1. "Los Colores" (preescolar)
¿Cómo podemos enseñar a niños de preescolar los colores primarios y
secundarios?
¿Qué tipo de material sería el más adecuado para su edad y aprendizaje
significativo?
En la edad de preescolar los niños están aprendiendo a identificar
letras, figuras y colores, por lo tanto es muy importante que no
compliquemos su aprendizaje, sino ayudar a que lo relacionen con
objetos y figuras que le sean familiares en su vida cotidiana, por
ejemplo:
Enseñar los colores primarios rojo, amarillo y azul.
El rojo con el símbolo de un corazón, que la mayoría de los niños lo
relaciona con el corazón, con el 14 de febrero, y también ayudará a
explicarle que bombea sangre por todo nuestro cuerpo, la sangre es de
color rojo, después dibujan un corazón y lo colorean de color rojo.
El amarillo, todos conocemos el sol y es de color amarillo, se le
proporciona dibujos de paisajes donde venga un sol para que lo
recorten y posteriormente lo peguen en un mural para adornar su aula.
El color azul, se les habla del mar, donde viven animales acuáticos
como las ballenas, los delfines, estrellas de mar y muchos más, se
explica que el mar es azul y el azul forma parte de los colores
primarios, con ayuda de recortes de revistas formarán su propio mar y
pondrán todo tipo de animales y plantas acuáticas.
Para concluir con la explicación de los colores primarios, se habla de
que el corazón es una parte fundamental del ser humano, la cual ayuda
a todos los órganos a funcionar, el sol forma parte del sistema solar y
el mar es inmenso y se en cuentra en todo el mundo, así los colores
primarios ayudan a crear todos los demás colores, siendo éstos los
principales.
Colores secundarios
El docente puede llevar objetos como la hojas de un árbol, uvas frescas
y naranjas, les entrega una hoja a cada alumno y les indica que la
observen detenidamente y les pregunta que si saben de qué color es y
de dónde es, les explica por qué es verde.
Después les entrega cinco uvas a cada uno para que la vean les indica
que es de color violeta, y que las agrupen de dos en dos, pregunta
cuántas sobran, y si conocen otros objetos de color violeta, al final deja
que se la coman.
El color naranja lo ejemplifica con gajos de 5 naranjas y con ayuda de
sus alumnos los distribuye de forma equitativa, para que los observen
y después los consuman.
Al final explica que el verde, violeta y naranja forman parte del
grupo de los colores secundarios.
2. Los niños, desde muy pequeños, tienen gran curiosidad por descubrir
todo lo que lo rodea haciendo uso de sus sentidos y es así como ellos
aprenden. Es aquí donde los padres van a desempeñar un papel muy
importante proporcionando los espacios y materiales necesarios para
enseñar al niño los hábitos de estudio necesarios que les permita un
aprendizaje exitoso.
Se sugiere las siguientes actividades, las cuales se deberán realizar en
temporada preescolar y vacaciones:
1. Establecer rutinas que consideren el tiempo de alimentación, de
juego, de tarea, de aseo y de sueño.
2. La lectura es una actividad muy importante dedícale unos minutos y
ambos sumérjanse en la aventura de un cuento, puedes crearle una
pequeña biblioteca personal.
3. Proporcionar un lugar adecuado que el niño identifique como “su
lugar de estudio”, éste deberá estar ventilado, bien iluminado y libre
de factores distractores
4. Facilitar los materiales que requiera para cumplir con sus tareas.
5. Guiar el desarrollo de sus tareas dándole las indicaciones, mas no
mostrándole la solución o solucionándolos por él.
6. Felicitar al niño cada vez que cumple las rutinas establecidas y
desarrolla correctamente las tareas o estimularlo con “premios” que lo
motiven a seguir esforzándose.
Todo lo mencionado ayudará a establecer hábitos en el niño, un par
de meses será suficiente para que el niño los tenga bien interiorizados.
Si durante este tiempo alguno de los padres descuida los tiempos
establecidos el niño no logrará establecer sus horarios. Sin embargo,
pasado este periodo, aunque los padres olviden o traten de cambiar
alguno de los tiempos no podrá, porque será el mismo niño quien les
recordará los pasos correctos ya que sus tiempos están establecidos.
El niño al tener hábitos estará a su vez contribuyendo al desarrollo de
su autoestima, sintiéndose seguro de lo que hace porque sabe que
podrá disfrutar de diferentes momentos ya que ha aprendido a
organizar su tiempo, lo cual le permitirá aprovechar mejor sus horarios
de juego, deportes, estudio y sobre todo el tiempo dedicado a la
familia. Mientras que los padres den el modelo correcto a seguir y
estén consientes que lograr hábitos de estudio desde temprana edad
es de gran importancia para el futuro éxito de sus niños, podrán evitar
futuros problemas escolares.
3. Causas del fracaso escolar
¿Las causas del fracaso escolar? Son múltiples y complejas: falta de
implicación de los padres, sistemas educativos ineficaces, recursos
más bien escasos,profesores desbordados, niños desmotivados… la
lista es muy larga y las soluciones son difíciles de consensuar.
