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EN LAS MUCOPOLISACARIDOSIS
A González-Meneses López, A Barcia Ramírez, JL Díaz Rodríguez
González-Meneses López A, Barcia Ramírez A, Díaz Rodríguez JL. Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis.
Protoc diagn ter pediatr. 2010;1:24-36.
INTRODUCCIÓN El objetivo de este protocolo de actuación es
ayudar al diagnóstico, tratamiento y segui-
Las mucopolisacaridosis (MPS) son errores in- miento adecuado de estas enfermedades apo-
natos del metabolismo secundarios a defec- yándonos en las nuevas herramientas tera-
tos enzimáticos que producen un acúmulo li- péuticas, pero dentro de un enfoque multidis-
sosomal de diversos tipos de glucosamino- ciplinar y multisistémico de las mismas, ya
glucanos (GAG) provocando consecuente- que, de otro modo, no se puede dar una res-
mente síntomas progresivos en todos los ór- puesta integral a una enfermedad global.
ganos y sistemas. Son por tanto enfermeda-
des multisistémicas que requieren un enfo-
que multidisciplinar para su tratamiento y CLASIFICACIÓN
manejo adecuado. En los últimos años se han
producido avances muy importantes en el Las MPS podemos clasificarlas según la enzi-
tratamiento de estas enfermedades con la ma alterada y, dentro de cada tipo, en diversas
aparición de tratamientos enzimáticos susti- manifestaciones clínicas. En la siguiente tabla
tutivos, inhibidores de sustrato y mejoras en podemos ver la clasificación de estas enferme-
la supervivencia de los trasplantes de médula dades.
ósea. Además, en el horizonte cercano se es-
tán perfeccionando estos mismos tratamien-
tos ayudados con detecciones muy precoces CLÍNICA
en la prueba del talón, diagnósticos genéti-
cos preimplantatorios, fármacos capaces de Mucopolisacaridosis tipo I (OMIN 252800)
saltarse los codones de parada prematura, y La MPS I es la mucopolisacaridosis causada
otros que impiden que una enzima defectuo- por el déficit de la enzima a-1-iduronidasa, lo
sa, pero aún con capacidad residual de actua- que provoca un acúmulo heparán y dermatán
ción se degrade (fármacos chaperones). To- sulfato.
das estas novedades suponen una gran espe-
ranza para los afectados por estas enferme- Es una enfermedad autonómica recesiva, y el
dades y sus familias y un reto para los profe- gen responsable está localizado en el locus
sionales encargados del diagnóstico, trata- 4p16.3. Las mutaciones más frecuentemente
miento y seguimiento de los mismos. encontradas en estos pacientes son W402X y
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2. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
Q70X, que provocan un déficit total de activi- los 3 y 8 años. Esperanza de vida de entre 20
dad enzimática. La prevalencia varía según las y 30 años.
distintas áreas geográficas, de 1:111000 a
1:84000 nacidos vivos. En la MPS I las manifestaciones de la enferme-
dad son multisistémicas, progresivas y hetero-
Es una enfermedad progresiva y potencial- géneas, con distintos órganos involucrados
mente mortal. Muestra un espectro muy di- con diferente nivel de gravedad.
verso de síntomas que afectan a numerosos
órganos y aparatos. • Aspecto general:
Dependiendo del grado de déficit de actividad – Rasgos faciales toscos: nariz aplastada,
enzimática, podemos encontrar distintas ma- labios engrosados, macroglosia, altera-
nifestaciones clínicas, clasificándose según su ción en la forma de los dientes, orejas
gravedad en: de implantación baja, con lóbulos pro-
minentes.
a) Síndrome de Hurler: forma más grave de
la enfermedad, de progresión rápida. – Macrocefalia con frente prominente.
Diagnóstico antes de los 2 años de edad
y una esperanza de vida menor a 20 años – Hipertricosis de la cara y del cuerpo.
sin tratamiento. Pelo estropajoso.
b) Síndrome de Scheie: forma más atenuada – Engrosamiento de la piel.
de la enfermedad, de progresión más lenta.
Diagnóstico a partir de los 10 años de edad – Cuello corto.
con una esperanza de vida de 35 a 40 años.
