1. NUEVOS MOVIMIENTOS Y GRUPOS RELIGIOSOS
Panorama actual
En la actualidad, la cultura occidental, ha cambiado su manera de creer y de concebir a la religión
y las experiencias religiosas. No es que la gente cree menos, sino que cree de una manera
diferente.
Las razones de este cambio son diversas, aunque podríamos describir las tres más significativas,
y que expone el documento pontificio “Jesucristo portador de agua viva”.
La primera razón de este cambio es la sensación de que las religiones tradicionales e
institucionales no alcanzan a dar una respuesta a las necesidades del hombre actual. Algunas
personas ya no encuentran espacio para creer en un Dios trascendente y personal. El mundo vive
mucho desconcierto ante la miseria, la pobreza, la guerra, el dolor, el sufrimiento y se ha vuelto
desconfiado y escéptico con respecto a la religión.
Otra razón para explicar este cambio es la propuesta de volver a una religión más ligada a la
naturaleza y al ecosistema.
Por último, es evidente también en la cultura actual que las personas van en busca de nuevas
experiencias y sensaciones.
Es así como se han abierto a la exploración de otras propuestas de espiritualidad tales como la
meditación, nuevos caminos de sabiduría y prácticas esotéricas, entre otras.
Muchas personas por otra parte, tienen la idea de que se puede llegar a una forma universal de
religión, integrando algunos elementos de las diversas religiones tanto monoteístas como
panteístas.
Los Nuevos Movimientos Religiosos (NMR)
La expresión “Nuevos Movimientos Religiosos” está aceptada por la mayoría de los sociólogos,
teólogos y educadores para designar a ciertos grupos que vienen desarrollándose desde hace
aproximadamente cuarenta años.
Es muy difícil agruparlos en una categoría única, pues poseen variedad de fuentes culturales y
religiosas. Algunas de sus raíces se remontan a antiguas tradiciones y otros constituyen
fenómenos más recientes.
Existen movimientos que tienen sus orígenes en tradiciones orientales; otros han surgido como
movimientos de tradición cristiana; otros del encuentro de sociedades tribales con las religiones
universales, y también hay una gran gama de grupos secretos y gnósticos.
Aún dentro de la tradición oriental o cristiana, existe a su vez una múltiple diversidad. La
práctica del yoga, la meditación, la devoción, las prácticas esotéricas, etc. Igualmente, en la
tradición cristiana, algunos movimientos se consideran a sí mismos como restauradores de la
verdadera Iglesia; otros como destinados a cumplir fielmente la misión cristiana.
Cuando se dice “nuevos”, en realidad esta novedad no se refiere a su fecha de aparición, sino más
bien a la fecha de su incursión o difusión en una determinada zona geográfica y cultural
determinada.
Asimismo, cuando se les califica de “religiosos”, no siempre es adecuada esta expresión, ya que
algunos de estos grupos no están de acuerdo con ser denominados de esa manera.
La denominación “Nuevos Movimientos Religiosos” ha sido utilizada también en varios
documentos eclesiales. La Iglesia ha analizado profundamente las características de estas nuevas
realidades ofreciendo elementos de discernimiento para el diálogo, la acogida y la aceptación de
la diversidad religiosa, sin caer en errores, frente a la enorme diversidad.
Una clasificación de los NMR
Como ya hemos dicho, es difícil hacer una clasificación exacta. Sin ánimo de incluir a todos,
hemos optado por una clasificación sencilla, agrupándolos en tres tipos:
Esta clasificación no obstante, no es estática, ya que hay grupos que incluyen elementos de
distintas procedencias.
Grupos de origen cristiano
1. A. Evangélicos.
Están constituidos por Iglesias procedentes en su mayoría de los Estados Unidos, separadas a su
vez del tronco de las Iglesias Históricas Protestantes.
A estas Iglesias Evangélicas se las puede denominar cristianas si cumplen con los fundamentos
básicos del Cristianismo según el Consejo Mundial de Iglesias.
2. Los Nuevos Movimientos Religiosos en el Perú
En el Perú existe una entidad llamada Concilio Nacional Evangélico del Perú (CONEP), que
agrupa a la mayoría de Iglesia evangélicas, con quienes se mantiene un diálogo abierto y de
mucha ayuda social en el país.
