1. 2.1.- ADOLESCENCIA
El vocablo adolescencia proviene del verbo latino adolescere, que
significa crecer o llegar a la maduración. Esto significa no sólo el crecimiento
físico, sino también el desarrollo mental. En lo mental está maduro el individuo
cuya inteligencia haya alcanzado su desarrollo máximo.
En términos generales, la adolescencia se extiende desde el momento de la
madurez sexual hasta la edad en que se asegura por vía legal la independencia
respecto de la autoridad del adulto. (Ver fig. 1)
Fig.1 Ejemplo de adolescentes
La adolescencia, es un periodo en el desarrollo biológico, psicológico,
sexual y social inmediatamente posterior a la niñez y que comienza con
la pubertad. Su rango de duración varía según las diferentes fuentes y posiciones
médicas, científicas y psicológicas pero generalmente se enmarca su inicio entre
los 10 a 12 años y su finalización a los 19 o 20.
La adolescencia es esencialmente una época de cambios. Es la etapa que marca
el proceso de transformación del niño en adulto, es un período de transición que
tiene características peculiares. Se llama adolescencia, porque sus protagonistas
son jóvenes de identidad y de una clara definición, que ya no son totalmente
2. niños, pero tampoco son adultos, son una especie de híbrido, con rasgos de
adulto y resabios de niño.
2.1.1.- ADOLESCENCIA EDAD DE TRANSICIÓN
La facilidad con que el adolescente efectúe la transición que lo lleva a la adultez
depende en gran parte del individuo, en parte del apoyo o los obstáculos que
provienen del medio y en parte de las expectativas por sentirse ya un adulto, vivir
como uno y lo que todo adolescente quiere llegar a tener, la independencia de sus
padres para ser libres y vivir su propia vida. (Ver fig.2)
Fig.2 Transición de niño a joven
Velocidad de la transición.- En ningún otro período el individuo experimenta un
cambio tan repentino y drástico en un lapso tan breve; en ningún otro momento de
su vida se halla menos preparado para enfrentarse con los problemas que trae
este cambio, que es especialmente difícil si el adolescente se dedica a trabajar
cuando finaliza sus estudios secundarios.
Extensión de la transición.- Los adolescentes que maduran con rapidez, los que
parecen haber crecido de un día para el otro encuentran una especial dificultad
para su adaptación. El medio que los rodea espera que se comporten como
3. adultos sólo porque tienen la apariencia de tales. En el caso opuesto, una
adolescencia prolongada también ocasiona problemas. Los jóvenes se
acostumbran a ser dependientes y este habito como todos es difícil de
abandonar.
Gran parte de la tensión y de la tirantez de la adolescencia se debe al
entrenamiento discontinuo. Por ejemplo, asumir responsabilidades durante la
adolescencia es difícil porque el niño ha sido preparado para ser dependiente y
sumiso.
El grado de dependencia que tendrá el joven adolescente está determinado en lo
primordial por la clase de entrenamiento que haya recibido en su infancia, por la
cantidad de incentivos que tenga para ser independiente y por el éxito que
obtenga en el manejo de la independencia que se le concede. Con frecuencia, los
padres fomentan la dependencia porque creen que los jóvenes no están listos
para asumir la responsabilidad de sus propios actos y los sobreprotegen. En
consecuencia, muchos jóvenes tienen dificultades para pasar a la condición
adulta.
En las sociedades sujetas a cánones tradicionales se espera que el niño siga los
pasos paternos; esto le proporciona un modelo de conducta que puede imitar.
En una sociedad democrática, por el contrario se presume que todo individuo debe
ser libre de elegir su propio modelo de desarrollo personal. Como
resultado se le priva de la guía y asistencia que se brindan en las sociedades
tradicionalistas en las que el comportamiento de la juventud está regulado por un
código definido.
Cuando el adolescente comienza a tener la apariencia de adulto se le concede un
grado mayor de libertad. Con demasiada frecuencia este hecho lo estimula a
establecer metas carentes de realismo, a creer que los obstáculos en su camino
4. están eliminados y que ya puede ser y hacer lo que desee. Si descubre que no
está en condiciones físicas ni psicológicas de desempeñar un rol adulto, entonces
se convierte en un ser insatisfecho consigo mismo y esto debilita su motivación
para tratar de alcanzar la condición adulta.