• Manifestaciones del sistema nervioso cen-
c) Síndrome Hurler-Scheie: formas interme- tral (SNC) y sistema nervioso periférico
dias de la enfermedad. Diagnóstico entre (SNP):
TIPO EPÓNIMO ENZYMA DEFICIENTE GAG AFECTADO LOCUS CROMOSÓMICO
IH Hurler Dermatán y heparán
MPS I IS Scheie a-1-iduronidasa 4p16.3
sulfato
IH/S Hurler-Scheie
MPS II Hunter Iduronato sulfatase Dermatán y heparán sulfato Xq28
A Heparan N-sulfatas 17q25.3
B a-N-Acetila-glucosaminidasa 17q21
MPS III SanFilippo Heparan sulfato
C a-glucosaminida acetiltransferasa 8p11.1
D N-Acetilglucosamina 6-sulfatasa 12q14
Galactosa Keratan sulfato, condroitin
MPS IV A 16q24.3
Morquio 6-sulfatasa 6-sulfato
B a-Galactosidasa Keratan sulfato 3p21.33
MPS VI Maroteaux-Lamy Arylsulfatasa B Dermatan sulfato 5q13-q14
Dermatan y heparan sulfato,
MPS VII Sly a-Glucuronidasa 7q21.11
condroitin 4 y 6 sulfato
MPS IX a-Hialuronidasa Ác. Hialurónico 3p21.2 – p21.3
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3. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
– Trastornos del aprendizaje. • Manifestaciones del aparato respiratorio:
– Retraso mental. – Síndrome restrictivo y obstructivo.
– Hidrocefalia comunicante. – Disnea.
– Compresión de la médula espinal. – Infecciones de las vías respiratorias re-
currentes.
– Síndrome del túnel carpiano/mano en
garra. – Insuficiencia respiratoria.
• Manifestaciones oftalmológicas: – Hipertensión pulmonar, Cor pulmo-
nale.
– Opacidad corneal.
• Manifestaciones del aparato cardiovascu-
– Disminución de agudeza visual. lar:
– Ceguera. – Displasia valvular/insuficiencia aórtica
y mitral.
– Glaucoma.
– Obstrucción de las arterias coronarias.
– Fotosensibilidad.
– Arritmias.
• Manifestaciones otorrinolargológicas
(ORL): – Hipertrofia ventricular izquierda.
– Rinorrea. – Miocardiopatía/insuficiencia cardíaca.
– Otitis media e infecciones respiratorias • Manifestaciones del aparato digestivo:
recurrentes.
– Hepatosplenomegalia.
– Pérdida de audición.
– Hernia umbilical e inguinal recurrentes.
– Respiración ruidosa.
– Diarrea/estreñimiento.
– Obstrucción de las vías aéreas supe-
riores. • Manifestaciones osteoarticulares:
– Apnea/hipopnea durante el sueño. – Rigidez articular.
– Astenia y somnolencia diurna. – Contracturas articulares.
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4. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
– Disóstosis múltiple. cesivo ligado al cromosoma X. El gen de la I2S
se localiza en Xq28 y se han descrito más de
– Displasia de cadera. 300 mutaciones1. Aunque no cabría esperar el
padecimiento de la enfermedad en el sexo fe-
– Genu valgo. menino, hay descritos unos pocos casos de
síndrome de Hunter en niñas2.
– Cifosis lumbar.
Su incidencia está estimada en 1,3 casos por
– Baja estatura. cada 100.000 recién nacidos varones vivos3.
– Atrapamiento de los nervios. Es una enfermedad multiorgánica y multisis-
témica con una variabilidad clínica interindi-
– Mano en garra. vidual considerable entre formas severas y
formas más atenuadas (Tabla 2). En la actua-
– Limitación de la movilidad y de la capa- lidad se considera la existencia de un espec-
cidad de deambulación. tro clínico entre fenotipos graves y atenua-
dos, siendo la afectación del sistema nervio-
Mucopolisacaridosis tipo II o síndrome so central preponderante para clasificar a los
de Hunter (OMIM 309900). diferentes individuos4. Al nacimiento la apa-
Está causada por la deficiencia de la enzima li- riencia puede ser normal. Las características
sosomal, Iduronato 2 Sulfatasa (I2S). Esta enzi- faciales son muy similares a las de otras
ma es el primer paso en el metabolismo de los MPS, facies tosca, macrocefalia con frente
GAG, heparan sulfato y dermatan sulfato. El prominente, naríz ancha, orejas de implan-
fenotipo clínico va a estar caracterizado por el tación baja, labios gruesos y macroglosia
depósito de estos GAG en los diferentes teji- que puede protuir. Estos rasgos comienzan a
dos y órganos. ser evidentes entre los 18 y 24 meses de
edad en formas graves 3. En estos casos la
Es la única MPS con un patrón de herencia re- muerte ocurre en la primera o segunda déca-
Tabla 2. Manifestaciones de MPS I según severidad de la enfermedad.
