El documento describe cómo los grupos pequeños son clave para el discipulado, ya que permiten una mayor pertenencia, compañerismo y oración personal, mientras que en las grandes celebraciones es más difícil esto. Sin embargo, los grupos pequeños son difíciles de promover en las parroquias católicas españolas, que no suelen estar estructuradas de forma celular. Para una nueva evangelización efectiva, las parroquias deben aprender a organizarse en células pequeñas donde los conversos recientes puedan encontrar discipulado y camino