El documento analiza el estado de la digitalización en América Latina frente a la pandemia de COVID-19. Describe que la región se encuentra en un nivel intermedio de desarrollo digital, pero presenta desafíos como la brecha digital, la resiliencia de la infraestructura y los hogares digitales, y la digitalización de la producción y el Estado. Las soluciones digitales como el teletrabajo y la educación a distancia han surgido como herramientas para enfrentar la pandemia, pero la brecha digital limita su implementación en la reg

1. ESTADO DE LA DIGITALIZACIÓN EN
AMÉRICA LATINA FRENTE A LA
PANDEMIA
D I E G O G A B R I E L E S T R A D A C O R T E
G R U P O : 6 11 9 1

2. Estado del Ecosistema Digital de
la región
• Según el informe, América Latina y el Caribe se encuentran en un nivel de desarrollo
intermedio en cuanto a su ecosistema digital en comparación con otras regiones del mundo.
Aunque la región ha logrado avances significativos en los últimos 15 años, todavía se
encuentra rezagada en comparación con Europa Occidental, América del Norte, Europa del
Este y los Estados Árabes.
• El índice de desarrollo del ecosistema digital de América Latina y el Caribe es de 49.925 en
una escala del 0 al 100, lo que indica su posición más avanzada en comparación con África
(35.05) y Asia Pacífico (49.16). Sin embargo, la región muestra una tasa de crecimiento
anual inferior a la de otras regiones.
• La gráfica 1 muestra que el índice de desarrollo del ecosistema digital de América Latina y el
Caribe tuvo una tasa anual de crecimiento compuesto del 6.21% entre 2004 y 2018. Esta
tasa es la más baja entre los países emergentes, siendo Asia y el Pacífico (9.39%), África
(8.27%) y Europa del Este (6.89%) quienes presentan tasas de crecimiento anual
superiores. Los países industrializados tienen tasas de crecimiento anuales aún más bajas,
lo que indica un mayor nivel de desarrollo en sus ecosistemas digitales.
• La desagregación del índice revela los desafíos que la región enfrenta para lidiar con la
disrupción causada por la pandemia. Estos desafíos se relacionan con los pilares que
componen el ecosistema digital, y es necesario abordarlos para impulsar un mayor
desarrollo en la región.

3. Resiliencia de
infraestructura digital
• La imposición de medidas sanitarias para enfrentar el COVID-19,
como la clausura de lugares de trabajo y la cuarentena
domiciliaria, ha ocasionado un salto en el uso por parte de la
población de redes de telecomuni- caciones para resolver temas
de aprovisionamiento de bienes, conectividad social, y acceso a
información. Ya existe numerosa evidencia del aumento en la
utiliza- ción de las redes de telecomunicaciones7 a partir del
desencadenamiento de la pandemia, y como conse- cuencia una
erosión natural de los índices de calidad. Por ejemplo, de acuerdo
con Ookla/Speedtest, los ín- dices de velocidad promedio y
latencia en Internet de cuatro países latinoamericanos sufrieron
cambios im- portantes en las dos últimas semanas de marzo.

4. • El análisis de los valores de velocidad y latencia de la banda ancha en varios países de América
Latina durante el mes de marzo muestra una alta volatilidad. Esto se debe a cambios en el
comportamiento y flujo de tráfico debido a la clausura de oficinas y la adopción masiva del teletrabajo.
• En cuanto a la velocidad de la banda ancha fija, se observa estabilidad en Brasil y México, una
disminución marcada en Chile y una disminución constante en Ecuador. En cuanto a la latencia de la
banda ancha fija, se registra un incremento gradual en Brasil, Chile, Ecuador y México, lo que indica
una erosión en la calidad del servicio.
• En cuanto a la velocidad de la banda ancha móvil, se mantiene estable en Brasil y México, pero se
observa una disminución notable en Chile y una disminución gradual en Ecuador. En cuanto a la
latencia de la banda ancha móvil, se mantiene estable en todos los países, pero a niveles
extremadamente altos.
• El aumento en el uso de plataformas de videoconferencia y trabajo en la nube, debido al teletrabajo y
al uso intensivo de Internet en los hogares, ha generado un aumento en el número de dispositivos
conectados y ha creado cuellos de botella en los enrutadores wifi que operan en espectro no
licenciado.
• En resumen, la pandemia ha tenido un impacto en los índices de velocidad y latencia de la banda
ancha en América Latina, reflejando cambios en el tráfico y comportamiento de los usuarios, así
como una mayor demanda de servicios en línea.