Manifestación clínica Hurler Formas intermedias Scheie
Retraso mental +++++ -
Hidrocefalia comunicante +++ +/- -
Compresión de médula espinal +++ +++ ++
Pérdida de audición +++ ++ +/-
Opacidad corneal +++ +++ +++
Rigidez articular +++++ ++++ +++
Patología obstructiva de vías aéreas +++++ +++ ++
Patología cardíaca +++++ ++++ +++
Síndrome del túnel carpiano +++++ ++++ +++
Disóstosis múltiple +++++ +++ +/-
Hernia umbilical o inguinal ++++ +++ +++
Rasgos faciales toscos +++++ +++ +/-
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da de la vida, habitualmente a causa de en- (déficit de a-N-Acetilglucosamina 6-sulfatasa)
fermedad respiratoria obstructiva o fallo car- también va a ocurrir una alteración en el me-
díaco asociado al deterioro de las funciones tabolismo del keratan sulfato.
neurológicas. En las formas más atenuadas
los signos y síntomas clínicos aparecen más Su incidencia se estima en 1 de cada 70.000
tardíamente siendo la disfunción neurológi- recién nacidos vivos, considerándose la MPS
ca mínima. Estos pacientes tienen una inteli- más frecuente en Europa, siendo el subtipo
gencia normal y pueden sobrevivir hasta A, el más prevalente en gran parte del conti-
etapas tempranas de la edad adulta (algu- nente6,7,8. A pesar de esto, su diagnóstico es
nos individuos pueden tener una supervi- dificultoso porque sus rasgos físicos son di-
vencia hasta la quinta o sexta década de la ferentes al de otras MPS. También existe va-
vida). riabilidad fenotípica entre los distintos sub-
tipos, aunque la distinción entre los mismos
Mucopolisacaridosis tipo III o síndrome de suele ser difícil. Generalmente, el subtipo A
SanFilippo (OMIN MPS IIIA 252900, MPS IIIB suele ser el más grave con un inicio más
25920, MPS IIIC 252930, MPS IIID 252940) temprano y con mayor progresión sintomá-
Está causada por la deficiencia de varias enzi- tica. El resto de subtipos tienen mayor hete-
mas lisosomales encargadas de la degrada- rogeneidad en cuanto a la sintomatología.
ción del GAG, heparan sulfato. Dependiendo La clínica va a girar entorno a la grave afec-
del enzima deficitario van a clasificarse en tación del SNC. El inicio de la misma ocurre
4 subtipos (Tabla 1). En el caso del subtipo D entre los 2 y 6 años con un retraso en la ad-
Tabla 3. Manifestaciones clínicas de los pacientes con MPS tipo II (Síndrome de Hunter). Datos de pacientes
españoles registrados en Hunter Outcome Survey (HOS) Marzo 2008.
Manifestación clínica Pacientes Porcentaje (N total = 30)
Manos en “garra” 19 63%
Hipertrofia Amígdalar 24 80%
Otitis recurrentes 28 93%
Macroglosia 25 83%
Hernia (umbilical/inguinal) 25 83%
Rigidez articular 30 100%
Hepatomegalia 29 97%
Esplenomegalia 21 70%
Facies toscas 30 100%
Enfermedad valvular 17 57%
Soplo 12 40%
Cardiomiopatía 2 7%
Problemas cardiovasculares 21 70%
Problemas respiratorios 23 77%
Hidrocefalia 4 13%
Retraso cognitivo 11 37%
Hiperactividad 9 30%
Problemas neurológicos 26 87%
Síndrome del tunel del carpo 1 3%
Rigidez cadera 11 36%
Lesiones hipocromas en escápula (típicas de la enfermedad) 8 26%
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6. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
quisición de la deambulación y el lenguaje. tan sulfato, galactosa-6sulfatasa en el subti-
Es frecuente el inicio posterior a esta etapa po A y la galactosidasa en el subtipo B. Esta
de una gran hiperactividad que dificulta última enzima también se sitúa en el meta-
enormemente la convivencia. La hiperactivi- bolismo de los gangliósidos. Estas diferencias
dad, el hirsutismo y una leve hepatoesple- bioquímicas van a ser en muchos casos pri-
nomegalia (menos evidente que en las otras mordiales en el diagnóstico diferencial de
MPS) son muy características de este perio- ambos subtipos.
