1. INTRODUCCION
Muchos (entre los que me incluyo), habremos disfrutado de largas tardes o noches jugando al Age of
Empires, reviviendo las apasionantes batallas de antiguas civilizaciones. Pues, bien, esta serie de artículos de
repaso sobre mis apuntes de Historia Antigua, tiene, no sólo la finalidad de conocer los hechos acaecidos,
sino también esa finalidad lúdica que necesita nuestra imaginación, para sentirnos por unos momentos,
protagonistas de la Historia.
Con este fin, he generado escenarios para jugar y hacer más entretenido y distendido nuestro aprendizaje.
Aunque el juego el bastante limitado para crear fielmente el desarrollo de las batallas, he intentado recrear
lo mejor posible el entorno geográfico de los acontecimientos, y la consecución de la victoria se basa
simplemente en la conquista del territorio o eliminar al contrincante (aunque en muchos casos, nunca fue
así, como es evidente). Para poder jugar es obvio que se necesita tener instalado el Age of Empires (con o
sin su extensión Rise of Rome, ya que para la época romana, me reservo el juego Imperium).
Los escenarios estarán comprimidos en un ZIP y colgados en mi carpeta pública de dropbox:
https://www.dropbox.com/home/Public desde donde se podrá descargar fácilmente, y sólo hay que
descomprimir el escenario en la carpeta “Scenarios” del Age of Empires. Desde ahí, cada uno puede
modificar la dificultad de juego y la velocidad entrando a “Jugar un Escenario”. En el momento señalado,
habrá una reseña en cada artículo con el nombre de archivo comprimido correspondiente. Puede que
existan artículos sin escenario para jugar, ya que también existieron periodos de moderada estabilidad,
pero, que por supuesto hay que conocer. En el artículo de hoy conoceremos el Imperio Nuevo de Egipto.
IMPERIO NUEVO DE EGIPTO – DINASTÍAS XVIII-XX
Comprende las dinastías XVIII-XX (1570-1070 a.C.), siendo un momento de esplendor, tras la expulsión de
los hicsos, en la cual se restablecen las relaciones internacionales y comerciales, y se inicia una época de
conquistas al exterior. Se restauró el Alto y Bajo Egipto, instalándose la capital en Tebas. Fue una época de
construcción de grandes monumentos y donde la mujer tuvo importancia y protagonismo en los problemas
sucesorios, ya que por primera vez, una mujer (HATSHEPSUT), fue nombrada faraón con los títulos
masculinos, y Nefertiti es representada en escenas familiares en un plano de igualdad. También quedaron
bajo el protectorado egipcio, las ciudades cananeas.
Dinastía XVIII - sin cambios con la relación anterior, pues el primer faraón AMOSIS fue hermano de
KAMOSE, último faraón de la Dinastía XVII. La unificación de Egipto llegó hasta el sur, y durante la
dominación hicsa se formó un principado indígena en Tebas. No se sabe si estos príncipes tebanos, eran
vasallos de los hicsos, pero convivieron con ellos con mutuas ventajas. El relato de la batalla de KAMOSE,
describe una gran batalla y un regreso triunfal a Tebas, aunque los hicsos fueron derrotados, continuaron al
norte del país, sin poder alguno.
Dinastía XVIII – su primer rey fue AMOSIS I (1570-1546 a.C.), el cual expulso definitivamente a los hicsos del
poder. El avance egipcio llego hasta el sur de Palestina, anexionando la zona ocupada por los hicsos.
Problemas con Nubia y expediciones de castigo. Contactos comerciales con el Egeo. Le sucedió, AMENOFIS I
(1551-1524 a.C.) reorganizando el País.
Thutmósidas – Política Expansionista – le sucedió THUTMOSIS I (1524-1518 a.C.), siendo el primer gran
conquistador entre los faraones, llevando sus conquistas hasta Palestina y el Éufrates. Realizo dos campañas a
Nubia derrotando el reino indígena de Kerma y construyo la fortaleza de Tombos. Inicio la costumbre de la
inhumación del rey en hipogeos excavados en las laderas de las colinas frente a Tebas (rito que perdurará
durante todo el Reino Nuevo en el Valle de los Reyes). Le sucedió, THUTMOSIS II (1518-1504 a.C.), el cual
realizo campañas contra una sublevación en Nubia, y en Siria. Tomo por esposa a Hatshepsut, su
2. hermanastra y única hija de Thutmosis I y por tanto con derechos al trono. A la muerte de THUTMOSIS II,
esta reina renegó al joven Thutmosis III (1504-1450 a.C.) a la sombra y reino como rey durante 22 años.