5. • Varios gobiernos y empresas en América Latina están tomando medidas para hacer frente a la
situación del COVID-19 y asegurar la continuidad de los servicios de telecomunicaciones.
• En Colombia, el operador Claro ha implementado un plan de contingencia tecnológica para atender la
creciente demanda de tráfico. También ofrecen beneficios adicionales a sus clientes, como datos
adicionales y mayor velocidad en los servicios de hogar. Además, en alianza con Cisco Webex, Google
y Microsoft, brindan herramientas colaborativas a pymes y grandes empresas sin costo por un tiempo
limitado.
• En Brasil, el operador Nextel y la filial brasileña de Telefónica, Vivo, están fortaleciendo sus redes para
satisfacer la demanda adicional. Nextel mantendrá la velocidad de Internet aunque los clientes
alcancen el límite de datos de sus planes, mientras que Vivo ofrece canales de televisión de forma
gratuita y navegación gratuita en una aplicación desarrollada por el Ministerio de Salud.
• Netflix también ha reducido la calidad de video en Europa durante 30 días para reducir la demanda de
transmisión debido al aumento del uso en el hogar. Esto ayudará a disminuir el consumo de datos en
un 25% sin comprometer la calidad de imagen.
• En España, el gobierno emitió un decreto que garantiza que las empresas de telecomunicaciones
mantengan los servicios contratados por los clientes durante el estado de alarma, con excepción de
situaciones que afecten la seguridad e integridad de las redes. Esto plantea cuestionamientos sobre la
neutralidad de red, ya que los operadores pueden analizar el tráfico para garantizar la seguridad de las
redes.
• En general, se destaca la importancia de la infraestructura digital en el mantenimiento de la resiliencia
económica. La colaboración entre operadores, reguladores y plataformas de Internet es fundamental
para garantizar la capacidad de las redes y satisfacer las necesidades de comunicación durante la
pandemia del COVID-19.

6. Resiliencia de hogares digitales
• La brecha digital existente entre los países y dentro de ellos expone desigualdades en términos de acceso a la
conectividad. Mientras que en la región el enfoque de la conectividad solía ser principalmente recreativo,
ahora se vuelve crucial para acceder a servicios sociales y productivos.
• En general, el 67% de la población en la región es usuaria de Internet, pero existen diferencias significativas en
función del nivel socioeconómico y la ubicación geográfica. Los países con mayor conectividad tienen una
penetración de usuarios de Internet superior al 60% en áreas urbanas y alrededor del 40-50% en áreas rurales,
mientras que en los países con menor desarrollo digital, la penetración promedia solo el 10%.
• En cuanto al rango de edad, se observa una menor cantidad de usuarios en el grupo de mayores de 75 años,
con un máximo del 20%. Esto destaca la limitación que enfrentan los adultos mayores para acceder a servicios
en línea que se vuelven cada vez más relevantes. Además, en el rango de menores de 15 años, el porcentaje
de usuarios varía considerablemente entre países y en varios casos es inferior al 50%, lo que también limita las
iniciativas de educación en línea.
• El nivel de ingresos también influye en el acceso a Internet. En los países con mayores desigualdades, la
relación entre los usuarios de Internet en el segmento más rico y el más pobre es cercana al doble.
• Estas disparidades en el acceso a la conectividad resaltan la necesidad de abordar la brecha digital y promover
la igualdad en el acceso a servicios y oportunidades en línea.

