1. Contaré una historia de amor hecha realidad. El 12 de diciembre de 2009 fuimos a la misión en el municipio de San Lucas, Madriz. Ingresamos a otra dimensión de vida donde existe mucha gente llena de fe y donde cada comunidad preparaba el nacimiento del niño Jesús. Con el mensaje del evangelio y con el ejemplo de San Antonio María Claret, proclamamos el reino de Dios, que es para toda persona que se siente llamada a transformar nuestra realidad en paz y gozo, el verdadero camino. La gente campesina está siguiendo a Jesús, anhelando la caridad de los buenos cristianos. Los sencillos viven el evangelio como supervivientes.Nosotros, en Jesús, somos el agua que revive la fe de la gente. Todos nos recibían con alegría y llenos de amor. Nosotros, como los tres magos de oriente, montados en los caballos y subiendo las montañas rocosas, llegábamos en busca de los apreciables valores que nos motivan a reflexionar nuestra vivencia con Jesús. Nosotros hablamos sobre la fe y el reino de Dios y ellos nos muestran la caridad, el servicio hacia el prójimo. Nuestra misión es caminar con la gente y orientar su proceso de encuentro con Jesús, debido a que ellos ya practican, del evangelio, lo fundamental: servicio, caridad, amor y fe.Esta experiencia, hecha realidad, nos invita a caminar con el pueblo de Dios que está siendo excluido por unos poderosos. <br />La vida misionera no es simplemente estar con la gente, ni mucho menos buscar privilegios, sino seguir el ejemplo de Jesús, quien vivió con la gente oprimida, esclavizado por los reyes de aquel tiempo. José Antonio Ichich Cac El retoño de la cultura MayaFormando ClaretianoMisión es evocación de sacrificio y transformación espiritual, evocación de encuentro con el Jesús de los marginados, de los excluidos y de todo el pueblo sediento de la palabra de Dios. Misión, para mí es: “clara conciencia profética, conciencia que anuncia y denuncia la injusticia de los hombres”. Esa conciencia parte de una fórmula cristiana global: sentirse seducido, llamado y enviado por Dios. “Señor, me has seducido y yo me he dejado seducir; me has agarrado y has sido más fuerte que yo” (Cf. Jer. 20, 7) No es el hombre quien busca a Dios o se fija de antemano una vocación misionera. Es Dios quien sale al encuentro del hombre señalándole el camino. La experiencia de Dios, ese Dios que seduce, que llama y que envía es esencial, porque no se trata de una experiencia teórica, sino vivencial. Vivencia que año con año renovamos en las distintas zonas misioneras de nuestra provincia, yo, en La Masica, Honduras. <br />Para relacionarnos con el Dios viviente, compartimos la alegría de ser pueblo con el pueblo, y al sumergirnos en la realidad de las comunidades eclesiales, somos otro hermano más, otro miembro más que se añade al cuerpo místico comunitario, otro más que celebra la palabra de vida, otro más que canta y camina, llevando a Cristo en su corazón. David Flores EspinozaFormando ClaretianoTodo ser humano, sin importar su credo o cultura, ha experimentado en su vida, voluntaria o necesariamente, ayuno, penitencia, oración y limosna. Sin embargo, ¿cuál es el significado de cada una de estas acciones en la Cuaresma; somos conscientes de que las realizamos?El ayuno es privarse durante algún lapso de tiempo de tomar alimento sólido. Por otro lado, tenemos formas más cómodas de vivirlo. Sin embargo, el sentido del ayuno hoy debería estar en el gesto de denuncia contra el despilfarro, la opulencia... y la solidaridad material de lo privado, con los hermanos necesitados.La penitencia normalmente es vista como el sacramento de la reconciliación, sin menospreciar su importancia. - 4 -<br />Pero ¿por qué no verla como un medio para unirnos en la paz y la justicia? Muchos seres humanos son testimonio vivo de compromiso con los empobrecidos; ¿por