Había una vez un burro que vivía en al sur de tucumán
1. Y colorín colorado este cuento animal se ha terminado.
Había una vez un príncipe que se sentía muy solo y cada tarde salía al jardín de su castillo
a escribir poemas sin descubrir que un hada lo miraba todas las tardes escondida detrás de
las flores.
El príncipe no se detenía a contemplar la belleza de su jardín porque siempre estaba con la
cabeza agachada escribiendo sus lamentaciones.
Un día, aburrido de hacer siempre lo mismo se le ocurrió la idea de cortar todas las
plantas y las flores de su jardín para hacer una piscina más grande que la que tenía, así
que escogió a cinco de sus siervos para que lo destruyeran.
El hada del jardín cuando vio que los siervos venían a destruir el jardín se puso en
contacto con todos los árboles y con todas las flores para que no se dejaran cortar.
En ese instante el jardín cobró vida y mágicamente los árboles empezaron a sacar sus
brazos de ramas y dándoles azotes a los siervos los tiraban al suelo.
Las flores se unieron a la batalla y comenzaron a utilizar sus dulces fragancias y sus lindos
colores para atraer a los insectos los cuales llegaron por aire y tierra. Y picándoles por todo
el cuerpo le produjeron hinchazón en la piel.
Los siervos salieron del jardín corriendo y muy asustados le contaron lo sucedido al
príncipe Pablo.