Conociendo a un misionero la vida de william carey
La fusión en frío
1. LA FUSIÓN EN FRÍO
Frente a la energía de fisión, que es actualmente la más utilizada en el mundo, una
parte importante de los esfuerzos de los científicos se centra en investigar la gran
alternativa, inagotable y limpia: la energía de fusión, y en concreto en una variante
de la misma: la "fusión en frío".
Sabemos que la fusión nuclear actualmente más desarrollada e investigada es la que
une los isótopos de hidrógeno (tritio y deuterio) a través de altas temperaturas (cien
millones de grados). Es la llamada fusión en caliente.
Este inmenso calor es necesario para vencer la fuerza de repulsión electrostática de
los isótopos (al tener la misma carga eléctrica), excitándolos de tal forma que llegan
a unirse, creando un nuevo estado de la materia: el plasma.
Dadas las dificultades para conseguir esas temperaturas y, sobre todo, para confinar
el plasma (por confinamiento magnético o por confinamiento inercial), se ha estado
investigando la fusión fría, que logra crear energía sin necesidad de calentamiento.
El experimento de Fleischmann y Pons.-
Como suele ocurrir en ciencia, los primeros resultados se lograron por casualidad. El
23 de marzo de 1989 dos químicos norteamericanos de la Universidad de Utah
(Martin Fleischmann y Stanley Pons) aseguraron en una conferencia haber logrado la
fusión fría mediante un sencillo ingenio y a través de la electrolisis, con una barra de
paladio rodeada de hilo de platino, sumergida en agua pesada (rica en deuterio).
Con este sistema, aplicando una corriente eléctrica, el deuterio se separa del oxígeno
del agua y se acumula en la barra de paladio. Llegado un punto, los núcleos del
deuterio y del paladio se funden a temperatura ambiente, provocando la reacción
nuclear, que libera energía, detectada por la emisión de neutrones.
Fleischmann y Pons, que venían desarrollando el experimento desde 1984 con
fondos del Departamento de Energía de EE.UU, aseguraron haber obtenido el
equivalente a 1 watio de energía por centímetro cúbico de agua, lo que representaría
1 millón de veces más de lo que mostraron las emisiones de neutrones medidas y
unas 50 veces más de la energía utilizada.
Sin embargo, la comunidad científica no creyó tales resultados, intentando por todos
los medios reproducir el experimento sin éxito.
Es más, si esos datos fuesen correctos, los neutrones liberados habrían matado a
todo el equipo científico que estuviera presente en el experimento, lo cual no ocurrió
(afortunadamente).
2. Lo extraño del caso es que no se ha vuelto a reproducir dicho resultado y es más, los
dos científico quisieron publicar el experimento en la revista Nature (es norma de los
investigadores publicar sus resultados en revistas científicas para darlas a conocer y
otorgar relevancia mundial a los mismos), pero no lo lograron al no responder a las
lógicas preguntas de los equipos científicos de la publicación.
El experimento de Scaramuzzi.-
Pese a los fracasos de los científicos y a que se dijese consecuentemente que la
fusión fría no era posible, retirándose variosgobiernos y laboratorios de su
investigación, pocas semanas después del anuncio de los americanos, el Profesor
italiano Scaramuzzi cambió algunos elementos del experimento y, si bien no logró la
energía "obtenida" por Fleischmann y Pons, sí demostró que la fusión en fría es
posible.
Su experimento eliminó la electrolisis y sustituyó el paladio por un ovillo de titanio.
Sumergiendo el titanio en deuterio gaseoso y logrado un equilibrio entre la presión
del gas y la temperatura, se consiguió la fusión. El profesor Scaramuzzi midió 491
unidades de neutrones emitidas cuando sólo esperaba contabilizar 30.
La fusión fría en la actualidad.-
Dentro de las investigaciones encaminadas a lograr resultados prácticos y
aprovechables a largo plazo, se está aplicando la técnica de la sonoluminiscencia,
que consiste básicamente en la emisión de luz por los líquidos sometidos a
ultrasonidos.
El futuro de la fusión en frío.-
Pese a ser la oveja negra en las investigaciones sobre fusión, de conseguirse
resultados parecidos a los de Fleischmann y Pons, ello supondría una revolución en
las fuentes de energía.
Un solo litro de combustible satisfaría las necesidades energéticas de todo un
edificio durante varios años, o de una familia durante toda su vida.
Además, la energía de fusión fría, no sólo no contamina y es inagotable (como la de
fusión en caliente), sino que también es muchísimo más barata de conseguir. Todas
las naciones podrían tener sus plantas generadoras y se podría llegar a pensar
incluso en vehículos movidos por fusión nuclear, equipos generadores portátiles,
batería atómica inagotable, aeronaves y buques que no necesitaran repostar, etc. Y
yendo más allá, incluso podría favorecer la colonización de otros planetas.
