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25 AÑOS DE FRENTE
MEMORIA HISTORICA, IDENTIDAD Y DESAFIOS PRESENTES
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25 AÑOS DE FRENTE
Guía de contenidos
Soberanía Popular, Patriotismo-centroamericanista y
Justicia Social: Nuestra raíz original. 3
Heredero de las nobles causas del Pueblo 5
Nuestra vida es una lucha continua por una sociedad mejor. 6
La Guerra contra el pueblo 8
La Era de los grandes frentes populares 10
FMLN: Una estrella de cinco vértices 12
Semillas de Unidad 13
La Estocada al pueblo cristiano 15
Nacimiento del FMLN 16
El Ejército Popular 16
De la Guerra civil a la lucha por una nueva sociedad, justa
y para todos 17
FMLN, Nuevo e histórico partido 19
Luchar, desarrollarnos y avanzar hacia la victoria popular. 21
FMLN lanza el Proyecto de País 23
Las antidemocráticas elecciones 2004 25
Vencer al neoliberalismo por un futuro mejor, es el desafío 26
Sacar al país de la crisis 32
El desmedido aumento en el costo de la vida golpea
Cruelmente la vida de la gente 32
La Tragedia Macro social 33
Se cierra el círculo de la impunidad. . . . . 35
Tres tareas histórico – programáticas 36
Siempre Revolucionaria. . . La misión del Frente 38
FMLN, La esperanza del pueblo 40
FMLN, sujeto político de la lucha popular y nacional por
el cambio 41
Retos del FMLN para elevar su condición Democrático
Revolucionaria y Socialista 44
Para no perder el rumbo. . . hay que forjar un partido
Programático 45
La forma más digna de honrar a nuestros Héroes y
Mártires es. . . luchando. 46
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SOBERANÍA POPULAR, PATRIOTISMO-CENTROAMERICANISTA Y
JUSTICIA SOCIAL: NUESTRA RAÍZ ORIGINAL.
El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, FMLN, surgió de la justa lucha del
pueblo salvadoreño por la democracia política, la defensa de sus intereses más sentidos, la
justicia económica y social, su soberanía frente a la intervención y dominación extranjeras, su
autodeterminación y la defensa de la vida de sus hijos e hijas frente a la opresión social y la
represión política.
El FMLN es heredero directo de la resistencia heroica de nuestros antepasados frente a la
invasión española, primero, y contra la dominación colonial y la esclavitud. El Frente
reivindica la herencia independentista de hombres y mujeres1 que dedicaron lo mejor de sus
vidas a romper el yugo colonial en noviembre de 1811, el proceso de emancipación que
incluyó el alzamiento de enero de 1814, los movimientos que llevaron al 15 de septiembre de
1821 y al primero de julio de 1823, luego de resistir a la anexión por la fuerza al
Imperio de Iturbide y declarar la unión de las provincias de Centroamérica
“independie ntes de España, México y cualquier potencia extranjera”.
El alto ideario y los valores de soberanía, patriotismo e independencia nacional son ahora
principalmente representados por el FMLN. Nuestro partido es leal a los ideales de nuestros
predecesores, combatientes por la unidad Centroamericana independiente, encabezados por
Francisco Morazán quienes lucharon incansablemente por hacer realidad el proyecto
republicano de las “provincias unidas” centroamericanas y que fuera malogrado por
mezquinos intereses localistas (1838). Unidad de los pueblos buscada así mismo por los
libertadores latinoamericanistas, Simón Bolívar y José Martí, entre otros.
En el FMLN, cada uno de los hombres y mujeres que le integramos, mantenemos y elevamos
cada día más los principios y valores de esa pléyade patriótica que en el curso de la historia
se rebeló ante las injusticias sociales, el autoritarismo y la brutal negación de la democracia
con que se inauguró el viejo régimen, usufructuado por la oligarquía cafetalera. Caminamos
sobre la huella de aquellas generaciones a su vez encarnadas en Anastasio Aquino en el siglo
XIX y Prudencia Ayala, en los albores del siglo XX.
HEREDERO DE LAS NOBLES CAUSAS DEL PUEBLO.
El FMLN es también fruto y semilla de una cosecha sembrada por aquellos primeros núcleos
revolucionarios que se levantaron por la liberación social, forjados en los enfrentamientos con
la dictadura, su ejército y los cuerpos represivos, en los años veinte del siglo XX. Somos
continuidad del ejemplo temprano de los nonualcos, de Agustín Farabundo Martí, de la
Regional de Trabajadores, de la Confederación de Obreros Centroamericanos, del Partido
1 Nos referimos a heroicas mujeres como María Feliciana de los Angeles Miranda ejecutada
por sus ideas libertarias y a próceres como los presbíteros José Matías Delgado, Manuel,
Vicente y Nicolás Aguilar, General Manuel José Arce, Pedro Pablo Castillo, Juan Manuel
Rodríguez y otros.
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Comunista de El Salvador y de los héroes salvadoreños2, que desde las Segovia y desde el
suelo salvadoreño, acompañaron al Gral. Sandino en su lucha contra la invasión yanqui a
Nicaragua y de quienes en enero de 1932 estuvieron al frente de la insurrección popular,
bloqueada por el etnocidio tras el cual se instaló y perpetuó, 60 años, la dictadura militar,
a la que pusimos fin con los Acuerdos de Paz firmados en enero de 19923, fruto del
sacrificio del pueblo y de la iniciativa política del FMLN, de la abnegada, ingeniosa e
insobornable lucha político-militar del partido al que honrosamente pertenecemos.
La historia del FMLN tiene las más profundas raíces en la historia de las luchas populares,
por la libertad, el pan, el trabajo, la salud, la vida y la educación, por las necesidades
diarias y concretas de la gente.
Nuestro partido encarna los trascendentales ideales de quienes bajo la noche de militarismo
se trenzaron en una de las más justas guerras populares de la historia. Héroes y heroínas,
muchachos y muchachas, jóvenes y adultos mayores, combatientes guerrilleros, estudiantes
y campesinos, obreros y maestros, milicianos y autodefensas, intelectuales y cristianos,
religiosos y laicos, todo un pueblo junto al FMLN, y con la fraterna solidaridad de otros
pueblos, abriendo mañanas, poniendo fin a 60 años de militarismo y derrotando la guerra de
contrainsurgencia del imperialismo y la oligarquía.
El FMLN abrazado a su pueblo fue artífice de los Acuerdos de Paz y de la creación de
condiciones históricas en las que la gente pudiera vivir y luchar por sus derechos sociales y
la democracia, por la construcción de una nueva sociedad, en donde el mismo pueblo
conquiste y defienda la titularidad de la soberanía que le pertenece, como arquitecto de
su propio futuro y beneficiario del desarrollo… que es la causa inconclusa que legitima la
existencia y la creciente vigencia política del FMLN.
NUESTRA VIDA ES UNA LUCHA CONTÍNUA POR UNA SOCIEDAD MEJOR.
En la década del 50 y de los 60, América Latina era escenario de un profundo enfrentamiento
de los pueblos por sus aspiraciones más queridas, frente a la voracidad, la miopía y la barbarie
de las oligarquías lacayas y de su amo imperial, en el marco de una crisis mundial del
capitalismo y del fracaso de las políticas económicas y sociales antipopulares en cada uno de
nuestros países, condenados hasta entonces a una oprobiosa dependencia.
En el año 1959, sin embargo, un acontecimiento irrumpió aquel horizonte sombrío. Un hecho
histórico de calidad revolucionaria, que abre una nueva etapa en la lucha política de
nuestros pueblos por su liberación política, social y nacional. Fue el triunfo del pueblo sobre la
dictadura de Fulgencio Batista. Fue la Revolución Cubana.
2 En 1924 nació la Federación Regional de Trabajadores Salvadoreños, conocida como la Regional, que
organizó y dirigió la lucha de trabajadores por mejores condiciones de trabajo. Fundó la Universidad Popular
y con la consigna de “a organizar las ligas campesinas”, promovió la creación de sindicatos en el campo y la
ciudad. En 1928 nace el Partido Comunista Centroamericano, se libraron las luchas contra los filibusteros
norteamericanos en Centroamérica, como Nicaragua y Panamá.
3 La negociación del Acuerdo de Paz finalizó en diciembre de 1991.
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Entonces tiemblan las dictaduras. La lucha armada gana renovada vigencia como una forma
de lucha de los pueblos frente a la opresión armada de las tiranías genocidas, domésticos
peones de la llamada “Doctrina de la Seguridad Nacional”, para imponer los intereses del
“complejo militar-industrial” núcleo del poder imperial y de las oligarquías criollas.
Las fuerzas de la reacción se declaran enemigas acérrimas de la naciente obra revolucionaria
cubana. Su ejemplo político, su obra social y humana fue considerada el más peligroso
ejemplo para su poder y sus privilegios. Se recrudeció el despotismo, la barbarie y la mentira
institucionalizada con el propósito de impedir el desarrollo de los movimientos
reivindicatorios profundos y aplastar cualquier tentativa liberadora de los pueblos. La
estrategia contrarrevolucionaria era política, militar, social, económica y sicológica. Sus
componentes fueron los planes represivos contra la población, las acciones antiguerilleras, el
impulso de la guerra sicológica, las llamadas “acciones cívico-militares y el desarrollismo”.
