1. Aprendizajes y Desafíos en la
Intervención con Adolescentes vulnerados
en sus derechos en la provincia de Linares
PROGRAMA DE PREVENCIÓN FOCALIZADA
FUNDACIÓN PAULA JARAQUEMADA
08 de Octubre del 2015
2. ¿EN QUE CONSISTE NUESTRO TRABAJO CON LA
POBLACIÓN ADOLESCENTE?
En relación a las Etapas de Intervención se reconocen tres
grandes momentos:
DIAGNÓSTICO
(2 Meses y Medio)
- Plan de Intervención
Inicial.
-Aplicación de Pauta de
Autoobservación.
-Aplicación de
Diagnóstico de Recursos
Personales.
PROCESO
-Co-construcción de un
PII individualizado.
Abordaje desde:
- Terapia Psicológica
Individual y Familiar.
- Intervención
Psicosocial.
-Coordinación en Red.
- Talleres para padres y
adolescentes.
SEGUIMIENTO Y
CIERRE
- Consta de 2 meses, se
busca monitorear la
situación familiar y la
sustentabilidad de los
cambios.
- Al finalizar el Proceso
Interventivo los
adolecentes y su grupo
familiar realizan
evaluación de éste y
confeccionan su “Caja de
Recursos Familiares”.
3. TERAPIA PS.
INDIVIDUAL
• Enfocada en fortalecimiento de recursos personales. A partir del
diagnóstico de recursos y de la pauta de autobservación, se
implementan intervenciones atingentes a las características de cada
joven, así como a su problemática.
TERAPIA PS.
FAMILIAR
• Se trabaja con la familia y/o adultos significativos, en conjunto con el
adolescente, incorporando elementos del enfoque sistémico familiar. Se enfoca
en generar un espacio de comunicación y escucha activa, que promueva la
adecuada vinculación entre los miembros de la familia, así como la sensibilidad
parental y la empatía.
rabaja con
INTERVENCIÓN
PSICOSOCIAL
• Se realizan intervenciones psicosociales a nivel individual y familiar, trabajando
desde el enfoque contextual relacional y socioeducativo, trabajando
especialmente en temáticas asociadas a la crianza, ejercicio de la autoridad,
normas y límites.
¿EN QUE CONSISTE NUESTRO TRABAJO CON LA
POBLACIÓN ADOLESCENTE?
4. COORDINACIÓN
EN RED
•Salud y Educación principalmente. Se desarrolla un trabajo coordinado con los actores
locales relevantes, propiciando el óptimo uso de los recursos por parte del adolescente y su
familia. Se identifica (en conjunto con el adolescente y su grupo familiar) con un co-garante
de derecho Institucional y familiar, con quien se trabaja, mediante talleres de sensibilización
y reconocimiento, además de sesiones orientadas al fortalecimiento de recursos, esperando
que pueda participar activamente en la sustentabilidad de los cambios presentados durante
la intervención, constituyéndose como un apoyo estable para el adolescente y su familia.
TALLERES
PARA
PADRES
• Orientados a abordar temáticas relevantes para el adecuado ejercicio de la
crianza y la parentalidad, enfocadas en el fortalecimiento de competencias
parentales, tendientes a la restitución de los derechos vulnerados.
TALLERES
PARA
ADOLECENTES
• se realizan talleres enfocados al fortalecimiento de recursos individuales, que les
permitan un mejor desenvolvimiento en la esfera familiar, escolar y social. Así
como talleres enfocados en problemáticas especificas, tales como género y
violencia en el pololeo, prevención del consumo de alcohol y drogas, sexualidad
y afectividad, entre otras.
¿EN QUE CONSISTE NUESTRO TRABAJO CON LA
POBLACIÓN ADOLESCENTE?
5. PRÁCTICAS POSITIVAS QUE HAN FAVORECIDO EL
TRABAJO CON ADOLESCENTES
• Principalmente existe una premisa básica que plantea que nuestras
intervenciones deben tener como pilar fundamental una adecuada alianza
terapéutica (vínculo terapéutico positivo, acuerdo en las metas y objetivos y
acuerdo en las tareas) con el adolescente y su familia.
• Redefinir la conducta del adolescente visualizada como problemática para los
padres, enfocándose en las características propias del ciclo evolutivo. Esto
implica normalizar algunas de sus conductas, especialmente las que tienen una
connotación negativa para los padres y diferenciarlas de las conductas de
riesgo o desadaptativas asociadas a dinámicas disfuncionales.
• Hacer partícipe a los integrantes del grupo familiar de todas las etapas del
proceso de intervención, desde la co-construcción del plan de intervención,
hasta la evaluación del proceso.
• Brindar espacio a cada uno para que sean escuchados y atendidos. Fomentar la
vinculación y propiciar un contacto cálido y humano, evitando los juicios y
prejuicios que puedan generar en los y las adolescente una actitud negativa o
distante.
• Tener una comprensión teórica clara respecto a la situación del adolescente y la
familia y desde ahí generar un PII que incorpore elementos centrales del ciclo
evolutivo, así como de la problemática específica que presenta la familia,
incorporando elementos del enfoque contextual relacional.
