El propósito de esta lección es que –desde la perspectiva que nos comunica el apóstol Pablo– podamos tomar conciencia de la manera maravillosa en que Dios nos capacita y potencia para poder sostenernos en medio de situaciones con un potencial de fracaso y aniquilamiento físico y espiritual.
1. Lección
25
Derribados
pero
no
destruidos
2
Corin1os
4.2-‐15
Texto
áureo
«Que
estamos
atribulados
en
todo,
pero
no
angus4ados;
en
apuros,
pero
no
desesperados;
perseguidos,
pero
no
desamparados;
derribados,
pero
no
destruidos».
—2
Corin4os
4.8-‐9
2. Propósito
• El
propósito
de
esta
lección
es
que
–desde
la
perspec1va
que
nos
comunica
el
apóstol
Pablo–
podamos
tomar
conciencia
de
la
manera
maravillosa
en
que
Dios
nos
capacita
y
potencia
para
poder
sostenernos
en
medio
de
situaciones
con
un
potencial
de
fracaso
y
aniquilamiento
Bsico
y
espiritual.
3. Bosquejo
de
la
lección
I. Un
ministerio
fundamentado
en
la
misericordia
de
Dios
(2
Corin1os
4.2-‐15).
II. Predicando
a
Jesucristo
como
Señor
(vv.
5-‐6).
III. Un
tesoro
en
vasos
de
barro
(vv.
7-‐9).
IV. Entregados
a
muerte
por
causa
de
Jesús
(vv.
10-‐12).
V. El
que
resucitó
a
Jesús,
también
nos
resucitará
a
nosotros
(vv.
13-‐15).
4. Vocabulario
bíblico
«MISERICORDIA»:
Se
ha
definido
como
uno
de
los
atributos
que
Dios
comunica.
Se
manifiesta
en
el
amor
y
la
bondad
de
Dios
hacia
el
culpable.
Como
elementos
presentes
en
la
misericordia
están
la
piedad,
la
compasión,
etc.
«EL
“DIOS”
DE
ESTE
MUNDO»:
En
el
contexto
de
esta
lección
se
refiere
al
entendimiento
de
Pablo
sobre
Satanás
y
la
influencia
que
ejerce
en
este
mundo
y
las
personas.
5. 2
Corin1os
4.2
RVR
VP
2
Antes
bien
renunciamos
a
lo
oculto
y
vergonzoso,
no
andando
con
astucia,
ni
adulterando
la
palabra
de
Dios.
Por
el
contrario,
manifestando
la
verdad,
nos
recomendamos,
delante
de
Dios,
a
toda
conciencia
humana.
2
Hemos
rechazado
proceder
a
escondidas,
como
si
sin1éramos
vergüenza;
y
no
actuamos
con
astucia
ni
falseamos
el
mensaje
de
Dios.
Al
contrario,
decimos
solamente
la
verdad,
y
de
esta
manera
nos
recomendamos
a
la
conciencia
de
todos
delante
de
Dios.
6. 2
Corin1os
4.3
RVR
VP
3
Pero
si
nuestro
evangelio
está
aún
encubierto,
entre
los
que
se
pierden
está
encubierto;
3
Y
si
el
evangelio
que
anunciamos
está
como
cubierto
por
un
velo,
lo
está
solamente
para
los
que
se
pierden.
7. 2
Corin1os
4.4
RVR
VP
4
esto
es,
entre
los
incrédulos,
a
quienes
el
dios
de
este
mundo
les
cegó́
el
entendimiento,
para
que
no
les
resplandezca
la
luz
del
evangelio
de
la
gloria
de
Cristo,
el
cual
es
la
imagen
de
Dios.
4
Pues
como
ellos
no
creen,
el
dios
de
este
mundo
los
ha
hecho
ciegos
de
entendimiento,
para
que
no
vean
la
brillante
luz
del
evangelio
del
Cristo
glorioso,
imagen
viva
de
Dios.
8. 2
Corin1os
4.5
RVR
VP
5
No
nos
predicamos
a
nosotros
mismos,
sino
a
Jesucristo
como
Señor,
y
a
nosotros
como
vuestros
siervos
por
amor
de
Jesús,
5
No
nos
predicamos
a
nosotros
mismos,
sino
a
Jesucristo
como
Señor;
nosotros
nos
declaramos
simplemente
servidores
de
ustedes
por
amor
a
Jesús.
9. 2
Corin1os
4.6
RVR
VP
6
porque
Dios,
que
mandó
que
de
las
1nieblas
resplandeciera
la
luz,
es
el
que
resplandeció́
en
nuestros
corazones,
para
iluminación
del
conocimiento
de
la
gloria
de
Dios
en
la
faz
de
Jesucristo.
6
Porque
el
mismo
Dios
que
mandó
que
la
luz
brotara
de
la
oscuridad,
es
el
que
ha
hecho
brotar
su
luz
en
nuestro
corazón,
para
que
podamos
iluminar
a
otros,
dándoles
a
conocer
la
gloria
de
Dios
que
brilla
en
la
cara
de
Jesucristo.
10. 2
Corin1os
4.7
RVR
VP
7
Pero
tenemos
este
tesoro
en
vasos
de
barro,
para
que
la
excelencia
del
poder
sea
de
Dios
y
no
de
nosotros,
7
Pero
esta
riqueza
la
tenemos
en
nuestro
cuerpo,
que
es
como
una
olla
de
barro,
para
mostrar
que
ese
poder
tan
grande
viene
de
Dios
y
no
de
nosotros.