Cuba fue amenazada entonces como ahora, aislada, militarmente agredida, atacada y sometida
largos años al ignominioso bloqueo económico contra su pueblo. Ello ha provocado, increíbles
sufrimientos humanos, pero no doblegó al pueblo, ni detuvo la titánica obra social, el
desarrollo humano y de dignidad nacional que hoy distingue en la historia mundial a la
Revolución Cubana.
En 1962 la izquierda hace un primer giro para responder con las armas al terror militar de la
dictadura, concibiendo al Frente Unido de Acción Revolucionaria, FUAR, que fue una
tentativa que no llegó a despegar.
INICIA LA GUERRA CONTRA EL PUEBLO
Fue rápido el fracaso del modelo basado en el llamado Mercado Común Centroamericano
hacia finales de los años sesentas. A él le acompañó el auge de las luchas sociales
reivindicativas, cívicas, obreras, magisteriales, estudiantiles. Frente a aquellos escenarios y
bajo los designios de Washington la dictadura en El Salvador declara abiertamente la
guerra, a través de la llamada estrategia de la Guerra Preventiva, que consistía en ahogar
a sangre y fuego, tortura y desaparición a los movimientos sociales. Se declaraba, de esta
manera, desde el régimen y de una manera unilateral una guerra sistemática y ascendente
contra el pueblo, con el objetivo expreso de “impedir el brote guerrillero o de ahogar al
niño en su cuna”, tal y como lo prescribieran los manuales del General Maxwell Taylor.
Esta es la guerra que fue origen, que fue causa de la elevación, aceleración y
agravamiento del conflicto.
El nacimiento de las organizaciones político-militares del pueblo en los 70’s fue posterior,
fue la consecuencia, fue la justa respuesta.
En esa misma coyuntura es que desataron la guerra fraticida honduro-salvadoreña, la
histeria militarista y seudo nacionalista. Con todo esto, el país fue hundido en una profunda
crisis política, económica, ideológica y social.
En ese punto histórico es que despega la lucha armada del pueblo, su proceso político-
militar. Nace y se consolida rápidamente la primera guerrilla revolucionaria. Con ello, la
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sangrienta etapa de la guerra preventiva contra el pueblo desarmado había fracasado.
El camino liberador político-militar se volvía indetenible.
La victoria de la oposición política coaligada en la Unión Nacional Opositora, que
incluía parte de la izquierda revolucionaria, en las elecciones presidenciales de febrero
1972, expresaba esta voluntad de cambio que animaba al pueblo. La dictadura militar, una
vez más burló aquella decisión cívica, mediante otro escandaloso fraude electoral y el
brutal ahogamiento de las libertades democráticas. Enseguida se intensificó el
escalonamiento guerrerista desde el poder y se opera el paso a la etapa propiamente
punitiva de la guerra contrarrevolucionaria: la guerra especial de contrainsurgencia
declarada por la dictadura y sus amos, en contra del pueblo salvadoreño.
La crueldad y la creciente fascistización del régimen no detuvieron la marcha popular. En
heroica lucha por sus necesidades sociales más graves y urgentes y como justa
respuesta al terror de la guerra contrainsurgente se desencadenó en el más prodigioso
oleaje social, masivo, organizativo, combativo, sistemático y sostenido; caracterizado por
unos ascendentes niveles de conciencia política, que dado aquél escenario objetivo, y la
existencia de las organizaciones revolucionarias políticas y militares, lograron muy
acertados niveles de combinación de las diversas formas de lucha del pueblo, políticas,
reivindicatorias, milicianas, de autodefensa, guerrilleras y organizativas, propagandísticas y
culturales, legales, ilegales y semilegales, pacíficas y altamente combativas, desatándose en
el país un verdadero p r o c e s o revolucionario.
La dictadura y la oligarquía agraria y financiera trancaron los caminos legales y electorales
para alcanzar el cambio en el poder gubernamental y la alternancia del mismo.
LA ERA DE LOS GRANDES FRENTES POPULARES
En aquella grave encrucijada, grandes frentes sociales integrados por organizaciones
obreras, campesinas, magisteriales, cristianas, universitarias, de secundaria, pobladores de
tugurios, mujeres, artistas, técnicos y profesionales nacieron y se formaron con una
celeridad extraordinaria para enfrentar la barbarie de la dictadura militar. Fue su lucha
combativa por la tierra, la tortilla, los frijoles, arroz y salarios, por el derecho a la
libertad de organización, a las libertades políticas, por los derechos humanos, por la defensa
de la propia vida, de la familia y de la comunidad, por el derecho mismo de soñar con una
sociedad justa y humana para sus hijos.
Fue sólo después de una intrincada, difícil y sistemática fase de trabajo clandestino y
semilegal, de organización y de concertación social, que se opera la irrupción y
lanzamiento de los Frentes sociales de nuevo tipo.
En 1974 surgían el Frente de Acción Popular Unificada (FAPU) y varias de las
organizaciones que en 1975 hacen el lanzamiento del Bloque Popular Revolucionario
(BPR). Posteriormente, nacen las Ligas Populares 28 de febrero (las LP-28) y el
Movimiento de Liberación Popular (MLP). Fue parte de ese gran torrente organizativo la
Unión Democrática Nacionalista (UDN).
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Esta multitud de movimientos sociales de izquierda lograron la más amplia incorporación y
movilización reivindicativa del pueblo conocida hasta nuestros días, caracterizada por su
conciente ataque a las raíces estructurales de la injusticia y la pobreza y por la
transformación revolucionaria de la sociedad salvadoreña, con una mística organizativa,
de disciplina, de combatividad y de compromiso sin precedentes.
Este poderoso empuje político-militar del pueblo frente a la masacre, la persecución, y la
negación atroz de un Estado de derechos estremeció al régimen desde sus cimientos. Los
frentes sociales y la guerrilla revolucionaria y sus propios fraudes electorales, habían
producido un desgaste estratégico a la dictadura presidida entonces por el general Romero.
El salvajismo del régimen era ya repudiado por la comunidad internacional. Para el año 79
había estallado la crisis nacional. Los de arriba ya no podían seguir oprimiendo al pueblo
como hasta entonces, y el pueblo, por su parte, ya no sólo no quería seguir siendo
oprimido, sino que estaba decidido a terminar con esa larga dictadura.
En este contexto se produce el golpe de Estado apoyado por Estados Unidos. Algunos
sectores democráticos apoyaron el golpe para impulsar algunas reformas, pero los militares
del alto mando asestaron rápidamente dieron un golpe de mano abortando el camino
reformista, en medio de la espantosa represión que ponía en evidencia que: el poder militar
estaba en manos de los fascistas, y principalmente que, para la contrarrevolución, aquellas
reformas no tenían como fin la solución de la crisis económica, social y política, sino el
único objetivo contrainsurgente de arrebatar banderas a las organizaciones político
militares y sociales para aislarlas, destruirlas y salvar al régimen.
UNA ESTRELLA DE CINCO VÉRTICES.
En aquellos días, operaban en El Salvador cinco organizaciones revolucionarias hermanas
que, habían desempeñado un papel decisivo, de mucha heroicidad e iniciativa, que
constituyeron el epicentro organizativo y convocante de la ofensiva política sostenida
contra el terror de la dictadura. Para 1979, estas cinco fuerzas, ya habían perdido a
centenares y centenares de sus mejores hijos e hijas quienes tiñeron con su sangre el suelo
patrio, muchas de ellas combatiendo con las armas en la mano a los esbirros del régimen,
educando al pueblo con ese ejemplo vivo de consecuencia, de total renunciación, de
entrega incondicional y desinteresada a la justa causa del pueblo. Aquel papel histórico
les había conferido altos grados de confianza y credibilidad entre los sectores más
concientes y honrados de la sociedad, un liderazgo legítimo.
Estas cinco organizaciones hermanas fueron:
(1) El Partido Comunista Salvadoreño (PCS) fundado en marzo de 1930; dos años
antes de la insurrección de 1932.
(2) Las Fuerzas Populares de Liberación FPL Farabundo Martí, nacida en abril de
1970, creada por un puñado de compañeros y compañeras salidos del PCS;
(3) El Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), nacido en 1972;
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(4) La Resistencia Nacional (RN), nacida en 1975 de una escisión del ERP;
(5) El Partido Revolucionario de los Trabajadores Centroamericanos (PRTC)
fundado en 1975, por compañeros y compañeras salidos del ERP.
En el año 79, ya muy avanzado el proceso revolucionario, las cinco organizaciones
revolucionarias actuaban desunidas en su lucha contra la dictadura, adoleciendo de agudos
niveles de sectarismo.
Sin embargo, el vertiginoso ascenso de la lucha popular, la incorporación creciente de la
población a la lucha político, social y armada, la crisis de poder de la dictadura, el
derrocamiento de la dictadura somocista con el triunfo de la revolución popular sandinista y la
inevitabilidad de la guerra civil, fueron factores que demandaron la unificación de las
fuerzas revolucionarias de nuestro país y su alianza con otras fuerzas democráticas,
sociales, políticas, intelectuales y religiosas del país.
SEMILLAS DE UNIDAD.
De esta manera, tres organizaciones de izquierda, las FPL Farabundo Martí, la Resistencia
Nacional y el Partido Comunista Salvadoreño, tomaron un primer y trascendental acuerdo,
el día 17 diciembre de 1979, de crear la Coordinadora Política Militar, CPM, como el
primer paso de unidad para enfrentar responsable y victoriosamente la crisis nacional de aquel
momento.
