Los intereses de los niños y jóvenes han cambiado en la era de las pantallas. Su vida cotidiana pasa por los dispositivos tecnológicos que operan y si bien se sostiene el atractivo por la lectura es necesario pensar estrategias desde la mirada de una cultura de la convergencia de medios.
El análisis de la relación entre contenidos, entornos, formatos y códigos de comunicación debería marcar el punto de partida para el desarrollo de propuestas de lectura para orientadas a estas nuevas generaciones. Esto implicaría abandonar ciertos prejuicios respecto de las relaciones entre los libros y la diversidad de dispositivos tecnológicos y aplicaciones, empezando a tender puentes entre ellos más allá de considerarlos como meros soportes de la lectura.
Esta presentación apuntará a mostrar las relaciones entre la lectura y las nuevas formas de expresión y comunicación de niños y jóvenes tales como videojuegos, comunidades virtuales y redes sociales al tiempo que brindar algunos indicios sobre cómo tender puentes entre las características propias de estas culturas interactivas y la motivación por la lectura.
1.
FORMAR
LECTORES
EN
LA
ERA
DE
LAS
PANTALLAS:
¿LAS
NUEVAS
GENERACIONES
YA
NO
QUIEREN
LEER?
Débora
Kozak
III
SIMPOSIO
INTERNACIONAL
SOBRE
LIBRO
ELECTRÓNICO
“La
cadena
del
libro
en
el
mundo
digital”
México
D.F.,
10
al
13
de
septiembre
de
2013
Abstract
Los
intereses
de
los
niños
y
jóvenes
han
cambiado
en
la
era
de
las
pantallas.
Su
vida
cotidiana
pasa
por
los
dispositivos
tecnológicos
que
operan
y
si
bien
se
sostiene
el
atractivo
por
la
lectura
es
necesario
pensar
estrategias
desde
la
mirada
de
una
cultura
de
la
convergencia
de
medios.
El
análisis
de
la
relación
entre
contenidos,
entornos,
formatos
y
códigos
de
comunicación
debería
marcar
el
punto
de
partida
para
el
desarrollo
de
propuestas
de
lectura
para
orientadas
a
estas
nuevas
generaciones.
Esto
implicaría
abandonar
ciertos
prejuicios
respecto
de
las
relaciones
entre
los
libros
y
la
diversidad
de
dispositivos
tecnológicos
y
aplicaciones,
empezando
a
tender
puentes
entre
ellos
más
allá
de
considerarlos
como
meros
soportes
de
la
lectura.
Esta
presentación
apuntará
a
mostrar
las
relaciones
entre
la
lectura
y
las
nuevas
formas
de
expresión
y
comunicación
de
niños
y
jóvenes
tales
como
videojuegos,
comunidades
virtuales
y
redes
sociales
al
tiempo
que
brindar
algunos
indicios
sobre
cómo
tender
puentes
entre
las
características
propias
de
estas
culturas
interactivas
y
la
motivación
por
la
lectura.
Introducción
Una
de
las
cosas
que
más
escucho
decir
últimamente
a
maestros,
profesores
y
padres
es
que
los
niños
ya
no
quieren
leer,
que
perdieron
el
interés
por
la
lectura.
Sin
embargo,
en
mi
experiencia
de
la
vida
cotidiana
en
las
escuelas
puedo
comprobar
que
nada
más
lejos
de
la
realidad
que
esta
afirmación.
Los
niños
están
muy
interesados
en
leer,
solo
que
han
cambiado
los
entornos
de
lectura
y
los
intereses
en
cuanto
a
las
narrativas
que
resultan
más
atractivas
para
ellos.
La
oposición
entre
medios
digitales
y
libros
en
papel
nos
ha
conducido
a
una
falsa
dicotomía.
Los
detractores
de
lo
digital,
entre
los
que
la
escuela
ha
ocupado
un
lugar
de
privilegio,
han
contribuido
fuertemente
al
distanciamiento
de
los
niños
de
la
lectura.
Pero
el
mayor
alejamiento
ha
sido
producido
a
mi
entender
por
la
falta
de
entendimiento
de
los
nuevos
códigos
que
convocan
el
interés
de
los
niños
en
la
actualidad.
En
la
era
de
las
pantallas,
es
necesario
pensar
y
diseñar
estrategias
diferentes
de
motivación
del
interés
por
la
lectura.
Los
niños
de
hoy
pertenecen
a
generaciones
cuya
vida
cotidiana
está
signada
por
la
interactividad
mediada
por
tecnología.
La
idea
de
que
los
niños
solo
recuperarán
el
2. interés
por
la
lectura
cuando
se
alejen
de
los
dispositivos
tecnológicos
solo
contribuye
a
profundizar
cada
vez
más
la
brecha.
