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1. Escrito por: Henry J. Herrera y Noemi de Herrera
Revista Presencia Divina
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Revista@PresenciaDivina.info
ES03
LEYENDO LA PALABRA DE DIOS CON
ENTENDIMIENTO
Lucas 24:45 Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras
La Biblia es uno de los betseller más vendidos en el mundo entero, para algunos de sus lectores es solamente un libro
con historias, para otros es como un amuleto en contra de los espíritus, pero para nosotros los hijos de Dios la Biblia es
un libro en donde está la divinidad de Cristo, la instrucción y el alimento espiritual para nuestras vidas. Sabiendo que la
Biblia es un libro inspirado por Dios es importante conocer la forma de leerla y comprenderla para poder ser edificado
con su lectura y crecer en el conocimiento de Dios.
En esta oportunidad nosotros deseamos trasladarte unos parámetros sencillos pero muy importantes que te ayudarán
en tus devocionales para comprender mejor la lectura de la biblia con el propósito de que seas edificado y bendecido.
Para su desarrollo lo hemos dividido en cuatro segmentos que son: leer, escudriñar, meditar y aplicar y por último la
oración.
1. Leer:
Nehemías 8:8 Ellos leían con claridad el libro de la ley de Dios y lo interpretaban de modo que se comprendiera su
lectura.
Para poder leer la biblia y comprender lo que Dios desea transmitirle por medio de ella es requisito fundamental
haber reconocido a Cristo como Señor y Salvador personal, ya que 2 Corintios 3:14-16 nos explica que sin Cristo una
persona podrá leer la Biblia, pero su conocimiento espiritual esta entenebrecido, razón por la cual no va a poder
comprenderla espiritualmente hablando, pero cuando reconozca a Cristo, este velo le será quitado y entonces
podrá leer y comprender las escrituras con entendimiento, pero también con la revelación que da el Espíritu Santo.
Otro requisito es que antes de leer las Sagradas Escrituras, la persona tenga un tiempo de oración para pedirle a
nuestro Señor, que la letra escrita cobre vida en su ser al momento de leerla y que le envié revelación de lo alto
para su correcto entendimiento.
Al igual que como se haría con cualquier libro de texto, es necesario leer el o los versículos no solamente una vez
sino las veces que sean necesarias para entender mejor de lo que allí se está hablando y si fuese necesario se puede
recurrir a alguien con mucha más madurez espiritual, para que te brinde una explicación correcta de los versos
leídos.
2. Escudriñar:
Juan 5:39 Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las
que dan testimonio de mí.
Eclesiastés 12:9-10 Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e
hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios. Procuró el Predicador hallar palabras agradables, y escribir
rectamente palabras de verdad.
Cristo no quiere que únicamente usted lea la Biblia, El desea que la escudriñemos lo dejo establecido en Juan 5:39
al decir: “Escudriñad las Escrituras” ya que en ellas se refleja el carácter de Dios.
La palabra Escudriñad según la concordancia Strong significa: Investigar, Interrogar, preguntar, discernir, juzgar.

2. Escrito por: Henry J. Herrera y Noemi de Herrera
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Es decir que la lectura de la Biblia debe de realizarse a profundidad, no conformándose con un solo versículo sino
investigando el significado de la palabra clave y sus distintos sinónimos, buscando la relación entre los distintos
versículos que contengan la palabra que se está buscando, valiéndose de la Biblia primeramente y apoyándose
también de diccionarios y concordancias cuando sea posible, siempre y cuando no contradigan lo que dicen las
escrituras, también se podrá recurrir a otros recursos tales como el computador y al internet para facilitar este
proceso.
