Este documento resume la historia de las carreras y marchas de montaña. Comenzaron como marchas recreativas sin competitividad, pero luego se introdujo la competición. Ahora las marchas ya no son para disfrutar, sino que los corredores las dominan. Los montañeros tradicionales quedan relegados a un pequeño territorio, mientras que las cuentas de la federación no son claras sobre cómo se reparten los fondos entre las diferentes actividades. Se pide un debate sobre el futuro de las marchas y la federación.