciones y la impresión y
difusión del texto de la Biblia. Se ve
como necesario que se disponga del
texto de la Sagrada Escritura. Es el
primer gran paso que posibilitará los
siguientes.
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
3
4. 2. Movimiento bíblico
Se da un paso con respecto a lo anterior y se
comienza el “apostolado” con la Biblia.
Introducción más específica de la Biblia en la
catequesis, sobre todo en la de iniciación.
También se da un fuerte desarrollo con la
renovación de las lecturas bíblicas del Año
Litúrgico realizadas por inspiración del CV II.
Es el momento del despertar de la formación
bíblica que se plasmará en los modelos
posteriores.
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
4
5. 3. Pastoral bíblica
La “pastoral con la Biblia” adquiere una especie de
"estatuto" propio dentro de la pastoral de
conjunto. Se la llama también trabajo bíblico
pastoral o ministerio bíblico. Se la ubica al lado
de las otras pastorales: juvenil, familiar, de niños,
matrimonial… Es una pastoral “yuxtapuesta” a
las otras pastorales. Es el momento del
desarrollo fuerte de los círculos bíblicos o
grupos de reflexión bíblica. En muchos lugares
ha sido fuerte el trabajo de las comunidades
eclesiales de base.
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
5
6. 4. Animación bíblica de la pastoral
Este último paradigma se da dentro de la pastoral
orgánica de la Iglesia. La Biblia “anima”, es “principio
vital” de la vida pastoral de la Iglesia. Desde su
ámbito específico que la Escritura, anima a todas las
demás pastorales. También se la suele denominar
simplemente “animación bíblica”, o “animación
bíblica de la pastoral”, o “animación bíblica de la vida
pastoral”, o “dimensión bíblica de la pastoral”. La
ABP no es un grupo eclesial con un "carisma
particular" sino que es una pastoral que debe estar
presente acompañando y dando fundamento a todas
las pastorales de la Iglesia.
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
6
7. No es sencillo “establecer fechas” para la consecución
de estos cuatro paradigmas. No se puede hacer una
cronología por dos motivos:
Los procesos se dan de forma distinta en las
diversas partes del mundo; las transiciones son
diferentes en forma y en tiempo en las diversas
iglesias particulares.
Los modelos anteriores siguen coexistiendo
integrados y asumidos en los nuevos. Por
ejemplo, el nuevo paradigma de la ABP no puede
prescindir de seguir distribuyendo el texto de la
Biblia como lo hacía el antiguo modelo del
“apostolado bíblico”
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
7
¿Cuál sería la cronología de estos paradigmas?
8. II – Algunas fechas de
documentos importantes y
algunos acontecimientos que
tienen que ver con la PB y la ABP
desde finales del siglo XIX hasta
la actualidad
9. 1. LEÓN XIII, Encíclica Providentissimus Deus, 18 de
noviembre de 1893.
2. LEÓN XIII crea la Pontificia Comisión Bíblica en
octubre de 1902.
3. PÍO X funda el Instituto Bíblico en 1909.
4. BENEDICTO XV, Encíclica Spiritus Paraclitus, 15 de
septiembre de 1920.
5. PÍO XII, Encíclica Divino afflante Spiritu, 30 de
septiembre de 1943.
9
10. 6. La Vª Asamblea Plenaria del Episcopado
Argentino en noviembre de 1961 implanta el
"Domingo Bíblico Nacional".
7. CONCILIO VATICANO II, Constitución Dei Verbum, 18
de noviembre de 1965.
8. PABLO VI crea el 16 de abril de 1969 la Federación
Bíblica Católica Mundial. En 1990 se simplifica el
nombre a Federación Bíblica Católica (FEBIC).
9. PABLO VI con el Motu propio Sedula cura del 27 de
junio de 1971 reorganiza la Pontificia Comisión
Bíblica.
10. Se publica: PONTIFICIA COMISIÓN BÍBLICA, La
interpretación de la Biblia en la Iglesia, 21 de
septiembre de 1993.
