2. En nuestro estado Bolívar, uno de los tópicos más interesantes que forman parte de las
peculiaridades de esta región, es el hecho de que el Río Orinoco y el Río Caroní, a pesar de estar
prácticamente contiguos no se mezclan. Esto se debe a las diferencias de densidad, niveles de acidez
y caudal que repercuten en ellos y provocan una separación, en algunas zonas, bastantes marcadas
como en la unión llamada “Angosturita”, donde se puede observar este hermoso fenómeno natural,
que, sin duda alguna, caracteriza a nuestro estado.
El río Caroní posee un color profundo con tonos oscuros, debido al contenido de ácidos
orgánicos (húmicos y fúlvicos) que se distingue de las tonalidades, si bien se puede afirmar
“terrosas”, y ligeramente marrones del río Orinoco, que por tener una gran cantidad de sedimentos
repercuten directamente en la composición de diversos factores. Es importante destacar que la
diferencia de temperatura entre ambos es apenas de 2°C lo que hace que este primero tenga una
temperatura mayor al igual que la densidad.
El Caroní es considerado el segundo río más importante del país con una longitud de
aproximadamente 952 km, el cual se extiende desde el Tepuy Kukenán (Río Kukenán) hasta llegar a
confluir con el Río Orinoco. Un dato curioso de la etimología de su nombre es que este inicia a
utilizarse desde la confluencia del río Kukenán y el Yuruaní.
Una de las características fisicoquímicas más resaltantes del río Caroní es que posee bajos
valores de conductividad y nutrientes en el paso del río Caruachi, lo que hace que en esta zona exista
una baja concentración de calcio que es un factor persistente en los denominados “ríos de aguas
negras”.
Por otro lado, en el río Orinoco pueden distinguirse tres tipos de aguas que, en primera
instancia, pueden identificarse por su color. Destacan las aguas claras, que resaltan por ser aguas
turbias; las aguas negras que poseen un color más oscuro, donde cabe la analogía al “color té” y
aguas claras que llegan a ser más o menos transparentes. Los ríos que tienen más nutrientes y por lo
general una composición rica en electrolitos pertenecen a la clasificación de aguas blancas, por lo
que se consideran más productivos; la apariencia turbia se da por la presencia de sedimentos
inorgánicos que generalmente parten de los Andes hasta la llanura.
A su vez, los ríos de aguas claras son aquellos que provienen de zonas planas y debido a la
influencia de las cubiertas de bosque, tienden a tener tonos verdosos y transparentes, siempre
dependiendo de las características del suelo. Cuando llega el periodo de lluvia, este tipo de agua
tiende a enturbiarse. Las aguas negras, por su parte, se originan en la Orinoquia Guayanesa que
generalmente discurren en terrenos arenosos y a pesar de tener tonos muy oscuros, el agua es
transparente. Su pH es ácido y son de baja conductividad.
Ambos ríos son considerados como elementos de suma importancia en nuestro estado Bolívar y a
pesar de sus diferencias, los aportes que realizan permiten el aprovechamiento de diversos sectores
económicos. Admirar el río Orinoco y el río Caroní es un privilegio que todo venezolano debería tener
y que como guayaneses, debemos apreciar, ya que poder observar la confluencia y separación de
3. tonalidades, densidad, desde una perspectiva como la que tenemos actualmente, es un fenómeno
no solo digno de fotografiar sino también de recordar.
El rio Orinoco es el más grande de Venezuela y uno de los tres grandes ríos de América del sur, este
se compara en gran medida con el rio Caroní el cual se encuentra a una cota mayor.
En este caso Hablaremos solo del rio Orinoco, específicamente en las diferencias fundamentales o
puntuales durante los periodos de lluvias y sequia a lo largo del año.
Comenzando dando una interesante acotación, durante el periodo de sequía se forma un nuevo
relieve en los alrededores de la cuenca del rio Orinoko y este se refiere a un ecosistema de
paleodunas que aparecen debido al bajo nivel de las aguas (producido por la falta de lluvias),
especialmente de los que proceden de los Llanos, se quedan unas extensas playas de arena muy fina,
que los vientos alisios muy pronto van trasladando hacia el sureste.
Tomando en cuenta la dirección de los vientos recientemente mentada. La dirección de los vientos
durante la época de sequía (del verano como se dice en los Llanos) resulta, en promedio, muy
constante y con una considerable velocidad, desde el noreste al suroeste. Esta dirección puede variar
durante breve tiempo, pero a largo plazo se mantiene de manera exacta en dicho sentido.
Por otro lado, en la época de lluvias la dirección cambia ligeramente, y procede prácticamente desde
el este franco. Pero no es este el cambio más notable, sino la disminución de su velocidad. Ello se
debe a la mayor humedad que traen los vientos alisios y a la convección consiguiente; a medida que
avanzan los vientos húmedos sobre la sabana van aumentando de temperatura por el calor del suelo
debido a la radiación solar. A su vez, este calentamiento da origen al ascenso del aire húmedo y este
ascenso da origen, a su vez, a una disminución de la velocidad de los vientos y al aumento de las
precipitaciones.