do aunque pueden faltar. Los rasgos faciales
no son tan claros como en las otras MPS pu- La incidencia, en conjunto, estimada es de 1 de
diendo tener una fascies normal o sólo leve- cada 263.000 recién nacidos vivos, siendo el
mente tosca, destacando lo poblado de las subtipo A el más frecuente8.
cejas. Los defectos en el sistema esquelético
son mínimos no viéndose alterada en gran Las manifestaciones clínicas van a girar en-
medida la talla final ni el balance articular. torno a la afectación esquelética tan impor-
La regresión neurológica ocurre entre los 6 y tante que se produce en la MPS IV y suelen
10 años acompañada de un deterioro rápido aparecer en ambos subtipos, considerando al
de las habilidades adquiridas y alteraciones subtipo A, el fenotipo más grave. Al naci-
conductuales importantes merman la cali- miento la mayoría de los pacientes suelen
dad de vida del paciente y de la familia. En pasar desapercibidos, pudiendo presentar
esta etapa de la enfermedad se va a produ- ocasionalmente, pie zambo o limitación a la
cir un empeoramiento de los episodios con- abducción de la cadera. Los primeros signos
vulsivos, alteraciones conductuales y del son evidentes al final de primer año de vida,
sueño. El lenguaje suele ser pobre, falto de desarrollando giba toracolumbar, claramente
articulación y contenido, con un curso regre- visible sentado. Suele ser el primer motivo de
sivo añadido. En la última etapa se produce consulta. En el segundo año se va producien-
un mayor deterioro físico por la falta de con- do el retraso estatural caracterizado por un
trol muscular, apareciendo problemas para tronco corto con respecto a la longitud de los
caminar o mantenerse sentados, llevándo- miembros. La rigideces articulares también
los a la postración en cama. En este período son importantes. Todos los pacientes con
la alimentación se precisa a través de sonda MPS IV van a presentar alteraciones denta-
nasogástrica y la aspiración de secreciones rias. La opacidad corneal es frecuente aun-
es importante. La supervivencia va a depen- que puede pasar desapercibida en muchos
der de la afectación neurológica, siendo es- casos. La hepatoesplenomegalia es poco fre-
timada entre la segunda y cuarta década de cuente en el síndrome de Morquio. El des-
la vida5. arrollo psicomotor es normal y se puede ver
dificultado por la existencia de sordera neu-
Mucopolisacaridosis tipo IV o síndrome de rosensorial o de conducción. La deambula-
Morquio. (OMIN MPS IVA 253000 y MPS IVB ción se va a ver dificultada por el genu valgo.
253010) En la primera infancia hay que vigilar los sig-
Está causada por la deficiencia de dos enzi- nos de compresión de canal medular (agota-
mas implicadas en el metabolismo del kera- miento rápido de la marcha o signos pirami-
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7. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
dales en extremidades inferiores). En la cuar- simple, aunque esta puede fallar en la MPS III.
ta o quinta década de la vida, las importantes Recientemente se ha desarrollado por los Pro-
deformidades torácicas producen dificulta- fesores Sanjurjo y Galdámiz Echevarría un sis-
des en la función pulmonar y cardiaca, redu- tema de detección de GAG en orina simple a la
ciendo la esperanza de vida. cabecera del paciente muy barato y fiable, que
puede usarse adecuadamente como test de
Mucopolisacaridosis tipo VI o síndrome screening en la consulta.
de Maroteaux-Lamy (OMIN 253200)
Se produce por la deficiencia de la enzima aril- Si se hallan en cantidades normales, podre-
sulfatasa B, responsable de la degradación del mos descartar en gran medida que se trate
dermatan sulfato. de una MPS, a excepción del síndrome de
Sanfilippo, en el que unos GAG en orina nor-
Su incidencia es menor que el de las anterio- males no descartan el cuadro, siendo precisa
res MPS (1 de cada 455.000 recién nacidos una determinación de GAG en orina de 24
vivos)8. horas.