Destaca aquí la iniciativa de Schafik, de Ernesto Jovel, de Marcial y Ana María.
Un segundo paso, el 11 de enero de 1980, fue la constitución de la Coordinadora
Revolucionaria de Masas, CRM, integrada por los frentes populares vinculados a las cinco
organizaciones revolucionarias político-militares.4
LA ESTOCADA AL PUEBLO CRISTIANO.
En un desesperado intento por aniquilar la moral del pueblo, el 24 de marzo de 1980, los
enemigos de la verdad y de la vida asesinan al Arzobispo de San Salvador Monseñor Oscar
Arnulfo Romero, el más grande pastor de su pueblo que, desde el evangelio, enfrentó y
condenó las deshumanizadas atrocidades de la dictadura militar.
Pero aquel horrendo magnicidio perpetrado frente al altar mayor, no fulminó los ideales del
pueblo, no demolió su Fe, no le intimidó, ni le hizo retroceder. Antes bien, le hizo levantarse
para abrir caminos. A partir de entonces, ciertamente, los días de la dictadura estaban
realmente contados.
4 Se trata del Bloque Popular Revolucionario, BPR; el Frente de Acción Popular Unificado, FAPU, las Ligas
Populares 28 de Febrero, LP-28, y la Unión Democrática Nacionalista, UDN, y en mayo de 1980 se incorporó
la organización Movimiento de Liberación Popular, MLP, quedando así integrada la CRM con las cinco
organizaciones populares de la izquierda revolucionaria.
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El 18 de abril de 1980, la alianza entre la CRM y el Frente Democrático, integrado éste por los
partidos Movimiento Nacional Revolucionario (MNR), el Movimiento Popular Social
Cristiano (MPSC) organizaciones de pequeños y medianos empresarios, de profesionales y
técnicos independientes (MIPTES), universidades y otras organizaciones, dieron lugar a la
constitución del Frente Democrático Revolucionario, FDR. Aliado estratégico que acompañó
al FMLN en su lucha en el campo político y diplomático. Aquella sería una alianza estratégica
que duraría hasta que logramos poner fin a la guerra contrarrevolucionaria y a la dictadura.
Nos unió aquella hazaña y la lucha por un Gobierno Democrático Revolucionario –GDR-,
causa de la que es continuadora la membresía del FMLN.
En el desarrollo de aquellos escenarios, entre 1987 y 1989 los partidos MNR y MPSC,
construyeron junto al PSD, la Convergencia Democrática, para su inserción política en El
Salvador.
NACIMIENTO DELFMLN.
En mayo de 1980 se dio un paso superior al constituir la Dirección Revolucionaria
Unificada, DRU y una estructura de organismos conjuntos. El 10 de Octubre de ese mismo
año, nació el FMLN5.
El 10 de Enero de 1981, ante el escalonamiento militarista y represivo de la dictadura, el
FMLN lanza la primera gran ofensiva con el objetivo de derrocar al régimen. Desde el
inicio de esa Guerra Civil, el Frente enarboló su política de diálogo y negociación para
reducir los costos humanos del conflicto armado generalizado que había estallado. Aquella
iniciativa de dialogo fue rechazada por la dictadura y el gobierno Reagan quienes, dominados
por su paranoia guerrerista apostaron que la derrota y la destrucción total del FMLN y de los
sueños del país sería cuestión de días.
La seriedad, la legitimidad y fortaleza popular del FMLN, le valió el reconocimiento
internacional de gobiernos y pueblos, como FUERZA REPRESENTATIVA, expresión de lo
cual fue la Declaración FRANCO-MEJICANA.
El FMLN lideró la lucha social, política, militar y diplomática, durante los doce años de la
guerra civil que comenzó en enero de 1981 y culminó en enero de 1992 tras la firma del
Acuerdo de Paz en Chapultepec, y de la que el pueblo salió políticamente victorioso. La
Comisión negociadora fue encabezada por parte del FMLN, por Schafik Jorge Hándal,
miembro de la Comandancia General del FMLN.
Aquella agenda de la Solución Política Negociada de la guerra, ofertada y puesta en la mesa
de negociación por el FMLN y que desembocó en los Acuerdos de Paz, sentó las bases para
continuar, ya sin dictadura militar, la lucha hacia una nueva sociedad con democracia, justicia
social y con un desarrollo que se traduzca, en lo concreto, en una vida digna para las
5 Integrado por cinco fuerzas: las FPL; el ERP; la RN; el PRTC y el PCS. Para su constitución concurrió la
exigencia histórica planteada por los extraordinarios acontecimientos desatados porel pueblo organizado, la
sensibilidad política de las cinco dirigencias, la sabiduría de muchos de sus liderazgos colectivos, dentro de
los que adquirió relevancia la madurez de Schafik.
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mayorías populares y el progreso del país en general, bajo un ejercicio efectivo de la
soberanía popular en la toma de las decisiones y el goce pleno de autodeterminación
nacional.
EL EJÉRCITO POPULAR.
En esos doce años de guerra civil, el FMLN desarrolló con gran acierto la guerra
revolucionaria. Las unidades guerrilleras y el vasto movimiento popular dieron lugar al
desarrollo de un verdadero ejército popular: el Ejército Nacional para la Democracia
(END). Con su creciente poderío militar y popular, el FMLN avanzó hasta controlar gran
parte del territorio salvadoreño, construyó una inmensa base social, promovió el Poder
Popular y se constituyó él mismo, en un verdadero poder paralelo y alternativo. La
escalada militar intervencionista y su dictadura-mascota fueron derrotadas política y
moralmente, internacional y militarmente.
Todos los años fue condenado el gobierno por su brutal violación a los Derechos Humanos.
DE LA GUERRA CIVIL A LA LUCHA POR UNA SOCIEDAD JUSTA Y PARA
TODOS.
Con los Acuerdos de Paz comenzó el irreversible desmontaje de la dictadura y la construcción
democrática. Con ello se abrió un nuevo periodo de lucha del FMLN y del pueblo para la
edificación de una nueva sociedad.
Muy temprano, el diseño pactado en Chapultepec chocó con el esquema neoliberal fraguado
desde 1989, que sólo benefició a un minúsculo y excluyente grupo económico-financiero que
controlaba y usufructuaba los hilos del gobierno. De inmediato aceleraron la más salvaje
concentración de la riqueza económica, empotrando en la humanidad del pueblo el grillete
neoliberal y antidemocrático que hoy sufrimos, bajo el ardiente patrocinio de organismos
financieros internacionales del imperio, el FMI, el BM, la AID y el BID.
Pero rápidamente el neoliberalismo VINO sufriendo reveses políticos en el mundo, y
generando destructivas crisis económicas en regiones enteras del planeta, al tiempo que ha
profundizado la desigualdad y la miseria sobre la tierra, en clara evidencia de su fracaso.
En El Salvador ha transcurrido un poco más de once años de lucha política electoral,
parlamentaria, institucional, municipal y social, del FMLN y del pueblo, con el objetivo de
cambiar el salvaje “modelo” de capitalismo neoliberal, proponiendo en cambio, un modelo
productivo basado en la justicia social, la democracia participativa y la honestidad, rumbo a
una sociedad socialista de raíces salvadoreñas.
La firma de los Acuerdos de Paz fue producto de un intenso proceso de negociaciones, con
la intermediación y buenos oficios de la Iglesia Católica, las Naciones Unidas y finalmente
el Grupo de Países Amigos6. Todavía a finales de 1989, la dictadura se resistía a la
6 Integrado por Venezuela, Francia, México, España, Cuba y finalmente Estados Unidos
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Solución Política Negociada propuesta por el FMLN, aferrada a su concepción militarista
y revanchista del conflicto, de la total destrucción del FMLN y del movimiento popular.
Algunos de sus mandos habían hecho un millonario negocio de la guerra. Esta posición
obstinada fue derrotada con la ofensiva guerrillera del FMLN “Febe Elizabeth Velásquez,
hasta el Tope” del 11 de noviembre de 1989, sobre la capital y las grandes ciudades, refugio
de los altos mandos.
EL SACRIFICIO DE LOS PADRES JESUITAS
En su desesperación, el mando fascista del gobierno Cristiani, ordenó el asesinato de los
Padres Jesuitas y sus colaboradoras, intentando quebrar la moral del pueblo Cristiano.
Luego de la ofensiva, el Departamento de Estado y el Pentágono llegaron a la conclusión de
que la derrota militar del FMLN no era posible, que la dictadura había perdido hace rato la
batalla política y moral, y desde mucho antes la batalla diplomática, que su situación militar
era crítica y que había, entonces, que favorecer la solución negociada.
Así, luego de la gran ofensiva del FMLN se abrió posibilidades a los Acuerdos de Paz.
La Comunidad Internacional, a esa altura, promovía activamente la solución negociada del
conflicto en El Salvador. A partir del acuerdo de Ginebra en abril de 1990, con la
mediación de la ONU, se iniciaron dos años intensos de negociación, sobre el esquema de
acuerdos políticos y proceder luego al desmontaje del conflicto armado. Los conceptos
acordados en Ginebra fueron: el FMLN y el Gobierno son partes iguales en el proceso
de negociación, los objetivos del proceso son la democratización y el pleno respeto a
los Derechos Humanos, la Reconciliación. Y sobre esta base silenciar los fusiles, concluir
el conflicto armado y desmovilizar a las partes.