El adolescente atraviesa un periodo en el cual se pregunta cómo se enfrentará con
los nuevos problemas que le presenta la vida diaria. Le gustaría ser adulto
pero se siente inseguro de su capacidad para afrontar la adultez. Mientras perdure
este sentimiento de inseguridad estará poco motivado para efectuar la “transición
hacia la siguiente etapa”. Cuando los obstáculos obstruyen el camino a la adultez
desaparecen o se eliminan por obra de los padres, los docentes y la sociedad, el
adolescente ve la posibilidad de alcanzar el objetivo de ser adulto y normalmente
hay mayores razones para llevar a cabo la transición.
Pocos jóvenes logran la transición desde la infancia a la adultez sin cicatrices
emocionales. A veces tales marcas carecen de importancia; en otras ocasiones
son tan perjudiciales que los adolescentes renuncian a la lucha y permanecen
inmaduros durante el resto de sus vidas. Ciertos efectos de la transición son más
comunes y más perniciosos que otros: Inestabilidad, preocupación por los
problemas que deben enfrentar, conducta perturbadora e infelicidad.
El adolescente ya no puede conducirse como un niño, pero no se siente seguro de
su capacidad para hacer lo que la sociedad espera de él.
Los sentimientos de inseguridad siempre son acompañados de tensión emocional;
el individuo se muestra preocupado y ansioso, o enojado y frustrado. Raramente
es feliz en medio de su inseguridad porque se da cuenta de que su conducta
refleja su falta de confianza en sí mismo.
La inestabilidad se exterioriza así mismo en pautas de conducta no relacionadas
con la emotividad. Algunos adolescentes exageran su dedicación escolar, otros se
lanzan con entusiasmo a la práctica de deportes, y otros pasan la mayor parte de
5. su tiempo en actividades sociales. Algunos dan cuenta de su inestabilidad
alternando sus gustos, sus intereses, sus aspiraciones vocacionales y sus
amistades.
A medida que avanza la adolescencia, el individuo se hace cada vez más estable.
Con cuánta anticipación y con qué grado de éxito habrá de alcanzar la estabilidad
dependen en parte de su motivación para acelerar la transición hacia la madurez
y en parte de la oportunidad con que cuenta para hacerlo. Cuando descubre que
la gente considera su inestabilidad de modo desfavorable, encuentra una
motivación para hacerse más estable y digno de confianza.
El aumento de su estabilidad posibilita al adolescente una mejor adaptación
personal y social. Se siente más feliz y más libre de tensiones emocionales. Una
inestabilidad prolongada y pronunciada indica que el individuo tiene dificultades ya
sea por su propia culpa o por la del ambiente en que se desenvuelve, para
deshacerse de los hábitos infantiles y formar otros más maduros. Como resultado,
se adaptará deficientemente en relación con lo que se podría esperar teniendo en
cuenta su nivel de edad.
2.1.2.- TEMORES TÍPICOS DE LOS ADOLESCENTES
En la adolescencia hay cambios notables en los estímulos que provocan
emociones, así como también hay cambios en la forma de la respuesta emocional.
Sin embargo, hay una similitud entre las emociones de la infancia y las de la
adolescencia, tanto en uno como en otro período las emociones dominantes
tienden a ser desagradables, principalmente el temor y la ira en sus diversas
formas, el pesar, los celos y la envidia.
Las emociones placenteras alegría, afecto, felicidad o curiosidad son menos
frecuentes y menos intensas, en particular en los primeros años de la
adolescencia. Los factores sociales son en gran parte los responsables de las
emociones desagradables, de la forma como se expresa cada emoción y de la
6. clase de estimulo que origina la emoción. Los factores sociales también son
importantes para determinar el hecho a cual el adolescente responderá
emocionalmente.