7. • Finalmente, otro elemento que debe considerarse es la calidad del Internet que determina también los
servicios y aplicaciones a los que se puede acceder. En América Latina existe un rezago en términos de
veloci- dades de conexión de banda ancha, en relación con el promedio mundial y a países más avanzados.
En este caso se utiliza como referencia a la banda ancha móvil ya que esta modalidad de acceso es por
mucho la más utilizada en América Latina.
• Todas esas brechas relacionadas con el acceso evi- dencian los grupos y segmentos de la población que
están excluidos de los beneficios de las tecnologías digitales y, en una situación como la actual, limitan de
manera importante el impacto de las acciones que puedan adoptarse en materia de aplicaciones de tele-
salud, teleeducación y teletrabajo. Por otro lado, re- saltan la necesidad de seguir impulsando políticas de
universalización de la conectividad y de inversión en infraestructura digital.

8. Resiliencia de la producción
• La digitalización de la producción es crucial para mantener la economía
funcionando durante la pandemia de COVID-19. Para lograr la resiliencia
en este contexto, es necesario que todos los actores en una cadena de
suministro estén digitalizados. No solo las empresas manufactureras
deben manejar órdenes de compra digitalmente, sino que también deben
interactuar con empresas logísticas, operadores portuarios y aduanas
para garantizar la eficiencia en el transporte de productos.
• Aunque muchas empresas latinoamericanas están conectadas a internet,
la proporción de aquellas que utilizan plataformas digitales en su cadena
de suministro es menor.
• La digitalización en la producción se vuelve esencial para garantizar la
continuidad de las operaciones y la eficiencia en tiempos de disrupciones
como la pandemia.

9. Resiliencia del Estado
• La resiliencia del Estado frente a la pandemia depende de su capacidad para seguir
funcionando en términos administrativos y brindar servicios públicos. Algunos
servicios, como la seguridad y la salud pública, son esenciales y no dependen tanto de
la digitalización. Sin embargo, la digitalización de otros servicios puede ayudar a
enfrentar el COVID-19.
• En el caso del procesamiento del comercio exterior, ha habido avances en la
simplificación y digitalización de procesos, como el uso de la ventanilla única de
comercio exterior. Sin embargo, los países de América Latina y el Caribe aún están
rezagados en comparación con las mejores prácticas internacionales. Esto se refleja
en el tiempo necesario para procesar la documentación requerida en el comercio
exterior.
• Las estadísticas de las tablas indican que, indepen- dientemente del grado de adopción de
Internet, una porción importante de empresas (principalmente py- mes) no ha incorporado la
tecnología en su cadena de aprovisionamiento. Por ejemplo, de acuerdo con INEGI en México,
solamente 19% de pymes adquieren insu- mos por Internet

10. COVID-19:
CONECTIVIDAD
DIGITAL PARA EL
DISTANCIAMIENTO
SOCIAL
• Ante la propagación del COVID-19, el aislamiento social se
ha convertido en una solución efectiva. En este contexto, las
soluciones digitales como el teletrabajo, la educación a
distancia y las aplicaciones móviles han surgido como
herramientas para enfrentar la pandemia. Sin embargo, en
América Latina y el Caribe, la brecha digital revela
desigualdades en su uso.
• En China, se han utilizado tecnologías como el análisis de
datos, la inteligencia artificial, drones y robots para combatir
el virus. Por ejemplo, se implementó el "Alipay Health Code"
para gestionar las cuarentenas, asignando a las personas un
código de color que indica su estado de salud y les permite
acceder a servicios públicos. Sin embargo, el uso de estos
sistemas plantea interrogantes sobre la privacidad y el
control de datos personales.
• En Beijing y Shenzhen se han integrado sistemas de
inteligencia artificial en estaciones de tren y aeropuertos para
detectar el calor humano, identificar aglomeraciones y
verificar la temperatura de las personas, reduciendo el riesgo
de contagio.
• En resumen, las soluciones digitales han surgido como
herramientas para enfrentar el COVID-19, pero la brecha
digital y las preocupaciones sobre la privacidad plantean
desafíos en su implementación.