El acuerdo implicaba un cambio importante no sólo hacia la democratización política del
país, sino que pretendía sentar base para resolver a través del dialogo y la negociación
los agudos problemas económicos y sociales del país. De tal modo, la política neoliberal,
contraría al espíritu del Acuerdo de Paz.
Lo que sucedió es que los grupos económicos y derechistas opuestos al Acuerdo de Paz, se
reagruparon, en desde un primer momento incumplieron ciertos acuerdos, bloquearon su
esencia y adulteraron la mayoría de leyes surgidas del Acuerdo de Paz, a fin de vaciar
algunos de sus contenidos más importantes.
Hoy en día, por ejemplo, asedian y ahogan financieramente a la Procuraduría para la
Defensa de los Derechos Humanos, alteraron la doctrina y la estructura de la PNC, la
Inspectoría y la Academia Policial, contra reformaron los códigos penal y procesal penal y
no cumplieron las recomendaciones de la Comisión de la Verdad.
Así las cosas, es bien clara la regresión autoritaria. Las instituciones surgidas de los
Acuerdos de Paz han sido torpedeadas y están aprisionadas obedeciendo políticas
transgresoras de sus propios fines y naturaleza; mientras por otro lado, la situación
económica y social del pueblo empobrecido es cada día peor.
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FMLN, NUEVO E HISTÓRICO PARTIDO.
La fundación del FMLN como partido político, el uno de septiembre de 1992, fue un
acontecimiento que contó con la presencia de Monseñor Arturo Rivera y Damas, Arzobispo de
San Salvador y Monseñor Gregorio Rosa Chávez, como testigos de ese acto histórico y con la
firma de Miguel Mármol, eslabón viviente de dos épocas, 1932-1992.
Fue en realidad una conquista popular sin precedentes la legalización del FMLN. Porque el
Frente es en sí mismo, todo un patrimonio histórico, un partido de la gente, de la clase
trabajadora y de la patria entera.
Fue, sin embargo, hasta el 14 de diciembre de 1992, después de presentar millares y millares y
millares de firmas, muchas más de las legalmente necesarias, y de vencer las triquiñuelas de
la derecha, que el FMLN fue registrado como partido político legal.
Esta es, en verdad, una doble reivindicación histórica:
PRIMERO, Porque la legalización del FMLN, de la izquierda fue una conquista popular,
largamente soñada, largamente peleada;
SEGUNDO, Porque es toda una reivindicación nacional la conquista del pluralismo
político, la libertad de asociación y credo político, en donde nadie sea perseguido por sus
ideas, ni por su amor al pueblo.
Por eso es que el FMLN es patrimonio histórico y político, pero también moral de nuestro
pueblo.
Desde comienzos del 92 hasta las elecciones generales de marzo-abril de 1994, el FMLN
estuvo principalmente dedicado al fiel cumplimiento, consolidación y desarrollo de los
Acuerdos de Paz, a vencer la resistencia antidemocrática de la derecha pro oligárquica, a
incidir en la apertura de espacios para la participación popular y social, y a la
reorganización de sus propias estructuras internas con vistas a la jornada electoral.
LUCHAR, DESARROLLARNOS YAVANZAR HACIA LA VICTORIA POPULAR.
En las elecciones generales del 94, las primeras elecciones en que participamos, el FMLN
conquistó 15 alcaldías municipales y su primera Representación Legislativa de 21
diputados y diputadas.
De esa jornada, resultó segunda fuerza política del país en los comicios presidenciales y fue
promovido por el pueblo como la primera fuerza de oposición. Un saldo positivo para su
primera participación electoral
En el año 95 animado por aquellos avances y con un alto sentido de la responsabilidad frente
al pueblo y su decisión de cambio, el FMLN emprende la disolución de las cinco
organizaciones históricas que le integraron, para dar a El Salvador UN SOLO
PARTIDO, una sola gran familia efemelenista, democrática, revolucionaria y socialista.
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Prevaleció la idea de superar el anterior esquema de coordinación de cinco partidos, de un
frente penta partidario, para fortalecer y desarrollar al FMLN como la opción alternativa
como un solo referente, un partido sólido, unido y coherente, capaz de convocar al
pueblo a la victoria.
En el Estatuto, sin embargo, se introdujo más tarde una reforma, un capítulo admitiendo las
tendencias al interior del partido. Ello propició el aparecimiento e institucionalización de
grupos fraccionales y centros paralelos de decisión, que, en el marco de las diferencias que
amenazaban la naturaleza interna del partido y de su proyecto, dieron pie a una espiral de
confrontaciones y fracturas, y a la proliferación creciente de ideas y métodos incorrectos,
extraños al carácter del FMLN, que deterioraban su calidad y la calidad de su militancia, y que
es indispensable superar.
Luego del primer periodo de gestión legislativa y municipal y de lucha social y partidaria, el
FMLN experimenta en el 97 un verdadero salto de calidad:
1. Gana la capital del país y 54 de los más poblados municipios, lo que le permite gobernar,
desde lo local, a más de la mitad de la población salvadoreña;
2. Gana 27 diputados, a sólo un diputado del partido en el gobierno.
Para el año 99, había aflorado con mayor fuerza la diferencia de concepción y de proyecto,
que ponía en riesgo el rumbo del partido. El FMLN se vio entonces desgarrado por las
secuelas de aquella contradicción y debilitado en la justa electoral de aquel año.
En el año 2000 sin embargo, el FMLN vuelve a avanzar ganando 80 alcaldías incluyendo
otra vez San Salvador y 31 diputados, sacando una ventaja de dos diputados al partido en el
gobierno.
En el año 2003 nuestro Partido gana 74 alcaldía y 31 diputados, alcanzando más de 475,000
votos, cuatro diputados más y dos por ciento de los votos encima del partido que saquea
al país desde el gobierno.
FMLN LANZA EL PROYECTO DE PAÍS.
Dada la necesidad de contar con un diseño programático de mediano alcance, un poco más
delineado, que marcara un rumbo más allá de lo quinquenal e inmediato, y con el objeto de
contribuir a cohesionar al partido alrededor de nuestro proyecto, el FMLN inició en el año
2002 la más amplia y prolongada jornada de consulta, que produjo el Proyecto de País
Democracia, Prosperidad y Justicia Social.
Todos los esfuerzos partidarios desarrollados contribuyeron a cohesionar a la mayoría de la
militancia alrededor del proyecto, del compromiso con el pueblo y de mística hacia el
FMLN.
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Sin embargo, la década de los 90 había dejado sus secuelas. El contexto internacional de
aquella década, estuvo marcada por la implosión y el derrumbe de los regímenes estadistas de
Europa del Este, por la desintegración de la Unión Soviética, por la agresividad de los
“cruzados” de la llamada era Reagan y la embestida neoliberal en contra de las corrientes
democráticas del pensamiento social, su asalto a las empresas públicas, el
desmantelamiento del Estado Social, el autoritarismo economicista y la exacerbación del
pensamiento reaccionario, ultraliberal y neoconservador.
Como parte de toda esa histeria ideologicista de las derechas, las fuerzas hegemónicas del
capital financiero y transnacional a través del gobierno antinacional y su partido lacayo,
impulsaron una política tendiente a la cooptación, la compra y descomposición de partidos y
dirigencias que antes suscribían una pensamiento social. La Democracia Cristiana se derechizó
y fue corrompida en su cúpula por el poder corruptor de los oligopolios y del gobierno, al
punto de su pulverización y el abandono total del ideario socialcristiano, hasta el asalto de sus
despojos por la ultra reacción neoliberal.
El Movimiento Nacional Revolucionario (MNR) de Guillermo Manuel Ungo y de Héctor
Oquelí, genuina representación socialdemócrata del país, aliada por la democracia a
nuestro partido, en los momentos más cruentos de la historia, fue descarrilado de sus
principios y doctrina original y liquidado posteriormente, después de la dolorosa muerte de sus
dos líderes, cuya memoria es honrada a través de nuestra lucha por la democracia.
Pero la “industria del arrepentimiento”, como cabalmente le llama el escritor Eduardo
Galeano, también tocó a nuestra puerta. Tentó las más endebles figuras, que abdicaron del
compromiso con la causa más humana y progresista de la sociedad y renegaron de las
convicciones que han acompañado a nuestro pueblo en su indoblegable marcha por una
sociedad distinta y mejor.
Ciertos exdirigentes y pequeños grupos de afiliados se apartaron del camino, dejaron al partido
en su lucha, para transitar extraños carriles, inclusive el rumbo opuesto, enredados algunos
de ellos, en el obsesivo oficio de arremeter con saña y de conspirar a favor de la reacción para
destruir al FMLN.
Queda en nuestro partido la irrenunciable tarea de revisar y erradicar encallecidos métodos e
ideas erróneas, prácticas incorrectas, que tomaron prestadas (copiadas) de los partidos
tradicionalistas que están en descomposición; prácticas enteramente ajenas al carácter
revolucionario y revolucionador de la política y a los métodos correctos que deben
distinguir a la militancia efemelenista.
LAS ANTIDEMOCRÁTICAS ELECCIONES 2004.
En el 2004 el FMLN participó en las elecciones presidenciales con un candidato surgido de
elecciones internas, mediante voto directo y secreto, y con el PROGRAMA SOCIAL Y
DEMOCRÁTICO DE PAÍS.
