Este documento resume los pasos para establecer la correlación entre el peso y la talla de 30 estudiantes. Primero, se comprueba que el peso y la talla siguen una distribución normal mediante las pruebas de Shapiro-Wilk. Luego, se calcula el coeficiente de correlación de Pearson, el cual arroja un valor de 0.475, indicando una correlación positiva moderada entre el peso y la talla de los estudiantes.