1. BEATIFICACIÓN DEL HNO. JOSÉ OLALLO Camagüey (Cuba) ~ 29 de Nov. 2008 (Encender los altavoces y dejar pasar de manera automática)
2. SITUACIÓN GEOGRÁFICA DE CAMAGÜEY Camagüey, lugar en el que se celebrará la Beatificación del Hno. Olallo Pero, ¿quién fue el Hno. Olallo?
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5. Durante estos años se vive en toda Cuba una situación de muchas dificultades de carácter socio-político. Camagüey no será una excepción: Escudo de la ciudad de Camagüey Pero ahí estaba él, testigo de la misericordia de Dios en medio de tantas dificultades Hambrunas Epidemias de cólera, viruelas y fiebre amarilla Revueltas independentistas Guerra de los Diez Años Consecuencias que trajo la Supresión de las Ordenes Religiosas
6. El 15 de diciembre de 1841, el hospital de Camagüey será declarado “hospital civil”, quedando su control en manos de las autoridades. Hospital San Juan de Dios de Camagüey Los religiosos serán apartados progresivamente de la administración del centro. En 1845 sólo quedan tres Hermanos, y en 1856 se reduce a dos. En este mismo año el Hno. Olallo es nombrado prior, manteniéndose en este cargo hasta su muerte. El año 1857 renuncia a todo tipo de administración en el hospital, dedicándose en alma y cuerpo a las labores de enfermería
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8. Otras facetas del Hno. Olallo: CIRUJANO Son muchos los testimonios que refieren su sólida formación y pericia como cirujano. “ ansiaba saber detalles de los últimos adelantos; sobre todo prefería los referentes a la cirugía. Con el tiempo llegó a ser un completo cirujano de acuerdo con los adelantos y prácticas de la época” Material para las amputaciones que realizaba el Hno. Olallo
9. FARMACÉUTICO Tenía un avanzado conocimiento en la preparación de tópicos y la homeopatía PEDAGOGO De noche enseñaba a leer y escribir a los niños pobres de la barriada. También se preocupaba de enseñar la doctrina cristiana a niños y jóvenes que venían al hospital DESPENSERO Como no tenía dinero, vivía de las limosnas que le daban, a pesar de su pobreza ponía a la puerta del hospital una cesta con pan para cuando pasaban los pobres y mendigos lo pudiesen coger, y así tuvieran algo que comer.
10. APRENDIENDO A VIVIR CON LA PROPIA ENFERMEDAD Al cumplir 69 años, se le ve cansado y enfermo. Le flaqueaban las piernas pero no su portentosa memoria. En medio de sus dolores nunca dejaba de sonreír, de ofrecer alguna palabra de consuelo a sus prójimos. A pesar de sus achaques sigue atendiendo a más de 80 enfermos y a cuantos acuden a diario en busca de auxilio médico o económico. Consciente de la propia enfermedad y gravedad de su estado, tiene que seguir “al pié del cañón”, pues no hay Hermano que le releve. Sus hermanos partieron hace ya tiempo y no intuye su vuelta. Él, sin embargo, se acuerda de los cuatro votos que profesó, haciéndolos vida cada día como buen Hermano de San Juan de Dios.
11. Su encuentro con el Señor En el momento de fallecer, se encontraba el Hno. Olallo recostado en su austero catre, por falta de respiración. Tenía el pié y parte de la pierna derecha muy hinchados. En la tarde-noche del día 7 de marzo de 1889, en paz y con su constante sonrisa entregaba su alma a Dios, el Hno. José Olallo Valdés. Todo Camagüey llora su pérdida, y de manera expontánea se organiza una multitudinaria peregrinación hacia el Hospital San Juan de Dios, en el que se hallaba expuesto su cuerpo Su entierro: “El día 10 de marzo, a las ocho y media de la mañana, sobre los hombros de cuatro pobres, vi salir del templo de San Juan de Dios, el cadáver de fray José Olallo Valdés, en olor de multitudes”
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13. Testigo de la misericordia vivida por Juan de Dios El recuerdo del Hno. Olallo, es para nosotros un consuelo, un bálsamo, una esperanza que nos hace confiar en el proyecto de Dios. Su próxima beatificación, será todo un acontecimiento para la Iglesia universal, y de manera especial para la isla de Cuba. Por fin podrá ser celebrado y aclamado como ejemplo de Hospitalidad En diciembre de 2007, una vez culminado el proceso sobre la vida y milagros del Hno. Olallo, Benedicto XVI hace público el Decreto para su Beatificación,.
14. La gran familia hospitalaria te invita a participar de este acontecimiento EL DÍA 29 DE NOVIEMBRE…, EN ESPÍRITU O EN PERSONA, IDENTIFICADOS CON EL NUEVO BEATO DE LA ORDEN HOSPITALARIA… “ TODOS EN CAMAGÜEY”
15. LA VIDA DEL HNO. OLALLO EN VERSOS A dos santos conoció: Claret y al padre Valencia, y a despreciar la violencia, de los dos él aprendió. El amor a Jesucristo que los dos santos tenían y por él tanto sufrían, en Padre Olallo hemos visto. Daba a los pobres comida del pan que él se quitaba, y a los enfermos lavaba la ropa siempre cosida. En epidemias cuidó, con cariño y con su ciencia, y una muy santa paciencia, a los enfermos que amó. A los presos ayudaba, y buscaba nueva vida en su patria muy querida, y de lo suyo les daba. Cuidaba a los africanos con afán y prontitud; salvar de la esclavitud pretendía a sus hermanos. Del Padre Olallo cantamos su bondad y su pobreza, y envidiamos su riqueza de Dios al que tanto amamos. De La Habana nos llegó religioso quinceañero; con un sólo compañero en Camagüey se quedó. Religioso Hospitalario hasta la muerte vivió y en la Virgen confió siempre rezando el Rosario. A los pobres visitaba y a los enfermos cuidó; de lepra a muchos salvó, y con todos siempre oraba. Ayudaba a bien morir con consuelo y con cariño, y con su alma de niño les hacía sonreír. A los niños enseñaba el catecismo y a orar, y les educaba a estar en la vida que empezaba. El último honor rindió al gran Ignacio Agramonte al que trajeron del monte ya cadáver que lavó. De santo tenía fama, y el pueblo sencillo y pobre siempre vio en este hombre al padre que mucho ama. La Iglesia reconoció el milagro realizado y el cielo ha alcanzado quien la santidad vivió. Por eso ha sido nombrado Beato y con emoción está en cada corazón como un hermano amado. Mons. Juan García Rodríguez Arzobispo de Camagüey. Presidente de la C.O.C.C. 2008