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En el curso de la campaña para imponer su actual gobierno, la derecha desencadenó la más
enconada guerra sucia, de mentiras y miedo contra el FMLN, respaldada además por una
descarada intervención de personeros del gobierno Bush, desesperados ante la posibilidad
histórica de la alternancia democrática, que significaría una victoria del pueblo
salvadoreño.
Toda la marrullería de aquellos que abusivamente detentan el poder financiero y
político, no logró confundir ni atemorizar a todo el pueblo. Aunque inflado por aquella
campaña fraudulenta, el personaje impuesto por la argolla subió su votación de una manera
ciertamente mal-habida. El FMLN ascendió de 475 mil a 812 mil 500 votos limpios,
responsables y concientes.
Los resultados de esta jornada cívica y popular fueron posibles también gracias a las
participaciones convocante de importantes fuerzas pequeño y mediano empresariales,
productores, militares patrióticos en retiro, movimientos sociales, femeninos,
intelectuales y cristianos fieles al ministerio de Jesús.
En estos años, la obra municipalista y legislativa del FMLN es la más relevante y
ligada a las comunidades del país. Y su presencia en el Parlamento Centroamericano es
una contribución al ideario morazanista…. pendiente
Y pese al transfuguismo político que nos ha afectado, protagonizado por diputados y
algunos alcaldes que primero pidieron el voto popular cobijados con nuestra bandera,
para cambiarse de partido una vez en el puesto; pese a ello, la Representación Legislativa
del FMLN y nuestros concejos municipales que se mantienen firmes, como bastión de
dignidad, de iniciativa y de actitud insobornable… reserva moral y política del pueblo
en el parlamento.
VENCER AL NEOLIBERALISMO POR UN FUTURO MEJOR, ES EL DESAFÍO.
El neoliberalismo económico ha terminado colisionando, chocando, con las aspiraciones de
democracia, justicia y desarrollo en todos los sentidos. Por eso mismo, como pretendido
“modelo” global de sociedad estaba llamado a agotarse históricamente. Hoy es un
desastroso fracaso. Dieciséis años después de su entronización, la situación del país es
grave y desesperante la situación de la inmensa mayoría. Aquí ha fracasado el
neoliberalismo.
Por ello mismo, el dilema histórico de este periodo en el país, está determinado por la
exigencia de un nuevo modelo de sociedad en los campos económico, social, político,
cultural y ambiental.
El enfrentamiento por ese nuevo modelo se libra entre una minúscula élite oligárquica
aferrada a un capitalismo aberrante, usufructuado por ese mismo cartel financiero, atado
por completo a la globalización neoliberal, y que representa lo viejo; frente a una fuerza
política efemelenista y unos sujetos sociales que representan los intereses y motivaciones
populares y nacionales, que bregan por un modelo participativo, incluyente y equitativo
en ruta a una nueva sociedad.
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La necesidad histórica del nuevo modelo para El Salvador, es ahora más vigente que
nunca, porque el neoliberalismo se halla sin salida, pese al esquema remesa-TLC-
endeudamiento estéril dolarizado y la migración provocada, a través del cual se busca
capear la crisis. Sin embargo su obra fatídica está a la vista, arruinando inclusive a
importantes sectores del empresariado nacional, beneficiando exclusivamente a la rosca
oligopólica y a algunas empresas transnacionales.
De este modo se bloquea el incipiente proceso de democratización iniciado con los
Acuerdos de Paz, corrompiendo la institucionalidad del país y lanzando a la
desesperación a la mayoría de nuestro pueblo, al que brutalmente se le niega el derecho a
los servicios de educación, a la canasta alimenticia, la salud, vivienda, el trabajo y el salario
digno.
LA DIASPORA DE UN PUEBLO
Este régimen economicida rompe a la familia y expulsa fuera de fronteras a decenas y
centenares de miles de salvadoreños en busca de las oportunidades que aquí se le
niegan.
Es la dolorosa diáspora a la que ha sido sometido todo un pueblo. Dos millones 700 mil
salvadoreños sobreviven dentro de los Estados Unidos y otros millones en otras regiones
del mundo.
El costo humano es inmenso. Vidas valiosas perdidas en las rutas del emigrante, ahogadas
en el río Bravo o en el ardiente desierto de Arizona. Es muy alto el precio pagado por el
pueblo. Pero la desgarradora obra de los gobiernos de turno, es el gran negocio de la
argolla dorada.
Con el continuismo arenero, las extremas desigualdades se agudizan cada día más, se
empobrece a la familia, el pueblo es castigado por el más espantoso desempleo, se acelera
el deterioro de los recursos naturales y crece la vulnerabilidad ambiental; mientras la ola
delincuencial cobra magnitudes nunca vistas, con su orgía de muerte, frente al
burlesco teatro de la “súper mano dura”.
El FMLN ha asumido el desafío de superar en sus raíces y efectos esa profunda tragedia
humana que golpea a la inmensa mayoría de la población y el compromiso de luchar por el
nuevo modelo delineado en nuestra Constitución que ponga en el centro a los seres
humanos, a la sociedad y al bien común, en el que la economía esté al servicio de la
gente y no al revés.
La derrota política de la antigua dictadura militar salvadoreña, no marcó la recuperación de
la soberanía y autodeterminación de nuestro pueblo, ni el cese de la ingerencia política
norteamericana. Ahora, trece años después de la firma de los Acuerdos de Paz, El Salvador
ha experimentado una mayor pérdida de soberanía. Se instaló inconsultamente al pueblo y
sin consenso, una base norteamericana antinarcóticos en nuestro suelo. En la guerra civil se
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enclavó en Ilopango la base de la CIA para la región, escenario de la operación Irán-
Contras a través de la cual se realizó el trasiego más organizado y gigantesco de droga que
haya ocurrido en Centroamérica. Ahora se trata de un enclave del FBI.
Mientras se viola la ley internacional en otras partes, aquí, contra la voluntad del pueblo y
la oposición del FMLN se pretende instalar la Academia Internacional de “Aplicación de la
Ley” –especie de Escuela de las Américas-. Todo ello es el plus a la dolarización del país,
al TLC, al envió de tropas a Irak.
Frente al régimen vende-patria, el FMLN profundiza su carácter patriótico y su
vocación centroamericanista y latinoamericana, hacia una integración soberana para
enfrentar el desafío del progreso, la libertad y autodeterminación de nuestro pueblo.
El orden económico prescrito por la Constitución de la República desde los años 50, que el
FMLN promueve y defiende, trata del respeto a todos los empresarios, nacionales y
extranjeros, a los emprendedores de todos los tamaños, bajo todas las formas de propiedad,
y la promoción de un sector social de la economía con respaldo estatal, a modo de
ponerle fin a la infausta tradición de la extrema concentración de la riqueza, como ha
ocurrido de manera ostentosa con el neoliberalismo que se ha valido del Estado, desde
1989, para la rapaz reconfiguración de una oligarquía principalmente financiera.
El compromiso histórico del FMLN consiste en cambiar junto al pueblo la dramática
realidad del país y construir un porvenir basado en ese postulado constitucional que
“reconoce a la persona humana como el origen y el fin de la actividad del
Estado...cuya obligación es asegurar a los habitantes de la republica el goce de la
libertad, la salud, la cultura, el bienestar económico y la justicia social”.
Remontar la situación de pobreza que acongoja a más de la mitad de la población
salvadoreña significa poner en el camino de la reactivación de las pequeñas empresas, la
agricultura y la industria del país, también significa frenar las irregularidades en el
mercado y los abusos contra los consumidores.
Implica romper el injusto patrón neoliberal que pasó el monopolio de los servicios
públicos a las garras de monopolios y oligopolios privados, ilegítimos y
anticonstitucionales, una de las peores herencias de los gobiernos sufridos en los últimos
dieciséis años.
Asimismo implica rescatar al Estado para el bien público. Ya que ahora se halla
secuestrado a manos del exiguo grupo de poder que se enriquece sangrando el
Presupuesto General del Estado y usufructuando el endeudamiento público, y que son los
mismos que capturaron el sistema financiero, que no pagan impuestos y que, además, hacen
recaer los costos del agiotismo financiero sobre el pueblo y el empresariado productivo,
mientras terminan de afianzar el control corporativo de la economía del país, en su único
provecho.
Uno de los grandes retos que tiene el FMLN, entonces, es el de superar el estancamiento
y retrocesos del proceso de democratización, el estado de impunidad al haberse
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incumplido las recomendaciones de la Comisión de la Verdad. Mientras han tejido un
sistema de protección y encubrimiento a la corrupción delictiva en el Estado. Se trata
de reencauzar hacia la dirección democrático-transformadora a las instituciones a las que
se les ha cambiado el espíritu y la letra, pactados en el Acuerdo de Paz y en la
Constitución.
Necesitamos convertir a El Salvador en un país seguro y habitable. Lo que requiere
establecer y defender un verdadero Estado de Derecho, en donde las leyes tengan
efectivo cumplimiento y nadie, ni carteles económicos mafiosos, ni mandatarios
comediantes y corruptos, ni funcionarios, ni Cortes encubridoras, ni políticos venales,
nadie esté por encima de la ley, ni sobre el bien público. Que nadie quede fuera del
alcance de la justicia y sobre todo, que la población salvadoreña goce plenamente del
respeto a sus derechos civiles, políticos, económicos y sociales. El respeto a la
Constitución debe ser guía para la actividad del gobierno, para la actividad económica y la
vida ciudadana.