10
11. 11. Se da a conocer: VIª ASAMBLEA PLENARIA DE LA FEDERACIÓN
BÍBLICA CATÓLICA, La Palabra de Dios: “Bendición para todas
las naciones”. La pastoral bíblica en un mundo plural.
Documento Final, 12 de septiembre de 2002.
12. Se publica: CONSEJO ORDINARIO DE LA SECRETARÍA GENERAL
DEL SÍNODO DE LOS OBISPOS, “Lineamenta” para la próxima
Asamblea General del Sínodo de Obispos: “La Palabra de
Dios en la vida y la misión de la Iglesia”, 27 de abril de
2007.
13. Se da a conocer: Vª CONFERENCIA GENERAL DEL EPISCOPADO
LATINOAMERICANO Y DEL CARIBE, Aparecida. Documento
Conclusivo, 29 de junio de 2007.
14. Se publica: XIº CONSEJO ORDINARIO DE LA SECRETARÍA GENERAL
DEL SÍNODO DE LOS OBISPOS, “Instrumentum laboris” para la
XIIª Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos:
“La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia”,
11 mayo 2008. 11
12. 15. Se realiza en Roma la XIIª Asamblea General
Ordinaria del Sínodo de Obispos del 5 al 26 de
octubre de 2008 bajo el título "La Palabra de Dios en
la vida y la misión de la Iglesia".
16. XIIª ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE
OBISPOS, Mensaje al Pueblo de Dios, 24 de octubre de
2008.
17. XIIª ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE
OBISPOS, Proposiciones al Papa, 27 de octubre de
2008.
18. BENEDICTO XVI, Exhortación Apostólica postsinodal
Verbum Domini, 30 de septiembre de 2010.
12
13. III – Aparición del término ABP
en algunos “documentos” de la
Iglesia
14. VI ASAMBLEA PLENARIA DE LA FEDERACIÓN BÍBLICA CATÓLICA, La
Palabra de Dios: “Bendición para todas las naciones”. La
pastoral bíblica en un mundo plural. Documento Final, 12 de
septiembre de 2002.
III. 3. Misión de la Federación Bíblica Católica
La misión de la Federación Bíblica es el apostolado bíblico, el
ministerio de la Palabra, la “animación” bíblica de la pastoral,
para alimentar y nutrir a la Iglesia con lo que es su alma. Su
objetivo y misión es “hacer que la Palabra de Dios sea cada
vez más el alimento espiritual del Pueblo de Dios, su fuente
para una vida de fe, de esperanza y de amor, y, realmente, una
luz para toda la humanidad” (IBI, Introducción B). Su meta es
“hacer conocer la Biblia como Palabra de Dios y fuente de
vida” (IBI, IV, C, 3).
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
14
15. CONSEJO ORDINARIO DE LA SECRETARÍA GENERAL DEL SÍNODO DE
LOS OBISPOS, “Lineamenta” para la próxima Asamblea
General del Sínodo de Obispos: “La Palabra de Dios en la
vida y la misión de la Iglesia”, 27 de abril de 2007.
Capítulo II, preguntas 2
2. La Palabra de Dios en la formación del pueblo de Dios
¿Qué propuestas se llevan a cabo para transmitir a nuestras
comunidades y a los fieles individualmente la doctrina
integral y completa sobre la Palabra de Dios? ¿Están
formados adecuadamente y con actualización continua en la
animación bíblica de la pastoral los futuros presbíteros, las
personas consagradas, los responsables de los servicios en
la comunidad (catequistas, etc.)? ¿Existen proyectos de
formación permanente para los laicos?
Pbro. Lic. Gabriel Mestre - M. del Plata - Argentina
15
16. V CONFERENCIA GENERAL DEL EPISCOPADO LATINOAMERICANO Y DEL CARIBE,
Aparecida. Documento Conclusivo, 29 de junio de 2007.
