El documento describe el modelo de aula invertida o "Flipped Classroom", donde los estudiantes aprenden los contenidos fuera del aula a través de herramientas multimedia y completan actividades de manera colaborativa. En el aula, el profesor organiza y guía a los estudiantes para motivarlos, despejar dudas y entregar material didáctico, mientras que la responsabilidad del aprendizaje recae en los estudiantes. El modelo fue popularizado en 2012 y propone sesiones adicionales para enseñar a los estudiantes a usar