La impunidad debe ser erradicada en todos los órdenes y en todas sus formas.
El Salvador ciertamente necesita para desarrollarse un ambiente regional e internacional de
paz y seguridad. Resguardar, defender y ejercer la soberanía nacional, así como el
irrenunciable derecho de la nación salvadoreña, de nuestro PUEBLO-NACIÓN a la
autodeterminación.
En la promoción de la cooperación internacional para el desarrollo humano y económico,
nuestro país debe ampliar las relaciones con los países del mundo, con iniciativa y sin
discriminación alguna y basado en el respeto mutuo. Para ello debemos, junto a las
fuerzas progresistas construir una alternativa de integración económica, social,
política, cultural y ambiental desde los pueblos centroamericanos y latinoamericanos,
que se base en la cooperación y en la solidaridad, en el aprovechamiento de las
oportunidades y recursos de todos, para superar asimetrías y desventajas que la inserción
del mundo globalizado nos impone. Nos pronunciamos por construir la unidad de Centro
América y América Latina, la Patria Grande.
La Alternativa Bolivariana para América Latina, que se está desarrollando entre los
pueblos, nos muestra que OTRO MUNDO ES POSIBLE.
Asimismo nos unimos a la exigencia del último Informe Mundial sobre el Desarrollo
Humano, para que cesen las condicionalidades ignominiosas que se les impone a
nuestros pueblos a través de la llamada ayuda internacional y el endeudamiento
esclavizante.
SACAR AL PAÍS DE LA CRISIS.
El recetario neoliberal está en decadencia. Su ruinoso “modelo” exhibe una crisis crónica,
una caja de desgracias para la población:
1) EL DESMEDIDO AUMENTO EN EL COSTO DE LA VIDA QUE GOLPEA
CRUELMENTE LA VIDA DE LA GENTE:
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a) Los precios de todos los bienes y servicios de consumo básico para la familia se
disparan cotidianamente, bajo la complicidad del desgobierno Saca;
b) Los ingresos de la población se mantienen congelados, por obra del desgobierno
y de las argollas económicas, robándoles su escaso poder de compra;
c) La economía lleva más de diez años prácticamente estancada merced al
neoliberalismo, y no se hunde totalmente gracias a dos “flotadores” económicos
externos: las remesas de salvadoreños en el exterior y el creciente
endeudamiento estéril que apenas sirve para sostener con alfileres la
dolarización. Sin contar el flujo de dólares sucios que son lavados por el crimen
organizado a ciencia y paciencia del gobierno.
d) La crisis fiscal tras el fracaso de la injusta política tributaria y por el
irresponsable aumento del endeudamiento estéril en bonos estatales, que
nos impone además una creciente y multimillonaria carga como pago del
servicio de la deuda, que exige más endeudamiento para pagar deuda y no
para financiar la inversión pública social (educación, salud, vivienda, agua,
energía, etcétera);
e) Incremento del déficit para el pago de la deuda provisional (las pensiones), a
niveles insostenibles, después de la privatización de los ahorros extraídos del
sudor de los trabajadores en beneficio de dos bancos. Ello absorbe recursos
financieros presupuestarios y obligan al endeudamiento público, mientras las
AFP’s7 cobran comisiones abusivas a los empleados.
f) Crisis macro financiera igualmente insostenible a causa de la dolarización
totalitaria de la economía;
g) Balanza comercial con saldos crecientemente negativos prácticamente con
todos los países del mundo, con TLC y sin TLC, que se incrementa año con año
a causa de la apertura comercial y la dolarización;
h) La irresponsable apertura comercial ha llevado a la quiebra a sectores
productivos industriales y agropecuarios
i) Deterioro profundo del aparato productivo, un proceso de
desindustrialización estimulado por el gobierno arenero.
j) Una frágil situación política, sostenida por el costoso juego de apariencias de
una prefabricada imagen mediática de un presidente incapaz, que habla
mucho y no hace nada; cuya falta de voluntad política y de resultados
comienza a agotar su cajón de argucias y mentiras.
2) LA TRAGEDIA MACROSOCIAL
Las calamidades de la crisis macro social es el vergonzoso resultado del
neoliberalismo:
a) Con los gobiernos Flores-Saca los homicidios se han triplicado. El promedio
de muertos se ha elevado a más de once asesinatos por día; crímenes que en su
7 Administradoras de Fondos de Pensiones,empresas privadas que manejan los fondos de pensiones.
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mayoría quedan impunes, mientras un maquilladísimo presidente posa ante las
cámaras;
b) Casi 2 millones 700 mil salvadoreños emigraron a los Estados Unidos
huyendo de los gobiernos neoliberales. Año tras año se despedazaron 72 mil
familias por la expulsión de sus hijos víctimas del desempleo.
c) Al comenzar el año escolar 2005, unos 278 mil niños no asistieron al nivel de
parvularia, mientras que muchos centros escolares, urbanos y rurales, carecen
de aulas y pupitres8 y los niños y niñas reciben clases a la intemperie;
d) De los 100 municipios donde hasta hoy descubren su extrema pobreza, en
treinta de ellos, el analfabetismo, la repitencia, la deserción escolar, entre otros,
son crónicos, y requieren la concentración de esfuerzos financieros y
humanos, sostenidos y ascendentes, dentro de una política-estratégica seria,
que el gobierno, con su política de parches, se niega a impulsar;
e) Continúan las muertes infantiles por enfermedades comunes, como la diarrea,
que por la pobreza y la desatención gubernamental, adquieren el carácter
de epidemias, las cuales son totalmente prevenibles y que por tanto es
injustificable la pérdida de vidas.9 Es la vieja “historia” de una población
abatida por enfermedades y la falta de servicios públicos de salud y por el
infame desabastecimiento de medicinas cometido por el gobierno de Saca.
f) Se recrudece la violencia de género y la discriminación contra las mujeres
en todos los órdenes, impidiéndoles el pleno ejercicio de sus derechos y su
incorporación como sujetas activas y beneficiarias del desarrollo.
3) SE CIERRA EL CÍRCULO DE LA IMPUNIDAD, EL DETERIORO DE LA
INSTITUCIONALIDAD Y LA RUPTURA DEL ESTADO DE DERECHO:
a) Para afianzar el control totalitario del aparato estatal, la derecha prepara su
tentativa de fraude electoral para los comicios legislativos y municipales
de marzo del 2006;
b) El partido en el gobierno ha tomado ilegalmente el control de TSE10 y
sometió a la Corte Suprema a sus designios, impidiendo aviesamente la
legal desaparición de sus partidos apéndices PCN y PDC, que conforme al
veredicto democrático del pueblo, dado en urnas, debieron legalmente
ser desinscritos, de acuerdo a la decisión popular expresada en las
elecciones presidenciales 2004 y según lo establecido en el Código
respectivo. Les regalaron el llamado “salvataje político” pisoteando la
voluntad popular y el Estado de derecho. Todo con el objeto de comprar con
una mayoría borreguil y mal-habida dentro de la Asamblea Legislativa, que
8 El Ministerio afirma que adquirirá 500 mil nuevos pupitres para escuelas e institutos, cuando la matricula
total no aumentará en más de 50 mil estudiantes.
9 Según datos del mismo Ministerio de Salud Pública, se han producido 3 mil 473 casos más de enfermos por
diarrea respecto al mismo periodo de 2004. Tanto en hospitales del interior del país como en los hospitales
Bloom y Zacamil de San salvador, se ha reportado un incremento en las consultas por este tipo de
enfermedad.
10 Tribunal Supremo Electoral.
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sirva, no al país, sino a la rosca oligopólica y que tape los delitos de “cuello
blanco”.
c) De esta manera, pasando por encima de la ley, la Constitución y los
Acuerdos de Paz, el gobierno ha utilizado la corruptela de los
procedimientos y la corrupción política, para piratear esa “mayoría”
eventual a fin de imponer decretos antinacionales y antipopulares que
requieren mayoría calificada de 56 votos en el Organo Legislativo;
d) Las fuerzas de la reacción, apuntalan un régimen hiperpresidencialista al
estilo más absolutista, como un dócil enclave al servicio del cartel
oligopolio;
e) Han pervertido y sometido a un retroceso antidemocrático a
importantes instituciones estatales nacidas de los Acuerdos de Paz,
como la PNC y han desatado un asedio y un bloqueo sobre otras que no son
del agrado de las fuerzas autoritarias, como la Procuraduría para la Defensa
de los Derechos Humanos;
Todo ello en un proceso de pérdida creciente de soberanía y
autodeterminación.
En resumen, a la dictadura militar -luego de un corto respiro democratizador- le ha
sucedido un régimen neoliberal autoritario, inepto y corrupto, al que es del más alto
interés nacional derrotar para retomar el camino de los cambios contenidos en el
Acuerdo de Chapultepec y en el Programa Social y Democrático de país postulado por
el FMLN.
TRES TAREAS HISTÓRICO-PROGRAMÁTICAS
Para alcanzar el progreso y el desarrollo humano, el FMLN se ha trazado tres tareas
programáticas fundamentales, buscando la concertación y la confluencia con todos los
sectores nacionales en torno a ellas:
PRIMERO . COMBATIR LA POBREZA: para garantizar seguridad social, salud,
educación, vivienda, empleo, seguridad alimentaria, atención a la niñez y a la juventud,
equidad entre mujeres y hombres, y prevención de riesgos.