248. Se hace, pues necesario proponer a los fieles la Palabra de
Dios como don del Padre para el encuentro con Jesucristo
vivo, camino de “auténtica conversión y de renovada comunión
y solidaridad” (Ecclesia in America 12). Esta propuesta será
mediación de encuentro con el Señor si se presenta la Palabra
revelada, contenida en la Escritura, como fuente de
evangelización. Los discípulos de Jesús anhelan nutrirse con
el Pan de la Palabra: quieren acceder a la interpretación
adecuada de los textos bíblicos, a emplearlos como mediación
de diálogo con Jesucristo, y a que sean alma de la propia
evangelización y del anuncio de Jesús a todos.
16
17. V CONFERENCIA GENERAL DEL EPISCOPADO LATINOAMERICANO Y DEL CARIBE,
Aparecida. Documento Conclusivo, 29 de junio de 2007.
Por esto, la importancia de una “pastoral bíblica”, entendida
como animación bíblica de la pastoral, que sea escuela de
interpretación o conocimiento de la Palabra, de comunión con
Jesús u oración con la Palabra, y de evangelización inculturada o
de proclamación de la Palabra. Esto exige, por parte de obispos,
presbíteros, diáconos y ministros laicos de la Palabra, un
acercamiento a la Sagrada Escritura que no sea sólo intelectual e
instrumental, sino con un corazón:
“hambriento de oír la Palabra de Dios” (Amós 8,11).
17
18. V CONFERENCIA GENERAL DEL EPISCOPADO LATINOAMERICANO Y DEL CARIBE,
Aparecida. Documento Conclusivo, 29 de junio de 2007.
99. Los esfuerzos pastorales orientados hacia el encuentro
con Jesucristo vivo han dado y siguen dando frutos. Entre
otros, destacamos los siguientes:
a) Debido a la animación bíblica de la pastoral, aumenta el
conocimiento de la Palabra de Dios y el amor por ella.
Gracias a la asimilación del Magisterio de la Iglesia y a
una mejor formación de generosos catequistas, la
renovación de la Catequesis ha producido fecundos
resultados en todo el Continente, llegando incluso a
países de Norteamérica, Europa y Asia, donde muchos
latinoamericanos y caribeños han emigrado…
18
19. XI CONSEJO ORDINARIO DE LA SECRETARÍA GENERAL DEL SÍNODO DE LOS OBISPOS,
“Instrumentum laboris” para la XII Asamblea General Ordinaria del
Sínodo de los Obispos: “La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la
Iglesia”, 11 mayo 2008.
3. Los aportes de los Pastores se denotan muchos puntos en común
que expresan lo que se espera del Sínodo. Emergen:
la necesidad del primado que debe darse a la Palabra de Dios en la
vida y en la misión de la Iglesia…
el estímulo a reconocer que la Palabra de Dios es Jesucristo…
la proclamación que el Espíritu Santo conduce a la comprensión
completa de la Palabra de Dios…
la certeza que la Biblia es revelación de la Palabra de Dios…
el gran deseo de los fieles de escuchar la Palabra de Dios…
la necesidad de una pastoral bíblica, pero también de una
animación bíblica de la entera pastoral, que comprenda la
enseñanza de todas las verdades de la fe…
19
20. XI CONSEJO ORDINARIO DE LA SECRETARÍA GENERAL DEL SÍNODO DE LOS OBISPOS,
“Instrumentum laboris” para la XII Asamblea General Ordinaria del
Sínodo de los Obispos: “La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la
Iglesia”, 11 mayo 2008.
La tarea de los laicos
51. …El laico en el camino con la Palabra de Dios no debe ser solamente
un oyente pasivo, sino que debe participar activamente, en todos los
campos donde entra la Biblia: en el estudio científico, en el servicio
de la Palabra en ámbito litúrgico o catequístico y en la animación
bíblica en los diversos grupos. El servicio de los laicos exige
capacidades diversificadas que suponen una formación bíblica
específica. Vale la pena recordar como tareas prioritarias: la Biblia
en la iniciación cristiana de los niños, la Biblia para el mundo de los
jóvenes, por ejemplo en las Jornadas Mundiales de la Juventud, la
Biblia para los enfermos, para los soldados y para los encarcelados.