11. Soluciones digitales para enfrentar el COVID-19
Ante la rápida propagación del COVID en el
mundo una de las soluciones más efectivas es
el aislamiento social a fin de disminuir la
transmisión del virus. Esto implica permanecer
en casa y evitar la circulación pública en
lugares de trabajo, estudio, recreación, etc.
En este contexto, aplicaciones digitales que
habilitan el teletrabajo, la educación a distancia,
la realización de trámites, la interacción social y
el esparcimiento, apare- cen como una solución
para lidiar con los requerimien- tos que nos
impone el contexto. El factor habilitante para su
uso es la conectividad. Sin embargo, en los paí-
ses de América Latina y el Caribe, la brecha
digital deja de manifiesta un nuevo elemento de
inequidad, la des- igualdad la digital.
A continuación, se revisará cómo las
tecnologías digitales surgen como herramientas
para enfrentar la pandemia del COVID-19 y las
limitaciones para su aprovechamiento.

12. Datos, drones, robots y plataformas
al rescate
• Ante el desafío del COVID-19 en China, se utilizaron diversas
soluciones tecnológicas, como el análisis de datos, la inteligencia
artificial, robots, drones y cascos inteligentes. El "Alipay Health Code"
permitía a las personas registrar su estado de salud y obtener un
código de color que determinaba su libertad de movimientos. Además,
se implementaron sistemas de inteligencia artificial en estaciones de
tren y aeropuertos para detectar la temperatura de las personas y evitar
aglomeraciones. KC Wearable desarrolló cascos inteligentes que
pueden detectar la fiebre a cinco metros de distancia y transmitir datos
al hospital más cercano. Estos cascos también cuentan con
reconocimiento facial y visor de realidad aumentada. Estas soluciones
tecnológicas han sido útiles, pero generan interrogantes sobre la
privacidad y el control de datos personales.

13. 5G
• En algunos países, como China, la tecnología 5G
ha permitido mejorar la comunicación y el
intercambio de datos para detectar y controlar la
propagación del COVID-19. Se han utilizado
plataformas digitales para cargar historiales
médicos y realizar consultas remotas. Además, se
han implementado estrategias de salud digital
basadas en el monitoreo, la cuarentena y el
tratamiento. En China, ZTE y China Telecom
utilizaron la tecnología 5G para transformar el
Hospital Occidental de China de la Universidad de
Sichuan.

14. • En China y Corea del Sur, se ha
utilizado la tecnología 5G para
combatir la propagación del COVID-
19. En China, se implementaron
sistemas de consultas médicas
remotas a través de video y se
utilizaron sistemas de monitoreo de
temperatura corporal con imagen
térmica 5G en lugares públicos.
Además, se estableció una red única
entre hospitales para proporcionar
diagnóstico remoto y tratamiento
oportuno. En Corea del Sur, se
utilizó la tecnología 5G junto con la
vigilancia y el seguimiento del uso
de tarjetas bancarias y teléfonos
móviles para identificar contactos de
personas contagiadas y realizar
pruebas masivas de virus. Estos
ejemplos muestran cómo la
tecnología 5G puede ser una
herramienta efectiva en el control de
una pandemia como el COVID-19.

15. • En Corea del Sur, se utilizó la tecnología 5G junto con sistemas
de rastreo digital para identificar a personas contagiadas y sus
contactos. Esto se logró mediante el seguimiento de
transacciones electrónicas, tarjetas de crédito y débito, así como
el uso de cámaras de video vigilancia. El gobierno surcoreano se
convirtió en un caso de éxito en el combate al COVID-19 gracias
al uso estratégico de datos y la divulgación de información a
través de sitios web y aplicaciones para teléfonos inteligentes. En
América Latina, se han realizado pruebas y lanzamientos
comerciales de la tecnología 5G en varios países, como Uruguay,
Puerto Rico, Trinidad y Tobago, Surinam y Aruba. Sin embargo,
aún existen desafíos y procesos pendientes en países como
Argentina y Brasil para avanzar en la implementación de la
tecnología 5G.