SEGUNDO . SACAR AL PAIS DE LA CRISIS ECONOMICA: mediante un
programa fundado en el interés nacional y de las mayorías empobrecidas y excluidas
por la política gubernamental; a fin de impulsar la recuperación y el desarrollo de
los sectores arruinados por las políticas económicas neoliberales, la reactivación
productiva de los agricultores, de la micro, pequeña y mediana empresa y el
mejoramiento de las condiciones de los trabajadores y de las familias en el campo y
la ciudad.
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TERCERO . RESCATE DE LA SOBERANIA NACIONAL Y CONSTRUCCIÓN
DE LA DEMOCRACIA: resituando en su justo lugar el valor de lo público y del
Estado, teniendo como ejes la promoción, vigencia y defensa de los derechos
humanos, la participación efectiva del pueblo en las decisiones y transformaciones
del país, la equidad de género, la descentralización y desarrollo local, la defensa y
recuperación del medio ambiente y la integración centroamericana i n d e p e n d i e
n t e.
Las tres avenidas de acción antes señaladas inscritas en nuestro Proyecto de País, buscan
sentar las bases que permitan la aproximación dinámica a una sociedad justa,
profundamente democrática, soberana, culta, altamente productiva, prospera,
equitativa, saludable y solidaria que posibilite la elevación en la calidad de vida de las
personas, yendo a sus raíces para realizar a plenitud el ideario social y democrático
preceptuado en la Constitución de la República.
Castigadas por el tormentoso mar de calamidades irresueltas, pero estimuladas al mismo
tiempo, por el trabajo convocante del FMLN, ciudadanías cada vez más despiertas, están
tomando conciencia y pronunciándose por una democratización real del país y por un
cambio del rumbo impuesto por el perverso programa económico implantado por Arena.
Fuera de las argollas doradas, la sociedad entera demanda justas reglas de convivencia
económica, social y política, en donde primen los intereses de las mayorías y desarrollen
principios de transparencia, concertación, inclusión y equidad para solucionar los graves
problemas nacionales, poniendo un basta ya, a una etapa de intolerancia, soberbia e
imposición de decisiones tomadas a espaldas de la gente y en contra de sus intereses.
SIEMPRE REVOLUCIONARIA… LA MISIÓN DEL FRENTE.
Los ideales del Frente resumen el paradigma, el sueño de sociedad por el que vivieron,
se sacrificaron y ofrendaron sus vidas millares de los mejores hijos e hijas del pueblo
salvadoreño, cuya bandera nos confiaron.
Por eso mismo, el FMLN dirige sus esfuerzos hacia la transformación del sistema injusto
para edificar, en su lugar, una sociedad socialista profundamente humana y
DEMOCRÁTICA de raíces propias (salvadoreñas) y nutrida de los más altos valores
de la humanidad.
La nuestra es una misión que está entrando en una hora decisiva, más difícil y compleja. La
oligarquía financiera y el nido de transnacionales que sojuzgan y devoran al país,
pretenden someter al pueblo al totalitarismo corporativo del capital especulativo,
adueñarse enteramente de El Salvador, demoler los pilares del Estado Social y
Constitucional de Derecho, perpetuar el autoritarismo, titerizando y corrompiendo al
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sistema de partidos, vaciándoles del mínimo sentido social y patriótico y mandando al
destierro a la ya olvidada ética política.
El exilio social que representa el proceso de migración, pero especialmente los ultrajes a la
soberanía mediante las nuevas modalidades neocolonizadoras del imperio, imprimen a
nuestra lucha y a nuestro partido una renovada vigencia de su carácter de L I B E R A C
I Ó N N A C I O N A L.
Pese a la embestida contra democrática de la reacción contra el país, pese a su virulencia
contra el FMLN, nuestro partido se enaltece por una militancia que ha sabido mantener su
fidelidad al pueblo y a los intereses nacionales. Es la lealtad inquebrantable con la causa
revolucionaria. Conducta, ideas y principios, sacrificio colectivo que le han forjado y
que le han permitido avanzar y mantener abiertas las compuertas hacia el futuro.
Tal es nuestra identidad.
FMLN, LA ESPERANZA DEL PUEBLO.
No cabe duda que, la esperanza del pueblo es un bien supremo, el derecho a un presente
promocionante de la vida y a un mañana de alegrías, justicia y prosperidad equitativamente
compartida.
Esa es la divisa del FMLN y el compromiso de toda una vida, de su militancia,
hombres y mujeres de todas las edades, de todas las condiciones sociales y de todos los
credos. Construir y no defraudar la confianza del pueblo es tarea fundamental del FMLN.
Acercar esa esperanza con trabajo honrado, con lucha permanente y altamente
efectiva, con el ejemplo, con la solidaridad y con las victorias junto al pueblo.
Resolver la crisis que sufre el país y abrir brechas al futuro requiere de la unidad del
pueblo. Y la unidad del pueblo, reclama a su vez la unidad del FMLN. Por ello mismo,
es preciso fortalecer la unidad programática, organizacional y de la línea política
estratégica y táctica del FMLN.
Demanda al mismo tiempo concertar con todas las fuerzas sociales y políticas, propiciar
una gran alianza a nivel nacional, regional y local, invariablemente basada en los
intereses del pueblo y de la nación, en dirección al cambio que signifique soluciones
justas y sustentables… soluciones de verdad.
Programáticamente, el FMLN representa, el futuro mejor para la gente, aquella esperanza,
la reivindicación de los anhelos populares.
Frente al chantaje, el terror y el miedo, la corrupción y el cinismo político de la derecha y
sus allegados, debe sobreponerse la actitud comprometida, erguirse la verdad; la
resolución de luchar, la decisión de vencer y de llevar las justas banderas hasta el fin.
FMLN: SUJETO POLITICO DE LA LUCHA POPULAR Y NACIONAL POR EL
CAMBIO.
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El Frente tiene ante sí, no sólo el reto de consolidarse como el sujeto político, ideológico y
organizativo de la justa lucha contra el neoliberalismo, como lo ha sido, sino el deber de
generar condiciones claras para que el pueblo mismo, DE MANERA PARTICIPATIVA
Y DIRECTA, esto es, con sus propias manos, modele su presente y su futuro.
Pese a los embates de los zares del mercantilismo, de su gobierno y sus instrumentos
políticos, pese a la descomunal maquinaria de la desinformación y el engaño, el potencial
del FMLN se ha centuplicado.
Hoy en día para cumplir con su misión histórica, es clave su cohesión humana y
política, su unidad interna alrededor de su programa, una sola estrategia, sus valores y
principios democrático-revolucionarios y socialistas, una sola y legítima dirección y una
sola organización política, en fin, una sola bandera.
Ello nos impone el deber revolucionario de erradicar cualquier centro paralelo de
decisión, la tendencia al fraccionalismo, así como el combate a los métodos de trabajo y
de dirección incorrectos en los distintos planos de la vida partidaria, local, departamental,
nacional y sectorial.
Esos superiores niveles de disciplina y cohesión consciente y democrática, permitirán
impulsar con acierto, efectividad y éxito la organización del pueblo, concitar la más
amplia alianza y desatar el creador embate de sus fuerzas políticas y sociales en los
diferentes escenarios de lucha.
Ello reclama la promoción de métodos correctos, el debate sustancial y con espíritu
partidario sobre los problemas de la realidad, del proceso y del partido con
PROFUNDIDAD, RESPETO Y SABIDURÍA POLÍTICA.
La estrategia, el programa, la conducción, la unidad y la acción creativa de la
militancia forman un todo necesario, para que el FMLN se reimpulse como un solo
puño contra los enemigos del pueblo y de la patria; para producir las conquistas
populares y soluciones, para movilizar al pueblo titular de la soberanía, alrededor de
sus derechos y aspiraciones.
La alta efectividad política que se requiere para cumplir honrosamente (y no sólo
declarativamente) estas finalidades, está relacionada ante todo, con la CALIDAD de su
militancia, dirigencias y liderazgos a todo nivel, aunque también con la cantidad, la
masividad de la incorporación del pueblo y de los mejores hijos e hijas de El Salvador a las
filas simpatizantes y militantes del FMLN.
De ahí la especial importancia de la formación, de la educación política, teórica,
ideológica y –dentro de ella- también ética de cuadros a distinto nivel, lo mismo que la
capacitación técnica para el exitoso despliegue de la lucha política y del servicio público
efemelenista en lo municipal y legislativo.
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La revitalización institucional y la elevación de la calidad humana y política interna,
posibilita la superación de las debilidades, el potenciamiento de las fortalezas y permite la
readecuación de sus estructuras para enfrentar los desafíos planteados y mejorar el
funcionamiento de las mismas, en su dimensión nacional, departamental y municipal.
El FMLN refrenda su condición de PARTIDO DE LUCHADORES SOCIALES y
políticos permanentes, y el reconocimiento de que en su íntima unidad con el pueblo, así
como en la sólida convicción de su membresía descansa su fuerza y su perspectiva de
triunfo definitivo.
Cada día, es un acto de reafirmación del FMLN en su carácter y misión revolucionarias,
cuestionante y rupturista del capitalismo salvaje que expresamente fustigara ya Juan Pablo
II, en ruta a la sociedad de la plena realización humana: el socialismo modelado por el
mismo pueblo sobre sus genuinos intereses y sus propias vertientes históricas de:
soberanía, patriotismo, justicia social, democracia, solidaridad, desarrollo, equidad,
sustentabilidad ambiental y humanismo social que han delineado su historia.