Haciendo hincapié en que la mayoría de los versículos no están aislados, sino que están relacionados entre el
versículo anterior y el posterior, por lo que hay que leer el texto dentro del contexto para no torcer el concepto que
allí está escrito. Esto con el fin de tener un concepto global de la idea que Dios desea transmitir, ya que la palabra
de Dios no se contradice, sino se complementa, unos versículos con otros, como bien lo dice la escritura en 2
Timoteo 3:16 cuando se refiere que toda escritura es útil para enseñar, para reprender, para corregir y para
instruir…
Un ejemplo de lo que estamos hablando lo podemos explicar haciendo referencia al tema del bautismo, existen
algunas corrientes doctrinales que afirman que únicamente se debe de bautizar en el nombre de Jesús y su texto
base es el siguiente:
Hechos 19:5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.
Pero si escudriñamos las escrituras buscando mas versículos que hablen del bautismo notamos que la Biblia también
nos dice que debemos agregarle el nombre del Padre, y del Espíritu Santo:
Mateo 28:19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo,
y del Espíritu Santo.
Con este breve ejemplo se puede decir que en estos dos casos la Biblia no se contradice sino únicamente se
complementa, para darnos una instrucción global de cómo se debe orar al momento de realizar un bautismo.
Esta es la razón por la que es muy importante escudriñar las escrituras, para evitar ser confundido o engañado por
doctrinas erróneas.
3. Meditar y Aplicar:
Josué 1:8 Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de
hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito
Salmos 119:97 !!Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación.
Según el diccionario de la Real academia española, meditar es aplicar con profunda atención el pensamiento a la
consideración de algo, o discurrir sobre los medios de conocerlo o conseguirlo.
Recuerda que meditar no es poner tu mente en blanco como pretenden las filosofías de la nueva era, sino al
contrario meditar es llenar la mente de lo que se acaba de leer y buscar la correcta interpretación y aplicación de la
palabra de Dios para tu vida.
Dios desea que no solo seamos oidores, sino también hacedores y como explica Josué 1:8 es para que nos vaya bien
en nuestra vida por eso es que después de tener el concepto general del versículo o los versículos que se están
estudiando, debes analizar qué es lo que Dios está hablándote a través de las escrituras, pregúntate a ti mismo
como se aplica a tu vida ahora mismo y si es una instrucción, aliento, revelación de una promesa, o corrección de
algún área en particular de tu vida.

3. Escrito por: Henry J. Herrera y Noemi de Herrera
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Recuerda que debes de tomarte tu tiempo y pensar en lo siguiente: ¿hay algo aquí que tengo que imitar?, ¿hay algo
en este pasaje que debo de evitar?, ¿me identifico con alguna actitud positiva o negativa que aquí se menciona?.
Identifica cual es la relación causa y efecto que puede tener la aplicación de determinada actitud.
Reflexionar acerca de la aplicación de la lectura bíblica en nuestra vida es de suma importancia para ser edificado y
bendecido.
4. Oración:
Colosenses 1:9 Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir
que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual,
Al finalizar la lectura agradece a Dios en oración por lo que te ha enseñado a través de su palabra, pide a Dios en
oración que cuide de que la semilla caiga en buena tierra y que Dios te de su ayuda para que traiga frutos de
bendición al ciento por uno en tu vida, además puedes hacer con los versículos de la lectura una oración, como por
ejemplo orar con los Salmos, recordemos que la palabra de Dios es como agua que limpia y purifica el alma por eso
es muy importante que nuestras oraciones estén llenas de la palabra de Dios.
Conclusiones:
Debemos leer la palabra pero hay que hacerlo con el entendimiento y con la revelación que da el Espíritu
Santo, la mayor parte de las personas que inician un plan de lectura Bíblico renuncian porque no comprenden
el significado de alguna palabra y por eso no llegan a comprender todo el versículo, otro motivo es el
cansancio físico o espiritual, también ocurre que muchas veces las personas no son edificadas por que leen
solo por leer, pero no escudriñan lo que están leyendo.
Pero a medida que usted convierta la lectura en una disciplina, usted podrá comprobar con sus propios ojos
que la palabra de Dios empezará a confrontarlo, limpiarlo y transfórmalo y en la medida que usted le de la
libertad a Cristo de que opere en su vida se reflejara cada día mas en usted los frutos del Espíritu Santo.