SlideShare uma empresa Scribd logo
1 de 6
VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS
LYDIA CABRERA1
os santos, airados, no solamente envían las enfermedades sino todo género de
calamidades. Del caso de Papá Colás conocido en la Habana a fines del siglo
pasado, se acordarán los viejos. Era “omó Obatalá”. Tenía la incalificable
costumbre de enojarse y conducirse soezmente con su Santo, de insultarle cuando no
tenía dinero. Conozco la historia por varios conductos: sabido es que Obatalá, el dios
puro por excelencia —es el Inmaculado, el dios de la blancura, el dueño de todo lo que
es blanco o participa esencialmente de lo blanco—, exige un trato delicadísimo. La
piedra que habita Obatalá no puede sufrir inclemencias de sol, de aire, de sereno. A
Obatalá es menester tenerle siempre envuelto en algodón —Oú— cubrirlo con un
género de una blancura impecable. En sus accesos de rabia, Papá Colás asía a Obatalá,
lo liaba en un trapo sucio o negro, y para mayor sacrilegio, lo relegaba al retrete.
Obatalá es el Misericordioso; es el gran Orisha omnipotente que dice “yo siempre
perdono a mis hijos”; pero a la larga se hartó de un trato tan canallesco e injustificable.
Un día que a Papá Colás le bajó el Santo, este le dejó dicho que en penitencia por su
irreverencia se diera por preso, permaneciendo en su cuarto durante diez y seis días
junto a los orishas. Papá Colás se encogió de hombros, y muy lejos de obedecer la
voluntad del dios, soltando un rosario de atrocidades, se marchó a la calle sin ponerse
un distintivo de Obatalá, sin llevar siquiera una cinta blanca de hiladillo.
L
“Yo que conocí a sus hermanas, doy fe que todo eso es verdad; las pobres siempre
tenían el corazón temblando en la boca, comentando su mala conducta y esperando que
el Santo lo revolcara. Colás se portaba con los Santos como un mogrolón (sic) y ellas
decían: El Angel lo va a tumbar”. Y así fue. Dormía Papá Colás frente a la ventana de
su habitación, que daba a la calle, y sin saberse poqué, al pasar el carretón de la basura,
el negro, como un loco (recuérdese que Obatalá, “el amo de las cabezas”, castiga con la
cabeza y arrebata el juicio) armándose de la tranca de la puerta mató al carretonero. Así
diez y seis días de retiro se convirtieron en diez y seis años de presidio para el
desobediente. Un contemporáneo de este santero, tan conocido por sus blasfemias y
rebeldías como por su clarividencia —dicen que para adivinar no tenía necesidad de
consultar sus caracoles, “tan fuerte era su vista”— nos cuenta que los jueces iban a
condenarlo a pena de muerte (garrote); que hubo junta de babalawos y que Orula,
Oshún y Obatalá se negaban a acceder a los ruegos de los demás Santos que pedían su
gracia. Obatalá, después de largas súplicas, solo perdonó y consintió en salvarle la vida
“cuando los blancos pensaron en sentenciarlo con pena de orí (cabeza), y Obatalá, por
tratarse de la cabeza de un hijo suyo, conmutó la pena”. Este Papá Colás, que ha dejado
tantos recuerdos entre los viejos, era famoso invertido y sorprendiendo la candidez de
un cura, casó disfrazado de mujer, con otro invertido, motivando el escándalo que puede
presumirse.
Desde muy atrás se registra el pecado nefando como algo muy frecuente en la Regla
lucumí. Sin embargo, muchos babalochas, omó—Changó, murieron castigados por un
orisha tan varonil y mujeriego como Changó, que repudia este vicio. Actualmente la
proporción de pederastas en Ocha (no así en las sectas que se reclaman de congos, en
las que se les desprecia profundamente y de las que se les expulsa) parece ser tan
1
En los relatos de Lydia Cabrera seleccionados, se observarán algunas irregularidades de orden
gramatical y tipográfico, que hemos respetado. (N. del E.)
numerosa que es motivo continuo de indignación para los viejos santeros y devotos. “¡A
cada paso se tropieza uno un partido con su merengueteo!”
“En esto de los Addodis hay misterio”, dice Sandoval, “porque Yemayá tuvo que ver
con uno... Se enamoró y vivió con uno de ellos. Fué en un país, Laddó, donde todos los
habitantes eran así, maricas, mitad hombres, que dicen nafroditos (sic) y Yemayá los
protegía”. “Oddo es tierra de Yemayá. ¡Cuántos hijos de Yemayá son maricas!” (y de
Oshún). Sin embargo, los Santos Hombres, Changó, Oggún, Elegguá, Ochosi, Orula, y
no digamos Obatalá, no ven con buenos ojos a los pederastas. No hace muchos años,
Tiyo asistió a la escena que costó la vida a un afeminado que llamaban por mofa María
Luisa, y que era hijo de Changó Terddún. “La pena era que aquel desgraciado le bajaba
un Changó magnífico. Cuando para sacar a cualquiera de un aprieto lo mandaba a que
se jugase el dinero de la comida o del alquiler del cuarto al número que le decía, nunca
lo engañaba. Ese número que daba Changó Terddún salía seguro. ¡Ah! Pero Changó no
lo quería amujerado, y ya había declarado en público que su hijo lo tenía muy
avergonzado. Fué en una fiesta de la Virgen de la Regla, María Luisa estaba allí y todos
nosotros bromeando con él, ridiculizándolo. En eso, cuando a María Luisa le estaba
subiendo el Santo, llegó otro negrito, un cojo, Biyikén, y le dio un pellizco en salva sea
la parte. Ahí Changó mismo se viró como un toro furioso y gritó: ¡Ya está bueno!
Mandó a traer una palangana grande con un poco de agua y nos ordenó que todos
escupiésemos dentro y que el que no escupiese recibiría el mismo castigo que le iba a
dar a su hijo. María Luisa estaba sano. Era bonito el negrito, y simpático... ¡Una
lástima! Cuando se llenó de escupitajos la palangana, se le vació en la cabeza. Al otro
día, María Luisa amaneció con fiebre. A los diez y seis días, lo llevamos al cementerio.
Changó Terddún lo dejó como un higuito”.
No menos extraña y ejemplar la historia de los Santeros R. y Ch... Ch. Con un
mantón amarillo de seda enredado a la cintura era la Caridad del Cobre, Oshún
panchággara, en persona.
En Gervasio, en el solar de los Catalanes, celebró una gran fiesta en honor de Oshún.
Era espléndida la “plaza” que le hizo a la diosa (plaza se llama a las ofrendas de frutas,
que después de exponerlas un rato ante las soperas del Orisha, se reparten entre los
devotos y asistentes a la fiesta). “Todo lo que se daba allí era por canastas”, me cuenta
un testigo, “las naranjas, los cocos, los canisteles, las ciruelas, los mangos, los plátanos
manzanos, las frutas bombas, todas las frutas predilectas de Oshún, los huevos, además
de los platos de bollos, palanquetas, panetelas borrachas, miel, natillas, harina dulce con
leche y mantequilla, pasas, almendras y azúcar blanca espolvoreada con canela, y
rositas de maíz... Ch. Había gastado en grande para su Santa. La casa estaba llena de
bote en bote. A las doce, cae Ch. con Oshún. R. que está en la puerta borracho, dice: a
mí también ahora mismo me va a dar Santo, y lo fingió. Entra al cuarto, va a la canasta
de los bollos, y se pone a comer bollos con miel. Viene Ch. con Oshún a saludarlo y
éste le manda un galletazo. Lo agarran, y le pega una patada. Le gritamos ¡R. tírate al
suelo! ¡Pídele perdón a Mamá!
—¡Bah! ese es un maricón...
—No es Ch. ¡Es nuestra Mamá!