Las características clínicas son similares a las Si los GAG en orina se hallan elevados, o existe
del síndrome de Hurler, aunque en la MPS VI, el una alta sospecha de síndrome de Sanfilipo a
desarrollo mental es normal. La variabilidad clí- pesar de unos niveles de GAG normales, habrá
nica es importante pudiendo encontrar dife- que continuar con el proceso diagnóstico para
rentes grados de severidad. Generalmente, en determinar qué tipo de MPS es la que padece
la primera infancia, va a desarrollarse las alte- el paciente, aunque según el tipo de GAG que
raciones en la curvatura vertebral, rigidez arti- se encuentre aumentado y la clínica, podamos
cular y hernias umbilical e inguinal. La hepa- sospechar de qué MPS se trata, como se verá
toesplenomegalia no es un signo constante. La más adelante en el algoritmo diagnóstico (Al-
opacidad progresiva, así como la atrofia óptica goritmo 1).
son especialmente frecuentes en esta MPS. El
retraso estatural desproporcionado es ya evi- Tras una determinación de GAG en orina com-
dente entre los 8 y 10 años. El acúmulo de GAG patible con MPS, se debe realizar la determi-
a nivel cardíaco va a producir una miocardiopa- nación de la actividad enzimática de aquella
tía hipertrófica y/o insuficiencia valvular, re- enzima que sospechamos causal de la enfer-
presentando la complicación más importante medad. Esta determinación se suele realizar
en la segunda y tercera década de la vida. en leucocitos o fibroblastos, aunque la técnica
más idónea (sobre todo para cribado neona-
tal) es la Dryed Blood Spots (DBS), que es una
DIAGNÓSTICO técnica fluorimétrica o por espectometría de
tándem masas en gota de sangre seca.
Ante la sospecha clínica de que nos encontra-
mos ante una MPS, la primera prueba a reali- Una actividad enzimática <10% es muy suges-
zar es una determinación de GAG en orina. Pu- tiva de MPS, y <1%-2% es diagnóstica de la
de emplearse una determinacion de orina misma.
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8. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
Una vez que confirmamos el diagnóstico me- necesariamente incompleto si no va acompa-
diante determinación de la actividad enzimá- ñado de una actuación global sobre todos los
tica, conviene realizar el diagnóstico genético, órganos y sistemas afectados.
que busca la mutación génica responsable de
la enfermedad. Sintomático
Problemas esqueléticos
TRATAMIENTO El ejercicio físico y las distintas medidas fisiote-
rapéuticas (masajes, hidroterapia o electrotera-
El tratamiento de las diversas MPS debe incluir pia) van a ir dirigidos a mejorar las deformacio-
tanto un tratamiento específico según el tipo nes óseas y articulares, la estabilidad vertebral,
de enfermedad de que se trate (trasplante de contracturas musculares y en resumen permitir
médula ósea (TMO) si es eficaz, terapia enzi- la movilidad del paciente. Habrá que tener es-
mática sustitutiva si está disponible) como un pecial cuidado con los procedimientos extre-
tratamiento global de las diversas manifesta- mos de hiperextensión articular, porque podría
ciones clínicas que estas enfermedades multi- producir cambios degenerativos.
sistémicas presenten. Un tratamiento única-
mente centrado en administrar terapia enzi- Las indicaciones de uso de distintas ortesis y
mática sustitutiva o en conseguir un TMO será de cirugía correctora deben seguir un plan de
Algoritmo 1. Algoritmo diagnóstico en MPS.
Presentación clínica
compatible con MPS
No alterado Solicitar GAG Alterado
en orina
(test DMB, Berry)
Pensar en Test y patrón urinario
otro proceso de GAGs
- Heparán sulfato: MPS III (A, B, C, D).
- Heparán sulfato + Dermatán sulfato:
Oligosacaridosis Otras enfermedades MPS I, II, VII, MSD.
Glucoproteinosis hereditarias no - Dermatán sulfato: MPS VI.