Todo ello reclama de la militancia redoblados esfuerzos, una sólida organización de los
comités de partido, movilización, unidad y acción creativa, diversificar y ahondar todavía
más nuestra relación permanente y sistemática con la población de nuestro municipio,
colonia, barrio, comunidad, lugar de trabajo o de estudio, explicándole y escuchándole
constantemente.
Se requiere para ello un fino y esmerado trabajo comunicacional, de esclarecimiento y
de educación política al pueblo. Es realmente decisivo el ágil seguimiento y la transmisión
cuidadosa de la información, generando y garantizando superiores niveles de conexión e
identificación con la población. Llevar la MISIÓN VERDAD a todos los rincones y
organizar TRIBUNAS LEGISLATIVAS Y MUNICIPALES.
RETOS DEL FMLN PARA ELEVAR SU CONDICIÓN DEMOCRÁTICO
REVOLUCIONARIA Y SOCIALISTA.
En la actualidad, se nos plantea la exigencia de perfeccionar al partido: en lo ideológico,
en su línea política estratégica y táctica, en la calidad de su militancia, con su modelo
organizativo, en su sistema de trabajo y conducción, en su vida interna y su enraizamiento
en el pueblo.
De manera especial debemos sacudirnos y superar el excesivo condicionamiento y la
influencia perniciosa del submundo electoral, que aunque es un escenario decisivo,
está infectado de vicios, métodos, cálculos y estilos deformantes, propios de los
partidos engendrados por el sistema.
Hay que asumir consecuentemente que la formación política ideológica de nuestras base
militancia debe cualificarse en la ACCIÓN SOCIAL, como también en la vivencia
sentida y activa de la solidaridad de nuestro pueblo con los pueblos del mundo en sus
justas causas.
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Para realizar este proceso de perfeccionamiento partidario, debemos partir del más agudo
análisis critico de la realidad nacional e internacional y sus dinamismos, de sus riesgos y
amenazas, pero también de los factores tendencialmente favorables que nos brindan
potencialidad ofensiva, buscando siempre el sentido de la posibilidad a los cambios.
Sobre esa base es preciso desarrollar nuestra estrategia política combinando
creadoramente la lucha social, como LA FORMA DOMINANTE, con la lucha local
comunitaria apoyándonos en los gobiernos locales, lo mismo que con la lucha
parlamentaria y electoral para responder efectivamente a las expectativas populares. El
viraje a una más acertada combinación de estos escenarios es tarea de primer orden.
PARA NO PERDER EL RUMBO . . . HAY QUE FORJAR UN PARTIDO
PROGRAMÁTICO
Todo el pensamiento y acción del partido y su militancia, toda su iniciativa, de
concertación y lucha, debe observar un claro sentido programático, es decir,
estar enfilada hacia los objetivos y tareas de nuestro Proyecto de País y del
Programa alternativo. Por eso es que hoy en día es preciso fijar la mira en:
1. Redirigir los recursos del Estado y hacer la reforma económica en función
del desarrollo productivo del país para generar riqueza, realizar una justa
distribución de esa riqueza socialmente producida y reducir hasta erradicar la
pobreza;
2. Invertir estratégicamente en el desarrollo social, especialmente en el
sistema de salud y en la educación;
3. Poner en marcha una política económica y del Estado para generar
empleos, mejorar los ingresos a fin de poner la canasta básica al alcance de
la familia;
4. Superar el estado de criminalidad y todas las impunidades;
5. Profundizar la reforma política democrática y abrir paso a la reforma
económica y social, en beneficio de los excluidos;
6. Defender y promover los derechos de la niñez, la juventud, las mujeres, los
anciano y discapacitados;
7. Revertir la acelerada y casi irreversible destrucción del medio ambiente,
entre otras tareas.
LA FORMA MÁS DIGNA DE HONRAR A NUESTROS HÉROES Y MÁRTIRES
ES . . . LUCHANDO.
El 25 aniversario de su fundación encuentra al FMLN ante a la posibilidad histórica del
cambio de modelo económico y la derrota del autoritarismo político; posibilidad abierta
por aquellos y aquellas que entregaron sus energías y hasta su vida por las aspiraciones
libertarias de nuestro pueblo. Héroes, heroínas y mártires de la larga lucha por El Salvador
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y su pueblo, que hicieron del FMLN la fuerza decisiva del cambio alternativo que
necesita el país, emblema de lucha, compromiso y consecuencia en el concierto de los
pueblos.
Dar a nuestra “utopía” el sentido de la posibilidad efectiva, es la consigna. Lograr el
vuelco histórico en favor de los ofendidos, por la democracia progresiva y profunda, la
prosperidad económica y social para todos, es la forma más digna de honrar a nuestras
heroínas y héroes, combatientes revolucionarios que consagraron sus vidas a la misma causa a
la que los efemelenistas de hoy dedicamos nuestras vidas…
Mauricio Gonzalez Domínguez, Rafael Aguiñada Carranza, Rafael Arce Zablah, Felipe Peña
Mendoza, Roque Dalton, Enrique Alvarez Córdova, Juan Chacón, Lil Milagro Ramírez,
Mélida Anaya Montes, Capitana Ileana, Mario Zamora Rivas, Justo Mejía, Antonio Handal,
Jaime Veliz, José Roberto Sibrián, Francisco Veliz, Clara Elizabeth Ramírez, Andrés Torres,
Carlos Fonseca, Luis Díaz, Apolinario Serrano, Antonio Cardenal, Humberto Mendoza, Marta
Castillo, Graciela Menjivar, Celia Margarita Alfaro, Camilo Turcios, Mario López, Jurg Weis,
Alejandra Bravo, Madeleine Lagadec, Febe Elizabeth Velásquez, Francisco Hernández
Sermeño y tantos otros hijos e hijas de nuestro pueblo y de los pueblos del mundo caídos en El
Salvador.
Con ellos hay que honrar la memoria imperecedera de periodistas, sindicalistas, estudiantes,
mujeres, niños y niñas, maestros y maestras, campesinos y campesinas, que ofrendaron sus
valiosas vidas por la liberación social. Honrar a los mártires del evangelio, quienes, como el
más grande pastor viviente de nuestra patria, Monseñor Oscar Arnulfo Romero, los
padres jesuitas, Ernesto Barrera, muchos sacerdotes, monjas y predicadores
evangélicos que a través de su magisterio ofrendaron sus vidas por los intereses del pueblo y
la Nación, en una genuina opción preferencial por los pobres.
Un laurel para Schafik.
Y antes de cerrar el memorial del 25 Aniversario, debe quedar profundamente impreso
nuestro ferviente homenaje al más destacado líder de la izquierda salvadoreña, Schafik
Jorge Hándal, a su vida, su huella, su aporte, a sus enseñanzas.
A ellos, a Schafik y a las madres y familiares de todas las víctimas del conflicto, se les
honra con la vocación de servicio, nuestro activismo incansable, la rectitud política, la
incorporación desinteresada a la lucha, la conducta insobornable, la disposición al
sacrificio, pero sobre todo con las conquistas, logros y victorias en beneficio de los y
las pobres y excluidos.
Somos continuadores de su obra. La existencia misma del FMLN, su programa y nuestra
vida militante es el eterno homenaje que debemos a nuestras compañeras y compañeros
caídos en la lucha.
Hoy, como aquel 10 de Octubre de 1980, el FMLN empuña indeclinablemente la bandera
de las causas justas y las formas legítimas de la lucha popular.
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Somos un partido que hemos hecho historia, mucho camino. Y para nosotros esa memoria
histórica es consustancial a NUESTRA IDENTIDAD POLÍTICA
REVOLUCIONARIA.
Al recordar a nuestros hermanos ausentes, nos enaltecemos reconociendo que la lucha
conciente del pueblo y su propio sacrificio hicieron posible convertir al FMLN en un valor
nacional, en la primera fuerza política, en insignia de cambio y futuro. Por eso mismo,
nunca el partido abandonará, ni renegará de su aspiración originaria de democracia,
justicia social, progreso y bienestar que reclama la población salvadoreña.
Este 25 aniversario es un acto de reconfirmación programática y es el despegue de una
nueva etapa de jornadas y de conquistas populares por el derecho a un salario digno,
por el derecho al trabajo, a la canasta familiar, por derrotar la especulación de precios,
exigir la salud gratuita, el acceso al agua, la educación, la vivienda segura; por la derrota
a la criminalidad común y a la delincuencia gubernamental que saquea los dineros
públicos, por detener el endeudamiento inútil y derrotar la pretensión de pagar esa deuda
subiendo la carga sobre el pueblo.
Es el reimpulso del FMLN hacia una nueva victoria, hacia una Asamblea Legislativa en
la que prevalezcan los intereses populares con una mayoría efemelenista y más
gobiernos municipales que con su obra y con el decisivo empuje popular marquen un
¡BASTA YA! Y posibiliten el cambio de gobierno en el 2009.
El 25 aniversario es seguramente el despegue de una nueva etapa para construir
soluciones y acercarnos al gran sueño de nuestra gente de una sociedad mejor.
REVOLUCIONARIA SIEMPRE!
. . . LA MISIÓN DEL FRENTE
HONRAR A NUESTROS HÉROES, HEROÍNAS Y MÁRTIRES
HACIENDO FUTURO.