Oshún no se movió. Abrió el mantón, un mantón muy bueno que le habían regalado a
Ch. los ahijados, y se rió. Levantó la mano derecha y apuntando para R. tocándose el
pecho dijo:
—Cinco irolé para mi hijo, y cinco irolé para mi otro hijo.
Y ahí mismo se fué.
Ch. amaneció con cuarenta grados de fiebre y el vientre inflamado. R. amaneció con
cuarenta grados de fiebre y el vientre inflamado... Cinco días después murieron a la
misma hora, el mismo día. No valió que los ahijados trajeran un pavo real y cincuenta y
cinco gallinas amarillas y todo lo que hacía falta para hacerle ebbó. Cinco días después,
asistiendo yo al entierro de Ch., pasaba al mismo tiempo la puerta del cementerio el
entierro de R. Las tumbas están cerca. La madre de Ch., que también era hija de Oshún,
y veinticuatro personas más que eran hijos e hijas de Oshún, en uno y otro cortejo se
subieron y usted las veía reirse y reirse, sin hablar... Hasta que echaron la última
paletada de tierra, las Oshún al lado de la fosa, no dejaron de reir, pero no a carcajadas
como se ríe la Santa, sino con una risa fría y burlona que helaba la sangre, en un silencio
en que no se oía más que la pala y el puñado de tierra cayendo en el hoyo”.
Abundan también las lesbias en Ocha (alacuattá) que antaño tenían por patrón a Inle,
el médico, Kukufago, San Rafael, “Santo muy fuerte y misterioso” y a cuya fiesta
tradicional en la loma del Angel, en los días de la colonia, al decir de los viejos, todas
acudían. Invertidos, —Addóddis, Obini—Toyo, Obini—Naña o Erán Kibá, Wassicúndi
o Diánkune, como les llaman los Abakuás o Ñañigos— y Alácuattas u Oremi se daban
cita en el barrio del Angel el 24 de octubre. Los balcones de las casas se quemaba un
pez de paja relleno de pólvora y con cohetes en la cola; la procesión y los fuegos
artificiales resultaban espléndidos. Allí estaba en el año 1887, “su capataza la Zumbáo”,
que vivía en la misma loma. Armaba una mesa en la calle y vendía las famosas tortillas
de San Rafael. (Las del negro Papá Upa, su contemporáneo, fueron también muy
célebres, y aun las recuerdan algún viejo glotón).
De la Zumbáo, santera de Inle, me han hablado en efecto, varios viejos. Era costurera
con buena clientela, muy presumida y rumbosa. Otros me hablan de una supuesta
sociedad religiosa de Alacuattás. Lo curioso es que Inle es un Santo tan casto y
exigente, en lo que se refiere a la moral de sus hijos y devotos, como Yewá. Es tan poco
mentado como ésta, como Abokú (Santiago Apóstol) y Naná, pues se le teme y nadie se
arriesga a servir a divinidades tan severas e imperiosas. Ya en los últimos años del siglo
pasado, en la Habana, “Inle casi no visitaba las cabezas”. Una sesentona me cuenta que
una vez fue al Palenque y bajó Inle. Todos los Santos le rindieron pleitesía y todas las
viejas y viejos de nación que estaban presentes “se echaron a llorar de emoción”.
—“Desde entonces”, me dice, “no he vuelto a ver a Inle en cabeza de nadie” y tampoco
recuerda más nada de aquella inolvidable visita al Palenque que honró la bajada de San
Rafael, pues tarde, cuando había terminado la fiesta, se halló en el fondo de la casa, en
una habitación, atontada y con la ropa todavía empapada de agua. Deduce que “le dio el
Santo”, Inle, y como es costumbre cuando el Santo se manifiesta presentarle una jícara
llena de agua para que beba y espurrée abundantemente a los fieles, su traje húmedo y
su “sirímba”, (atontamiento) serían prueba de haberla poseído el Orisha.
A Inle se le tiene en Santa Clara por San Juan Bautista, (24 de junio) que aquí es el
día de Oggún, y no por San Rafael, (24 de octubre). Es un adolescente, casi un niño; se
le ofrecen juguetes, y es tan travieso que lo emborrachan la noche del veinte y tres para
que pase durmiendo el día siguiente y no haga de las suyas. Amanece fresco el veinte y
cinco. Era el Santo del famoso villareño Blas Casanova, que en él se manifestaba muy
sereno y “leía el alma de todos”.
Yewá, “nuestra Señora de los Desamparados”, virgen, prohibe a sus hijas todo
comercio sexual; de ahí que sus servidoras sean siempre viejas, vírgenes o ya estériles, e
Inle, “tan severo”, tan poderoso y delicado como Yewá, acaso exigía lo mismo de sus
santeras, las cuales se abstenían de mantener relaciones sexuales con los hombres.
No menos conocido que el caso de Papá Colás entre la vieja santería, es el de P.S.,
hijo de una de las más consideradas y solicitadas iyalochas habaneras, de O.O., quien en
un momento de expansión, me lo refiere como ejemplo de la inflexibilidad y del
proceder de un dios agraviado.
“P. era, como yo, hijo de Changó; y como tal era tamborero aunque de afición. Si
cogía un cajón para tocar, el cajón se volvía un tambor. Cantaba que hacía bajar del
cielo a todos los Santos. Pero mi hijo P. se puso en falta con Changó y se perdió. En una
fiesta le dijo así al mismo Santo, en mi propia casa: si es verdad que usté es Santa
Bárbara y dice que hace y que torna, y que a mí me va a matar ¡máteme enseguida! A
ver, ¡que me parta un rayo ahora mismo! y déjese de más historias. Santa Bárbara no le
contestó. Se echó a reír. Yo me quedé fría, y abochornada del atrevimiento del
muchacho. Pasaron los años. El siguió trabajando y divirtiéndose. En los toques que yo
daba en mi casa, Santa Bárbara recogía dinero y se lo daba2
. Bueno, con eso P. creyó
que a Changó se le había olvidado aquel incidente. Otra falta que cometió fue la de
sonar a varias mujeres de Changó: ¡digo, con lo celoso que es él! Ponga otras cositas
que hizo, unidas a la zoquetería que tuvo con el propio Santo y arresultó que al cabo del
tiempo, y cuando menos se lo pensaba, Santa Bárbara saltó con que se las iba a cobrar
entonces todas juntas, y caro. Por que eso tienen los Santos, esperan para vengarse, dan
cordel y cordel, y arrancan cuando más desprevenido está el que tiró la piedra. Primero
Changó me lo puso como bobo. Después loco. Un día se fué desnudo a la calle y volvió
tinto en sangre. Estuvo amarrado. Pedía perdón y Santa Bárbara lo que contestaba
siempre era: que sepa que yo los tengo más grandes que él, que yo no he olvidado,
aunque cuando me insultó me reía. Y yo su madre, con ser yalocha, sin poder salvarlo.
Tiraba los caracoles para hacerle algo a mi hijo (ebbó) y Changó me contestaba que yo
no podía más que él, que me dejase de parejerías. Oigame, no logré hacerle ni una
limpieza a mi hijo. ¡Nada, con mi santería! Y a padecer como madre. Al fin murió que
no era ni su sombra. Un esqueleto. Cuando se lo llevaron, lo que pesaba era la caja”.
O.O. deja en silencio otro pecado imperdonable que cometió su sacrílego hijo. Es
una llegada suya quien me cuenta que lo que más entristeció a O.O. —y “desde
entonces ella empezó a declinar, eso acabó con ella”— fue lo que hizo con su piedra de
Oshún. “O.O. tenía una piedra africana que era de su madrina lucumisa; su madrina la
trajo cuando vino a Cuba, y se la había dejado a ella. La piedra creció. Se puso enorme.
Parecía por la forma, un melón. Dos hombres no podían moverla. Esa Caridad tenía un
metro de ancho. Como que no había sopera para ella. O.O. la tenía en una batea. En una
