SATA es una interfaz de almacenamiento que ha evolucionado a través de varias generaciones con tasas de transferencia cada vez mayores, actualmente hasta 600 MB/s. Soporta unidades de escritorio, portátiles y servidores. Se ha convertido en la interfaz estándar en placas base de PC, utilizando cables flexibles de hasta 1 metro de largo que permiten un mejor flujo de aire. Ya no requiere distinguir entre dispositivos maestros y esclavos.