6. PRÁCTICAS POSITIVAS QUE HAN FAVORECIDO EL
TRABAJO CON ADOLESCENTES
• Entender que para el adolescente es central la integración e incorporación en su grupo de
pares, la valoración personal y autoimagen positiva, la búsqueda de independencia, la
necesidad de seguridad y contención.
• Comprender que como interventores, debemos promover la autonomía e independencia,
para lo cual es esencial acompañar y guiar a las familias de manera que puedan proveer al
adolescente un contexto que promueva el sano desarrollo.
• Considerar que para los padres es una etapa compleja, en tanto el adolescente comienza,
entre otras cosas, a cuestionar lo que antes validaba, a diferenciarse de su núcleo familiar y
buscar asociarse con su grupo de pares, buscando su validación; entendemos entonces que
esto implica para los padres mirar su propia adolescencia y enfrentarse tal vez con procesos
no resueltos en sus propias familias. Impone un desafío en tanto va más allá de la
psicoeducación, ya que supone la puesta en práctica de estrategias que impliquen cambios
no sólo en su modelo representacional, sino que en las pautas interaccionales.
• Adoptar una postura flexible frente al proceso, entendiendo que una metodología
destinada a trabajar con personas que están viviendo un proceso transformador en sus
vidas, que en este transcurrir transitarán por momentos anímicamente complejos y
variados, no puede ser otra cosa que flexible, lo que implica que la intervención debe ser lo
suficientemente dúctil como para responder a las distintas necesidades (explicitas y
latentes) de los adolescentes que forman parte de nuestro Programa.
7. • En cuanto al ámbito grupal se realiza una diversidad de talleres con temáticas
atingentes a la edad evolutiva, siendo uno de los temas de mayor importancia
“Proyecto de vida”: se realiza la entrega de información y se vincula a los
adolescentes con las redes, a través del contacto directo (visitas a cárcel-
gendarmería, escuela de artillería, universidades, centro de formación técnica,
entre otros) siendo esta actividad acogida favorablemente por la población de
adolescentes que se atiende en la actualidad.
PRÁCTICAS POSITIVAS QUE HAN FAVORECIDO EL
TRABAJO CON ADOLESCENTES
8. ¿CUÁLES SON LOS DESAFÍOS PARA MEJORAR LA INTERVENCIÓN
CON ADOLESCENTES VULNERADOS EN SUS DERECHOS?
En base a nuestra experiencia, es posible visualizar
problemáticas comunes a los adolescentes atendidos, las
cuales se relacionan principalmente con historias vitales
marcadas por vulneraciones de diversa complejidad, asociada
principalmente a nivel familiar.
Lo anterior implica que los adolescentes traigan consigo una
alteración en la forma de vincularse y carencia de figuras
significativas con quien vincularse, apreciándose sentimientos
de vacío, incomprensión y soledad; frente a esto, tienden a
desarrollar conductas de riesgo, (consumo de alcohol y/o
drogas, pre deserción o deserción escolar, promiscuidad sexual,
conductas de autoagresión); como una forma de refugiarse, ser
reconocidos y sentirse integrados se asocian a grupos de pares
con características similares, reforzando de esta manera su
modelo operante interno.
9. • Mantenerse en constante revisión y actualización respecto a esta etapa evolutiva,
desde distintas miradas, de forma de contar con una comprehensión integradora que
permita incluir los fenómenos relevantes, así como la evolución y cambios sociales y
seguir incorporando como equipo de trabajo, nuevas prácticas tendientes a fortalecer la
intervención centrada en fortalecer los vínculos del adolescente con su entorno familiar,
escolar y social.
• Sensibilizar a la comunidad respecto a la importancia de generar instancias concretas
que promuevan la integración de los adolescentes y que les permita sentirse
reconocidos y valorados; es necesario generar dichos espacios que propicien el
encuentro de jóvenes, utilizando la expresión verbal y emocional respecto a temáticas
de interés.
• Mantener una postura flexible frente al trabajo con los adolescentes y sus familias,
donde se incorpore no solo el fortalecimiento de recursos, sino también elementos que
son vivenciados como relevantes para el/la joven y sus familias.
• Seguir proveyendo de manera permanente un contexto de contención, apoyo y
valoración, que le permita al adolescente contar con una experiencia positiva, de buen
trato y que pueda resultar eventualmente reparadora.
¿CUÁLES SON LOS DESAFÍOS PARA MEJORAR LA INTERVENCIÓN
CON ADOLESCENTES VULNERADOS EN SUS DERECHOS?
10. • Continuar estableciendo redes que puedan aportar al proyecto de vida de
los adolescentes.
• Fomentar la motivación a través de la creación de talleres que sean
atractivos y novedosos para los y las adolescentes.
• Por último, mantener el contacto con redes vinculadas al adolecente y su
grupo familiar, conociendo los distintos contextos en lo que se
desenvuelven (familiar-escolar-salud-religioso-entre otros), con el objetivo
de triangular información respecto al caso, posibilitando aunar criterios de
respecto a la intervención, en pos de su desarrollo y bienestar.
¿CUÁLES SON LOS DESAFÍOS PARA MEJORAR LA INTERVENCIÓN
CON ADOLESCENTES VULNERADOS EN SUS DERECHOS?