1. CONCIENCIA
Titulo: Conciencia Del Yo De La Personalidad Humana
Nombre del alumno: LLontop Baldera Yessenia Anataly.
Institución: Universidad Católica Santo Toribio De
Mogrovejo.
Chiclayo _ Perú
2. Resumen
El trabajo elaborado se inicia con una breve ubicación.
Que es la conciencia como punto de partida de la
presentación de sus referentes conceptuales principales. A
continuación ofrecemos la conciencia del yo de la
personalidad humana, conciencia y verdad, conciencia
humana, también tipos de conciencia en la cual tenemos la
conciencia moral y la conciencia psicológica.
Palabras claves: la conciencia personal es reclama como un
derecho fundamental del hombre, y la conciencia como fuente
de la misma, cada cual tiene su propia conciencia, La
conciencia no obliga por si mismo si no por que refleja la
verdad.
Abstract
The work produced begins with a brief location.
That is the consciousness as the starting point of
presenting their concept concerning major. Here are the
conscience of the self of the human personality,
consciousness and truth, human conscience, also kinds of
consciousness in which we have the moral and psychological.
Key words: the personal conscience is claimed as a
fundamental human right, and consciousness as the source of
it, everyone has their own conscience, consciousness does
not obligate himself if not for that reflects the truth.
3. 2
INTRODUCCIÓN
La presente investigación sobre la “CONCIENCIA” ha sido
elegido con la filosofía con el conocimiento de conciencia
humana, esta dirigida a brindar información, la conciencia
del yo de la personalidad humana es importante también
tipos de conciencia de manera que la conciencia psicológica
nos permite saber a conocer tomar conciencia de si mismo,
del propio actuar que tiene cada persona.
Además la conciencia no obliga por si mismo si no por que
refleja la verdad, porque es instrumento de la verdad.
Ahora bien, la verdad no es algo que se crea si no algo que
se descubre, mientras que la persona moral; tiene
conocimiento de si mismo. es el estado de madurez
suficiente que le permite darse cuenta de su existencia y
lo que hace o deja de hacer .Por lo tanto la conciencia es
un juicio sobre el bien y el mal de nuestras acciones ,
conocimientos que el espíritu humano tiene su propia
existencia.
Así mismo puedo afirmar; según Sayis J. (1997); cada cual
tiene su propia conciencia; por eso la conciencia es el
lugar del dialogo del hombre de Dios; es por eso que la
conciencia consiste en servir y hacer la verdad.
4. 3
Como idea principal, ser conciencia es ser capaz de conocer
según el ser, el ser de las cosas. La primera afirmación
“SOY CONCIENCIA” significa ser “soy ser”. Dar a conocer, el
conocimiento que se Adquiere por los sentidos y la
conciencia de nosotros mismos. Es por este motivo este
trabajo me sirve mucho para mi porque da a saber a
conocer que hay cosas reales independiente de la
conciencia con sus contenidos.
La conciencia es obviamente una de las maravillas del ser
humano y es lo que realmente nos permite darnos cuanta de
lo que somos realmente, criaturas especiales, resultado de
una mente inteligente.
Además se espera que este trabajo sirva como ayuda o guía
para otros y les sirva a los profesionales de la psicología
que se interesan por este tema.
5. 4
Sumario
Introducción
CAPITULO I: Conciencia
1.1 Que es la conciencia.
1.2 Conciencia y verdad.
1.3 Conciencia humana.
1.4 Conciencia católica y conciencia protestante.
CAPITULO II: Tipos de conciencia
2.1 La conciencia moral
2.1.1 Modalidad de la conciencia moral.
2.1.2 Pruebas de la existencia de la conciencia moral.
2.2 La conciencia psicológica
2.2.1 Caracteres fundamentales de la conciencia
Psicológica.
2.2.2 Psicología diferencial de la conciencia
psicológica.
Conclusión
Bibliografía
Anexos
6. 5
CONCIENCIA
1.1 QUÉ ES LA CONCIENCIA.
Según el autor Monge, À (1991); afirma que la
conciencia del hombre está compuesta por todo aquello que
él conoce con lo que estado en contacto a través de las
experiencias adquiridas durante su vida. De manera que la
conciencia es propiedad única de cada corriente de vida
individual, y es la única actividad que no puede ser robada
o destruida. Por lo tanto, aquello que el hombre construye
en su conciencia mediante la contemplación y esfuerzo, le
pertenece para toda la eternidad.
