3. “El ángel le dijo:
No temas, María,
porque has hallado
gracia delante de Dios,
vas a concebir en el
seno y vas a dar a luz
un hijo,
a quien pondrás por
nombre Jesús.
El será grande y será
llamado Hijo del
Altísimo (...).
4. “Dijo María:
He aquí la esclava del
Señor; hágase en mí
según tú palabra.”
(Lucas 1, 30-32, 38)
5. Se llama "anunciación"
a la visita del Arcángel
Gabriel, enviado por Dios
a la Virgen María para
pedirle que sea la Madre
del Verbo por la gracia
del Espíritu Santo.
6. Ella, conciente de su
dignidad y al mismo
tiempo su pequeñez,
consintió entregándose
sin reservas a la
voluntad
de Dios.
7. El "Sí" de María
Santísima abre el
camino a la
Encarnación que
ocurre en ese
momento.
En ese instante el
Verbo se hizo
carne.
Dios eterno vino a
habitar en ella
asumiendo la
8. Recordamos
la anunciación:
Rezando el Angelus,
al mediodía.
Rezando el primer
misterio gozoso del
Rosario
Celebrando
el día del niño por
nacer.
9. El día de la
Anunciación
el Verbo se hizo
carne;
La Segunda
Persona
de la Trinidad
asumió la
naturaleza humana
y comenzó a vivir
en el vientre de
10. Reflexiones del Papa Benedicto XVI
acerca de la anunciación:
“Gracias al «sí» de Cristo y de María,
Dios pudo asumir un rostro de hombre”
11. “Reflexionemos sobre este estupendo
misterio de la fe, que contemplamos
cada día al rezar el Angelus”.
12. La Anunciación,
narrada al inicio del
Evangelio de san
Lucas,
es un acontecimiento
humilde, escondido
--nadie lo vio, sólo lo
presenció María--,
pero al mismo tiempo
decisivo para la
historia de la
humanidad.
13. Cuando la Virgen pronunció su «sí»
al anuncio del ángel, Jesús fue concebido
y con Él comenzó la nueva era de la
historia,
que después sería sancionada
en la Pascua como «nueva y eterna
14. En realidad,
el «sí» de María es
el reflejo perfecto
del «sí»
de Cristo, cuando
entró en el mundo,
como escribe
la Carta a los
Hebreos
interpretando
el Salmo 39:
15. «¡He aquí que vengo -
pues de mí está
escrito en el rollo del
libro
- a hacer, oh Dios,
tu voluntad!»
(10, 7).
16. La obediencia del Hijo
se refleja en la
obediencia de la Madre
y de este modo,
gracias al encuentro de
estos dos «síes»,
Dios ha podido asumir
un rostro de hombre.
Por este motivo la
Anunciación es también
una fiesta cristológica,
pues celebra un
misterio central de
17. «He aquí la esclava del
Señor; hágase en mí
según tu palabra».
La respuesta de María
al ángel continúa en la
Iglesia, llamada a
hacer presente a Cristo
en la historia,
ofreciendo su propia
disponibilidad para que
Dios siga visitando a la
humanidad con su
misericordia.
18. En este período de
Cuaresma
contemplamos más
frecuentemente a la
Virgen que en el
Calvario sella el «sí»
pronunciado en
Nazaret.
19. Unida a Jesús, testigo del amor del
Padre, María vivió el martirio del alma.
Invoquemos con confianza su
intercesión para que la Iglesia, fiel a su
misión,
dé al mundo entero testimonio valiente
del amor de Dios
20. Oración:
Bendita sea tu Pureza y
eternamente lo sea,
pues todo un Dios se recrea
en tan graciosa belleza,
A ti Celestial Princesa,
Oh Virgen Sagrada María,
yo te ofrezco en éste día,
alma, vida y corazón,
Mírame con compasión,
no me dejes Madre mía,
Ahora y en mi última agonía,
Sed mi amparo y protección.
Amén.
21. Madre mía,
que yo también
aprenda a saludarte
con la misma
reverencia con que el
ángel Gabriel te
saludó,
y cuando dirija a ti
mis Salves vayan con
mucho amor hacia ti.
Amén.
22. Si deseas recibir mails, relacionados con la Iglesia:
que contienen diapositivas, vida de Santos, Evangelio del
Domingo, etc.
Escribe a:
unidosenelamorajesus+subscribe@googlegroups.com,
Que Dios te llene de bendiciones.
Y que permanezcamos unidos en el amor de Jesús.