1. Elemento de competencia 1: Reconocer un espacio de estudio,
para la comprensión y reflexión crítica acerca de las prácticas
educativas y su teorización pedagógica, en contextos histórico-
sociales y culturales concretos.
Criterios de desempeño
Para que la competencia formulada se cumpla, es necesario lograr a
satisfacción los criterios de desempeño para esta unidad de aprendizaje,
que son:
Se siente protagonista de la transformación de la realidad, desde sus
futuros micro espacios de intervención pedagógica.
Aplica las diferentes teorizaciones que, desde las pedagogías activas,
se ofrecen para la interpretación de la realidad actual.
Evidencia el dominio de uno o varios enfoques pedagógicos que le
permiten interpretar la peculiaridad de la tarea profesional educativa.
Desarrolla su formación ética, su capacidad crítica y su compromiso
político en relación con las injusticias sociales que obstaculizan el
desarrollo de la humanidad.
Desarrollo temático
Ahora apreciado estudiante, usted ya ha adquirido las
bases epistemológicas básicas, conoce la historia de la pedagogía y la
relación con los contextos educativos. Este elemento de competencia le
ayudará a complementar cuál es el perfil que debe adquirir para su
desempeño en el campo de la docencia.
Damos comienzo a esta sesión del encuentro con el conocimiento
reflexionando acerca de cómo se está formando al profesional de la
educación y para qué se le está formando. ¿Qué está pasando con el
profesional de la educación? ¿Cuál es el sentido y finalidad de la educación?
¿Qué rasgos caracterizan una profesión? ¿Conoce cuáles son los elementos
que configuran la identidad profesional del docente? ¿Está relacionada la
formación del docente con la investigación educativa? ¿Cuál es la
importancia de la práctica en la formación del profesional de la educación?
¿Cuál es la esencia del quehacer del docente en el aula? ¿El quehacer del
docente es enseñar o formar? Para estas y muchas otras preguntas son las
2. respuestas que debemos encontrar en el camino de formación como
orientadores del conocimiento y formadores de futuras generaciones. Para
comenzar a responder los interrogantes anteriores, se expone la siguiente
información extraída de la formación a docentes: "Factores asociados a la
calidad de la educación. FACE. Proyecto educativo. 2009".
Exigencias de la formación de los educadores en Colombia
Actualmente las exigencias de formación de los educadores, se encuentran
dentro del marco de las tendencias pedagógicas mundiales y nacionales, así
como los requerimientos planteados en la normatividad educativa vigente.
Olga Lucía Zuluaga Garcés1 en el marco de la "Misión ciencia, educación y
desarrollo" dice que los docentes deben reunir iniciativas y estrategias para
alcanzar una tarea de transformación sobre la escuela, la educación y la
formación de los mismos. Se necesita una escuela capaz de adoptar otras
formas de pensamiento que aborden el universo sin límites ni jerarquías,
una escuela apta para insertarse en los postulados de la ciencia con
vocación creativa y de cambio, una escuela comprometida con la asunción
de la diversidad y la convivencia en un mundo, como el de hoy, abierto a la
búsqueda y a la afirmación de la vida.
Acorde con tales desafíos, se precisan contundentes cambios del maestro
en su manera de relacionarse con el conocimiento y, por supuesto, en el
modo de entregarlo a los estudiantes.
Edgar Morín, en el primero de los siete saberes necesarios para la
educación del futuro “La ceguera del conocimiento, el error y la ilusión”,
nos recuerda que el conocimiento del conocimiento debe aparecer como
necesidad primera, como preparación para afrontar riesgos de error que no
cesan de hacer parte de la mente y el espíritu humano. Es necesario
desarrollar en la educación el estudio de las características cerebrales,
mentales, y culturales del conocimiento, de sus procesos y modalidades, de
las disposiciones tanto psíquicas como culturales que permiten arriesgar el
error o la ilusión.
El ser humano ha desarrollado un control racional, pero siempre surgen los
innumerables errores de concepción de ideas. A ello se debe agregar la
multiplicación de riesgos de error aportados por las propias emociones, la
proyección de los deseos, de los miedos y las perturbaciones mentales de
cada persona. Los tipos de errores del conocimiento son:
Los errores mentales: la memoria está sujeta a numerosas fuentes
de error y de ilusión. La mente tiende, inconscientemente, a
3. seleccionar los recuerdos que le convienen y a rechazar, incluso a
borrar, los desfavorables.
Los errores intelectuales: los sistemas de ideas de cada persona
(teorías, doctrinas, ideologías) no solo están sujetos al error sino
también protegen los errores e ilusiones.
Los errores de la razón: ¿quién corrige el error? La actividad
racional de la mente que apela al control es la que corrige, esta
racionalidad ha de permanecer abierta a la discusión.
La comprensión del conocimiento como fuente de riqueza, redimensiona el
sentido social de la educación desde varias perspectivas:
El conocimiento como riqueza hecha de símbolos, no material, y por
tanto ilimitada, crea nuevas posibilidades de conocimiento.
El dominio de lo simbólico deriva de una nueva división del trabajo.