HATSHETUP (1498-1483 a.C.) tomo al gobernar la titulatura real vistiéndose como un hombre, adoptando
el protocolo completo de los reyes de Egipto. Se apoyo para gobernar con fieles funcionarios e interrumpió
la política expansionista. Construyo templos y restauro los templos destruidos por los hicsos. Realizo
expediciones al Punt, donde los egipcios formados militarmente, la recibieron con amabilidad. Se iba en
busca de incienso, pieles de pantera y leopardo, ébano, marfil y ganado bovino, a cambio de manufacturas
metálicas (hachas, adornos y telas). Tuvo un reinado pacifico, dedicado a la tareas administrativas, y se
desconoce como finalizó su reinado, aunque se pensó que habría perecido en una sublevación de los
partidarios de Thutmosis III
THUTMOSIS III (1483-1453 a.C.) asumió su papel de rey llevando conquistas y campañas hacia Asia, durante
sus 21 primeros años. Los mitannios se habían fortalecido y el objetivo de Egipto era el Éufrates. Las
campañas se reducían a un duelo Mitanni-Egipto, con victorias egipcias. Recibía tributos de las provincias
asiáticas y regalos de Babilonia, y se conocen relaciones con el Egeo. Enorme actividad constructora
Templos.
El scenario de AoE correspondiente para descargar, se llama: 14_Thutmosis_III_1464ac.zip
Le sucedió su hijo, AMENOFIS II (1453-1419 a.C.) continuando su política y abatiendo a príncipes sirios
sublevados. Tras su muerte le sucedió, THUTMOSIS IV (1419-1386 a.C.) que se caso con una princesa
mitannia, formando una alianza egipcio-mitannia contra la amenaza hitita.
Le sucedió, AMENOFIS III (1386-1349 a.C.) el cual se enfrentó al rey hitita Subiluliuma, sin éxito, y construyo
el Templo de Luxor en Tebas. Fue el periodo más brillante de Egipto, asegurada la paz por las campañas
anteriores y donde el país gozaba de prosperidad. Las relaciones con el Oriente Próximo se podían seguir a
través de la correspondencia de El-Amarna en lengua acadia (lengua diplomática de la época). Evoluciona la
sensibilidad social y religiosa, destacando la importancia que adquiere el dios Atón.
Le sucedió, AMENOFIS IV (AKHENATÓN) – (1350-1334 a.C.) conocido por el cambio religioso,
sustituyendo la primacía del culto al dios Amón por el de Atón, dios solar (manteniendo el culto de los
dioses tradicionales). No se puede hablar de monoteísmo, pero sí de panteísmo, aunque en realidad es un
henoteísmo (con un dios más importante entre los demás).
La reforma de El-Amarna fue una decisión personal de un hombre, que trato de imponerla sin preocuparse
de nada, ni de nadie, produciendo grandes conmociones. El dios Atón era omnipresente y no necesitaba
representarse en estatuas y se le figuraba como el sol. Sus santuarios eran abiertos para que el dios bajara en
persona y bañase a los fieles con sus rayos. Se persiguió a Hapy, dios del Nilo (divinidad secundaria) y a
Osiris, aunque es de suponer que al rey le asistieran grupos minoritarios o élites intelectuales, capaces de
entender sus elucubraciones. La tradición histórica no lo considero un rey legítimo y la religión posterior se
verá afectada por el culto atoniano impuesto, y a los dioses más cerca de los hombres.
El-Amarna fue construida deprisa y en su mayor parte en adobes, con suelos y paredes en estuco, y pinturas
de tonos azules y rojos. Las pinturas eran al fresco y los relieves representaban la familia real, mostrando
escenas domésticas.
En política exterior se pensó que era el responsable de la caída del imperio egipcio en Asia, aunque no
faltaron las demostraciones militares en Siria y Nubia. Desplegó una hábil diplomacia en época crucial con el
declive de Mitanni y el auge de Hatti. La situación en Siria y Palestina estaba cambiando, y los pueblos
cananeos seguían creando un clima de inseguridad.
3. Le sucedió, TUTANKHAMON (1334 -
1325 a.C.) famoso por el
descubrimiento de su tumba intacta en
1922, el cual se caso con la princesa
Ankesenamón (hija de Akenatón y
Nefertiti).
Tras la muerte de este faraón, reinó su
esposa hasta que se caso con AY (1325-
1321 a.C.) siendo posiblemente el padre
de Nefertiti.
Le sucedió HOREMHEB (1321-1293
a.C.) que se caso con la hermana de
Nefertiti, MUTNEDJMET, la cual a la
muerte de su marido, reino sola.
Durante este periodo se suceden varias
reinas/faraón que no aparecen en las
listas reales.