11. 2
Corin1os
4.8-‐9
RVR
VP
8
que
estamos
atribulados
en
todo,
pero
no
angus1ados;
en
apuros,
pero
no
desesperados;
9
perseguidos,
pero
no
desamparados;
derribados,
pero
no
destruidos.
8
Así,
aunque
llenos
de
problemas,
no
estamos
sin
salida;
tenemos
preocupaciones,
pero
no
nos
desesperamos.
9
Nos
persiguen,
pero
no
estamos
abandonados;
nos
derriban,
pero
no
nos
destruyen.
12. 2
Corin1os
4.10
RVR
VP
10
Dondequiera
que
vamos,
llevamos
siempre
en
el
cuerpo
la
muerte
de
Jesús,
para
que
también
la
vida
de
Jesús
se
manifieste
en
nuestros
cuerpos,
10
Dondequiera
que
vamos,
llevamos
siempre
en
nuestro
cuerpo
la
muerte
de
Jesús,
para
que
también
su
vida
se
muestre
en
nosotros.
13. 2
Corin1os
4.11
RVR
VP
11
pues
nosotros,
que
vivimos,
siempre
estamos
entregados
a
muerte
por
causa
de
Jesús,
para
que
también
la
vida
de
Jesús
se
manifieste
en
nuestra
carne
mortal.
11
Pues
nosotros,
mientras
vivimos,
nos
vemos
expuestos
a
la
muerte
por
causa
de
Jesús,
para
que
también
su
vida
se
muestre
en
nuestro
cuerpo
mortal.
14. 2
Corin1os
4.12-‐13
RVR
VP
12
De
manera
que
la
muerte
actúa
en
nosotros,
y
en
vosotros
la
vida.
13
Pero
teniendo
el
mismo
espíritu
de
fe,
conforme
a
lo
que
está
escrito:
«Creí,
por
lo
cual
hablé»,
nosotros
también
creemos,
por
lo
cual
también
hablamos.
12
De
ese
modo,
la
muerte
actúa
en
nosotros,
y
en
ustedes
actúa
la
vida.
13
La
Escritura
dice:
«Tuve
fe,
y
por
eso
hablé».
De
igual
manera,
nosotros,
con
esa
misma
ac1tud
de
fe,
creemos
y
también
hablamos.
15. 2
Corin1os
4.14
RVR
VP
14
Y
sabemos
que
el
que
resucitó
al
Señor
Jesús,
a
nosotros
también
nos
resucitará
con
Jesús,
y
nos
presentará
juntamente
con
vosotros.
14
Porque
sabemos
que
Dios,
que
resucitó
de
la
muerte
al
Señor
Jesús,
también
nos
resucitará
a
nosotros
con
él,
y
junto
con
ustedes
nos
llevará
a
su
presencia.
16. 2
Corin1os
4.15
RVR
VP
15
Todas
estas
cosas
padecemos
por
amor
a
vosotros,
para
que
abundando
la
gracia
por
medio
de
muchos,
la
acción
de
gracias
sobreabunde
para
gloria
de
Dios.
15
Todo
esto
ha
sucedido
para
bien
de
ustedes,
para
que,
recibiendo
muchos
la
gracia
de
Dios,
muchos
sean
también
los
que
le
den
gracias,
para
la
gloria
de
Dios.
17. Resumen
-‐
1
• El
aprendizaje
y
comprensión
de
nuestra
realidad
humana,
lejos
de
ser
un
limitante,
en
el
ámbito
de
la
fe
en
Jesucristo,
es
el
punto
de
par1da
para
poder
internalizar
cuánto
está
dispuesto
Dios
a
inver1r
en
nuestra
vida
para
conver1rla
en
un
recurso
de
su
agenda
restauradora.
18. Resumen
-‐
2
• Siguiendo
el
modelo
de
Jesús,
Pablo
ar1culó
un
principio
que
plantea
que
el
verdadero
líder
y
maestro
en
la
comunidad
de
fe
es
aquél
que
está
dispuesto
a
«lavar
los
pies»
de
aquellos
a
quienes
pretende
enseñar
y
dirigir.
Ese
debe
ser
el
principio
rector
de
toda
tarea
en
la
iglesia.
19. Resumen
-‐
3
• La
visión
que
Pablo
tenía
de
haber
recibido
el
conocimiento
de
Dios
como
un
tesoro
guardado
en
una
vasija
de
barro,
está
sustentada
por
una
profunda
verdad
espiritual:
Dios
ha
decidido
capacitarnos
y
sostenernos
con
el
conocimiento
de
su
gloria,
aun
cuando
parezca
que
nuestra
propia
realidad
personal
no
1ene
la
fortaleza
para
sostenerse.
20. Oración
• Gracias
te
damos
Señor
y
Dios
Todopoderoso
porque
en
tu
inmenso
amor
por
nosotros
y
nosotras
has
querido
capacitarnos
con
un
conocimiento
maravilloso
de
la
realidad
de
Jesucristo
para
nuestras
vidas.
Gracias
porque
desde
ese
conocimiento
se
potencia
un
poder
espiritual
para
sostenernos
en
medio
de
las
pruebas.
En
Jesucristo
oramos.
Amén.