16. • En Colombia, aún no se han definido las frecuencias 5G, pero se espera que incluyan la banda de 3.5 GHz. En México, se están estudiando varias bandas de
espectro, como 2.3-2.4 GHz, 3.3-3.7 GHz, 26 GHz, 30 GHz, 38 GHz, 40 GHz, 50 GHz, 70 GHz y 80 GHz. El regulador mexicano ha permitido a algunas
empresas renovar bloques en la banda de 3.5 GHz como preparación para las redes 5G. En Perú, se planea adjudicar 830 MHz para servicios móviles en dos
licitaciones, y se ha publicado una regla para reasignar 500 MHz a la banda de 3.5 GHz, que se espera sea la más utilizada para 5G en la región.
• En cuanto a las aplicaciones y sistemas de información en el contexto de la pandemia de COVID-19, se ha observado que son fundamentales para el control y
mitigación de la enfermedad. Países como China, Singapur, Corea, India, Israel y Uruguay han utilizado soluciones digitales para proporcionar información,
rastreo y diagnóstico, y prevención y control del contagio. Estas soluciones se consideran críticas para detectar casos tempranamente y aislar a las personas
infectadas, lo que ayuda a frenar la propagación del virus.
• Además, se ha promovido la innovación en el uso de aplicaciones espaciales y telecomunicaciones para abordar la crisis del COVID-19. La Agencia Espacial
Europea ha lanzado una iniciativa llamada "Espacio en respuesta al brote del COVID-19" para impulsar la colaboración y el desarrollo de aplicaciones y servicios
relacionados con la salud y la educación.
• Un ejemplo destacado es el caso de Kerala en la India, donde se implementó una red pública basada en código abierto llamada CoronaSafe Network. Esta red
tiene como objetivo proporcionar información auténtica sobre el virus, promover medidas de prevención y difundir noticias verificadas para evitar la propagación
de información falsa.
• En resumen, el despliegue de tecnología 5G está en proceso en varios países de la región, como Colombia, México y Perú. Asimismo, las aplicaciones y
sistemas de información digitales han sido fundamentales en la lucha contra la pandemia, permitiendo la difusión de información, el rastreo de contactos y el
control del contagio.

17. • Se han implementado diversas soluciones digitales en India para abordar el COVID-19. Se ha
creado una red de seguridad que incluye Centros de Atención para el COVID-19 (CCC) cuya
ubicación se muestra en un sistema de mapas especializado llamado "India Map on CoronaSafe
Network". Este sistema ofrece actualizaciones en tiempo real sobre los casos de COVID-19 y
proporciona instrucciones para llegar a los centros de prueba vinculados a Google Maps.
• Además, se han desarrollado herramientas de trazabilidad del virus a nivel geográfico más detallado,
lo que mejora los diagnósticos de tasas de contagio a nivel nacional, subnacional y distrital. Estos
sistemas de información proporcionan datos en tiempo real sobre pacientes bajo observación,
hospitalizados, en aislamiento en el hogar, casos confirmados, recuperados y fallecidos. También
ofrecen información sobre protocolos de defensa y cuarentena, y enlazan hospitales, centros de
atención y voluntarios en una red unificada.
• A nivel local, el distrito de Hyderabad en India ha desarrollado un rastreador de COVID-19 a nivel de
distrito, que brinda información detallada sobre la propagación del virus. Esta herramienta combina
inteligencia artificial y verificación humana para verificar las cifras de casos positivos y muestra la
información en un mapa y un tablero estadístico en tiempo casi real.
• Empresas líderes en geoespacial, como Esri y Geospark Analytics, están contribuyendo al mapeo
del impacto del COVID-19 mediante sistemas de inteligencia, localización y mapeo de contagios.
También se están utilizando técnicas avanzadas de inteligencia artificial y machine learning para
evaluar los riesgos asociados a la propagación del virus. Además, se están empleando herramientas
de localización para espacios cerrados e interiores.
• En resumen, en India se han implementado diversas soluciones digitales, como sistemas de mapas
especializados, rastreadores a nivel de distrito y herramientas de inteligencia artificial, para abordar
el COVID-19 y proporcionar información actualizada y detallada sobre la propagación del virus.