20
21. XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del
Sínodo], 27 de octubre de 2008.
Proposición 30
Pastoral bíblica
La Dei Verbum exhorta a hacer de la Palabra de Dios no sólo el
alma de la teología sino también el alma de toda la pastoral,
de la vida y de la misión de la Iglesia (cf. DV 24). Los obispos
deben ser los primeros promotores de esta dinámica en sus
diócesis. Para ser anunciador y anunciador creíble, el obispo
debe nutrirse, él el primero, de la Palabra de Dios, de
manera que pueda sostener y hacer cada vez más fecundo
su propio ministerio episcopal.
El Sínodo recomienda incrementar la "pastoral bíblica" no en
yuxtaposición a otras formas de pastoral sino como
animación bíblica de toda la pastoral…
21
22. XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del Sínodo],
27 de octubre de 2008.
Proposición 34 Animación bíblica y jóvenes
Como Jesús invitó a un joven a seguirle, así la invitación debe ser
propuesta de nuevo hoy a niños, muchachos, adolescentes y jóvenes
para que puedan encontrar la respuesta a su búsqueda en la
palabra del Señor. En la animación bíblica de la pastoral juvenil, se
tendrá en cuenta la invitación de Benedicto XVI: "Queridos jóvenes,
os exhorto a adquirir familiaridad con la Biblia, a tenerla a mano
para que sea para vosotros como una brújula que indica el camino a
seguir. Se espera que se presente la Escritura en sus implicaciones
vocacionales de modo que ayude y oriente a muchos jóvenes en su
decisión vocacional, incluso hasta la consagración total. Que la
comunidad cristiana acoja, escuche y acompañe a las jóvenes
generaciones con amor, de modo que sean iniciadas en el
conocimiento de las Escrituras por educadores, verdaderos testigo
s apasionados de la Palabra de Dios. 22
23. XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del
Sínodo], 27 de octubre de 2008.
Proposición 47.
La Biblia y el fenómeno de las sectas: Experimentamos una
profunda preocupación respecto al aumento y mutación del
fenómeno de las sectas... Proponemos:
-mediante una correcta hermenéutica vital de las páginas
bíblicas, intensificar la actividad pastoral para proporciona r
al alimento de la Palabra a los fieles que la buscan.
-aprender de la rica experiencia de los primeros siglos de la
Iglesia que sin embargo conocieron fenómenos análogos; (cf.
1 Juan 2, 19; 4, 2-3).
-conocer mejor las características peculiares, las causas y los
promotores de las sectas tal como se presentan hoy. 23
24. XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del
Sínodo], 27 de octubre de 2008.
-ayudar a los fieles a distinguir bien la Palabra de Dios de las
revelaciones privadas.
-impulsar grupos que compartan y mediten para contrarrestar
la atracción de las sectas y del fundamentalismo.
Es necesario que los sacerdotes estén adecuadamente
preparados para afrontar estas nuevas situaciones,
haciéndoles capaces de proponer una animación bíblica de la
pastoral, adaptada a los problemas que siente la gente de hoy.
Pedimos a la Santa Sede que estudie, en colaboración con las
Conferencias Episcopales y las estructuras competentes de
las Iglesias Orientales Católicas, el fenómeno de las sectas en
su amplitud global y en sus repercusiones también locales.
24
25. XIII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del Sínodo],
25 de octubre de 2008.
Propositio 2
La Palabra de Dios
La Palabra de Dios es el alma y el fundamento de toda la pastoral; se
augura que cada familia tenga una Biblia.
Los Padres sinodales animan a la lectura y la meditación cotidiana de
la Palabra de Dios, especialmente la lectio divina, la creación de un
sitio Internet bíblico con explicaciones y comentarios católicos al
alcance de los fieles, la preparación de una guía de introducción a la
Biblia (Antiguo y Nuevo Testamento) con un método fácil de leer la
Biblia.