La
tecnología
puede
ser
el
puente
para
llegar
a
la
lectura,
pero
no
solamente
a
través
de
su
soporte.
El
libro
electrónico
ha
intentado
reducir
estas
distancias
entre
las
narrativas
y
las
tecnologías
logrando
un
interesante
acercamiento
en
los
adultos,
aunque
aún
no
resulta
un
dispositivo
que
refleje
el
interés
de
los
niños.
Como
todos
saben,
las
nuevas
generaciones
tienen
acceso
cotidiano
a
diversas
pantallas:
netbooks,
tabletas
y
celulares
inteligentes
son
las
opciones
más
elegidas
entre
niños
y
jóvenes.
Estos
dispositivos
les
ofrecen
todo
aquello
que
buscan:
los
mantiene
conectados
a
otros
a
través
de
las
redes
sociales;
les
posibilitan
el
uso
de
aplicaciones
interactivas;
mantienen
códigos
de
tipo
icónico
y
visualmente
atractivos;
les
permiten
acceder
a
información
que
requieren
en
cualquier
lugar
a
donde
se
encuentren;
etc.
Estas
manifestaciones
de
una
cultura
“ubicua”
mediada
por
la
tecnología
en
la
vida
cotidiana
–tal
como
la
definiría
Nicholas
Burbules
(2009)-‐
está
disponible
en
todo
momento
y
en
todo
lugar
y
representa
la
forma
natural
de
aproximación
al
conocimiento
de
las
nuevas
generaciones.
¿
Qué
motiva
la
lectura
en
los
niños
y
jóvenes?
Graciela
Montes,
una
conocida
escritora
argentina
de
libros
para
niños
y
jóvenes,
decía
sobre
formar
lectores
en
la
escuela
en
el
2003:
“De
lo
que
se
trata,
me
parece,
es
de
darle
al
lector
la
oportunidad
de
ejercer
su
lectura.
El
lector
no
es
una
persona
a
la
que
hay
que
llenarle
la
cabeza,
sino
alguien
que
debe
pensar
con
su
cabeza
y
que,
de
lo
que
el
maestro
le
ofrezca,
pueda
tomar
lo
que
crea
que
le
sirve
para
su
lectura.
Es
una
actitud
bastante
diferente
a
lo
que
tradicionalmente
se
ha
concebido
como
la
función
de
la
escuela.
¿Qué
es
hoy
bueno
para
el
otro?
Hay
que
abrir
fisuras
en
un
pensamiento
que
ha
sido
muy
compacto,
aunque
la
gente
extrañe
esa
solidez,
y
a
veces
diga
que
antes
era
mejor.
Leer
es
algo
más
que
descifrar,
aunque
toda
lectura
suponga
un
desciframiento.
Leer
es
construir
sentido.”1
¿Qué
significaría
hoy
construir
sentido
al
leer?
Como
decía
recién,
no
se
trata
solo
de
descifrar
por
lo
que
el
dispositivo
podría
ocupar
en
esta
afirmación
un
segundo
lugar
en
primera
instancia.
Sin
embargo,
para
las
nuevas
generaciones
construir
sentido
hoy
es
interactuar:
no
hay
sentido
sin
interacción.
Aquello
que
hoy
produce
“fisuras”
en
el
pensamiento
de
un
niño
o
joven
no
es
independiente
de
la
forma:
hoy
forma
y
contenido
aparecen
juntas.
Por
eso,
cuando
analizamos
el
tema
de
la
formación
de
lectores
en
la
era
digital
es
importante
entender
de
qué
se
tratan
los
nuevos
entornos
y
formatos,
qué
posibilidades
ofrecen
que
se
diferencian
de
los
ya
conocidos.
1
Tenewicki
Inés
(2003)
Entrevista
a
Graciela
Montes.
Revista
El
Monitor
Nro
8.
Buenos
Aires,
Argentina.
http://www.me.gov.ar/monitor/nro8/entrevista.htm
3. En
el
Ebook
entorno
y
contenido
parecen
fundirse.
¿Hablar
del
libro
electrónico
o
digital
refiere
entonces
a
un
nuevo
tipo
textual?
Aquí
es
necesario
detenerse
a
pensar
sobre
qué
ofrece
al
lector
un
Ebook:
¿se
diferencia
en
algo
para
los
niños
hoy
de
lo
que
le
ofrece
un
libro
impreso?
De
un
extremo
al
otro,
pasamos
a
los
detractores
de
los
libros
que
quieren
desterrarlos
directamente
de
la
escuela.
