Capítulo 4 negociación y transformación de conflictos
1. Universidad Galileo
Fissic – Idea
Liane
Boca del Monte
Licenciado Jose Antonio Lorenzana
Gabriela Sussette Soto Berducido
IDE 10188045
Fecha de Entrega 22-10-2011
2. Introducción
Una de las situaciones que aviva la necesidad de escribir estas
líneas es tratar de tener clara la separación entre la psicología,
las ciencias sociales, y la sociología , puestas en la misma casilla
y buscando retratar el conflicto humano, el cual tiene un enlace,
desde lo personal y lo interpersonal (con otros).
Charles A. Beard (1934) argumentó en sus escritos, que si alguna
vez hubiéramos sido capaces de desarrollar una ciencia de la
sociedad, que se pareciera a la astronomía, habríamos sido
capaces de predecir los asuntos humanos con gran anticipación
y describir la sociedad del futuro, pero el problema encontrado
es que los humanos disponemos de mecanismos de cambio
permanentemente y no necesariamente sistemáticos, lo cual
nos diferencia del universo.
3. Una pregunta que podríamos hacer, consiste en
investigar cuál ha sido el aprendizaje del ser humano
frente al conflicto, de qué han servido las guerras, los
enfrentamientos entre regiones y países, entre pueblos,
entre comunidades, organizaciones, familias, vecinos,
hermanos, amigos, esposos, hijos, etcétera.
VISIÓN SOBRE EL CONFLICTO HUMANO
4. • La verdad hemos • Debemos
sacado muy poco plantearnos de
provecho de tanta manera seria cuál
escuela de la guerra y será el futuro de
podríamos afirmar nuestros hijos y
que las relaciones futuras generaciones
han servido, en frente al conflicto, su
muchos casos, para forma de verlo,
aprender a ser más entenderlo y
guerreros y menos asumirlo.
humanos.
5. Algunos estudios con el reino
animal
• Como seres racionales hemos
observado patrones de
conducta del reino animal que
convertimos en modelos y
luego adaptamos para tratar
de examinar cómo debe tratar
el ser humano al conflicto; sin
embargo, estos experimentos
no han impactado en todo lo
esperado.
6. Con ello, el grado de error que se da
cuando predecimos las reacciones
humanas, partiendo de lo que
ocurre en los animales, mantiene un
espacio desconocido, pero ello no
impide que rescatemos elementos e
información valiosa que contribuye
a la presentación de nuestro tema
central: el conflicto.
7. La mayor parte de la agresividad
humana se puede detectar
directamente en el sentido de la
frustración por ciertas necesidades,
consideradas importantes y urgentes en
momentos específicos.
Los métodos del niño para hacer frente
a frustraciones tienden a se sencillas y
directas, y mientras aprende una
variedad de maneras de resolver sus
problemas, está obligado a sentirse
como una víctima de maneras
desamparada del capricho que le
impone el medio.
8. • Una gran parte de los conflictos intrapersonales que llevamos
que llevamos los adultos actualmente están referidos a nuestra
etapa de niños cuando ante la imposibilidad de reaccionar a las
amenazas o agresiones de adultos, volvemos esas emociones
conscientes en ese momento de inconsciente durante toda la
vida; viviendo frustrados y muchas veces sin recordar por qué.
• Ante las normas el niño enfrentas su mecanismo de defensa
frente a los incentivos que vienen del exterior.
• La amenaza y el rechazo entran en la estructura psíquica del
niño, lo que implica un reto para tratar de ser la persona que se
espera, y de no ser así puede producir una intensa angustia.
• La frustración aparece por no poder cumplir con los parámetros
normales de comportamiento y efectividad que suponemos
deben suceder en los diferentes ambientes frecuentamos o en
los que actuamos; aquí se requiere una participación
consciente para saber cómo actuar y tratar de transformar una
situación adversa o calificada como adversa, en un estado que
permita regresar el equilibrio o a encontrar la salida necesaria,
frente a ese momento de molestia.
9. Partimos del supuesto que todas las culturas proporcionan o tienen
mecanismos para tratar la hostilidad entre sus miembros, por constituirse
ésta en constante amenaza para la sociedad.
Aparece, entonces , la necesidad de trabajar los elementos culturales en
nuestras sociedades para observar y conducir con mejores melodías el
tema de la frustración. La hostilidad, la agresión, la violencia y la
destrucción.
Es importante rescatar la necesidad en forma en qué, por qué y para qué,
expresamos nuestros deseos, intereses , gustos y visiones del mundo,
siendo muy útil, pues parte de esto pasa de generación en generación.