Animan también a las eparquías / diócesis (desde ahora se usará el
término “diócesis” equivalente a “eparquía” propio de la
terminología oriental) y a las parroquias a promover encuentros
bíblicos en los que se medite y explique la Palabra de Dios para
responder a las preguntas de los fieles, con el objetivo de crear en
ellos una familiaridad con las Escrituras, una profundización d la
espiritualidad y un compromiso en el apostolado y en la misión.
25
26. XIII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA DEL SÍNODO DE OBISPOS, Proposiciones al
Papa [uso no oficial para reservar el carácter propositivo del Sínodo], 25
de octubre de 2008.
Propositio 3
Pastoral bíblica
Los Padres sinodales recomiendan trabajar para poner la
Sagrada Escritura, en sus dos Testamentos, en el centro
de nuestra vida cristiana.
Esto sucederá a través del ánimo a leerla, meditarla,
interpretarla de modo cristocéntrico y celebrarla en la
liturgia, según el ejemplo de la primera comunidad
cristiana.
Se propone proclamar, tras una preparación adecuada, un año
bíblico, seguido de una semana anual de la Biblia.
26
27. BENEDICTO XVI, Exhortación Apostólica Postsinodal Verbum Domini, 30 de
septiembre de 2010- La animación bíblica de la pastoral
73. En este sentido, el Sínodo ha invitado a un particular esfuerzo pastoral para resaltar el puesto
central de la Palabra de Dios en la vida eclesial, recomendando «incrementar la “pastoral bíblica”, no
en yuxtaposición con otras formas de pastoral, sino como animación bíblica de toda la pastoral» .
No se trata, pues, de añadir algún encuentro en la parroquia o la diócesis, sino de lograr que las
actividades habituales de las comunidades cristianas, las parroquias, las asociaciones y los
movimientos, se interesen realmente por el encuentro personal con Cristo que se comunica en su
Palabra. Así, puesto que «la ignorancia de las Escrituras es ignorancia de Cristo» (S. Jerónimo), la
animación bíblica de toda la pastoral ordinaria y extraordinaria llevará a un mayor conocimiento de
la persona de Cristo, revelador del Padre y plenitud de la revelación divina.
Por tanto, exhorto a los pastores y fieles a tener en cuenta la importancia de esta animación: será
también el mejor modo para afrontar algunos problemas pastorales puestos de relieve durante la
Asamblea sinodal, y vinculados, por ejemplo, a la proliferación de sectas que difunden una lectura
distorsionada e instrumental de la Sagrada Escritura. Allí donde no se forma a los fieles en el
conocimiento de la Biblia según la fe de la Iglesia, en el marco de su Tradición viva, se deja de hecho
un vacío pastoral, en el que realidades como las sectas pueden encontrar terreno donde echar
raíces. Por eso, es también necesario dotar de una preparación adecuada a los sacerdotes y laicos
para que puedan instruir al Pueblo de Dios en el conocimiento auténtico de las Escrituras.
Además, como se ha subrayado durante los trabajos sinodales, conviene que en la actividad pastoral se
favorezca también la difusión de pequeñas comunidades, «formadas por familias o radicadas en las
parroquias o vinculadas a diversos movimientos eclesiales y nuevas comunidades» (Prop. 21) en las
cuales se promueva la formación, la oración y el conocimiento de la Biblia según la fe de la Iglesia».
27
28. BENEDICTO XVI, Exhortación Apostólica Postsinodal Verbum Domini, 30 de
septiembre de 2010 - Dimensión bíblica de la catequesis
74. Un momento importante de la animación pastoral de la Iglesia en el que se puede redescubrir
adecuadamente el puesto central de la Palabra de Dios es la catequesis, que, en sus diversas formas
y fases, ha de acompañar siempre al Pueblo de Dios. El encuentro de los discípulos de Emaús con
Jesús, descrito por el evangelista Lucas (cf. Lc 24,13-35), representa en cierto sentido el modelo de
una catequesis en cuyo centro está la «explicación de las Escrituras», que sólo Cristo es capaz de
dar (cf. Lc 24,27-28), mostrando en sí mismo su cumplimiento (cfr. Prop. 23). De este modo, renace
la esperanza más fuerte que cualquier fracaso, y hace de aquellos discípulos testigos convencidos y
creíbles del Resucitado.
