2. Alejandra Aguirre, Arancha García, Carolina García
2
La relación que hemos establecido como un trípode entre los tres procesos
implicados en el lenguaje tiene una doble proyección, puesto que además de establecer esos
vínculos inter procesos que hemos comentado anteriormente, la psicología ha determinado
igualmente la necesidad de establecer relaciones entre el lenguaje y todos y cada uno de los
procesos cognitivos tratados en el primer bloque como son las funciones ejecutivas, la
atención y el procesamiento de la información visual. Por lo tanto se puede hablar de un
proceso complejo en el que se establecen relaciones dinámicas entre todos y cada uno de
los procesos.
Dependiendo de las teorías de adquisición del lenguaje, podemos encontrar diversos
puntos de vista con respecto a la predominancia de uno o varios procesos sobre el resto. Si
establecemos como criterio predominante las capacidades cognitivas, que dependen
esencialmente del individuo, más que del entorno, podemos hablar de los planteamiento
constructivistas que ha planteado Piaget, en el que el lenguaje depende del conocimiento
que el niño tenga del mundo. Lo que nos llevaría a realizar una revisión de cuál es el mundo
que nuestros alumnos, sean del nivel que sea, conocen.
Sobre este planteamiento de Piaget, podemos retroceder unos pasos en el pasado de
la neuropsicología y ver como la necesaria interrelación social es vital para ese conocimiento
del mundo, planteamiento que recogemos de los postulados de Vigotsky en su obra
Pensamiento y Lenguaje, en cuyo título se establece un vínculo claro entre el conocimiento
que el niño tiene del mundo y sus procesos lingüísticos.
La evolución de ambos autores hacia la actualidad nos plantea y representa escuelas
sobre la adquisición y el aprendizaje del lenguaje que han fundamentado sus teorías en la
dificultad, y sobre la que han proyectado el aprendizaje esencialmente de una segunda
lengua desde la neurolingüística. Vemos en este caso los llamados métodos comunicativos
que parten en el aula de la dificultad morfológica o sintáctica para intervenir en la
adquisición (Daniela Rigamonti, 2006).
Si bien desde planteamientos constructivistas, el aprendizaje del lenguaje implica un
componente social, ¿también implica que fuera del mismo no haya posibilidad de
aprendizaje? A este respecto es Chomsky quien nos propone el innatismo lingüístico, de tal
modo que el individuo tiene la capacidad innata de aprender el lenguaje. Refuerza este
planteamiento las teoría de Krashen (Salas, 2012), con su teoría del enfoque natural, en la
que establece un orden natural en la adquisición de las reglas y estructuras de la lengua
materna. Este autor habla de la monitorización, lo que conlleva una relevancia en los
procesos morfológicos, sintácticos y semánticos por encima del resto.
Con estas perspectivas y otras que podríamos recoger en esta reflexión, podemos
establecer que los alumnos en el aula no siempre vienen con una adquisición regulada del
lenguaje y que debemos establecer una relación profunda con ellos de tal modo que
conozcamos las dificultades a las que se pueden enfrentar. Niños con bilingüismo, con poco
3. Alejandra Aguirre, Arancha García, Carolina García
3
conocimiento del mundo y una adquisición muy limitada, etc. Además, no es lo mismo
encontrarse esta problemática en un primer ciclo de primaria, que hacerlo en secundaria, la
respuesta y toma de decisiones no será la misma dependiendo del nivel en el que
encontramos estas dificultades.
Para terminar la reflexión no queremos dejar de destacar los puntos a tener en
cuenta en nuestro aula, todos desde una perspectiva constructivista (Ferreiro, 1991):
• El alumno no sólo es un receptor de aprendizaje, sino que también es
poseedor de conocimientos, es decir, tiene una cultura y un aprendizaje
previo a lo que conocemos de él.
• El alumno que no es capaz de asimilar información nueva a través del lenguaje
tiende a rechazarla (Piaget, 1976), de tal modo que debemos buscar el modo
en el que el alumno de sentido a lo que tienen delante, la experimentación,
en la que el juego es una posibilidad, por su capacidad motivadora, afectando
este a los procesos cognitivos básicos.
• Todos estos procesos son plantados por Piaget (1986) como esquemas
asimilatorios, es decir, mecanismos cognitivos de aprendizaje que el alumnos
adquirir para dar sentido a esa nueva información, de tal modo que podemos
introducir en el aula una reflexión metacognitiva que permita hacer
consciente al alumno de estos esquemas, para una posible mejora de los
mismos, o un refuerzo, esencialmente en las edades preadultas o adultas.
Bibliografía.
Bronckart, J. P., & Schneuwly, B. (1996). La didáctica de la lengua materna: el nacimiento de
una utopía indispensable. Textos de Didáctica de la Lengua y de la Literatura, (9), 61-78.
Ferreiro, E. (1991). Desarrollo de la alfabetización: psicogénesis. Y. Goodman (Comp.), Los
niños construyen su lectoescritura. Un enfoque piagetano, 21-35.
Piaget, J. (1976). Desarrollo cognitivo. España: Fomtaine.
Piaget, J. (1986). Psicología evolutiva. Madrid, Editorial Paidos, 296
Rigamonti, D. (2006). Problemas de linguistica de la adquisicion y ensenanza del e/le a
italofonos. LED.
Salas, O. L. C. (2012). Stephen Krashen: sus aportes a la educación bilingüe. Rastros Rostros,
14(27).
Vygotski, L. S., Kozulin, A., & Abadía, P. T. (1995). Pensamiento y lenguaje (pp. 97-115).
Barcelona: Paidós.