Las Iglesias más conocidas que la integran son:
- Iglesia Evangélica Asamblea de Dios
- Iglesia Evangélica Bautista
- Iglesia Evangélica Metodista
- Iglesia Evangélica Pentecostal
- Iglesia Evangélica Alianza Cristiana y Misionera
- Evangélica Dios es Amor entre otras
Existe también otra organización llamada Unión de Iglesias Cristianas Evangélicas del Perú
(UNICEP), creada el 20 de abril del 2003 que agrupa diversas entidades religiosas evangélicas:
1. - Movimiento Misionero Mundial
2. - Iglesia Camino de Vida
3. - Iglesia Bíblica Emmanuel
4. - Centro Cristiano Vida
5. - Centro Cristiano Bíblico
Entre otras: Algunos lo dan por llamar “iglesias electrónicas, porque cuentan con tecnología de
punta para su difusión.
B. Para-cristianos o cuasi cristianos.
Son aquellos grupos que utilizan elementos o características cristianas, pero no cumplen con los
fundamentos básicos del cristianismo, ya sea porque tienen sus propios libros sagrados que
sustituyen a la Biblia, o bien versiones adaptadas a sus doctrinas (el libro del mormón, sagrada
escritura para el nuevo mundo, revelaciones, etc.).
Otros mantienen un monoteísmo rígido bajo un solo Dios que es Jehová y consideran que Jesús es
sólo el Hijo de Jehová.
Algunos plantean que Jesús como hombre, descubrió que El mismo era Dios a través de un
camino de autoconciencia. Por lo tanto, cada hombre puede llegar a esta autoconciencia, negando
de esta manera la doctrina de la Trinidad y ubicando a Jesús como un seudo Dios o un súper
hombre.
Los grupos que promueven esta doctrina son:
- Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos días (Mormones)
- Testigos de Jehová
- Iglesia Adventista del Séptimo día
- Asociación Evangélica de la Misión Israelita del Nuevo Pacto Universal
Los grupos separados de las grandes Iglesias constituyen un apartado muy complejo. Se les
considera en esta clasificación como para-cristianos pues sus orígenes se remontan a la lectura e
interpretación de textos bíblicos, del mensaje evangélico y de la tradición cristiana hecha por sus
fundadores, pero su fe se aparta sustancialmente del núcleo central de la fe cristiana, de las
iglesias históricas.
Los Grupos de origen oriental
Nacen como disidentes de las grandes religiones asiáticas, por lo tanto sus creencias son muy
distintas de las que profesan quienes pertenecen a la cultura occidental. Sin embargo, para poder
ingresar en esta cultura tuvieron que adaptar su lenguaje. En sus creencias, consideran que el
hombre se reencarna varias veces hasta llegar a la perfección; promueven el yoga tártrico, la
meditación trascendental, la búsqueda del propio karma.
La fuente principal del pensamiento se encuentra en el Bhagavad-Gita.
Algunos de estos grupos son:
- Sokka Gakkai Internacional
- Asociación Mahikari-Luz de Vida
- Hare Krishna
- Ananda Marga
La meditación tal y como se entiende en la cultura oriental, no se refiere a reflexión o
pensamiento profundo (sentido comúnmente aceptado en Occidente), sino exactamente lo
3. contrario. Por meditación se entiende la eliminación total de cualquier tipo de pensamiento,
mediante la concentración de la mente en un solo punto.
La experiencia de la paz interior se entiende como el logro de un punto de concentración
constante y utilizable en cualquier circunstancia.
Los grupos de origen cientista
Este tercer grupo es de mayor complejidad.
Poseen en común ciertas características y un cierto número de convicciones que les anima a todos
ellos.
Estas comunes convicciones consisten en ofrecer los medios para hacer del adepto un “ser
realizado”, posibilitarle el acceso a un nivel superior de existencia y de autoconocimiento, liberar
y sacar a flote todo lo divino que está escondido en cada ser humano por medio de diversas
técnicas psicológicas y corporales.
Las fuentes de que se alimentan estos grupos proceden de la Biblia y del Oriente, aunque
remodeladas por la tradición esotérica occidental.
Se puede clasificar de la siguiente manera:
1. A. Cientistas o Cientificistas
Estos grupos no se asumen como una religión o como religiosos. No reconocen un Dios personal
como el de la tradición Judea-cristiana: un ser único, trascendente y revelado. Creen que debemos
prepararnos para un contacto con “nuestros hermanos mayores”, los extraterrestres.
