2. “El plan de celebrar estudios bíblicos es
una idea de origen celestial”(Obreros Evangélicos, 200).
3. “Nuestra obra nos ha sido
señalada por nuestro Padre
celestial. Hemos de tomar
nuestra Biblia, y salir para
amonestar al mundo. Hemos
de ser la mano ayudadora de
Dios en la salvación de las
almas: canales por los cuales
ha de fluir cotidianamente su
amor hacia los que perecen”
(Testimonies for the Church, 9:150).
4. "Los miembros de
nuestras iglesias
deben hacer más
trabajo de casa en
casa, dando estudios
bíblicos”
(Joyas de los Testimonios, 3:346).
5. ¿QUÉ ES EL PROYECTO 100?
Es una iniciativa
misionera en la Unión
Peruana del Sur que
busca movilizar a
30,000 adventistas
para dar estudios
bíblicos
6. OBJETIVOS
1. Matricular por lo menos a 100
adventistas en cada distrito para
que se conviertan en
instructores bíblicos.
2. Entrenar por lo menos a 100
adventistas en la Escuela de
Instructores Bíblicos dirigida por
el pastor distrital.
3. Ministrar por lo menos 100
estudios bíblicos en iglesia o
grupo organizado a través de
todos los frentes misioneros de
la iglesia.
14. El ideal es que este año podamos tener 100 INSTRUCTORES POR
DISTRITOS y que ellos hayan realizado el SEM. Y para esto debo
tenerlos registrados debidamente para poder monitorearlos,
capacitarlos y motivarlos de la mejor manera.
17. “Cada iglesia debe ser una escuela
práctica de obreros cristianos. Sus
miembros deberían
aprender a dar estudios
bíblicos, a dirigir y enseñar clases en
la Escuela Sabática, a auxiliar al pobre y
cuidar al enfermo, y trabajar en pro de
los inconversos” (Ministerio de Curación, pp.107).
24. ACCIONES
AGRADECER el trabajo de los 100
CELEBRAR en la CENA DE LA VICTORIA
RECONOCER a los 100 instructores bíblicos de
esperanza y de avanzada
Requisitos para ser INSTRUCTOR BÍBLICO DE AVANZADA:
1. Haber dado 03 estudios bíblicos de diciembre a marzo
2. Haber participado de las 12 sesiones de entrenamiento
3. Haber llevado por lo menos 01 bautismo de enero a marzo
Nota: Un Instructor bíblico de esperanza, es aquél que no ha ligrado llevar a su estudiante al bautismo.
25. “La mejor medicina que
pueden dar a una iglesia
no es predicar o
sermonear, sino planear
trabajo misionero para
sus miembros”
(El evangelismo, 261).