18. • Se han desarrollado numerosas iniciativas digitales para controlar la pandemia de COVID-19 en varios países. Estas iniciativas incluyen
aplicaciones móviles y plataformas de videoconferencia que facilitan la autoevaluación, el seguimiento del estado de salud de los ciudadanos y la
atención médica remota. Ejemplos destacados incluyen aplicaciones como TraceTogether en Singapur, que ayuda a reducir la propagación del virus
al permitir el seguimiento de contactos y el monitoreo en tiempo real de posibles contagios. En Israel, se han desarrollado aplicaciones que utilizan
la geolocalización para advertir a los usuarios si han estado en contacto con personas infectadas.
• En Venezuela, las plataformas y aplicaciones de videoconferencia han sido especialmente útiles para realizar consultas y tratamientos médicos sin
la necesidad de acudir a los centros de salud, lo que minimiza los riesgos de contagio y propagación. Estas herramientas también facilitan la
atención a pacientes con enfermedades crónicas y la provisión de consultas gratuitas.
• En general, estas tecnologías digitales han contribuido a mejorar la transparencia y confiabilidad de la información para los usuarios, así como a
medir la propagación del virus, proporcionar actualizaciones en tiempo real e implementar esquemas de diagnóstico y mitigación. Es importante
promover el desarrollo y la adopción de aplicaciones digitales y sistemas de información en tiempo real como parte de la respuesta a la pandemia.
• Además, se destaca la importancia de la resiliencia y la planificación de emergencias en la implementación de servicios digitales. Los planes
nacionales de telecomunicaciones de emergencia son fundamentales para garantizar la disponibilidad de plataformas digitales y las comunicaciones
esenciales durante eventos de magnitud como la pandemia. La plataforma REG4COVID de la UIT proporciona un espacio para compartir mejores
prácticas e iniciativas relacionadas con el COVID-19 entre los gobiernos, reguladores y partes interesadas de la industria.
• En resumen, el uso de tecnologías digitales ha sido clave en el control de la pandemia, permitiendo una mayor transparencia, seguimiento de
contactos y acceso a servicios de salud remotos. Promover el desarrollo y la adopción de estas herramientas, así como garantizar la resiliencia y la
planificación de emergencias en el ámbito de las telecomunicaciones, son aspectos importantes para una respuesta efectiva a la pandemia en
América Latina y en todo el mundo.

19. Teletrabajo
• Bajo esta modalidad los empleados utilizan platafor- mas virtuales
para efectuar reuniones, informar, coor- dinar y seguir el avance
de tareas con sus compañeros y jefes. Existen diferentes
plataformas que ofrecen di- versas funcionalidades. En general se
trata de software propietario cuyo uso requiere licencias o
suscripción a servicios en nube. En virtud de la contingencia, las
grandes tecnológicas están facilitando estas herra- mientas dando
acceso gratuito por treinta días, exten- diendo el tiempo de
reuniones virtuales en modalida- des libre de costo, etc.

20. • desafíos técnicos hasta normativos. En Chile, si bien
el Código de Trabajo habilita esta modalidad, se
aceleró la tramitación de la Ley de Teletrabajo a fin
de contar con regulaciones que aborden aspectos
tales como ac- cidentes del trabajo, provisión de
herramientas tecno- lógicas y soporte por parte del
empleador, etc.38
• Esta necesidad de trabajar a distancia puede ser
una oportunidad de modernizar el mundo del
trabajo con un cambio estructural que impulse la
flexibiliza- ción y abra espacios de inserción al
mercado laboral, en particular a mujeres y jóvenes.
• Adicionalmente a las plataformas que habilitan el
trabajo a distancia, es necesario contar con acceso a
In- ternet, dispositivos y habilidades digitales. Este
último punto es de particular relevancia si se
considera que en América Latina y el Caribe la
digitalización aumentó mu- cho más rápido que el
suministro de capital humano.