Cualquier trabajo que se desarrolle dentro de una empresa depende
de la información que obtengan y entreguen.
Las tareas repetitivas y mecánicas que no comprometen el
pensamiento, son candidatas a la robotización. En las otras, en
donde participan las capacidades basadas en la conceptualización y
solución de problemas, los trabajadores se vuelven insustituibles.
La conexión, integración y la simultaneidad de tiempos, conforman el
nuevo paradigma de la producción.
El pensamiento y no la memorización, la creación y el desarrollo de
una mente globalizada y no la sumatoria de saberes, constituyen el
nuevo paradigma de la educación.
Las nuevas formas de organización del conocimiento determinan
nuevas formas de organización de la producción.
El poder de mejor calidad se deriva de la aplicación del conocimiento.
El ser humano tiene la libertad y la obligación de que el conocimiento
que se obtenga se debe colocar al servicio de los demás.
La justicia, la equidad, la solidaridad y el trabajo cooperado y compartido
son símbolos que expresan el valor que la sociedad asigna al conocimiento
porque sin éste, lo demás será sólo una utopía. Hoy el dominio de lo
simbólico es imprescindible y, por eso, el desarrollo de las capacidades de
leer, escuchar y hablar, dejan de ser tareas exclusivas de los primeros
grados escolares para convertirse en el aprendizaje diario de nuevos
códigos, de distintas formas de leer y escribir, de comunicar y significar.
Competencias profesionales para un educador
El país se enfrenta a una situación que es común a la mayoría de las
instituciones educativas: el conocimiento no es significativo para las y los
4. estudiantes. Por ende, no estimula ni motiva su aprendizaje, no le
encuentran ni viabilidad, ni aplicabilidad a ese conocimiento adquirido en
las aulas que le permita dar solución a los múltiples problemas a los que se
ve abocado en su desempeño profesional y su vida cotidiana.
De otra parte, algunas y algunos docentes no tiene acceso a procesos de
formación avanzada que les permita cualificar su práctica pedagógica
coherente con su que-hacer. Como docentes se deben vincular en el
ejercicio de nuevas prácticas pedagógicas y metodológicas que les permitan
transmitir su conocimiento. No se atreven a hacer uso de las actuales
herramientas tecnológicas y, de esta manera, romper esquemas y
paradigmas de las viejas pedagogías para dar paso a las novedosas formas
de informar, formar y transformar a los seres humanos en el proceso
enseñanza-aprendizaje. Las competencias se constituyen en un elemento
fundamental en el proceso pedagógico, la forma de enseñar, así como el
sistema de evaluación permite encontrar nuevos sentidos y significados al
conocimiento.
Competencias generales
Habilidad para innovar, indagar, crear.
Capacidad para enfrentar la diversidad sociocultural.
Capacidad de trabajo colaborativo y en equipos interdisciplinarios.
Desempeño crítico y creativo del rol profesional.
Habilidad para aplicar conocimientos disciplinarios
Compromiso ético-profesional.
Competencias especializadas
Habilidad para favorecer el aprendizaje por investigación, resolución
de problemas y métodos activos.
Habilidad para planificar acciones docentes.
Capacidad para asumir nuevas exigencias curriculares, metodológicas
y tecnológicas de la época actual.
Capacidad para generar proyectos educativos que den respuesta a
las problemáticas locales y nacionales más específicas.
Habilidad para comprender, identificar y aplicar teorías del
aprendizaje.
Capacidad de aplicar diferentes estrategias de enseñanza.
Capacidad para utilizar estrategias innovadoras en la evaluación.
Capacidad para utilizar estrategias integrativas teórico-prácticas en
los estudios del ambiente sociocultural, de investigación-
selección/acción, visitas y observaciones del entorno.
5. El conocimiento se crea y uno de los instrumentos utilizados es la
investigación, la que tiene por fin ampliar el conocimiento científico, sin
perseguir, en principio, ninguna aplicación práctica. Actualmente se usa la
investigación con un propósito de estudio determinado.
Para complementar el desarrollo del tema, como documento base haga, por
favor, la lectura del documento: "Reflexiones sobre la práctica pre-
profesional y la formación del docente".
Después de debatir los planteamientos anteriores estamos en capacidad de
avanzar en algunos enfoques educativos que entregan nuevos aportes que
favorecen la educación en forma significativa.
Para entrarnos en este tema debemos concientizarnos de la importancia de
aprender a sistematizar nuestras prácticas en el aula, para convertirnos en
maestros investigadores y adquirir la capacidad de transferir conocimiento
científico a partir de situaciones reales. Aquí nos preguntamos por el
sentido de la acción del maestro que conduce a un replanteamiento de las
teorías y prácticas pedagógicas enraizadas en la escuela.
No podemos entonces dejar de soslayo que en la actualidad se requiere un
nuevo modelo educativo que sea capaz de responder a los requerimientos
que imponen las realidades sociales. Hablamos de una educación con
enfoque antropológico, que permite visualizar con mayor claridad el
fenómeno educativo y las tareas que debe asumir una formación de
educadores.