mudada, P. se la botó. Sí señora... Dicen muchos que la echó al río, pero no se sabe de
fijo adonde fué a parar la Caridad del Cobre”.
No siempre los Santos, sin embargo, castigan con justicia. Si en el caso de Papá
Colás se comprende que Obatalá aplicara a su hijo un correctivo más que merecido, en
el de Luis S. el rigor de Changó parece tan excesivo como gratuito. Contra el capricho
despiadado de los dioses, contra la antipatía divina que se ensaña en algún mortal, “por
que sí”, no puede lucharse.
Se ataja a tiempo el mal que desencadena el mayombero judío, este tipo que aún
inspira al pueblo un terror en el que hallaremos tan fuertes, tan rancias reminiscencias
africanas: todo se estrella, en cambio contra la mala voluntad irreductible del Santo que
“emperra”, “se vuelve de espaldas” y niega su protección o su perdón al hombre
infortunado, sin más pecado que el de haber incurrido en su desagrado, “en caerle
pesado”. Si bien es cierto que el favor de los Orishas se compra, pues son estos muy
interesados, glotones y susceptibles al halago, cuando el Orisha se enterca y se hace el
sordo, no acepta transacción alguna. Y aquí, si el adivino y conjurador, dueño de los
medios de que se vale —coco, diloggún, okpelé, vititi mensu o andilé— para revelar al
hombre el misterio del presente o la incógnita del futuro, es honrado no insistirá en
2
Los Santos posesionados de sus hijos le piden dinero a los asistentes a las fiestas para regalarlo a los
tamboreros, demostrándoles con esto que han tocado a su entera satisfacción.
rogativas que arruinen al sentenciado sin apelación con gastos que implican serios
sacrificios y de los que sólo él se beneficiará mterialmente.
“Cuando el Santo se vira y quiere perder a uno, ¿qué se va a hacer?” Absolutamente
nada. La enfermedad entonces lo saben el babalawo y el gangángáme, no tiene remedio;
ya no existe para este individuo la posibilidad de “un cambio de vida” o de cabeza, esta
operación mágica, universal y milenaria que consiste en hacer pasar la enfermedad de
una persona a un animal, a un muñeco, al que se tratará de darle el mayor parecido con
el enfermo, o a otra persona sana, por lo que muchos se guardan de estar en contacto
directo y aún de visitar santeros e iyalochas enfermos de gravedad, “no sea que cambien
vida”, pues el espíritu más fuerte puede apoderarse de la vitalidad del más debil, robarle
la vida y recuperar la salud. (“Por eso vé Vd. que un santero viejo, ya moribundo revive,
y en cambio se muere el joven que está a su lado”).
Tampoco le salvaría la gracia que un orisha infundiera a una yerba. No valen
rogaciones ni ebbó, sacrificios de aves y cuadrúpedos, tan eficaces que estipulan de
antemano los Santos, especificando su naturaleza en cada caso, mediante los caracoles o
el Ifá.
Luis S., al revés que Papá Colás, no era santero. En un toque de tambor Changó le
pidió “agguddé” —plátano—, y Luis no lo entendió o se hizo el distraido. Es verdad
que no creía mucho en los Santos; detalle de la mayor importancia. Un domingo que iba
de compras al mercado alguien se le acercó y le habló en lengua. En aquel instante
perdió el conocimiento y sin recobrarlo lo llevaron a su habitación en el solar. No volvió
en sí hasta transcurridas cinco horas. Estando aún inconsciente en la cama, su mujer
“cae” con Changó, éste la conduce a casa de su madrina, y allí el Santo refiere lo
ocurrido.
—“Alafi (Changó) ¿pero qué has hecho?” le preguntan. “Etie mi cosinca”, (No he
hecho nada) responde el Santo maliciosamente dándose en la rodilla y encogiéndose de
hombros.
La madrina le retiró el Santo a la mujer de Luis. No se perdió tiempo; se hicieron
rogaciones para desagraviar a Changó. Advertido por la madrina de su mujer, Luis le
sacrificó un hermoso carnero. Pero Changó... “de tan rencoroso, de tan caprichoso que
es”, no quedó satisfecho. El hombre empeoró y su mujer no podía dejarlo solo pues
inmediatamente Alafi lo lanzaba al suelo y quedaba atontado, privado de movimiento
por mucho rato. Explicaba torpemente al volver en sí, que un negro lo elevaba y lo
dejaba caer. “Por la tirria de Santa Bárbara, que se empeñó en acabar con él”, Luis S. al
fin murió de un síncope.
VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS
Extraido de EL MONTE
Lydia Cabrera
Amanecer Vudú. Valdemar Antologías 3
rogativas que arruinen al sentenciado sin apelación con gastos que implican serios
sacrificios y de los que sólo él se beneficiará mterialmente.
“Cuando el Santo se vira y quiere perder a uno, ¿qué se va a hacer?” Absolutamente
nada. La enfermedad entonces lo saben el babalawo y el gangángáme, no tiene remedio;
ya no existe para este individuo la posibilidad de “un cambio de vida” o de cabeza, esta
operación mágica, universal y milenaria que consiste en hacer pasar la enfermedad de
una persona a un animal, a un muñeco, al que se tratará de darle el mayor parecido con
el enfermo, o a otra persona sana, por lo que muchos se guardan de estar en contacto
directo y aún de visitar santeros e iyalochas enfermos de gravedad, “no sea que cambien
vida”, pues el espíritu más fuerte puede apoderarse de la vitalidad del más debil, robarle
la vida y recuperar la salud. (“Por eso vé Vd. que un santero viejo, ya moribundo revive,
y en cambio se muere el joven que está a su lado”).
Tampoco le salvaría la gracia que un orisha infundiera a una yerba. No valen
rogaciones ni ebbó, sacrificios de aves y cuadrúpedos, tan eficaces que estipulan de
antemano los Santos, especificando su naturaleza en cada caso, mediante los caracoles o
el Ifá.
Luis S., al revés que Papá Colás, no era santero. En un toque de tambor Changó le
pidió “agguddé” —plátano—, y Luis no lo entendió o se hizo el distraido. Es verdad
que no creía mucho en los Santos; detalle de la mayor importancia. Un domingo que iba
de compras al mercado alguien se le acercó y le habló en lengua. En aquel instante
perdió el conocimiento y sin recobrarlo lo llevaron a su habitación en el solar. No volvió
en sí hasta transcurridas cinco horas. Estando aún inconsciente en la cama, su mujer
“cae” con Changó, éste la conduce a casa de su madrina, y allí el Santo refiere lo
ocurrido.
—“Alafi (Changó) ¿pero qué has hecho?” le preguntan. “Etie mi cosinca”, (No he
hecho nada) responde el Santo maliciosamente dándose en la rodilla y encogiéndose de
hombros.
La madrina le retiró el Santo a la mujer de Luis. No se perdió tiempo; se hicieron
rogaciones para desagraviar a Changó. Advertido por la madrina de su mujer, Luis le
sacrificó un hermoso carnero. Pero Changó... “de tan rencoroso, de tan caprichoso que
es”, no quedó satisfecho. El hombre empeoró y su mujer no podía dejarlo solo pues
inmediatamente Alafi lo lanzaba al suelo y quedaba atontado, privado de movimiento
por mucho rato. Explicaba torpemente al volver en sí, que un negro lo elevaba y lo
dejaba caer. “Por la tirria de Santa Bárbara, que se empeñó en acabar con él”, Luis S. al
fin murió de un síncope.
VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS
Extraido de EL MONTE
Lydia Cabrera
Amanecer Vudú. Valdemar Antologías 3