Sin embargo, con los pies en el suelo hemos de esperar aún algunos años más para
ver los primeros resultados, si es que los gobiernos ponen verdadero interés en la
3. fusión fría y no predominan los particulares intereses económicos de empresas
energéticas y de esos mismos gobiernos en relación a los actuales combustibles.
La fusión en frio otras posiciones
La fusión fría es un tema que produce mucha esperanza y escepticismo en igual
cantidad; quienes son positivos esperan que en algún momento la fusión fría sea una
realidad palpable, mientras que otros opinan que es un fraude, asegurando que
nunca será posible este tipo de reacciones y producción de energía.
Cuando una fusión nuclear es producida bajo condiciones de temperaturas cercanas
a la del ambiente, en la que la reacción nuclear producida genera grandes cantidades
de energía, se está hablando de Fusión Fría. Diferentes estudios realizados a través
del tiempo han empleado paladio, titanio o níquel en combinación con diferentes
fases de hidrógeno y cerámicas conductivas.
Con el tiempo, el nombre de Fusión Fría tomó una nueva forma, ahora es conocida
como LENR “Reacción Nuclear de Baja Energía” o CANR “Reacción Nuclear
Químicamente Asistida”.
El primer intento de fusión fría fue presentado ante la comunidad científica, en
marzo de 1989, por los doctores Martin Fleischmann y Stanley Pons de la Universidad
de Utah. En su exposición aseguraron haber conseguido una reacción de fusión
nuclear empleando una batería conectada a electrodos de paladio que se
encontraban sumergidos en agua pesada, donde el hidrogeno fue reemplazado por
el deuterio. La maquinaria que emplearon para este experimento podía caber sobre
una mesa y funcionaba a temperaturas cercanas al ambiente. Esta declaración causó
gran impacto y escepticismo entre quienes presenciaron la rueda de prensa,
mientras que la noticia de la fusión fría se esparció raudamente por el mundo.
James Decker, representante del Ministerio de Energía de Estados Unidos fue quien
inició las revisiones del estudio y en noviembre de 1989 luego de realizadas las
investigaciones que el Ministerio consideró pertinentes fue declarada la Fusión Fría
como irrealizable y teóricamente imposible, el mayor fraude del siglo, ya que muy
pocos o ninguno pudo duplicar el experimento de fusión fría con éxito.
Fleischmann y Pons intentaron refutar este negativo dictamen, pero pese a todos los
documentos y pruebas experimentales presentadas, no pudieron explicar por qué la
energía se producía solo en ciertas ocasiones.
La mala fama que obtuvo la fusión fría desligó el interés de muchos científicos,
quedando pendientes de su investigación y desarrollo muy pocos. Esta investigación
permaneció dormida por más de una década hasta que se volvió a retomar el tema
en 2002, cuando la Armada de Estados Unidos anunció que habían mantenido sus
estudios sobre la fusión fría, obteniendo resultados que debían ser analizados con
4. más profundidad.
En 2010 los doctores de la Universidad de Bologna en Italia, Andrea Rossi y Sergio
Focardi, presentaron un nuevo documento en que afirmaban haber conseguido la
fusión fría. Los dos científicos italianos crearon un reactor nuclear que funciona a
temperatura ambiente y que puede producir 31 veces la energía que ha necesitado
para funcionar.
E-Cat (Energy Catalyzer) o Catalizador de Energía es el nombre del reactor nuclear de
LENR creado por los doctores Rossi y Focardi en el cual se produce la fusión níquel –
hidrógeno. Los científicos italianos basan su investigación en la mecánica cuántica,
que dice que en un sistema donde existe gran cantidad de partículas con la misma
carga eléctrica, es posible que algunas de ellas se fusionen, como es el caso del
núcleo de níquel y el núcleo de hidrógeno, esta fusión transformará al níquel en
cobre.
La radioactividad medida en este experimento es casi cero y fácilmente manejada
dentro del reactor, es decir, el E-Cat produce energía limpia sin residuos atómicos y a
muy bajo costo: 1 centavo por Kwh, es por esta razón que su comercialización es un
acto inminente y la primera planta de 125 módulos empezará a funcionar desde
octubre 2011, su objetivo es producir 1MW.
Por el momento el Dr. Andrea Rossi, junto a sus socios comerciales Defkalion Green
Technologies y Ampenergo; y el Dr. Francesco Piantelli fundador de la empresa
Nichenergy, son los primeros en incursionar con éxito en la fusión níquel -
hidrógeno. Estos dos competidores buscan mejorar día a día la tecnología que están
implementando. Son muy pocos los inventos que revolucionan la manera en que la
gente ve y vive las cosas, es posible que de producirse la fusión fría, sea uno de los
pasos fundamentales en el desarrollo de la humanidad y la solución al grave
problema energético.
Fuentes:
Educadores Asociados http://ramiolra.es.tl/
www.nuclear.5dim.es/fu-fria.php
www.fusionfria.net/
Wilcox shresherin (2014) la fusion en frio procesos Universidad de Upsala
Sutton, Antony: Cold fusion: secret energy revolution, 1997.
Hewitt, Paul G.: Física conceptual.