Afirma de una persona que actúa éticamente se puede
decir igualmente que está actuando en conciencia. Es la
conciencia en al que juzga si un determinado acto es bueno
o malo. Así que todos distinguimos a una persona de buena
conciencia de otra de mala conciencia. Sin embrago ala
conciencia es, pues, una realidad de experiencia. Cada
hombre cuando actúa, juzga si esta obrando bien o mal. La
conciencia la aprueba cuando hace el bien, le recrimina
cuando hace mal.
Esto es así porque la inteligencia humana tiene un
conocimiento practico de lo que suelen llamar los primeros
principios del orden moral, hay que hacer el bien, hay que
7. 6
evitar el mal. También a la luz de estos principios, la
conciencia juzga sobre los actos concretos que se van a
realizar. Puede decirse que la conciencia establece un
juicio en el que se aplican esos principios a los actos
concretos.
Sucede si embargo que esos primeros principios son
todavía demasiado genéricos; la misma razón humana debe ir
desarrollando los para saber más en concreto donde está el
bien y el mal. Ahí entronca la ley natural, pues la
conciencia no determina arbitrariamente lo que es bueno o
malo sino que juzga como bueno o malo de acuerdo con la
norma de moral que le viene dada, y esa norma es la ley
natural.
Así que el autor Gormac, B (1276); pues si se puede
definir la conciencia como una facultad o juicio moral que
distingue entre el bien o mal, evidentemente, tiene que
juzgar de acuerdo con alguna norma, criterio o criterios.
Sin embargo Ayllón Ramón (2002); nos dice que la
conciencia como un simple movimiento cultural o religioso
que se transmite de padres a hijos por su indudable valor
educativo. Sin embargo, la conciencia no es un invento, un
elemento real de nuestra estructura psicológica, con la
8. 7
misma realidad que la inteligencia, la voluntad o la
memoria.
De tal manera De Torre, J (1990); como ya hemos visto,
el hombre puede conocer la ley moral mediante el uso de la
mera razón natural. En general, la conciencia es en darse
cuenta lo que sabemos, por ello la concia en su sentido
primario es una conciencia psicológica.
Entonces Ayllón, R (2002); la conciencia es un
instrumento de medida que pertenece al hombre, pero la
realidad medida que no pertenece al hombre, sino que tiene
existencia de leyes propias.
Además Sayes, J (2002); la conciencia no obliga por si
misma si no por que refleja la verdad, por que es
instrumento de la verdad.
En primer lugar Gay, Bochaca (1998); en realidad hoy
en día la referencia al respecto de la conciencia persona
es reclamada como un derecho fundamental del hombre.
Finalmente la conciencia como fuente de la misma, cada
cual tiene su propia conciencia.
9. 8
1.2 CONCIENCIA Y VERDAD.
Así que Gormac B. (1276); la verdad es independiente
de la conciencia. Pero la conciencia no es independiente de
la verdad. En las elecciones que realmente sean de
conciencia, uno no elige la verdad como si fuera una verdad
de entre otras posibles verdades.
Una verdadera, y una sola, se presentan a la mente
como real y verdadera, y esta o se acepta o se rechaza.
Pero incluso una vez rechazada sigue presentándosenos como
verdad. Además el hombre no puede deshacerse de ella. Por
mucho que intente someterla a su mente, fracasa. Por esta
razón, porque la verdad es más fuerte que la mente del
hombre.
Es decir frente a su fuerza, uno solo puede
esquivarla, apartando su mente de ella, declarándola fuera
de juego, serrada a cualquier consideración mental
posterior. Pero, si lo ase así, la que, de hecho, queda
descalificada y, sobre todo, dañada es su propia mente. Por
esta razón no se puede manipular la verdad.
Un hombre no puede ir creando sus propias verdades.
Esto solo lo puede hacer con el error. Desde luego, son,
muchos los hombres que fabrican sus propios errores y los
10. 9
llaman verdades. Además porque el error si que se puede
manipular. El error es totalmente maleable.
Es fácil subordinarlo ala mente humana, porque es
producto de la mente humana. Pero la verdad esta por encima
del hombre. La verdad esta ligada al ser y obrar de Dios.
La verdad, por lo tanto, la verdad autentica, siempre es
algo más grande que la mente humana. Debe ser respetada y
buscada con humildad.