21. Teleeducación
• La educación a distancia se puede llevar a cabo a través de plataformas que
permiten el acceso a aulas virtuales y materiales educativos en formato digital. Sin
embargo, muchos países enfrentan dificultades en este aspecto, especialmente en
la falta de plataformas virtuales, conectividad limitada y falta de habilidades
digitales tanto por parte de profesores como de alumnos.
• En respuesta a la pandemia de COVID-19, muchos países han tenido que acelerar
la implementación de soluciones para la educación a distancia. Empresas de la
economía digital también han ofrecido facilidades para acceder a plataformas de
aulas virtuales y recursos educativos.
• La falta de acceso a equipos y conexión a Internet, así como la falta de habilidades
digitales, son obstáculos adicionales para la educación a distancia. Estas
dificultades han sido evidentes incluso en países más avanzados, y se ha
destacado la importancia de garantizar la igualdad educativa.
• En algunos casos, se están explorando soluciones alternativas, como el uso de
radio, televisión, Facebook y WhatsApp como medios educativos más accesibles y
democratizadores.
• En resumen, la educación a distancia requiere superar desafíos relacionados con
la disponibilidad de plataformas virtuales, conectividad y habilidades digitales. Es
importante buscar soluciones creativas y accesibles para garantizar la continuidad
educativa en todos los niveles.

22. Telesalud
• La estrategia clave para enfrentar la pandemia de COVID-19 es la mitigación, reduciendo la propagación del virus y protegiendo a los grupos vulnerables. Sin embargo, en
América Latina, los hospitales tienen una capacidad limitada, con solo dos camas disponibles por cada 1,000 habitantes en promedio.
• La pandemia ha destacado la necesidad de evolucionar la relación médico-paciente, aprovechando el uso de plataformas y herramientas digitales para el monitoreo, tratamientos
a distancia y seguimiento posterior al alta. También se busca permitir que médicos con síntomas leves o retirados puedan trabajar de forma remota y colaborar con especialistas
de otros países para casos graves.
• Las mejores prácticas internacionales incluyen la conferencia de audio/video, que permite entrevistar a pacientes sin necesidad de desplazamiento, y el telediagnóstico, que utiliza
avances en hardware y software para realizar diagnósticos a distancia. Además, los sistemas de información electrónicos de salud (HIS) proporcionan acceso rápido y eficiente a
información médica de los pacientes.
• A pesar de estas posibilidades, los países de la región enfrentan desafíos importantes. Aunque el 61% de ellos tiene una estrategia nacional de salud digital, muchos aún están en
la etapa de formulación de políticas y estrategias, y solo el 52.6% cuenta con un sistema de información electrónico de salud. Las principales barreras para su implementación son
la falta de recursos financieros y datos sobre la eficacia y los costos de los programas de telesalud.
• En resumen, la pandemia ha resaltado la importancia de utilizar herramientas digitales para mejorar la atención médica y el seguimiento de los pacientes. Sin embargo, se
requiere un mayor enfoque en la implementación de estas tecnologías en la región, superando barreras financieras y obteniendo datos sobre su eficacia.

23. • La disponibilidad de acceso a banda ancha tanto para usuarios como para centros
de salud es un factor clave y habilitante para la adopción de servicios de salud en
línea. La pandemia de COVID-19 ha impulsado el interés en la telemedicina, y las
consultas médicas en línea están siendo adoptadas como una solución viable en
América Latina.
• Startups como WeDoctor y Doctoralia ofrecen servicios de consultas médicas en
línea a través de aplicaciones móviles. La pandemia ha creado conciencia sobre la
importancia de digitalizar los servicios de salud y ampliar la conectividad para
garantizar un acceso universal y de calidad.
• Los usuarios están cada vez más interesados en la telemedicina, y se espera un
crecimiento en la adopción de estos servicios. En Estados Unidos, el gobierno
amplió el acceso a la telesalud a través del programa de seguro de salud
Medicare, lo que puede aliviar el hacinamiento en los hospitales y permitir a los
usuarios buscar tratamientos y atención a través de videoconferencias.
• En resumen, la disponibilidad de banda ancha y la adopción de servicios de salud
en línea, como la telemedicina, son aspectos clave para mejorar el acceso y la
calidad de la atención médica. La pandemia ha impulsado el interés en estas
soluciones y se espera un aumento en su adopción en América Latina.