En el Directorio general para la catequesis encontramos indicaciones válidas para animar bíblicamente
la catequesis, y a ellas me remito (cfr. Directorio gral. cat. 94-96; CT 1298-1299). En esta
circunstancia, deseo sobre todo subrayar que la catequesis «ha de estar totalmente impregnada
por el pensamiento, el espíritu y las actitudes bíblicas y evangélicas, a través de un contacto asiduo
con los mismos textos; y recordar también que la catequesis será tanto más rica y eficaz cuanto
más lea los textos con la inteligencia y el corazón de la Iglesia» (Directorio gral. cat. 127; cfr. CT
1299), y cuanto más se inspire en la reflexión y en la vida bimilenaria de la Iglesia. Se ha de
fomentar, pues, el conocimiento de las figuras, de los hechos y las expresiones fundamentales del
texto sagrado; para ello, puede ayudar también una inteligente memorización de algunos pasajes
bíblicos particularmente elocuentes de los misterios cristianos. La actividad catequética comporta
un acercamiento a las Escrituras en la fe y en la Tradición de la Iglesia, de modo que se perciban
esas palabras como vivas, al igual que Cristo está vivo hoy donde dos o tres se reúnen en su
nombre (cf. Mt 18,20). Además, debe comunicar de manera vital la historia de la salvación y los
contenidos de la fe de la Iglesia, para que todo fiel reconozca que también su existencia personal
pertenece a esta misma historia.
En esta perspectiva, es importante subrayar la relación entre la Sagrada Escritura y el Catecismo de la
Iglesia Católica, como dice el Directorio general para la catequesis: «La Sagrada Escritura, como
“Palabra de Dios escrita bajo la inspiración del Espíritu Santo” y el Catecismo de la Iglesia Católica,
como expresión relevante actual de la Tradición viva de la Iglesia y norma segura para la
enseñanza de la fe, están llamados, cada uno a su modo y según su específica autoridad, a fecundar
la catequesis en la Iglesia contemporánea» (Directorio gral. cat.128).
28
29. BENEDICTO XVI, Exhortación Apostólica Postsinodal Verbum Domini, 30 de
septiembre de 2010 - LA PALABRA DE DIOS EN LA VIDA ECLESIAL
72. Si bien es verdad que la liturgia es el lugar privilegiado para la proclamación, la escucha y la celebración de la
Palabra de Dios, es cierto también que este encuentro ha de ser preparado en los corazones de los fieles y,
sobre todo, profundizado y asimilado por ellos. En efecto, la vida cristiana se caracteriza esencialmente por el
encuentro con Jesucristo que nos llama a seguirlo. Por eso, el Sínodo de los Obispos ha reiterado más de una
vez la importancia de la pastoral en las comunidades cristianas, como ámbito propio en el que recorrer un
itinerario personal y comunitario con respecto a la Palabra de Dios, de modo que ésta sea realmente el
fundamento de la vida espiritual. Junto a los Padres sinodales, expreso el vivo deseo de que florezca «una
nueva etapa de mayor amor a la Sagrada Escritura por parte de todos los miembros del Pueblo de Dios, de
manera que, mediante su lectura orante y fiel a lo largo del tiempo, se profundice la relación con la persona
misma de Jesús» (Prop. 9).
San Jerónimo, gran enamorado de la Palabra de Dios, se preguntaba: «¿Cómo se podría vivir sin la ciencia de las
Escrituras, mediante las cuales se aprende a conocer a Cristo mismo, que es la vida de los creyentes?» (Ep.