Primaria, fundamental
Aunque todos los expertos concuerdan en un punto: el problema
eclosiona en Secundaria, pero se origina en los primeros años del
cole, en Primaria. Son niños con problemas de aprendizaje, que no
avanzan al ritmo de los demás y presentan dificultades sobre todo con
la comprensiónlectora y los cálculos matemáticos. Si no se les presta
atención y apoyo, tanto dentro como fuera del centro, cada vez van
peor y llega un momento (generalmente, en 6º de Primaria o ya en la
ESO) que ya no logran seguir y tiran la toalla.
Prevención, más profesores, más refuerzos y más apoyo familiar son
los remedios más señalados. Objetivo: que el fracaso y abandono
escolarse reduzca en diez puntos en el año 2013 y se reduzca al 15%
en 2020, meta fijada por el anterior ministro de Educación, Ángel
Gabilondo, cuyo ministerio destinó ocho millones de euros a ese
objetivo.
¿Por qué no rinde en el cole? Lo importante es hallar el origen del
fracaso escolar. Un niño que no rinde lo que debería en el colegio
puede estar sufriendo alguno de estos problemas:
Intelectual: se da tanto en niños con algún tipo de deficienciamental
como en niños superdotados.Tambiénpuede producirse por una falta
de base sólida en los cursos anteriores.
Desmotivación: aunque el estudiante tenga una inteligencia normal
o por encima de la media, pueden reproducirse serios problemas de
aprovechamiento escolar si no se siente motivado a aprender.
Orgánico: en ocasiones,el buen rendimiento escolarse ve afectado
por un problemavisual o auditivo (miopía,
hipermetropía, hipoacusia…), problemas de orientación espacio-
temporal, la dislexia, etcétera. También está comprobado que los
niños que duermen poco o mal, y los que no se alimentan
correctamente,en especialen el desayuno, rinden menos de lo que
sería deseable.
Problemas emocionales: suelendarse tanto en niños con carencias
afectivas como en niños sobreprotegidos, hiperactivos, inseguros o
con exceso de fantasía o algún sentimiento de inferioridad, que hayan
sufrido la pérdidade uno o ambos progenitores,con padres muy
severos,con un mal ambiente familiar, etcétera, lo que desembocaen
importantes dificultades de integración en el colegio.
Técnicasy hábitos de estudio: muchos escolares no saben cómo
estudiar ni tienen quién les enseñe.Convertir el estudio en un hábito
es otra de las herramientas para alcanzar el éxito académico.Los
4. pedagogos norteamericanos han establecido una pauta muy práctica
a la que llaman la “regla de los 10 minutos: la duración del tiempo de
estudio debe durar 10 minutos por cada curso escolar en que esté el
alumno”. Empiezas con diez a los seis y terminas con una hora y 40
minutos.
Programación inadecuada: a veces se exige al niño tareas muy
difíciles para su nivel de maduración intelectual. Se pretende que
todos los niños del curso rindan por igual. A veces también hay
discrepancias manifiestas entre los educadores,o entre los
educadores y los padres, que pueden llegar a confundir al niño.
Los profesores: clases numerosas,falta de respaldo por parte de
sus superiores o de especialistas,hacen que en ocasiones el profesor
transmita al alumno sentimientos de inseguridad e infravaloración.
Soluciones al fracaso escolar: qué pueden hacer los
padres
La implicación de los padres es fundamental en el éxito escolar de sus
hijos. Estas sencillas pautas pueden ayudar a orientar o reorientar su
rendimiento por el buen camino.
Reconoce y acepta que tu hijo tiene dificultades. Estudia el
problema, localiza dónde falla el proceso educativo y pon los medios
necesarios para superarlo.
Antes de decidir,habla con el niño para saber cuál es su problema
y qué tipo de ayuda puedes ofrecerle.
No asedies a tu hijo con la idea del estudio. Explícale cuáles son los
objetivos y qué es lo que se espera de él.
No te intereses sólo por las notas, también son importantes sus
problemas con los compañeros o de relación con los profesores. El
niño debe sentir que sus estudios son un asunto que interesa.
Participa en las actividades escolares que impliquen la presencia
de los padres.
Muestra predisposición y atiende sus necesidades y preguntas
en casa, pero no le hagas los deberes.
Sé coherente. Si tu hijo ve leer en su casa y tú compartes con él tus
conocimientos será más fácil despertar su deseo de aprender.
No amenaces nicastigues. Apuesta,sobre todo,por la persuasión y
la estimulación.
Enseña a tus hijos a estudiar, el estudio requiere sus técnicas.
Explícale que no debe desanimarse, que hay que ser tenaz y
buscar alternativas.
Evita transmitir mensajes negativos del tipo “eres un mal
estudiante”, porque puede llegar a creérselos y bloquearsu desarrollo
posterior.
Celebra sus éxitos, por mínimos que sean.