qué no ver la penitencia como una entrega total de la vida?: asumir, como Jesús y muchos humanos, la experiencia de la cruz de cada día. La limosna, lamentablemente, se limita a dar sobras, monetarias o alimenticias, insignificantes. El verdadero sentido de la limosna es compartir con los hermanos necesitados, pero no sólo con dádivas materiales , sino darles amor, comida, educación y acompañarles con proyectos sociales. La oración va más allá de prácticas devocionales como los viacrucis y las novenas. La oración debe ser escucha, asimilación y contemplación de la Palabra y de los acontecimientos de la historia para descubrir cuál es la voluntad del Señor en nuestras vidas. Además, debe llevarnos a un compromiso con la comunidad y con nosotros mismos. Para concluir agrego que estas cuatro prácticas son el camino para alcanzar una verdadera conversión de mente y corazón, sobre todo en este tiempo de Cuaresma: un cambio de mentalidad y sentimiento, y estas, junto con el sacramento de la reconciliación, nos ofrecen un momento privilegiado de revisión y planteamiento de compromisos serios a nivel personal, familiar, pastoral, profesional y otros. Recuerda: la puerta del cambio está abierta. Carlos Gustavo MoreiraFormando Claretiano <br />Dar un sí a Dios, hoy en día, no es nada fácil debido a que en nuestro mundo impera una cultura de muerte, en la cual vivimos inmersos y nadie se salva de sus repercusiones. Hablar de política, de partidos de fútbol… son temas sobre los que fácilmente dialogamos, pero cuando se trata de mencionar a Dios, todo se vuelve aburrido. Es por eso que, dar un sí, en medio de tanta pobreza, asesinatos, robos, narcotráfico, secuestros… se torna un tanto complicado pero necesario. Dios cuando nos pide un sí, en principio, es un sí a la vida. Dios nos creó a su imagen y semejanza, por lo que desde nuestro nacimiento somos llamados a un diálogo con Él. Nuestra tarea como cristianos es trasmitir ese amor que Dios nos regala. Nos cuesta descubrir a ese Ser Supremo que ha creado las montañas y el sol; el viento y las hormigas; las nubes y los maizales; el amor y la fidelidad; ese Señor que nos acompaña a lo largo de nuestras vidas. Siempre queremos ver grandes milagros, que se nos aparezca la Virgen y nos diga que hacer, sin embargo, no nos admiramos de lo ordinario, de una puesta del sol, del canto del gallo, de los llantos de un niño; somos incapaces de descubrir a Dios amor, que nos habla y nos llama.Sólo cuando seamos capaces de reconocer a este Dios, estaremos en todas las condiciones de poder decirle Sí. La invitación es descubrir a Dios en nuestras vidas, que nos atrevamos a darle un sí y a partir de eso poder descubrir nuestra vocación y responder a ese llamado que a diario nos hace el Señor. <br />Nuestra felicidad la encontraremos en la medida en que nos dispongamos a descubrir lo que Dios quiere para nuestra vida. ¡¡¡Ánimo!!! La vida es dura pero nadie dijo que es imposible.Carlos Josué PolancoPastoral Vocacional - 7 -<br />¿Te interesa? ¡Llámanos!<br />En relación con lo que has leído y las pistas que te damos, encuentra y marca las palabras en la sopa de letras.¡¡¡ Revisemos lo leído jugando!!!<br />1) A ejemplo de quién proclamamos el evangelio de Dios. (Santo)2) Es una de las actitudes que se practica en el tiempo de Cuaresma.3) quot;
Nosotros hablamos de la fe y el reino de Dios y ellos nos muestran la.quot;
4) Es una quot;
clara conciencia profética, conciencia que anuncia y denuncia la injusticia de los hombresquot;
5) Tiempo litúrgico que nos pide quot;
Un cambio de mentalidad y sentimientoquot;
.6) quot;
Somos incapaces de descubrir a.quot;
7) Hay que compartir quot;
con los hermanos necesitados, pero no sólo con dádivas materiales, sino darles.quot;
8) ¿Qué experiencia, como Jesús, debemos vivir cada día? <br />