Si “lo que hay que hacer” es reírse ante chistes acerca de miembros de otros
grupos étnicos, el adolescente responderá a tales bromas con una carcajada.
Además, como las diferentes clases sociales tienen valores y expectativas
distintos, las variaciones de las respuestas emocionales entre los estratos sociales
son mayores en la adolescencia que en la infancia, dado que en ésta el individuo
era menos consiente y estaba menos influido por las presiones sociales. Varios
son los factores que llegan a producir temor en los adolescentes como:
Fenómenos naturales y objetos materiales.- En donde se puede incluir los
estímulos que pueden generar temor, como insectos, víboras, perros, tormentas,
lugares elevados, el fuego y los aviones. (Ver fig.3)
Fig.3 Fobias naturales en los adolescentes
Relaciones sociales.- Los temores a la gente y a situaciones sociales se
expresan de dos maneras: timidez y turbación. Ambas tienen su origen en
sentimientos de inadecuación social. La timidez hace que el adolescente se sienta
incomodo en presencia de una persona en la cual quiere causar buena impresión.
7. La turbación aparece cuando el adolescente realiza algo que, según teme, le
acarreará oportunidades fallidas en la sociedad.
Relación consigo mismo.- También influye en la generación de temores
adolescentes ya que aquí se encuentran los miedos a las enfermedades graves, a
la incapacidad física, a la inadecuación personal respecto de situaciones sociales
o vacacionales y al fracaso en los estudios.
Temor a lo desconocido.- Los adolescentes tienen miedo de permanecer solos
en el hogar, de estar en un lugar extraño con gente desconocida, de someterse a
intervenciones quirúrgicas y de ser incapaces de encarar muchas
otras situaciones que para el adolescente le resulten nuevas o desconocidas, esto
siempre va a causar de una u otra forma cierto temor.
Hacia la época en que el niño se hace adolescente ya ha aprendido que muchas
de las cosas que solía temer no son ni peligrosas ni dañinas. Esto no quiere decir
que el miedo desaparezca, sino que los temores del niño son reemplazados por
otros más maduros. Por ejemplo, es probable que al adolescente lo atemorice más
algunas situaciones sociales que los animales.
El temor del adolescente es diferente del infantil por dos razones. La primera tiene
que ver con el “cambio de valores”. Cuanto más importante es una cosa para una
persona, mayores probabilidades hay de que lo invada el temor si cree que va a
perderla o que no podrá obtenerla. Hablar o actuar frente a un grupo compuesto
de profesores, de padres y de compañeros asusta menos a un niño que a un
joven, pues en este es mayor la ansiedad por causar una buena impresión.
También por lo cual los temores son diferentes según la edad es por el hecho de
que el adolescente enfrenta muchas más nuevas experiencias que un niño. Toda
cosa nueva y difícil puede originar miedo, pero por lo general el niño está
protegido; en cambio, el adolescente se ve constantemente frente a algo nuevo y
distinto a medida que se expanden sus horizontes sociales.
8. En la adolescencia el temor se puede presentar de diferentes maneras como:
rigidez del cuerpo y huida de la situación que le produce temor. Cuando el joven
está asustado, su cuerpo se pone rígido, tiembla y transpira, si su temor es más
intenso, su tez empalidece. De otro modo el adolescente aprende a evitar tales
situaciones “escapando” antes de que se produzcan. Evita así la vergüenza o la
humillación de que otros perciban que se halla dominado por el miedo.
Pero el temor más grande que presentan los adolescentes es a no ser aceptados
por grupos, por su familia o amigos y ahí es cuando comienzan a buscar donde
cubrir estos temores, generándose las tendencias de los adolescentes a formar
grupos urbanos con sus características especificas.
2.1.3 PROBLEMAS DE LOS ADOLESCENTES.
Analizar los problemas típicos Adolescentes, a continuación analizaremos qué
factores pueden intervenir en la aparición de problemas adolescentes, así como
los distintos enfoques que se han desarrollado para entender las causas de este
tipo de problemas, sus características y su forma cómo influyen en el desarrollo de
la vida del adolescente y su carácter.