Mucolipidosis II / III lisosomales - Keratán sulfato: MPS IV (A, B)
Estudio de actividad enzimática en leucocitos,
fibroblastos, suero
Estudio de mutaciones
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9. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
tratamiento individualizado que responda a pia y si es posible, electrorretinografía). Tam-
tres preguntas básicas: ¿Cuál es el problema bién la afectación neurológica va a ser un fac-
ortopédico?, ¿qué beneficio vamos a obtener tor importante.
con la cirugía? y ¿cuándo es el mejor momen-
to para la misma? Problemas ORL
El acúmulo de GAG en tracto respiratorio su-
Problemas neurológicos: perior produce infecciones respiratorias de
Los problemas de compresión medular, de ner- vias altas y otitis media recurrentes, y secun-
vios craneales y periféricos (ej. síndrome de tu- dariamente una hipoacusia de transmisión.
nel del carpo) deben ser valorados por un neu- Por lo cual, medidas como la adenoamigda-
rocirujano. La colocación de válvulas de deriva- lectomía y colocación de tubos de drenaje
ción ventrículo-peritoneal representa una me- transtimpánico (DTT) van a mejorar estos
dida paliativa contra la hidrocefalia no influ- síntomas (siempre de forma individualiza-
yendo en la progresión de la enfermedad8. da). El uso de oxígeno nocturno suplementa-
rio (BIPAP/CPAP) en el síndrome de apnea
El progresivo deterioro de funciones cerebra- obstructiva del sueño también ve a estar in-
les (sobre todo en MPS II y III) va a llevar a dicado.
una demencia importante acompañada de
tetraespasticidad generalizada. El uso de Problemas respiratorios
neurolépticos, psicoactivos y anticonvulsivos La afectación neurológica por un lado, y la
van a ser necesarios para el control de los afectación de paréquima pulmonar (hiperten-
problemas conductuales y los episodios con- sión pulmonar) y deformidades torácicas, por
vulsivos que se producen en esta periodo. Los otro, van a disminuir la función pulmonar oca-
cambios aislados en el trazado EEG no indi- sionando frecuentes episodios de déficit de
can la introducción de antiepilépticos. Espe- oxígeno. La adenoamigdalectomia, los DTT y
cialmente en la MPS III se producen alteracio- BIPAP/CPAP van a paliar estos episodios. Estas
nes en el sueño recomendando el uso de sis- alteraciones también van a provocar un au-
temas de fijación a la cama y la administra- mento de infecciones pulmonares con lo cual
ción de melatonina (3 -30 mg/día) van a me- la fisioterapia respiratoria va a ser imprescin-
jorar estos síntomas y la calidad de vida del dible.
paciente y de la familia.
Problemas cardiológicos
Problemas oftalmológicos La esperanza de vida de muchos pacientes
La opacidad corneal, principalmente en MPS I, está limitada a causa de las manifestaciones
VI y VII, va a necesitar un trasplante corneal cardíacas (cardiomiopatía hipetrófica e insu-
para restaurar la capacidad visual. Sin embar- ficiencia valvular). La profilaxis antibiótica
go, la aparición de otros problemas como el de endocarditis debería realizarse ante pro-
glaucoma, la degeneración retiniana y la atro- cedimientos invasivos, una vez que se com-
fia óptica va a mermar el éxito de esta medi- prueba la afectación cardíaca. Los digitálicos
da; de ahí, la importancia de un estudio oftal- y diuréticos se usarán en la insuficiencia car-
mológico exhaustivo (tonometría, fundusco- díaca.
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Problemas con la anestesia: • No es un procedimiento exento de riesgo
Los pacientes con MPS van a metabolizar de ya que la mortalidad inducida por el proce-
distinta manera los anestésicos utilizados. La dimiento está en torno a un 20% según las
intubación endotraqueal se ve dificultada por series consultadas.
la macroglosia, la laringe estrecha y la rigidez
cervical aumentando las complicaciones de • Presenta problemas psicosociales por la di-
los procedimientos anestésicos. La intubación ficultad de encontrar donantes y el aisla-
con la ayuda de fibrobroncospio agiliza la mis- miento del paciente al que obliga la inmu-
ma. Hay que prestar especial atención a la in- nosupresión.
estabilidad atlantoaxoidea a la hora de hipe-
rextender el cuello durante la intubación, es- • No mejora sustancialmente los proble-
pecialmente en el síndrome de Morquio. La in- mas musculoesqueléticos ni corneales,
suficiencia cardíaca, aunque sea leve, debería pero estabiliza los neurológicos y mejora
ser premedicada antes de cualquier interven- en gran medida la hepatoesplenomega-
ción que requiere anestesia. Por esta razones, lia, la patología cardíaca, la patología
estos procedimientos deberían llevarse a cabo obstructiva de las vías aéreas y los tras-
en unidades con experiencia. tornos del oído.