EGIPTO EN EL 1334 a.C. TRAS EL REINADO DE AMENOFIS IV
Consecuencias de la Política Religiosa de AKHENATÓN – la sustitución del gran sacerdote de Amón por el
de Atón causó una revolución religiosa y político-social con desordenes y asesinatos entre fieles de Amón y
Atón. Se construyo un templo dedicado a Atón, cerca del de Amón en Tebas, donde las estatuas eran de un
estilo expresionista sorprendente, destacando las caras alargadas y mandíbulas excesivamente prolongadas.
Se abandono la capital de Tebas por El-Amarna.
Posibles fallos del Cisma Amarniense – es posible que se produjera un fanatismo de los adoradores de Atón y
su persecución contra Amón. El culto de Atón, no aceptaba en parte, tradiciones muy arraigadas en el
pueblo egipcio, y es innegable que el pueblo llano debió sufrir una convulsión muy compleja, al ver el
abandono de los antiguos dioses, por orden real. Debió afectar también el traslado de la capital de Tebas a
El-Amarna, ocasionando un desplazamiento de la actividad comercial al N. El clero de los templos de Karnak
y Luxor se vio oficialmente perseguido y se desató la cólera del rey con violencia incontenida contra Amón.
Posibles causas del cambio de culto Amón a Atón – habían nuevas corrientes intelectuales que producían
nuevas construcciones y una nueva forma de vida en la corte del faraón, con la llegada de artistas,
intelectuales y un nuevo refinamiento de costumbres. Existían influencias extranjeras, sobre todo de Mitanni,
reflejado en numerosas princesas mitannias que formaban parte del harén real. Por el fanatismo del rey, se
originó un cambio político generado por el exceso de poder de los sacerdotes de Amón. AMENOFIS IV o
AKHENATÓN era pacifista, idealista y adorador de un dios universal incapaz de concentrarse en gobernar el
país.
Dinastía XIX – se inició con RAMSES I (1293-1291 a.C.) soberano procedente de Tenis (en el Delta),
posiblemente de una familia de advenedizos. Tuvo un reinado apacible, ya que su antecesor, Horemheb, dio
sus frutos en su lucha contra los hititas y una buena administración.
Le sucedió, SETI I (1291-1278 a.C.) monarca guerrero que realizó campañas en Siria, Fenicia y lucho en la
batalla de Kadesh contra los hititas.
4. Le sucedió, su hijo RAMSES II (1279-1212 a.C.) realizando grandes obras arquitectónicas en Abidos, Tebas y
Abu-Simbel, destacando el templo dedicado a él, y al de su mujer, Nefertari. Tras su muerte se produjo la
decadencia hitita y el declive de Egipto.
Enfrentamiento entre Egipto y Hatti – en Egipto, el debilitamiento de la dinastía XVIII y luchas internas,
habían permitido la consolidación del poder hitita en Siria, y la entrada en Egipto de elementos nómadas y
seminómadas. En tiempos de Amenofis III, los hititas habían tratado de unificar Anatolia y Siria,
enfrentándose a Mitanni a la que vencieron, sin tratar de enfrentarse a Egipto. Durante el reinado de
Amenofis IV (Akenatón), Hatti se fortaleció y se reanudaron los enfrentamientos con Ramses I (dinastía XIX),
hasta que Seti I tomo la fortaleza de Kadesh, que fue recuperada por los hititas poco después.
Hacia el 1287 a.C. murió el rey hitita Muwatalli, sucediéndole su hijo Mursil III, bajo la tutela de su tío
Hattusil, en un momento en que los hititas retrocedieron ante el empuje de Ramses II y Adad-Nirari de
Asiria. Subiendo al trono de Hatti, Hattusil III en circunstancias desconocidas, ofreció un tratado de paz a
Ramses II (Tratado de Kadesh, con copia hitita escrita en babilonio cuneiforme), y ofreció a su hija y princesa
como esposa, la cual se caso con Ramses II.
A Ramses II, le sucedió MINEPTAH (1213-1202 a.C.) haciendo frente a la sublevación y derrota de Canaán,
donde por primera vez se nombra el pueblo de Israel. Sus sucesores y últimos reyes se caracterizan por
gobernar en una época de continua decadencia y anarquía.
Dinastía XX – con SETNAKT (1185-1182 a.C.) de origen desconocido, acabo con la anarquía y expulsó a los
invasores extranjeros. La sucedió RAMSES III (1182-1151 a.C.) realizando reformas administrativas, sociales y
arquitectónicas, y recuperando tributos de Nubia y Asiria. Con dichos tributo preparo un ejército para hacer
frente a las revueltas, pero a su muerte, Egipto, volvió a caer en decadencia.
CAUSAS Y CONSECUENCIAS – el fin de este periodo viene dado en base a las intromisiones extranjeras, el
creciente poder de los sacerdotes de Amón, el déficit económico y la progresiva presencia de asiáticos en la
corte. En consecuencia, la anarquía se extendió probablemente motivada por elementos extranjeros de
origen asiático o cananeo.