Mais conteúdo relacionado

Mais procurados

Las bases de la fe premilenial
Las bases de la fe premilenialLas bases de la fe premilenial
Las bases de la fe premilenialJoseCandela9
 
Tratado ozain-tomo-1
Tratado ozain-tomo-1Tratado ozain-tomo-1
Tratado ozain-tomo-1Mase Lobe
 
Estrutura do santuário
Estrutura do santuárioEstrutura do santuário
Estrutura do santuárioJosé Santos
 
Libros sapienciales del antiguo testamento
Libros sapienciales del antiguo testamentoLibros sapienciales del antiguo testamento
Libros sapienciales del antiguo testamentoRebeca Reynaud
 
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo a. kenne...
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo   a. kenne...Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo   a. kenne...
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo a. kenne...Cleber Batista
 
A doutrina bíblica do uso do véu
A doutrina bíblica do uso do véuA doutrina bíblica do uso do véu
A doutrina bíblica do uso do véuRomário Osodrac
 
La misión de la iglesia en apocalipsis
La misión de la iglesia en apocalipsisLa misión de la iglesia en apocalipsis
La misión de la iglesia en apocalipsisSaúl Loera
 
Los oficios ministeriales. Iglesia de Cristo
Los oficios ministeriales. Iglesia de CristoLos oficios ministeriales. Iglesia de Cristo
Los oficios ministeriales. Iglesia de CristoMarta Canales
 
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_moderno
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_modernoBabilonia misterio religioso.antiguo_y_moderno
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_modernoKimberly Murillo
 
UTPL CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...
UTPL  CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...UTPL  CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...
UTPL CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...UTPL UTPL
 
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?Águila de Ifá
 
The bag of wisdom (wande abimbola)
The bag of wisdom (wande abimbola)The bag of wisdom (wande abimbola)
The bag of wisdom (wande abimbola)Marte Edgar
 
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...Águila de Ifá
 
Introdução ao Estudo do NT
Introdução ao Estudo do NTIntrodução ao Estudo do NT
Introdução ao Estudo do NTRicardo Gondim
 
Sucot la Fiesta de las cabañas
Sucot la Fiesta de las cabañasSucot la Fiesta de las cabañas
Sucot la Fiesta de las cabañasSaúl Loera
 

Mais procurados (20)

Las bases de la fe premilenial
Las bases de la fe premilenialLas bases de la fe premilenial
Las bases de la fe premilenial
 
Lição 12 a morte de jesus
Lição 12 a morte de jesusLição 12 a morte de jesus
Lição 12 a morte de jesus
 
Tratado ozain-tomo-1
Tratado ozain-tomo-1Tratado ozain-tomo-1
Tratado ozain-tomo-1
 
Fa lokun fatumbi dafa
Fa lokun fatumbi   dafaFa lokun fatumbi   dafa
Fa lokun fatumbi dafa
 
Refranes
RefranesRefranes
Refranes
 
Estrutura do santuário
Estrutura do santuárioEstrutura do santuário
Estrutura do santuário
 
Libros sapienciales del antiguo testamento
Libros sapienciales del antiguo testamentoLibros sapienciales del antiguo testamento
Libros sapienciales del antiguo testamento
 
El dilogun,129 pags.
El dilogun,129 pags.El dilogun,129 pags.
El dilogun,129 pags.
 
Merindilogun
MerindilogunMerindilogun
Merindilogun
 
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo a. kenne...
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo   a. kenne...Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo   a. kenne...
Os 100 Acontecimentos mais Importantes da História do Cristianismo a. kenne...
 
A doutrina bíblica do uso do véu
A doutrina bíblica do uso do véuA doutrina bíblica do uso do véu
A doutrina bíblica do uso do véu
 
La misión de la iglesia en apocalipsis
La misión de la iglesia en apocalipsisLa misión de la iglesia en apocalipsis
La misión de la iglesia en apocalipsis
 
Los oficios ministeriales. Iglesia de Cristo
Los oficios ministeriales. Iglesia de CristoLos oficios ministeriales. Iglesia de Cristo
Los oficios ministeriales. Iglesia de Cristo
 
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_moderno
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_modernoBabilonia misterio religioso.antiguo_y_moderno
Babilonia misterio religioso.antiguo_y_moderno
 
UTPL CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...
UTPL  CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...UTPL  CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...
UTPL CARTA A LOS TESALONESENSES Y CORINTIOS-CIENCIAS HUMANAS Y RELIGIOSAS-NU...
 
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?
Hacer Santo con Oró: ¿Coronando al Tío, la Esposa, el Hermano o la Prima?
 
The bag of wisdom (wande abimbola)
The bag of wisdom (wande abimbola)The bag of wisdom (wande abimbola)
The bag of wisdom (wande abimbola)
 
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...
El aleyo puede darle coco a su Eleggua y hasta un Pollito:O la historia de lo...
 
Introdução ao Estudo do NT
Introdução ao Estudo do NTIntrodução ao Estudo do NT
Introdução ao Estudo do NT
 
Sucot la Fiesta de las cabañas
Sucot la Fiesta de las cabañasSucot la Fiesta de las cabañas
Sucot la Fiesta de las cabañas
 

Destaque

Animales de osha ifá
Animales de osha ifáAnimales de osha ifá
Animales de osha ifáOkan Oyu
 
1960-2010 Multimedia
1960-2010 Multimedia1960-2010 Multimedia
1960-2010 MultimediaMakeOil Green
 
Manual del practicante
Manual del practicanteManual del practicante
Manual del practicanteSimon Torres
 
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yoruba
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yorubaPrimeros pasos para un aleyo entrar en la religion yoruba
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yorubaAzarais Ruiz
 
Santeria
SanteriaSanteria
Santeriasodavid
 
Hierbas de osha y orishas
Hierbas de osha y orishasHierbas de osha y orishas
Hierbas de osha y orishasSimon Gonzales
 
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?Águila de Ifá
 
Herencia africana-cuba
Herencia africana-cubaHerencia africana-cuba
Herencia africana-cubasuzannbaldwin
 
Nombres de los animales
Nombres de los animalesNombres de los animales
Nombres de los animalesLuis Enrique
 
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...Águila de Ifá
 
Palos+y+plantas+de+santo
Palos+y+plantas+de+santoPalos+y+plantas+de+santo
Palos+y+plantas+de+santoGuille Barrera
 

Destaque (18)

Animales de osha ifá
Animales de osha ifáAnimales de osha ifá
Animales de osha ifá
 
De orishas
De orishasDe orishas
De orishas
 
Taller Orishas
Taller OrishasTaller Orishas
Taller Orishas
 
1960-2010 Multimedia
1960-2010 Multimedia1960-2010 Multimedia
1960-2010 Multimedia
 
Santería y Género
Santería y GéneroSantería y Género
Santería y Género
 
Manual del practicante
Manual del practicanteManual del practicante
Manual del practicante
 
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yoruba
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yorubaPrimeros pasos para un aleyo entrar en la religion yoruba
Primeros pasos para un aleyo entrar en la religion yoruba
 
Reglas gratuitas ebook3
Reglas gratuitas ebook3Reglas gratuitas ebook3
Reglas gratuitas ebook3
 
El tarot de los orishas
El tarot de los orishasEl tarot de los orishas
El tarot de los orishas
 
Santeria
SanteriaSanteria
Santeria
 
Hierbas de osha y orishas
Hierbas de osha y orishasHierbas de osha y orishas
Hierbas de osha y orishas
 
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?
Los Orishas son Energias:Podremos iluminar la Ciudad?
 