Por
ejemplo,
el
nuevo
caso
en
Holanda
de
las
llamadas
“Escuelas
Steve
Jobs”
sin
cuadernos
ni
libros.
En
este
caso
los
entornos
van
por
encima
de
cualquier
propuesta:
lo
importante
son
los
objetos
tecnológicos
y
su
“dominio
instrumental”.
¿Cuál
sería
entonces
hoy
la
alternativa?
La
convergencia
como
escenario
posible
Partimos
de
la
base
de
que
los
chicos
y
jóvenes
tienen
un
interés
genuino
por
la
lectura.
Por
supuesto
que
estas
lecturas
responden
a
formatos
y
códigos
diferentes
a
los
que
nos
atraían
a
los
adultos
de
hoy,
pero
el
interés
está
intacto.
Cuando
el
contenido
los
convoca,
claramente
se
observa
el
placer
por
seguir
las
historias.
Sagas
como
“Harry
Potter”
o
“Crepúsculo”
son
claras
muestras
de
esta
afirmación.
Pero
para
mí
el
caso
más
emblemático
es
de
las
narrativas
de
los
videojuegos.
¿Qué
tienen
los
videojuegos
que
resultan
tan
convocantes
para
las
nuevas
generaciones?
El
investigador
inglés
David
Buckingham
(2008)
presenta
una
perspectiva
interesante:
“Los
medios
digitales
como
Internet
y
los
videojuegos
tienen
un
enorme
potencial
para
el
aprendizaje
pero
será
difícil
realizar
ese
potencial
si
seguimos
considerándolos
sólo
como
tecnologías
y
no
como
formas
de
cultura
y
comunicación.”2
La
particularidad
de
estas
formas
de
cultura
es
que
podemos
encontrar
en
ellas
la
convergencia
de:
• Un
escenario
atractivo
visualmente
• Una
narrativa
creativa
y
con
posibilidades
de
ser
enriquecida
por
el
lector
• Un
alto
grado
de
interactividad
en
comunidades
y
redes
¿Cómo
“competir”
con
esta
combinación
de
factores?
Evidentemente
la
mejor
opción
no
es
competir
sino
como
dice
el
refrán:
“-‐
Si
no
puedes
vencerlos,
únete
a
ellos”.
Veamos
algunos
casos:
• La
Biblioteca
Pública
de
Nueva
York
presenta
un
programa
similar
a
un
club
de
lectura
pero
con
videojuegos
2
Buckingham,
David
(2008)
Repensar
el
aprendizaje
en
la
era
de
la
cultura
digital.
Dossier
Revista
El
Monitor.
Septiembre
de
2008
.
Buenos
Aires,
Argentina.
4. • La
Biblioteca
Pública
de
Houston,
posee
más
de
una
docena
de
consolas
caseras
y
portátiles
para
que
sus
miembros
las
usen
(incluyendo
siete
PS3
y
cuatro
Xbox
360
conectadas
a
grandes
televisores).
Aseguran
que
las
personas
que
van
a
jugar
terminan
leyendo
libros
también.
•
la
Biblioteca
Pública
Johnson
de
New
Jersey
usa
los
videojuegos
para
crear
espacios
seguros
para
los
adolescentes,
aunque
con
algunas
reglas,
como
que
ningún
juego
calificado
por
encima
de
M
(Mature)
por
la
ESRB
es
permitido.
Lo
que
vemos
aquí
es
la
estrategia
de
“tender
puentes”:
la
posibilidad
de
utilizar
las
narrativas
que
convocan
a
niños
y
jóvenes
como
puertas
de
acceso
a
otras
lecturas
ampliando
las
posibilidades
de
promoción.
Es
lo
que
Henry
Jenkins3
(2006)
llama
la
“cultura
de
la
convergencia”:
contenidos
que
se
construyen
y
circulan
a
través
de
múltiples
plataformas
y
medios
que
operan
juntas.
¿Cuáles
serían
otros
“puentes”
posibles?
Un
ejemplo
es
el
caso
que
desarrollamos
con
Ediciones
Iamiqué
de
Argentina,
una
editorial
especializada
en
libros
para
niños.
Allí
nos
propusimos
crear
una
comunidad
virtual
de
aprendizaje
destinada
a
los
niños
basada
en
las
obras
de
la
editorial.
Para
ello
diseñamos
una
plataforma
interactiva,
en
donde
partiendo
de
las
historias
y
temas
que
aborda
cada
colección
se
propongan
juegos
interactivos,
foros,
trivias
y
otras
estrategias
que
para
los
niños
implican
ir
desde
la
computadora
o
tableta
a
los
libros
de
manera
permanentemente.
Como
parte
del
proyecto
comenzó
a
insertarse
en
las
obras
impresas
códigos
QR
que
facilitan
la
interacción.