De manera que el mecanismo de los vientos y el de la acumulación de las arenas procedentes del
Macizo Guayanés resultan casi opuestos y esta oposición ha sido favorable para el establecimiento
de las actividades agropecuarias en los Llanos: los médanos pueden llegar a cubrirse de vegetación
y servir de base para el establecimiento de viviendas, hatos y vías de comunicación, y este proceso
se hace más notorio hacia el oeste, no solo por la disminución de la velocidad de los vientos a medida
que avanzan en esa dirección sino también porque las arenas que forman dichos médanos proceden
de las playas del Orinoco y el transporte de las mismas disminuye al descender la velocidad del viento.
En otro caso, un tema que se es capaz de percibir en el propio cuerpo de manera natural es la
temperatura, a lo que se lleva la conclusión de que la diferencia entre periodo de sequía (muy
caliente) y el periodo de lluvia (menos caliente), debería de ser bastante amplia. Esto no es así, ya que
en toda la extensión de la cuenca del Orinoco los climas son isotermos, es decir, climas con escasas
variaciones de temperatura a lo largo del año. La diferencia entre la temperatura media de los meses
más y menos cálidos es de apenas 3 °C.
Los suelos en casi toda la cuenca del Orinoco son bastante pobres, sobre todo en la parte guayanesa
de la cuenca, que es donde predominan las superficies rocosas y arenosas. Son suelos muy ácidos,
como corresponde al clima intertropical y a la absorción del anhídrido carbónico procedente de la
descomposición de la materia vegetal por parte de las aguas de lluvia, las cuales transforman el CO2
en ácido carbónico, que se acumula en el suelo. Sin embargo, la vegetación es muy variada, sobre
4. todo en la Guayana venezolana, lo cual equivale a decir que los suelos en la cuenca del Orinoco no
tienen tanta relevancia en la determinación de los cultivos o de la vegetación natural, salvo algunas
excepciones, ya que otros elementos del medio ambiente, como la temperatura y la pluviosidad,
tienen mucha mayor importancia.
El río Orinoco tiene un régimen monomodal. Esto significa que tiene un solo período de crecida que
culmina a fines de julio y una época de aguas bajas, que culmina a comienzos de abril. Todo parece
indicar que la primera crecida a comienzos de la época de lluvias, va seguida por un breve lapso de
aguas momentáneamente bajas.
Algo que si es completamente notorio es el nivel del agua en los diferentes periodos en los que se
encuentra. Poco se habla de la verdadera razón o mejor dicho no se entiende la verdadera razón de
esto. Se entiende que en épocas de lluvia el nivel del mar sube y en épocas de sequía esta baja. Esto
sucede por la relación que hay entre las entradas y salidas de agua, para entrar en detalle; cuando el
nivel del agua sube es porque hay un mayor caudal de entrada que de salida y por las altas
precipitaciones (lluvias) que caen sobre el cauce del rio, por otro lado, cuando el nivel del agua
disminuye es debido a que el caudal de salida es mayor al de entrada y por sobre todo porque el nivel
de evaporación es alarmante porque en nuestros tiempos la tierra se calienta mucho más.
Pero no todo lo que brilla es oro, los excesos traen consecuencias. Por ejemplo; si hay mucha
precipitación y el rio se desborda (cabe destacar que es una de los ríos más grandes de la Pan-
Amazonia), pueblos quedaran inundados, fauna morirá ahogada y será muy difícil la vida rural. En
cambia si hay un exceso de sequía si se seca el rio, todo morirá, la fauna, la flora y los seres humanos,
porque sin agua...no hay vida.
Una de las grandes diferencias entre ambos ríos es su caracterización físico químico, El rio Orinoco
es el que más distingue a simple viste por su color marrón que lo caracteriza, esto debido a sus
sedimentos en suspensión siendo este mas denso en cambio el rio Caroní posee un color azul oscuro
este debido a los ácidos orgánicos, el rio Caroní pose un nivel de pH de alrededor de 5.46 mientras
que el del Orinoco es de aproximadamente 7.04, el rio el Orinoco termina siendo un Rio con un nivel
de alcalinidad apto para controlar ácidos débiles en agua natural, con respecto a la dureza de ambos
ríos también se distinguen en este aspecto la dureza del agua es la concentración de compuestos
minerales que hay en una determinada cantidad de agua, en particular sales de magnesio y calcio. El
agua denominada comúnmente como “dura” tiene una elevada concentración de dichas sales y el
agua “blanda” las contiene en muy poca cantidad, actualmente se desconoce los parámetros de
dureza de ambos ríos.
5. A continuación, se muestra un esquema Hidrometereológico que muestra la subida de nivel del Rio
Orinoco en Ciudad Bolívar
En el Siguiente es esquema se observa en general el comportamiento del régimen hídrico en el país
en las épocas de lluvia y sequia