Herencia africana-cuba
Herencia africana-cubaHerencia africana-cuba
Herencia africana-cuba
 
Religión en la Rep.Dom
Religión en la Rep.Dom Religión en la Rep.Dom
Religión en la Rep.Dom
 
Nombres de los animales
Nombres de los animalesNombres de los animales
Nombres de los animales
 
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...
Orishas que Hablan por Ifá y la Búsqueda del Caracol de Oggún: Dos Tareas Tit...
 
Palos+y+plantas+de+santo
Palos+y+plantas+de+santoPalos+y+plantas+de+santo
Palos+y+plantas+de+santo
 
Los Yoruba
Los YorubaLos Yoruba
Los Yoruba
 

Semelhante a Cabrera, Lydia Venganzas Y Castigos De Los Orishas

Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01
Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01
Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01Tania Campos
 
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles Arazo
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles ArazoSUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles Arazo
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles ArazoJulioPollinoTamayo
 
Pascua Marrana
Pascua MarranaPascua Marrana
Pascua MarranaJaguit
 
El cuento del molinero
El cuento del molineroEl cuento del molinero
El cuento del molineroAFC_73
 
El padre sin cabeza
El padre sin cabezaEl padre sin cabeza
El padre sin cabezalasusana
 
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familia
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familiaCuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familia
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familiaNelson Caldera
 
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47sifexol
 
tradiciones peruano ( la primera serie)
tradiciones peruano ( la primera serie)tradiciones peruano ( la primera serie)
tradiciones peruano ( la primera serie)yair mendoza
 
Buscon quevedo
Buscon quevedoBuscon quevedo
Buscon quevedoBea Marfer
 
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.Nombre Apellidos
 

Semelhante a Cabrera, Lydia Venganzas Y Castigos De Los Orishas (20)

Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01
Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01
Cabreralydia venganzasycastigosdelosorishas-090413125554-phpapp01
 
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles Arazo
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles ArazoSUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles Arazo
SUPERSTICIÓN Y FE EN ESPAÑA (1978) María Ángeles Arazo
 
Pesaj2007 (1)
Pesaj2007 (1)Pesaj2007 (1)
Pesaj2007 (1)
 
Pascua Marrana
Pascua MarranaPascua Marrana
Pascua Marrana
 
El cuento del molinero
El cuento del molineroEl cuento del molinero
El cuento del molinero
 
El gusto de la sangre
El gusto de la sangreEl gusto de la sangre
El gusto de la sangre
 
El padre sin cabeza
El padre sin cabezaEl padre sin cabeza
El padre sin cabeza
 
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familia
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familiaCuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familia
Cuentos del arañero_capitulo_01_historias_de_familia
 
Raíces populares del convidado de piedra
Raíces populares del convidado de piedraRaíces populares del convidado de piedra
Raíces populares del convidado de piedra
 
Pesaj2012
Pesaj2012Pesaj2012
Pesaj2012
 
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47
BIBLIA CATOLICA, ANTIGUO TESTAMENTO, TOBIAS, PARTE 42 DE 47
 
Labriegos 5
Labriegos 5Labriegos 5
Labriegos 5
 
10 leyendas
10 leyendas10 leyendas
10 leyendas
 
Pesaj2012
Pesaj2012Pesaj2012
Pesaj2012
 
Relatos
RelatosRelatos
Relatos
 
Relatos
RelatosRelatos
Relatos
 
tradiciones peruano ( la primera serie)
tradiciones peruano ( la primera serie)tradiciones peruano ( la primera serie)
tradiciones peruano ( la primera serie)
 
Buscon quevedo
Buscon quevedoBuscon quevedo
Buscon quevedo
 
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.
Mujeres libres. Women in freedown. Spanish writers women.
 
Citas
CitasCitas
Citas
 

Último

SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxSEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxYadi Campos
 
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.amayarogel
 
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdf
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdfCLASE - La visión y misión organizacionales.pdf
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdfJonathanCovena1
 
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfSELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfAngélica Soledad Vega Ramírez
 
Qué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaQué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaDecaunlz
 
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdfNeurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdfDemetrio Ccesa Rayme
 
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO .pptx
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO   .pptxINSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO   .pptx
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO .pptxdeimerhdz21
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Lourdes Feria
 
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularLey 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularMooPandrea
 
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxzulyvero07
 
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURA
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURAFORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURA
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURAEl Fortí
 
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...JonathanCovena1
 
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...Carlos Muñoz
 
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdf
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdfCuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdf
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdfNancyLoaa
 
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSTEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSjlorentemartos
 
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAJAVIER SOLIS NOYOLA
 

Último (20)

Medición del Movimiento Online 2024.pptx
Medición del Movimiento Online 2024.pptxMedición del Movimiento Online 2024.pptx
Medición del Movimiento Online 2024.pptx
 
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptxSEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
SEXTO SEGUNDO PERIODO EMPRENDIMIENTO.pptx
 
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.La triple Naturaleza del Hombre estudio.
La triple Naturaleza del Hombre estudio.
 
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdf
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdfCLASE - La visión y misión organizacionales.pdf
CLASE - La visión y misión organizacionales.pdf
 
Unidad 3 | Metodología de la Investigación
Unidad 3 | Metodología de la InvestigaciónUnidad 3 | Metodología de la Investigación
Unidad 3 | Metodología de la Investigación
 
Fe contra todo pronóstico. La fe es confianza.
Fe contra todo pronóstico. La fe es confianza.Fe contra todo pronóstico. La fe es confianza.
Fe contra todo pronóstico. La fe es confianza.
 
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdfSELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
 
Qué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativaQué es la Inteligencia artificial generativa
Qué es la Inteligencia artificial generativa
 
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdfNeurociencias para Educadores  NE24  Ccesa007.pdf
Neurociencias para Educadores NE24 Ccesa007.pdf
 
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO .pptx
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO   .pptxINSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO   .pptx
INSTRUCCION PREPARATORIA DE TIRO .pptx
 
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
Caja de herramientas de inteligencia artificial para la academia y la investi...
 
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circularLey 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
Ley 21.545 - Circular Nº 586.pdf circular
 
Sesión de clase: Fe contra todo pronóstico
Sesión de clase: Fe contra todo pronósticoSesión de clase: Fe contra todo pronóstico
Sesión de clase: Fe contra todo pronóstico
 
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptxACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
ACUERDO MINISTERIAL 078-ORGANISMOS ESCOLARES..pptx
 
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURA
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURAFORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURA
FORTI-MAYO 2024.pdf.CIENCIA,EDUCACION,CULTURA
 
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...
La empresa sostenible: Principales Características, Barreras para su Avance y...
 
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
Plan Refuerzo Escolar 2024 para estudiantes con necesidades de Aprendizaje en...
 
