Este documento discute cómo el contexto social fuera del aula afecta el comportamiento de los estudiantes dentro del salón de clases. Señala que algunos estudiantes exhiben malas actitudes debido a influencias negativas externas como juntarse con personas mayores. Estas actitudes tienden a manifestarse más en los estudiantes varones que en las mujeres. También sugiere que los hábitos y costumbres que los estudiantes traen de casa moldean su comportamiento en la escuela, aunque también pueden modificarse por las interacciones con otros compañeros.