La sífilis es causada por la espirilla Treponema pallidum. Se transmite principalmente a través del contacto sexual sin protección o de la madre al feto. Existen tres etapas de la enfermedad: la primera etapa presenta chancros; la segunda etapa presenta una erupción cutánea; y la tercera etapa puede causar daños en órganos internos como el cerebro. El diagnóstico incluye pruebas serológicas como VDRL, RPR y FTA-ABS.