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdf
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdfCuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdf
Cuaderno de trabajo Matemática 3 tercer grado.pdf
 
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOSTEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
TEMA 13 ESPAÑA EN DEMOCRACIA:DISTINTOS GOBIERNOS
 
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLAACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
ACERTIJO DE POSICIÓN DE CORREDORES EN LA OLIMPIADA. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
 

Cabrera, Lydia Venganzas Y Castigos De Los Orishas

  • 1. VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS LYDIA CABRERA1 os santos, airados, no solamente envían las enfermedades sino todo género de calamidades. Del caso de Papá Colás conocido en la Habana a fines del siglo pasado, se acordarán los viejos. Era “omó Obatalá”. Tenía la incalificable costumbre de enojarse y conducirse soezmente con su Santo, de insultarle cuando no tenía dinero. Conozco la historia por varios conductos: sabido es que Obatalá, el dios puro por excelencia —es el Inmaculado, el dios de la blancura, el dueño de todo lo que es blanco o participa esencialmente de lo blanco—, exige un trato delicadísimo. La piedra que habita Obatalá no puede sufrir inclemencias de sol, de aire, de sereno. A Obatalá es menester tenerle siempre envuelto en algodón —Oú— cubrirlo con un género de una blancura impecable. En sus accesos de rabia, Papá Colás asía a Obatalá, lo liaba en un trapo sucio o negro, y para mayor sacrilegio, lo relegaba al retrete. Obatalá es el Misericordioso; es el gran Orisha omnipotente que dice “yo siempre perdono a mis hijos”; pero a la larga se hartó de un trato tan canallesco e injustificable. Un día que a Papá Colás le bajó el Santo, este le dejó dicho que en penitencia por su irreverencia se diera por preso, permaneciendo en su cuarto durante diez y seis días junto a los orishas. Papá Colás se encogió de hombros, y muy lejos de obedecer la voluntad del dios, soltando un rosario de atrocidades, se marchó a la calle sin ponerse un distintivo de Obatalá, sin llevar siquiera una cinta blanca de hiladillo. L “Yo que conocí a sus hermanas, doy fe que todo eso es verdad; las pobres siempre tenían el corazón temblando en la boca, comentando su mala conducta y esperando que el Santo lo revolcara. Colás se portaba con los Santos como un mogrolón (sic) y ellas decían: El Angel lo va a tumbar”. Y así fue. Dormía Papá Colás frente a la ventana de su habitación, que daba a la calle, y sin saberse poqué, al pasar el carretón de la basura, el negro, como un loco (recuérdese que Obatalá, “el amo de las cabezas”, castiga con la cabeza y arrebata el juicio) armándose de la tranca de la puerta mató al carretonero. Así diez y seis días de retiro se convirtieron en diez y seis años de presidio para el desobediente. Un contemporáneo de este santero, tan conocido por sus blasfemias y rebeldías como por su clarividencia —dicen que para adivinar no tenía necesidad de consultar sus caracoles, “tan fuerte era su vista”— nos cuenta que los jueces iban a condenarlo a pena de muerte (garrote); que hubo junta de babalawos y que Orula, Oshún y Obatalá se negaban a acceder a los ruegos de los demás Santos que pedían su gracia. Obatalá, después de largas súplicas, solo perdonó y consintió en salvarle la vida “cuando los blancos pensaron en sentenciarlo con pena de orí (cabeza), y Obatalá, por tratarse de la cabeza de un hijo suyo, conmutó la pena”. Este Papá Colás, que ha dejado tantos recuerdos entre los viejos, era famoso invertido y sorprendiendo la candidez de un cura, casó disfrazado de mujer, con otro invertido, motivando el escándalo que puede presumirse. Desde muy atrás se registra el pecado nefando como algo muy frecuente en la Regla lucumí. Sin embargo, muchos babalochas, omó—Changó, murieron castigados por un orisha tan varonil y mujeriego como Changó, que repudia este vicio. Actualmente la proporción de pederastas en Ocha (no así en las sectas que se reclaman de congos, en las que se les desprecia profundamente y de las que se les expulsa) parece ser tan 1 En los relatos de Lydia Cabrera seleccionados, se observarán algunas irregularidades de orden gramatical y tipográfico, que hemos respetado. (N. del E.)
  • 2. numerosa que es motivo continuo de indignación para los viejos santeros y devotos. “¡A cada paso se tropieza uno un partido con su merengueteo!” “En esto de los Addodis hay misterio”, dice Sandoval, “porque Yemayá tuvo que ver con uno... Se enamoró y vivió con uno de ellos. Fué en un país, Laddó, donde todos los habitantes eran así, maricas, mitad hombres, que dicen nafroditos (sic) y Yemayá los protegía”. “Oddo es tierra de Yemayá. ¡Cuántos hijos de Yemayá son maricas!” (y de Oshún). Sin embargo, los Santos Hombres, Changó, Oggún, Elegguá, Ochosi, Orula, y no digamos Obatalá, no ven con buenos ojos a los pederastas. No hace muchos años, Tiyo asistió a la escena que costó la vida a un afeminado que llamaban por mofa María Luisa, y que era hijo de Changó Terddún. “La pena era que aquel desgraciado le bajaba un Changó magnífico. Cuando para sacar a cualquiera de un aprieto lo mandaba a que se jugase el dinero de la comida o del alquiler del cuarto al número que le decía, nunca lo engañaba. Ese número que daba Changó Terddún salía seguro. ¡Ah! Pero Changó no lo quería amujerado, y ya había declarado en público que su hijo lo tenía muy avergonzado. Fué en una fiesta de la Virgen de la Regla, María Luisa estaba allí y todos nosotros bromeando con él, ridiculizándolo. En eso, cuando a María Luisa le estaba subiendo el Santo, llegó otro negrito, un cojo, Biyikén, y le dio un pellizco en salva sea la parte. Ahí Changó mismo se viró como un toro furioso y gritó: ¡Ya está bueno! Mandó a traer una palangana grande con un poco de agua y nos ordenó que todos escupiésemos dentro y que el que no escupiese recibiría el mismo castigo que le iba a dar a su hijo. María Luisa estaba sano. Era bonito el negrito, y simpático... ¡Una lástima! Cuando se llenó de escupitajos la palangana, se le vació en la cabeza. Al otro día, María Luisa amaneció con fiebre. A los diez y seis días, lo llevamos al cementerio. Changó Terddún lo dejó como un higuito”. No menos extraña y ejemplar la historia de los Santeros R. y Ch... Ch. Con un mantón amarillo de seda enredado a la cintura era la Caridad del Cobre, Oshún panchággara, en persona. En Gervasio, en el solar de los Catalanes, celebró una gran fiesta en honor de Oshún. Era espléndida la “plaza” que le hizo a la diosa (plaza se llama a las ofrendas de frutas, que después de exponerlas un rato ante las soperas del Orisha, se reparten entre los devotos y asistentes a la fiesta). “Todo lo que se daba allí era por canastas”, me cuenta un testigo, “las naranjas, los cocos, los canisteles, las ciruelas, los mangos, los plátanos manzanos, las frutas bombas, todas las frutas predilectas de Oshún, los huevos, además de los platos de bollos, palanquetas, panetelas borrachas, miel, natillas, harina dulce con leche y mantequilla, pasas, almendras y azúcar blanca espolvoreada con canela, y rositas de maíz... Ch. Había gastado en grande para su Santa. La casa estaba llena de bote en bote. A las doce, cae Ch. con Oshún. R. que está en la puerta borracho, dice: a mí también ahora mismo me va a dar Santo, y lo fingió. Entra al cuarto, va a la canasta de los bollos, y se pone a comer bollos con miel. Viene Ch. con Oshún a saludarlo y éste le manda un galletazo. Lo agarran, y le pega una patada. Le gritamos ¡R. tírate al suelo! ¡Pídele perdón a Mamá! —¡Bah! ese es un maricón... —No es Ch. ¡Es nuestra Mamá! Oshún no se movió. Abrió el mantón, un mantón muy bueno que le habían regalado a Ch. los ahijados, y se rió. Levantó la mano derecha y apuntando para R. tocándose el pecho dijo: —Cinco irolé para mi hijo, y cinco irolé para mi otro hijo. Y ahí mismo se fué. Ch. amaneció con cuarenta grados de fiebre y el vientre inflamado. R. amaneció con cuarenta grados de fiebre y el vientre inflamado... Cinco días después murieron a la