En
paralelo
se
creó
un
espacio
para
que
los
maestros
de
las
escuelas
pudieran
desarrollar
propuestas
didácticas
con
uso
de
tecnología,
sobre
la
base
de
los
libros
de
la
editorial.
Esta
experiencia
recién
está
en
fase
Beta,
atravesando
sus
primeras
etapas
de
prueba.
Existen
muchas
iniciativas
en
esta
línea
de
desarrollo,
que
comienzan
a
explorar
las
ventajas
potenciales
que
ofrece
la
interacción
con
entornos
diferentes
al
libro
“clásico”.
El
concepto
de
“texto
enriquecido”
ha
marcado
un
hito
en
este
sentido,
facilitando
la
interactividad
de
plataformas.
Su
antecedente
ha
sido
sin
duda
el
hipertexto,
ícono
de
la
era
2.0.
Un
punto
aparte
merece
el
tema
del
impacto
visual
en
las
obras.
La
imagen
en
los
textos
destinados
a
niños
siempre
ha
ocupado
un
lugar
de
centralidad,
pero
hoy
ese
atractivo
se
extiende
también
hacia
los
jóvenes,
cuya
cultura
audiovisual
es
el
patrimonio
que
los
distingue.
Pensar
hoy
un
libro
para
niños
y
jóvenes
es
sin
duda
vincularlo
con
una
cultura
multimedia.
Otro
buen
ejemplo
en
esta
línea
es
el
del
escritor
y
cantante
Luis
Pescetti4,
autor
de
la
saga
de
“Natacha”
(con
su
inolvidable
“Chat,
Natacha,
Chat”),
que
ha
desarrollado
su
propio
sitio
y
blog
con
propuestas
3
Jenkins,
Henry
(2008)
La
cultura
de
la
convergencia
de
los
medios
de
comunicación.
Ed.
Paidós.
España.
4
Sitio
oficial
Luis
Pescetti:
http://www.luispescetti.com/
5. interactivas
asentadas
en
un
activo
intercambio
permanente
con
su
comunidad
de
seguidores.
En
estos
casos
se
intenta
capitalizar
el
potencial
de
las
redes
sociales
y
el
desarrollo
de
comunidades
de
práctica
(Wenger,
2008)
características
hoy
de
las
interacciones
en
la
era
digital.
Para
finalizar,
la
posibilidad
de
pensar
en
convergencias
nos
amplía
la
mirada:
hablamos
de
innovar
si
se
pretende
convocar
el
interés
de
las
nuevas
generaciones.
No
basta
con
adornar
los
textos
con
dispositivos
tecnológicos
de
punta:
son
los
autores
y
editores
quienes
enfrentarán
el
desafío
de
pensar
sobre
la
conjunción
entre
estos
nuevos
contenidos,
formatos
y
entornos
propios
de
esta
era
de
las
pantallas,
concebidos
integralmente
desde
la
concepción
original
de
cada
obra.
Hay
un
interesante
camino
recorrido,
solo
se
trata
de
lograr
una
sinergia
entre
los
elementos
de
esta
compleja
relación
para
ir
un
poco
más
allá.
Bibliografía
Tenewicki,
Inés
(2003)
Entrevista
a
Graciela
Montes.
Revista
El
Monitor
Nro
8.
Buenos
Aires,
Argentina.
http://www.me.gov.ar/monitor/nro8/entrevista.htm
Buckingham,
David
(2008)
Repensar
el
aprendizaje
en
la
era
de
la
cultura
digital.
Dossier
Revista
El
Monitor.
Septiembre
de
2008
.
Buenos
Aires,
Argentina.
Ferreiro,
Emilia
(2000)
Leer
y
escribir
en
un
mundo
cambiante.
Ponencia
presentada
en
las
Sesiones
Plenarias
del
26
Congreso
de
la
Unión
Internacional
de
Editores.
CINVESTAV-‐México
Consultado
en
2013
en
http://www.atencapital.org.ar/sites/default/files/Leeryescribirenunmundocambi
ante.pdf
Ferreiro,
Emilia
(2006)
Pasado
y
futuro
del
verbo
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Antología
del
Primer
Taller
de
Actualización
sobre
los
programas
de
estudio
2006.
SEP.
México.
Consultado
en
2013
en
http://www.uam.mx/cdi/convenios/e_sep160008.pdf
Jenkins,
Henry
(2008)
La
cultura
de
la
convergencia
de
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medios
de
comunicación.
Ed.
Paidós.
España.
Kozak,
Débora
(comp.)
(2010)Escuela
y
TIC.
Los
caminos
de
la
Innovación.
Lugar
Editorial.
Buenos
Aires.