30,7). Era muy consciente de que la Biblia es el instrumento «con el que Dios habla cada día a los creyentes»
(Ep. 133,13). Así, san Jerónimo da este consejo a la matrona romana Leta para la educación de su hija:
«Asegúrate de que estudie cada día algún paso de la Escritura... Que la oración siga a la lectura, y la lectura a la
oración... Que, en lugar de las joyas y los vestidos de seda, ame los Libros divinos» (Ep. 107,9.12). Vale también
para nosotros lo que san Jerónimo escribió al sacerdote Nepoziano: «Lee con mucha frecuencia las divinas
Escrituras; más aún, que nunca dejes de tener el Libro santo en tus manos. Aprende aquí lo que tú tienes que
enseñar» (Ep. 52,7). A ejemplo del gran santo, que dedicó su vida al estudio de la Biblia y que dejó a la Iglesia
su traducción latina, llamada Vulgata, y de todos los santos, que han puesto en el centro de su vida espiritual
el encuentro con Cristo, renovemos nuestro compromiso de profundizar en la palabra que Dios ha dado a la
Iglesia: podremos aspirar así a ese «alto grado de la vida cristiana ordinaria» (NMI 31), que el Papa Juan Pablo
II deseaba al principio del tercer milenio cristiano, y que se alimenta constantemente de la escucha de la
Palabra de Dios.
29
30. II - Sugerencias concretas de ABP en
perspectiva
de pastoral orgánica
En las Diócesis, congregaciones,
parroquias, capillas, centros,
instituciones, movimientos y
comunidades varias.
31. I – Para las Diócesis (y con sus
adaptaciones para las
congregaciones o estructuras
nacionales de los movimientos e
instituciones de la Iglesia)
32. 1. Necesidad de una comisión de ABP a nivel diocesano o al menos
un delegado que pueda ser nexo con el Departamento de PB de la
Comisión Episcopal de Catequesis y PB.
2. Preferentemente independiente, pero en profunda relación, con
los Secretariados Diocesanos de Catequesis. Así se puede evitar
más fácilmente que la Biblia sea entendida como un “apéndice”
de la catequesis.
3. Algunas diócesis ya tienen un estatuto, reglamento o ideario
propio de PB o APB aprobado por el Obispo (Avellaneda,
Quilmes, Mar del Plata…). Es importante para darle identidad
dado que no tiene la "historia" que tienen otros ámbitos de
pastoral en la Iglesia (Acción Católica, Cáritas, etc.).
4. Se busca que las comisiones tengan una mínima estructura y una
máxima capacidad de servicio y ejecución en sus
circunscripciones. 32
33. 5. Se trata de un grupo de personas de no más de 20 que puedan
representar las distintas realidades de la Diócesis (decanatos, zonas
y ámbitos pastorales, etc.).
6. Las personas deben tener un mínimo de formación e interés
particular por la Biblia y la inserción de la misma en toda la vida
pastoral de la Iglesia.
7. La tarea de la comisión de ABP será fundamentalmente de
formación integral que asuma las tres "escuelas" mencionadas por
Aparecida 248: interpretación, oración y evangelización. Es decir
enseñar a interpretar la Biblia, a orar con la Palabra y a
comprometerse con el anuncio en el propio contexto y realidad.
33
34. 8. En lo teórico-doctrinal se va insistiendo en una lectura bíblica
en perspectiva de Historia de la Salvación dentro de la Tradición
viva de la Iglesia. Se intenta evitar el “biblicismo”, es decir la
lectura desencajada de su "casa", la Iglesia con su Tradición viva y
su Magisterio.
9. En lo espiritual la línea fuerte que se sigue imponiendo es la de
la Lectio Divina en sus múltiples formas metodológicas de
ejercitación personal y/o comunitaria.
10. En lo práctico-pastoral se busca responder al desafío de los
distintos tipos de destinatarios: niños, jóvenes, familias,
voluntarios de la caridad, encarcelados, etc. Se tiene en cuenta
también los diversos medios técnicos para hacer la animación:
didácticos, visuales, informáticos, etc.
34
35. 11. La comisión bíblica diocesana se hace presente para animar
bíblicamente la pastoral a partir de conferencias, talleres,
cursos, semanas bíblicas, exposiciones bíblicas, congresos,
retiros.