Lo anterior nos invita a retomar los hallazgos de la Neurociencia que
iluminan el camino de la Pedagogía destacando, entre otras, las relaciones
que pueden establecerse entre el proceso de enseñanza y de aprendizaje
con el desarrollo y funcionamiento del cerebro, y el aprender como
aprendo mediante el desarrollo de estrategias cognitivas.
El rol de la educación es estimular y orientar la autonomía del pensar,
hacer y sentir del estudiante. Esta situación representa un desafío para el
educador como responsable del proceso de enseñanza y de aprendizaje, y
justifica su mediación traducida, en términos generales, en implementar
creativamente el contexto en que se desenvuelve el estudiante de manera
que este pueda ejercer su iniciativa, actuar en forma independiente y auto
valorar su desempeño.
1 Zuluaga Garcés, Olga Lucía (2002). La formación de los educadores en Colombia. Cuadernos
Universidad de Antioquia. P. 29–37.
6. Elemento de competencia 2: Vincular la enseñanza con la vida y
con la práctica.
Criterios de desempeño
Para que la competencia formulada se cumpla, es necesario lograr a
satisfacción los criterios de desempeño para esta unidad de aprendizaje,
que son:
Analiza las prácticas educativas desde los modelos de aprendizaje
contemporáneos.
Retoma investigaciones que dan cuenta de los contrastes de
aprendizaje entre pedagogías activas y tradicionales en el aula.
Identifica experiencias significativas de aprendizaje, a nivel nacional
e internacional, de los modelos pedagógicos contemporáneos y sus
implicaciones en los cambios curriculares.
Desarrollo temático
Ahora entramos a reflexionar en algunas prácticas
educativas que permite repensar la intervención pedagógica, analizando los
modelos pedagógicos contemporáneos para abordar las propuestas que son
vitales en el desarrollo educativo y la formación integral en Colombia en
las instituciones educativas.
Dando continuación a la formación del profesional de la educación, tiene la
invitación a leer “Palabra maestra” que describe algunas experiencias
significativas en la búsqueda de dar respuesta a la pregunta que alguna vez
nos hemos hecho: ¿tiene sentido ser maestro?
Este diálogo del saber pretende contextualizar a los docentes en los nuevos
referentes filosóficos, epistemológicos, psicológicos y sociológicos de los
modelos pedagógicos contemporáneos en Colombia, como alternativa para
el mejoramiento de la educación de principios del siglo XXI en nuestro país
y analizar el seminario como un espacio pedagógico para transformar
nuestras prácticas. Este último permite realizar una reflexión individual y
colectiva sobre la práctica que cada persona desarrolla en las
organizaciones educativas, y decidir si transformarla aún tiene sentido.
Se pretende en este componente desarrollar un seminario como estrategia
de aprendizaje, cuyos textos "pretextos" serán elegidos entre los
7. compañeros del curso y el facilitador, conformando un banco de recursos
para el aprendizaje, fruto de un paseo programado por la red para cumplir
con los siguientes propósitos:
1. Identificar los principios de la pedagogía dialogante de Julián Subiría
Samper y sus atributos para formar la generación del siglo XXI.
2. Profundizar sobre las corrientes cognitivas que influyen en educación
y sobre los propósitos de las mismas, como una forma de acercarnos
a la comprensión de los problemas actuales en relación con el
aprendizaje significativo y la construcción del conocimiento en los
centros educativos.
3. Evaluar la pertinencia de los procesos didácticos que implican una
pedagogía por proyectos de área y de aula, y profundizar sobre las
estrategias que desde esta perspectiva se pueden dar en la escuela
para desarrollar aprendizajes significativos, teniendo como referentes
epistemológicos y pedagógicos los propios de la Pedagogía Activa.
4. Valorar la propuesta de la Pedagogía Cultural y establecer sus
contextos y relaciones con la formación integral de los educandos y
con las necesidades de formación de los actuales y futuros
formadores.
5. Analizar la pedagogía de la pregunta como una contribución para el
aprendizaje desde las relaciones interpersonales y como fuente de
conocimiento tanto en la vida cotidiana como en el aula escolar.
6. Encontrar en la pedagogía del juego un escenario privilegiado para el
aprendizaje desde aplicación de una verdadera pedagogía de las
conductas motrices.
7. Retomar la pedagogía computacional y el desarrollo de las
inteligencias múltiples como oportunidad para el desarrollo de
competencia para el aprendizaje.
8. Analizar los fundamentos de la pedagogía de la problematicidad y la
ruptura para la innovación educativa como el desafío pedagógico de
una educación científica.
9. Reflexionar acerca de la pedagogía del maestro de la calle y la
pedagogía de la ternura.
El debate del conocimiento permitirá conocer experiencias significativas de
aprendizaje, tanto a nivel nacional como internacional, de los modelos
pedagógicos contemporáneos y sus implicaciones en los cambios
curriculares.
Queda abierto el diálogo del conocimiento con la siguiente pregunta: si la
tecnología está presente en nuestras vidas, ¿por qué no en la educación?
Por favor, escuche y observe el siguiente video.