Trasplante de progenitores • Se puede combinar con la terapia enzima-
hematopoyéticos (TMO) tica sustitutiva para optimizar los resulta-
Aunque este tratamiento se ha realizado en dos, ofreciendo este tratamiento desde el
casi todos los tipos de MPS, sólo se han com- momento del diagnóstico hasta la realiza-
probado resultados satisfactorios en los pa- ción del trasplante y permitiendo la esta-
cientes afectos de MPS I o síndrome de Hurler- bilización de la enfermedad, mejorando
Scheie, en los que es el tratamiento de elec- así la situación en la que el paciente llega
ción siempre y cuando sean menores de 2-3 al trasplante. Debe mantenerse tras el
años y, sobre todo, tengan un CI mayor de 70, mismo hasta que se detecten niveles enzi-
y en MPS II cuando se realiza antes del año de máticos normalizados.
edad y sin afectación neurológica ya presente.
Terapia de sustitución enzimática
Pueden emplearse tanto células madre provi- MPS I: nombre de la enzima, Laronidasa.
nientes de médula ósea, como células de san-
gre de cordón umbilical. Es el único procedi- Forma de administración: 100 Unidades/kg
miento disponible actualmente capaz de me- /semana iv, administrado con solución salina
jorar la afectación neurológica de aquellas en- fisiológica a lo largo de 3-4 horas, aumentan-
fermedades en las que es eficaz. do paulatinamente la velocidad de infusión
hasta 30-40 mL/h aproximadamente.
Ventajas e inconvenientes del TMO:
Su indicación es el tratamiento enzimático sus-
• Precisa una elevada histocompatibilidad a titutivo de los pacientes afectos de mucopolisa-
nivel del HLA. caridosis tipo I. No atraviesa la barrera hemato-
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encefálica por lo que no es efectiva para el trata- en muchos casos y bien tolerada. Tampoco
miento del depósito de GAG a nivel cerebral. atraviesa la barrera hematoencefálica por lo
que no es útil para los síntomas del sistema
Puede requerir premedicación para disminuir nervioso central asociados a esta enfermedad.
la incidencia de efectos adversos. Habitual-
mente se emplean antihistamínicos, paraceta- MPS VI (Maroteaux-Lamy): nombre de la enzi-
mol y, ocasionalmente, corticoides de 30 a 60 ma, Galsulfasa.
minutos antes de la infusión. Ocasionalmente
se ha requerido premedicación adicional unas Forma de administración: 1 mg/kg/semana iv,
12 horas antes de la infusión. diluido en 100 mL de solución salina fisiológica
para menores de 20 kg o en 250 ml de solución
La mayor incidencia de efectos adversos relacio- salina en los mayores de 20 kg. Se administra a
nados con la infusión del medicamento se pro- lo largo de unas 4 horas con un aumento paula-
duce entre la 4.ª y 6.ª infusión y suelen desapa- tino de la velocidad de infusión si es bien tolera-
recer con la premedicación y el enlentecimiento da. Se recomienda la administración de preme-
de la velocidad de infusión. Los más frecuentes dicación como en los medicamentos citados
son fiebre, rash cutáneo, sensación de ahogo o previamente. La producción de anticuerpos tipo
dificultad respiratoria. Habitualmente no son IgG está también constatada en los tratamien-
graves y no suelen obligar a la suspensión del tos con Glasulfasa pero su significado continúa
tratamiento. Se han descrito casos aislados de siendo incierto. Los efectos secundarios más
shock anafiláctico. Varias semanas tras la infu- habituales son dolor abdominal, conjuntivitis y
sión es habitual la generación de anticuerpos dolor auditivo, que suelen mejorar enlentecien-
contra el fármaco tipo IgE, con significado in- do la velocidad de infusión. Se han descrito
cierto, aunque no parece que aumenten los también reacciones tipo anafilactoides o reac-
riesgos de reacciones adversas ni disminuyan ciones adversas severas tipo edema angioneu-
significativamente la efectividad del fármaco. rótico, dificultad respiratoria o dolores intensos
de cabeza que igualmente suelen ceder con
MPS II (Hunter): nombre de la enzima, Idursul- una interrupción temporal del tratamiento y la
fasa. administración adicional de antipiréticos,
antihistamínicos o corticoides.