Algunos de estos grupos son:
- Iglesia de Cristo Cientista
- Iglesia de la Cienciología
- Misión Ramma
- Movimiento Raeliano
1. B. Teosofistas y Gnósticos
Estos grupos se caracterizan porque realizan un cierto sincretismo al juntar filosofías antiguas
occidentales con la revelación cristiana y algunas doctrinas del oriente.
Consideran a la religión como la íntima relación de la mente con la verdad, por esa razón, piensan
que no es necesario entrar a formar parte de ninguna “forma religiosa” para ser religioso.
La síntesis del pensamiento gnóstico se resume en dos principios: disolver el yo, y levantar las
columnas del Templo del Dios Vivo. Solo con la muerte del yo se entra en el “nirvana” y nace el
Cristo interno en la morada divina del alma. El Cristo interno es la verdad que quiere conocerse a
sí misma en cada hombre.
La mayoría de estas organizaciones considera que la Iglesia Católica no dice la verdad sobre
Jesús y su misión. Por el contrario, sostienen que están llamados a “descubrirnos” y darnos a
conocer la verdad de la fe.
Se pueden identificar con los siguientes nombres:
- Organización Internacional Nueva Acrópolis
- Sociedad Teosófica
- Iglesia Gnóstica
- Nueva Era (New Age)
Las sectas y los Nuevos Movimientos Religiosos
La denominación “Nuevos Movimientos Religiosos” permite distinguirlos de aquellos que
podrían ser designados como “sectas clásicas”, o bien como “cultos”. El término goza entonces
de cierta ventaja por ser ideológicamente neutro y sin connotaciones peyorativas.
Tanto la Iglesia Católica como la Federación Luterana Mundial y el Consejo Ecuménico de las
Iglesias coinciden en determinados puntos en el análisis sobre el fenómeno de los Nuevos
Movimientos Religiosos y en su gran diversidad.
Por ello, recomiendan especial discernimiento sobre las características y las respuestas que
ofrecen a los fieles para que nadie se vea sorprendido en su buena fe.
Iluminación teológica sobre los Nuevos Movimientos Religiosos
La diversidad numérica, teológica y filosófica de los nuevos movimientos religiosos, ofrece una
gran dificultad de análisis para detectar el núcleo común de creencias de estos grupos.
Por lo general, no siempre hallamos en el cuerpo de sus doctrinas, la centralidad de Jesucristo
como la hallamos en las Iglesia históricas.
4. Otro de los elementos comunes en las Iglesias cristianas, como es el uso de la Biblia, se encuentra
diversificado en estos nuevos grupos, ya que en muchos casos sufre distorsiones porque se lee de
una manera fundamentalista.
Se debe reconocer que no todos los Movimientos Religiosos tienen como base doctrinal la Biblia.
La pérdida del sentido de la paternidad de Dios, que proponen estos nuevos grupos, hace que se le
conciba como alguien a quien hay que temer. Por otra parte la espera de la venida del Reino de
Dios, es presentada con frecuencia como algo que vendrá pronto, en días de angustia y
destrucción.
Los nuevos movimientos religiosos en el Magisterio de la Iglesia
Esta iluminación nace de una visión católica, aunque de ninguna manera renuncia a los principios
aceptados en el Concilio Vaticano II, tanto en el decreto Unitatis Redintegratio como en la
declaración Nostra Aetate. En estos documentos se sustentan los principios ecuménicos aplicables
en primer lugar a las Iglesias cristianas separadas de Roma, en segundo lugar a los hermanos de
las grandes tradiciones religiosas mundiales y en tercer lugar a quienes participan de nuevos
grupos, movimientos o cultos religiosos.
Existen además otros documentos que ofrecen las líneas de acción en el diálogo con estos nuevos
grupos.
Por ejemplo, la “Consulta de Obispos y Pastores de América Latina y el Caribe”, celebrada en
1986 en Cuenca, Ecuador.
La Iglesia reconoce además, explícitamente que este fenómeno religioso debe ser visto a la luz de
la fe como uno de los signos de los tiempos que nos pide una renovada respuesta y acción
pastoral.
En nuestro País se ha dado una Ley de Libertad Religiosa (Ley nº 29635). En este documento
precisamos tres aspectos relevantes de dicha ley:
Todos tienen libertad de profesar una fe individual o colectiva, privada o pública.
Igualdad ante la ley; no criscriminación por razón de su fe.
Objeción de conciencia, si una ley va en contra de sus creencias.