  • 3. misma hora, el mismo día. No valió que los ahijados trajeran un pavo real y cincuenta y cinco gallinas amarillas y todo lo que hacía falta para hacerle ebbó. Cinco días después, asistiendo yo al entierro de Ch., pasaba al mismo tiempo la puerta del cementerio el entierro de R. Las tumbas están cerca. La madre de Ch., que también era hija de Oshún, y veinticuatro personas más que eran hijos e hijas de Oshún, en uno y otro cortejo se subieron y usted las veía reirse y reirse, sin hablar... Hasta que echaron la última paletada de tierra, las Oshún al lado de la fosa, no dejaron de reir, pero no a carcajadas como se ríe la Santa, sino con una risa fría y burlona que helaba la sangre, en un silencio en que no se oía más que la pala y el puñado de tierra cayendo en el hoyo”. Abundan también las lesbias en Ocha (alacuattá) que antaño tenían por patrón a Inle, el médico, Kukufago, San Rafael, “Santo muy fuerte y misterioso” y a cuya fiesta tradicional en la loma del Angel, en los días de la colonia, al decir de los viejos, todas acudían. Invertidos, —Addóddis, Obini—Toyo, Obini—Naña o Erán Kibá, Wassicúndi o Diánkune, como les llaman los Abakuás o Ñañigos— y Alácuattas u Oremi se daban cita en el barrio del Angel el 24 de octubre. Los balcones de las casas se quemaba un pez de paja relleno de pólvora y con cohetes en la cola; la procesión y los fuegos artificiales resultaban espléndidos. Allí estaba en el año 1887, “su capataza la Zumbáo”, que vivía en la misma loma. Armaba una mesa en la calle y vendía las famosas tortillas de San Rafael. (Las del negro Papá Upa, su contemporáneo, fueron también muy célebres, y aun las recuerdan algún viejo glotón). De la Zumbáo, santera de Inle, me han hablado en efecto, varios viejos. Era costurera con buena clientela, muy presumida y rumbosa. Otros me hablan de una supuesta sociedad religiosa de Alacuattás. Lo curioso es que Inle es un Santo tan casto y exigente, en lo que se refiere a la moral de sus hijos y devotos, como Yewá. Es tan poco mentado como ésta, como Abokú (Santiago Apóstol) y Naná, pues se le teme y nadie se arriesga a servir a divinidades tan severas e imperiosas. Ya en los últimos años del siglo pasado, en la Habana, “Inle casi no visitaba las cabezas”. Una sesentona me cuenta que una vez fue al Palenque y bajó Inle. Todos los Santos le rindieron pleitesía y todas las viejas y viejos de nación que estaban presentes “se echaron a llorar de emoción”. —“Desde entonces”, me dice, “no he vuelto a ver a Inle en cabeza de nadie” y tampoco recuerda más nada de aquella inolvidable visita al Palenque que honró la bajada de San Rafael, pues tarde, cuando había terminado la fiesta, se halló en el fondo de la casa, en una habitación, atontada y con la ropa todavía empapada de agua. Deduce que “le dio el Santo”, Inle, y como es costumbre cuando el Santo se manifiesta presentarle una jícara llena de agua para que beba y espurrée abundantemente a los fieles, su traje húmedo y su “sirímba”, (atontamiento) serían prueba de haberla poseído el Orisha. A Inle se le tiene en Santa Clara por San Juan Bautista, (24 de junio) que aquí es el día de Oggún, y no por San Rafael, (24 de octubre). Es un adolescente, casi un niño; se le ofrecen juguetes, y es tan travieso que lo emborrachan la noche del veinte y tres para que pase durmiendo el día siguiente y no haga de las suyas. Amanece fresco el veinte y cinco. Era el Santo del famoso villareño Blas Casanova, que en él se manifestaba muy sereno y “leía el alma de todos”. Yewá, “nuestra Señora de los Desamparados”, virgen, prohibe a sus hijas todo comercio sexual; de ahí que sus servidoras sean siempre viejas, vírgenes o ya estériles, e Inle, “tan severo”, tan poderoso y delicado como Yewá, acaso exigía lo mismo de sus santeras, las cuales se abstenían de mantener relaciones sexuales con los hombres. No menos conocido que el caso de Papá Colás entre la vieja santería, es el de P.S., hijo de una de las más consideradas y solicitadas iyalochas habaneras, de O.O., quien en un momento de expansión, me lo refiere como ejemplo de la inflexibilidad y del proceder de un dios agraviado.
  • 4. “P. era, como yo, hijo de Changó; y como tal era tamborero aunque de afición. Si cogía un cajón para tocar, el cajón se volvía un tambor. Cantaba que hacía bajar del cielo a todos los Santos. Pero mi hijo P. se puso en falta con Changó y se perdió. En una fiesta le dijo así al mismo Santo, en mi propia casa: si es verdad que usté es Santa Bárbara y dice que hace y que torna, y que a mí me va a matar ¡máteme enseguida! A ver, ¡que me parta un rayo ahora mismo! y déjese de más historias. Santa Bárbara no le contestó. Se echó a reír. Yo me quedé fría, y abochornada del atrevimiento del muchacho. Pasaron los años. El siguió trabajando y divirtiéndose. En los toques que yo daba en mi casa, Santa Bárbara recogía dinero y se lo daba2 . Bueno, con eso P. creyó que a Changó se le había olvidado aquel incidente. Otra falta que cometió fue la de sonar a varias mujeres de Changó: ¡digo, con lo celoso que es él! Ponga otras cositas que hizo, unidas a la zoquetería que tuvo con el propio Santo y arresultó que al cabo del tiempo, y cuando menos se lo pensaba, Santa Bárbara saltó con que se las iba a cobrar entonces todas juntas, y caro. Por que eso tienen los Santos, esperan para vengarse, dan cordel y cordel, y arrancan cuando más desprevenido está el que tiró la piedra. Primero Changó me lo puso como bobo. Después loco. Un día se fué desnudo a la calle y volvió tinto en sangre. Estuvo amarrado. Pedía perdón y Santa Bárbara lo que contestaba siempre era: que sepa que yo los tengo más grandes que él, que yo no he olvidado, aunque cuando me insultó me reía. Y yo su madre, con ser yalocha, sin poder salvarlo. Tiraba los caracoles para hacerle algo a mi hijo (ebbó) y Changó me contestaba que yo no podía más que él, que me dejase de parejerías. Oigame, no logré hacerle ni una limpieza a mi hijo. ¡Nada, con mi santería! Y a padecer como madre. Al fin murió que no era ni su sombra. Un esqueleto. Cuando se lo llevaron, lo que pesaba era la caja”. O.O. deja en silencio otro pecado imperdonable que cometió su sacrílego hijo. Es una llegada suya quien me cuenta que lo que más entristeció a O.O. —y “desde entonces ella empezó a declinar, eso acabó con ella”— fue lo que hizo con su piedra de Oshún. “O.O. tenía una piedra africana que era de su madrina lucumisa; su madrina la trajo cuando vino