Los Mayas estaban organizados en ciudades-estado autónomas gobernadas por reyes. Cada ciudad tenía su propio gobierno y leyes. Los reyes eran asesorados por un Gran Consejo. Los jefes locales gobernaban a los campesinos y dirigían el servicio militar. La sociedad maya estaba estratificada en nobles, sacerdotes, comerciantes, artesanos, campesinos y esclavos.