Forma de administración: 0,5 mg/kg/semana
iv, diluido en 100 mL de solución salina fisioló- Se recomienda la explicación clara de los posi-
gica a lo largo de 3-4 horas, aumentando pau- bles efectos adversos de la medicación, sus limi-
latinamente la velocidad de infusión hasta 30- taciones y expectativas mediante la firma de un
40 mL/h aproximadamente. consentimiento informado al paciente o su fa-
milia.
Los efectos secundarios y la necesidad de pre-
medicación son similares a la Laronidasa, des- Actualmente no existe un tratamiento especí-
arrollándose también anticuerpos anti Idursul- fico eficaz ni para la MPS tipo III ni para la IV.
fasa en las mismas condiciones que con la La- Se encuentran actualmente activos diversos
ronidasa. La premedicación suele ser necesaria estudios de investigacion animal y en líneas
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12. Protocolos • Protocolo de actuación en las mucopolisacaridosis
celulares, pero ninguno ha dado aún el salto a dades, bien de forma exclusiva, bien apoyan-
la experimentación en humanos. Los trata- dose en centros más cercanos al domicilio del
mientos actualmente en estudio para estos ti- enfermo pero coordinados con el centro ex-
pos de MPS son inhibidores de sustrato, vecto- perto (centro de referencia).
res virales de terapia génica y terapias enzimá-
ticas sustitutivas. No obstante, actualmente Este seguimiento periódico tiene como objeto
las únicas herramientas terapéuticas disponi- monitorizar la evolución del paciente, anticipar-
bles son un adecuado enfoque multidisplina- se a la aparición de complicaciones y prevenirlas
rio que permita minimizar las consecuencias si es posible, corregir las disfunciones que vayan
del depósito de GAG en estos pacientes. apareciendo y evaluar la efectividad de los trata-
mientos aplicados. En caso de mucopolisacari-
dosis sin tratamiento eficaz, es igualmente ne-
SEGUIMIENTO (Tabla 4) cesario el tratamiento de las complicaciones
que se irán produciendo a lo largo del tiempo.
El seguimiento de los pacientes con mucopoli-
sacaridosis requiere una actuación multidisci- En la tabla 4 exponemos una indicación de se-
plinar y mantenida en el tiempo. Es conve- guimiento en los diversos tipos de mucopoli-
niente que este seguimiento se realice en cen- sacaridosis, aunque éste debe, no obstante,
tros con experiencia en este tipo de enferme- individualizarse.
Tabla 4. Monitorización mínima en las MPS.
Evaluación inicial Cada 6 meses Cada 12 meses Cada 2 años
Evaluación clínica de MPS
Neurológico/SNC
RMN cerebral I, II, III I, II, III
RMN espinal I, II, IV, VI I, II, IV, VI
Estudio oftalmológico (Tonometría, agudeza visual,
I, II, III, IV, VI I, II, IV, VI
examen de retina y córnea)
Audición (Audiometría) I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Potenciales evocados somatosensoriales I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Estudio cardiológico (ECG, ecografía)
I, II, IV, VI * I, II, IV, VI I, II, IV, VI
*Si alteraciones
Respiratorio
CVF/VEF1
I, II, IV, VI * I, II, IV, VI
*Si alteraciones
Estudio de sueño I, II, IV, VI I, II, IV, VI
Gastrointestinal
Volumen del hígado I, II, III, IV, VI I, II, VI
Musculoesquelético
Examen rehabilitador I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Signos vitales y pruebas de laboratorio
Estatura y peso I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Perímetro craneal I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Presión arterial I, II, III, IV, VI I, II, III, IV, VI
Niveles de actividad enzimática I, II, III, IV, VI
Niveles de GAG en orina
I, II, III, IV, VI *I, II, VI
*Si Terapia de sustitución enzimática
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