1. Cambios que ocurren en el material vegetal durante el proceso del
ensilado.
El ensilaje, según Bernal (1994) uno de los métodos más populares de
preservación de pastos y de forrajes, tiene como objetivo tratar que la
conservación del material sea lo más perfecta posible y que se produzca la
menor cantidad de modificaciones, ya que las mismas corresponden siempre
a la pérdidas de elementos útiles.
El ensilaje además de ser uno de los mejores métodos para la
conservación de forrajes, es uno de los que mejor preserva la energía y con
la ayuda de ciertos aditivos como la úrea, se puede mejorar también el
contenido proteínico.
Las plantas forrajeras más utilizadas para este fin son: El maíz blanco y
el amarillo, el sorgo forrajero y azucarado, los residuos de cosechas y los
pastos de gran tamaño con buena relación hoja-tallo, como son los pastos de
corte.
Ahora bien, El proceso que sufre el material vegetal durante el ensilaje
consiste básicamente en una fermentación y la clave del éxito consiste en el
control de esa fermentación.
Cuando se cosecha el forraje, la planta está viva y respirando
activamente y las células vegetales continúan haciéndolo por algún tiempo
después de ser cortadas. Al mismo tiempo, grandes cantidades de bacterias
aeróbicas, que se encuentran presentes en la superficie de la planta,
continúan creciendo y multiplicándose mientras haya oxígeno disponible.
Durante este período, tanto las bacterias aeróbicas como la misma planta,
consume los carbohidratos fácilmente asimilables, a través de reacciones
enzimáticas produciendo calor y anhídrido carbónico (C02).
Después de algunas horas, dependiendo de la cantidad de aire
atrapado en la masa del silo, el oxígeno se termina y prevalecen condiciones
anaeróbicas.
2. Esto permite que las bacterias anaeróbicas, especialmente las
productoras de ácido láctico, que inicialmente se encuentran presentes en
pequeñas cantidades, aumenten su número hasta varios millones por gramo
de forraje después de tres o cuatro días. Estas bacterias actúan sobre los
carbohidratos disponibles en el forraje para producir ácido láctico y pequeñas
cantidades de los ácidos acético, propiónico, fórmico y succínico.
La concentración del ácido láctico en el ensilaje puede llegar a constituir
de un 80 a un 90% de la materia seca en condiciones favorables. Cuando el
material no tiene suficientes carbohidratos solubles para producir el ácido
láctico necesario, como ocurre con las leguminosas, en el momento de
ensilar es necesario adicionar materiales ricos en estos elementos, tales
como la melaza, el grano molido, etc. El ácido producido reduce el PH del
silo a 4,2 o menos, lo que inhibe el desarrollo bacterial y las reacciones
enzimáticas preservando el ensilaje. El proceso se completa en un período
de dos a tres semanas y se puede conservar por años, si no se permite la
entrada de aire.
Cuando la humedad del material y el PH son altos se desarrollan
bacterias indeseables del género Clostridium, las cuales producen ácido
butírico, amoníaco y aminas tales como la cadaverina, la histamina y la
putrescina, características de una materia orgánica en descomposición y por
lo tanto indicativa de un ensilaje de mala calidad. El desarrollo de estas
bacterias se evita bajando la humedad a menos del 70% o aumentando la
acidez en el proceso.
Si el silo se encuentra mal tapado y mal compactado, continúa entrando
oxígeno y la respiración no se detiene, lo cual trae como consecuencia una
pérdida de materia seca en el ensilaje y una elevación en la temperatura que
puede llegar hasta 62 °C, con la pérdida de materiales y la disminución en la
digestibilidad por sobrecalentamiento de la proteína. En un buen ensilaje, la
temperatura no debe pasar de 40°C, cuando se inicia el proceso. La
3. temperatura óptima para el desarrollo de las bacterias que producen ácido se
encuentran entre 26 y 39 °C y su crecimiento cesa a los 50 °C.
El éxito del ensilaje consiste en una buena distribución del material
vegetal y un adecuado apisonamiento y tapado para desalojar la mayor
cantidad posible de aire al comienzo y durante el proceso.