12. Lo puede hacer en actividades que la misma comisión organice
de forma abierta para todos o algunos destinatarios
específicos; o respondiendo a pedidos particulares de los
diversos ámbitos de pastoral.
13. Hay Diócesis que ya tiene sus Escuelas específicas de
Formación Bíblica (Lomas de Zamora, Buenos Aires, Mar del
Plata…).
14. No se trata de exigir “delegados” por parroquia, por
movimiento… ni de multiplicar reuniones sin objetivos claros…
15. Es una comisión de servicio a toda la comunidad eclesial para
que la Biblia leída en la fe de la Iglesia esté en el centro de toda
la vida pastoral.
35
36. II – Para las parroquias y capillas
(con sus adaptaciones para las
estructuras diocesanas
de los movimientos e
instituciones de la Iglesia)
37. 1. El primer nivel debe ser de sensibilización con perspectiva formativa.
Pedir a la comisión diocesana o el mismo párroco o algún otro sacerdote,
religioso o laico medianamente capacitado, que puedan realizar una
conferencia y/o taller sobre alguna temática bíblica que se considere
oportuna según el grado de formación y el contexto de la propia
comunidad. Se pueden aprovechar las fechas más significativas:
patronales, tiempos fuertes, misiones, etc.
2. El segundo paso puede ir más orientado a establecer el tema formativo.
Pensar en más conferencias, talleres y tal vez agregar algún retiro
"eminentemente bíblico" (por ejemplo alguna sección de algún libro de la
Escritura, o algún personaje en particular de la Biblia).
3. Si la sensibilización va dando resultado el tercer paso sería la creación de
grupos de oración y reflexión bíblica. Se trata de encuentros semanales
donde se lee, interpreta, ora y se lleva a la vida la Palabra de Dios. Son los
llamados también círculos bíblicos. Serían los "Cenáculos de la Biblia".
37
38. 5. Con respecto al contenido y a la dinámica del grupo hay varias
opciones. Conviene que los grupos tengan una reunión semanal
en un horario y día estipulado. Es importante que haya un
coordinador que lo anime, motive y lleve adelante. Es
absolutamente necesario para que el grupo de no desvirtúe.
6. Para mí lo más conveniente por las recomendaciones de la
Iglesia es hacerlo en clave de Lectio Divina siguiendo el
Evangelio de la Misa Dominical.
7. El párroco y/o coordinador general deberá reunirse con los
animadores por lo menos cuatro veces al año.
8. Habrá que facilitar material, que hay mucho y variado, de forma
impresa o en internet para armar la reunión.
9. Se deberá seguir con la formación integral planteada en los
puntos 1 y 2. Allí se seguirán alimentado y formando los
miembros de los grupos bíblicos y toda la comunidad. Será un
espacio también para entusiasmar a los que todavía no se han
decidido a participar.
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39. 9. Es un excelente espacio de espiritualidad para todos dado que no
"compite" con ningún otro grupo o institución. El que participa
del grupo bíblico puede ser de Cáritas, catequista, Legión de
María, cursillista, no estar en ningún otro grupo... Se reclama un
mínimo de compromiso con el día y el horario que no debe
entorpecer la otras actividades eclesiales que se tengan.
10. En el caso de los movimientos e instituciones de la Iglesia, se
pueden adaptar las mismas estructuras institucionales para que
esté más presente la lectura, meditación y oración con la Biblia
en la Iglesia.
11. Habrá que tener muy presente los "destinatarios" y las
"situaciones particulares", a la luz de la segunda y la tercera parte
de VD: la Liturgia, la catequesis, las vocaciones (ministros
ordenados, consagrados, laicos, familias...), la devoción mariana,
la misión (MC), justicia y caridad, paz y reconciliación, jóvenes,
emigrantes, sufrientes, pobres, el cuidado de la obra creadora de
Dios, la cultura y las diversas realidades culturales, el
ecumenismo y el diálogo interreligioso.
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