a Cuba, y se la había dejado a ella. La piedra creció. Se puso enorme. Parecía por la forma, un melón. Dos hombres no podían moverla. Esa Caridad tenía un metro de ancho. Como que no había sopera para ella. O.O. la tenía en una batea. En una mudada, P. se la botó. Sí señora... Dicen muchos que la echó al río, pero no se sabe de fijo adonde fué a parar la Caridad del Cobre”. No siempre los Santos, sin embargo, castigan con justicia. Si en el caso de Papá Colás se comprende que Obatalá aplicara a su hijo un correctivo más que merecido, en el de Luis S. el rigor de Changó parece tan excesivo como gratuito. Contra el capricho despiadado de los dioses, contra la antipatía divina que se ensaña en algún mortal, “por que sí”, no puede lucharse. Se ataja a tiempo el mal que desencadena el mayombero judío, este tipo que aún inspira al pueblo un terror en el que hallaremos tan fuertes, tan rancias reminiscencias africanas: todo se estrella, en cambio contra la mala voluntad irreductible del Santo que “emperra”, “se vuelve de espaldas” y niega su protección o su perdón al hombre infortunado, sin más pecado que el de haber incurrido en su desagrado, “en caerle pesado”. Si bien es cierto que el favor de los Orishas se compra, pues son estos muy interesados, glotones y susceptibles al halago, cuando el Orisha se enterca y se hace el sordo, no acepta transacción alguna. Y aquí, si el adivino y conjurador, dueño de los medios de que se vale —coco, diloggún, okpelé, vititi mensu o andilé— para revelar al hombre el misterio del presente o la incógnita del futuro, es honrado no insistirá en 2 Los Santos posesionados de sus hijos le piden dinero a los asistentes a las fiestas para regalarlo a los tamboreros, demostrándoles con esto que han tocado a su entera satisfacción.
  • 5. rogativas que arruinen al sentenciado sin apelación con gastos que implican serios sacrificios y de los que sólo él se beneficiará mterialmente. “Cuando el Santo se vira y quiere perder a uno, ¿qué se va a hacer?” Absolutamente nada. La enfermedad entonces lo saben el babalawo y el gangángáme, no tiene remedio; ya no existe para este individuo la posibilidad de “un cambio de vida” o de cabeza, esta operación mágica, universal y milenaria que consiste en hacer pasar la enfermedad de una persona a un animal, a un muñeco, al que se tratará de darle el mayor parecido con el enfermo, o a otra persona sana, por lo que muchos se guardan de estar en contacto directo y aún de visitar santeros e iyalochas enfermos de gravedad, “no sea que cambien vida”, pues el espíritu más fuerte puede apoderarse de la vitalidad del más debil, robarle la vida y recuperar la salud. (“Por eso vé Vd. que un santero viejo, ya moribundo revive, y en cambio se muere el joven que está a su lado”). Tampoco le salvaría la gracia que un orisha infundiera a una yerba. No valen rogaciones ni ebbó, sacrificios de aves y cuadrúpedos, tan eficaces que estipulan de antemano los Santos, especificando su naturaleza en cada caso, mediante los caracoles o el Ifá. Luis S., al revés que Papá Colás, no era santero. En un toque de tambor Changó le pidió “agguddé” —plátano—, y Luis no lo entendió o se hizo el distraido. Es verdad que no creía mucho en los Santos; detalle de la mayor importancia. Un domingo que iba de compras al mercado alguien se le acercó y le habló en lengua. En aquel instante perdió el conocimiento y sin recobrarlo lo llevaron a su habitación en el solar. No volvió en sí hasta transcurridas cinco horas. Estando aún inconsciente en la cama, su mujer “cae” con Changó, éste la conduce a casa de su madrina, y allí el Santo refiere lo ocurrido. —“Alafi (Changó) ¿pero qué has hecho?” le preguntan. “Etie mi cosinca”, (No he hecho nada) responde el Santo maliciosamente dándose en la rodilla y encogiéndose de hombros. La madrina le retiró el Santo a la mujer de Luis. No se perdió tiempo; se hicieron rogaciones para desagraviar a Changó. Advertido por la madrina de su mujer, Luis le sacrificó un hermoso carnero. Pero Changó... “de tan rencoroso, de tan caprichoso que es”, no quedó satisfecho. El hombre empeoró y su mujer no podía dejarlo solo pues inmediatamente Alafi lo lanzaba al suelo y quedaba atontado, privado de movimiento por mucho rato. Explicaba torpemente al volver en sí, que un negro lo elevaba y lo dejaba caer. “Por la tirria de Santa Bárbara, que se empeñó en acabar con él”, Luis S. al fin murió de un síncope. VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS Extraido de EL MONTE Lydia Cabrera Amanecer Vudú. Valdemar Antologías 3
  • 6. rogativas que arruinen al sentenciado sin apelación con gastos que implican serios sacrificios y de los que sólo él se beneficiará mterialmente. “Cuando el Santo se vira y quiere perder a uno, ¿qué se va a hacer?” Absolutamente nada. La enfermedad entonces lo saben el babalawo y el gangángáme, no tiene remedio; ya no existe para este individuo la posibilidad de “un cambio de vida” o de cabeza, esta operación mágica, universal y milenaria que consiste en hacer pasar la enfermedad de una persona a un animal, a un muñeco, al que se tratará de darle el mayor parecido con el enfermo, o a otra persona sana, por lo que muchos se guardan de estar en contacto directo y aún de visitar santeros e iyalochas enfermos de gravedad, “no sea que cambien vida”, pues el espíritu más fuerte puede apoderarse de la vitalidad del más debil, robarle la vida y recuperar la salud. (“Por eso vé Vd. que un santero viejo, ya moribundo revive, y en cambio se muere el joven que está a su lado”). Tampoco le salvaría la gracia que un orisha infundiera a una yerba. No valen rogaciones ni ebbó, sacrificios de aves y cuadrúpedos, tan eficaces que estipulan de antemano los Santos, especificando su naturaleza en cada caso, mediante los caracoles o el Ifá. Luis S., al revés que Papá Colás, no era santero. En un toque de tambor Changó le pidió “agguddé” —plátano—, y Luis no lo entendió o se hizo el distraido. Es verdad que no creía mucho en los Santos; detalle de la mayor importancia. Un domingo que iba de compras al mercado alguien se le acercó y le habló en lengua. En aquel instante perdió el conocimiento y sin recobrarlo lo llevaron a su habitación en el solar. No volvió en sí hasta transcurridas cinco horas. Estando aún inconsciente en la cama, su mujer “cae” con Changó, éste la conduce a casa de su madrina, y allí el Santo refiere lo ocurrido. —“Alafi (Changó) ¿pero qué has hecho?” le preguntan. “Etie mi cosinca”, (No he hecho nada) responde el Santo maliciosamente dándose en la rodilla y encogiéndose de hombros. La madrina le retiró el Santo a la mujer de Luis. No se perdió tiempo; se hicieron rogaciones para desagraviar a Changó. Advertido por la madrina de su mujer, Luis le sacrificó un hermoso carnero. Pero Changó... “de tan rencoroso, de tan caprichoso que es”, no quedó satisfecho. El hombre empeoró y su mujer no podía dejarlo solo pues inmediatamente Alafi lo lanzaba al suelo y quedaba atontado, privado de movimiento por mucho rato. Explicaba torpemente al volver en sí, que un negro lo elevaba y lo dejaba caer. “Por la tirria de Santa Bárbara, que se empeñó en acabar con él”, Luis S. al fin murió de un síncope. VENGANZAS Y CASTIGOS DE LOS ORISHAS Extraido de EL MONTE Lydia Cabrera Amanecer Vudú. Valdemar Antologías 3