Si es cierto que las guerras empiezan en nuestras mentes, se hace
indispensable examinar motivos, emociones, percepciones y actitudes, en
cuanto éstas engendrar conflicto y formas de acción, incluyendo la
violencia.
Agresión, percepción
y cultura
10. Percibir es un proceso por el cual un individuo está
consciente del medio que lo rodea, teniendo claro que la
percepción puede tener diferencias con la realidad.
La forma como se mira e interpreta la realidad no siempre
tiene las mismas aristas, dependiendo del observador.
Existe un principio de realidad diferencial, parece ser de
aplicación universal, respecto a los conflictos de grupos.
Lo interesante de la experiencia es lograr recibir la
información de fuentes apropiadas para tamizarla, lo que
convierte la percepción en una función de muestreo y se
constituye en insumo para todo ser humano, en punto de
partida y en paradigma.
La naturaleza de la percepción es propia de cada ser
humano y, en consecuencia, un elemento subjetivo.
En un estudio elaborado por Leonard Carmichael, indica
que las formas visuales son modificadas para adaptarse al
patrón.
11. Emociones y conflictos
• Finalizando los años ochentas del siglo XX, se empezó a sentir
con la fuerza la necesidad de valorar a los seres humanos no
sólo por su coeficiente intelectual, como fue tradicionalmente,
derrotado la visión que por los años 50 impusieron los
conductistas, que promovían la necesidad de examinar al ser
humano por su conducta exclusivamente.
12. Los avances en la temática han llamado poderosamente
la atención para incorporarlos en el manejo de la
conflictividad por parte de los seres humanos.
Se ha mostrado la falta de autodominio y control sobre
nosotros mismos, exponiéndonos a pérdidas y malas
decisiones en nuestra interrelación con los otros, pues
no se ha comprendido el juego del «cerebro que domina
los momentos de rabia y temor o de pasión y dicha»
13. Aproximación sociología para
examinar el conflicto
• Los sociólogos buscan
explicaciones al pasado
de la sociedad y a veces
tratan de predecir su
futuro a través de un
modelo que les permita
definir grandes rutas o
líneas que se puedan
sustentar y, por ende,
afirmar.
14. • En el tema propio de los • Quienes hemos tenido que
conflictos y su vivir en las últimas décadas
transformación, del siglo XX y los primeros
podemos partir años del siglo XXI,
compartiendo lo que sabemos que el cambio es
según Julien Freund la única realidad que
permanece y a la que nos
representa este: «El sometemos cada
conflicto está en el amanecer, constituyendo
centro de las sociedades la mayor promesa, la
y se trata de una velocidad con que éste se
adquisición de primer presenta en escena, más
orden para la sociología, no por ello podemos
pues nos obliga a afirmar que el conflicto es
reflexionar sobre la propio de las actuales
naturaleza misma y la de generaciones o hijo
pródigo de esos años.
sociedad en general»
15. Una nueva forma de ver el
conflicto
Se ha tratado de determinar por qué unas
sociedades son más conflictivas que
otras, razón por la cual el tema del
conflicto debe ser observado desde el
punto de vista intercultural.
Ross presenta un ejercicio investigativo
que plantea una comparación desde el
punto de vista organizacional y de los
objetivos que persiguen los grupos o
comunidades, el cual permite examinar el
tratamiento del conflicto de diferentes
formas, acudiendo a referentes históricos
de unos y otros.
16. Los Yanomamos, presentan las siguientes características: capturan a las
mujeres y la consecución de la autonomía es a través de una manifiesta
violencia, constituyéndose estas acciones en los objetivos primarios de
la lucha entre aldeas.
Los hermanos y los primos por línea paterna se disputan entre sí las
mismas mujeres, las que siempre consideran como algo escaso.
Los padres promueven la agresividad, reprendiendo a los que no la usan,
abundando los modelos de roles agresivos; esto constituye un reto para
todo integrante de la comunidad o para aquel que desea tener un
espacio dentro de la misma.
Para llegar a ser un verdadero adulto hay que desligarse de los lazos
maternos y comportarse agresivamente con todas las mujeres, las
muestras y efectivas acciones de cariño entre padres e hijos casi no
existen, generándose baja confianza dentro del grupo social.
Los Mbuti, viven en pequeños grupos que se dedican a actividades como
la caza y la búsqueda de alimentos; «La jungla es su fuente de sustento y
su más profundo apoyo emocional».
Aspectos como la cooperación se observan 3n las actividades que les
permiten la subsistencia, coordinan acciones de captura y matanza de
animales, las que posteriormente se distribuyen.