Factores Biológicos.- En el enfoque Biológico los problemas adolescentes se
atribuyen a un funcionamiento inadecuado del cuerpo del adolescente. Hoy en día,
los científicos que adoptan un enfoque Biológico se centran en el cerebro y en los
factores genéticos como posibles causas de los problemas adolescentes.
En este enfoque se acude al tratamiento farmacológico para solucionar los
problemas. Por ejemplo, si un adolescente está deprimido, le recetan un
antidepresivo. (Ver fig.4)
9. Fig.4 Depresión causada por factores biológicos
Factores Psicológicos.- Entre los factores psicológicos que provocan problemas
adolescentes se encuentran los pensamientos distorsionados, la confusión
emocional, el aprendizaje inadecuado y las dificultades para interactuar con otros.
“La ciencia del desarrolló adolescente” trata sobre las causas que pueden
contribuir a que los adolescentes desarrollen problemas. Recordemos que los
teóricos psicoanalíticos atribuyen los problemas a las experiencias tempranas
estresantes que tienen los niños con las figuras paternas.
Los teóricos de la conducta y los sociocognitivos creen que los problemas
adolescentes son una consecuencia de las experiencias sociales que tienen los
adolescentes con otras personas.
Factores socioculturales.- Los problemas psicológicos que tienen los
adolescentes se dan en la mayoría de las culturas. Sin embargo, la frecuencia e
intensidad de los problemas varía de unas culturas a otras, asociándose estas
variaciones a los aspectos sociales, económicos, tecnológicos y religiosos
existentes de cada una de ellas. Entre los factores socioculturales que influyen
sobre el desarrollo de los problemas adolescentes se incluyen el nivel
socioeconómico y la calidad del barrio en el que se vive.
10. Enfoque biopsicosocial.- Algunos expertos consideran que los tres tipos de
factores biológicos, psicológicos y socioculturales pueden estar implicados en el
hecho de que un adolescente desarrolle determinados problemas. Así, el hecho de
que un adolescente empiece a consumir drogas puede obedecer a una
combinación de factores biológicos (predisposición genética y procesos
cerebrales), psicológicos (confusión emocional y dificultades relacionales y
socioculturales (pobreza). La combinación de todos estos factores recibe en
nombre de enfoque biopsicosocial.
Enfoque de la psicopatología del desarrollo.- El campo de psicopatología del
desarrollo se centra en describir y analizar la trayectoria evolutiva de los
problemas. Muchos de los investigadores que trabajan en este campo intentan
establecer relaciones entre los precursores de un problema (como los factores de
riesgo y las experiencias tempranas) y los resultados o consecuencias finales
(como la delincuencia o la depresión).
Los problemas adolescentes se pueden categorizar en dos tipos diferentes:
problemas de interiorización y problemas de exteriorización. Los problemas de
interiorización ocurren cuando la persona dirige sus problemas hacia el exterior.
Un ejemplo de problemas de exteriorización es la delincuencia juvenil.
Se han establecido relaciones entre problemas durante la infancia y los problemas
en la etapa adulta.
Del mismo modo, la presencia de problemas de exteriorización (como la agresión
y el comportamiento antisocial) durante la infancia elevaba el riesgo de presentar
comportamientos antisociales a los 21 años.
El sexo femenino tanto los problemas de interiorización como los de
exteriorización predijeron problemas de interiorización a los 21 años. Alan Sroufe y
11. sus colaboradores (1999) comprobaron que los problemas de ansiedad durante la
adolescencia correlacionan con el apego ansioso evocativo durante la primera
infancia.
Sroufe cree que la combinación de un apego seguro en la primera infancia y una
buena integración en el grupo de iguales durante esta misma etapa contribuyen a
impedir el desarrollo de problemas durante la adolescencia. En otro estudio
reciente de psicopatología evolutiva, Ann Masten y sus colaboradores (en prensa)
hicieron el seguimiento de 205 niños durante 10 años desde la infancia hasta la
adolescencia.
Estos autores comprobaron que el buen funcionamiento intelectual y las prácticas
educativas paternas adecuadas desempañaban un papel protector, impidiendo
que los adolescentes se implicaran en comportamientos antisociales.
