El documento resume brevemente la historia de cuatro lugares importantes en el Madrid del siglo XVIII y XIX: el Palacio Real, la Plaza de la Cebada, la Catedral de San Isidro y las referencias utilizadas. El Palacio Real alberga una biblioteca real con valiosas colecciones de los siglos XVIII y XIX. La Plaza de la Cebada era conocida por la venta de cebada y sus tabernas populares. La Catedral de San Isidro fue construida por los jesuitas y albergó a importantes figuras literarias