El agua es vital para el cuerpo humano ya que forma la mayor parte de nuestro peso corporal y participa en funciones esenciales como limpiar impurezas, regular la temperatura y ayudar al funcionamiento del cerebro. El agua también ayuda a crear saliva, regular la temperatura, eliminar desechos, mejorar el rendimiento físico y prevenir enfermedades. Se recomienda beber al menos 2 litros de agua al día para mantener estas importantes funciones corporales.