Las características de los problemas adolescentes.- El espectro de problemas
adolescentes es muy amplio, los problemas varían tanto en gravedad como en su
incidencia en función del sexo y del nivel socioeconómico. Algunos problemas son
de escasa duración otros pueden persistir durante años. Un niño de 13 años se
puede comportar de forma impulsiva en el centro escolar, interfiriendo en la
marcha de la clase. Al cumplir los 14 años, tal vez sea asertivo y agresivo pero
haya dejado de interrumpir en clase.
Otro niño que con 13 años presentaba una pauta similar de comportamiento
impulsivo a los 16 años puede haber sido arrestado repetidamente por cometer
distintos tipos de conductas delictivas y seguir interfiriendo en la marcha de la
clase. Algunos problemas tienen más probabilidades de aparecer en algunos
niveles evolutivos que en otros.
Por ejemplo, los miedos son más habituales al principio de la etapa preescolar,
muchos problemas relacionados con los estudios emergen por primera vez en la
12. etapa escolar y los problemas relacionados con el abuso de sustancias
predominan más en la adolescencia.
En el estudio se puso de manifiesto que la depresión, el abastecimiento escolar y
el abuso de sustancias predominaban más entre los adolescentes de más edad
mientas que discutir, pelearse y hacer demasiado ruido son comportamientos más
frecuentes entre los adolescentes más jóvenes.
2.1.4 TRASTORNOS DE LA ADOLESCENCIA.
¿Cuáles son algunos de los principales problemas y trastornos que afectan a los
adolescentes?
Para responder a esta pregunta podemos señalar el consumo de drogas y alcohol,
la delincuencia juvenil, los problemas relacionados con los estudios, los problemas
sexuales, la depresión y el suicidio y los trastornos de la alimentación. A
continuación se explica de manera breve los diferentes trastornos.
Anorexia nerviosa.- La anorexia nerviosa es un trastorno que afecta
principalmente a mujeres adolescentes, pero también a pre púberes y mayores, y
en menor medida a hombres; se caracteriza por una pérdida de peso auto
inducida por medio de una estricta restricción alimentaria, y/o el uso de laxantes y
diuréticos, la provocación de vómitos o exceso de ejercicio físico. La persona se
niega a mantener un peso mínimo dentro de la normalidad, manifiesta un miedo
intenso a ganar peso y una profunda distorsión de su imagen corporal.
La edad más común de inicio de la anorexia nerviosa es de aproximadamente 15
años. (Ver fig.5)
13. Fig.5 Anorexia nerviosa en adolescentes
Depresión.- Habitualmente lo sufren, los adolescentes que experimentan un
amplio abanico de estados del ánimo, que varían entre lo normal, elevado o
deprimido, y sienten que tienen cierto control sobre éste y su afectividad.
La depresión es un trastorno en el que la persona que lo padece pierde la
sensación de control sobre su estado de ánimo y su afectividad, y experimenta un
fuerte malestar general.
Las personas con depresión muestran pérdida de energía e interés por las
actividades habituales, sentimientos de culpa, dificultad para concentrarse, pérdida
de apetito, a veces pensamientos de muerte o suicidio. También manifiestan
cambios en su nivel de actividad, en sus funciones cognoscitivas, lenguaje y
funciones vegetativas (sueño, apetito, actividad sexual, y otros ritmos biológicos).
Generalmente este trastorno origina un deterioro del funcionamiento interpersonal,
social y laboral (rendimiento académico en adolescentes).
Consumo de drogas.- Se entiende por droga cualquier sustancia natural o
sintética que al ser introducida en el organismo a través de diferentes vías (nasal,
inyectable, fumada o tragada), altera la actividad psíquica y el funcionamiento del
organismo, por los efectos que produce principalmente en el sistema nervioso
central.
14. Los adolescentes al tener demasiados problemas y no sentirse aceptados buscan
en la droga una salida a todo los que les acontece lo cual les puede perjudicar en
la vida y en la salud. (Ver fig.6)
Fig.6 Drogadicción adolescente