Para verla, hay que mirar hacia arriba. Un hombre, de
echo, actúa según su conciencia solamente cuando esta
mirando”hacia arriba” en sus acciones, cuando esta
siguiendo una norma de verdad que esta por enzima de el, y
que intenta respetar y alcanzar.
Finalmente; si la conciencia hay a de conservar su
autentica naturaleza como facultada para buscarla y
alcanzar la verdad, sobre todo la verdad moral, debe
conservar esta actitud de humildad. La soberbia siempre
esta intentando imponerse.
Si se le permite, tendera a adoptar una actitud de
dominio hacia la verdad. Y es entonces cuando emerge la
conciencia con pretensiones de “facultad creadora de
verdad”
11. 10
1.3 CONCIENCIA HUMANA.
Así mismo puedo afirmar; según el autor Sayes, J
(2002); el hombre toma conciencia de que existen realidades
entorno a el y, al mismo tiempo, es el único ser que se ase
auto presente, es decir, que puede volver sobre si mismo
diciendo “yo”. Es lo que algunos filósofos han dado en
llamar ensimismamiento.
Por lo tanto la subjetividad humana aparece vinculada
a la objetividad que pone al hombre en relación con las
realidades distintas de la suya. Esta dimensión de la
conciencia humana le ase al hombre un ser de realidades,
bien en cuanto que conoce todo lo que le rodea en cuanto
realidades distintas de su yo, bien en cuanto que conoce su
propio yo como una realidad.
Por esta razón su conciencia, el hombre es el único
ser de este mundo que puede aunar en si el pasado y el
futuro por medio de su memoria y su imaginación.
Así que el hombre, por el contrario, puede hacer
presente el pasado como vivido y hacerlo así vivo en su
memoria.
12. 11
Así descubre su historia vivida y al traerla al hoy de
su vida, puede descubrir en ella potencialidades de futuro,
en cuanto que son potencialidades aun no realizadas. Sea
distinguido acertadamente entre el tiempo como mera
sucesión de instantes, en el que solo se da el presente
(puesto que el pasado ya fue y el futuro todavía no es),
del tiempo vivido pero el hombre pues el hombre puede
revivir el pasado en su memoria y presentir el futuro.
De este modo, el pasado aparece así no solo como algo
almacenado en el recuerdo, sino como virtualidad del
presente, de modo que el pasado y el futuro si viven como
en función del futuro. El futuro, propiciado cada ves mas
por la técnica moderna que abre posibilidades nuevas,
aparece como una posibilidad misma para el hombre, el cual
tiende a su perfección en cuanto que, siendo consiente de
su fenitud, busca de la plena autorrealización de si mismo.
Esta es la dimensión histórica del hombre, el tiempo vivido
desde la conciencia.
De manera que el hombre realiza su historia por medio
de la libertad, posibilitada por el hecho de su
autonciencia le distancia de las cosas conocidas como
realidades distintas de su yo y que, por tanto, puede
elegir en orden a sus fines. El hombre es capas de decidir
por si mismo y aparece como dueño de sus actos. Cada hombre
13. 12
vive y proyecta en cuanto que espera. El hombre esta, pues,
esencialmente proyectado así el futuro.
Pero el hombre no vive su autoconciencia en una
desnuda realidad de puro espíritu. Mas bien el hombre, en
todo caso, es un espíritu encarnado, un espíritu hecho
cuerpo. Y el cuerpo no es simplemente la posesión de un
espacio de materia, sino una relación con el mundo y con
los demás. Finalmente el hombre toma conciencia de las
cosas en cuantas realidades, comenzando el contacto con
ellas por medio de los sentidos corporales, al tiempo que
las capta con su conciencia espiritual con realidades
distintas de si.
Todo conocimiento humano comienza por la relación
sensorial. Su espíritu se mantiene, pues, aquí, por una
relación con el mundo por su condición misma de espíritu
encarnado.
1.4 CONCIENCIA CATÓLICA Y CONCIENCIA PROTESTANTE
Sin embargo Gormac, B (1276); nos afirma esta idea que
existe una verdad superior a las leyes hechas por los
hombres o a las voluntades de los individuos (y que debe
ser respetadas por ellas), fue universalmente aceptada en
el mundo cristiano hasta el siglo XVI. El protestantismo,
14. 13
en un principio, no parecía rechazar esta afirmación
cristiana de la existencia de una verdadera objetiva y
ultima, fuera de la mente humana, que está por encima de
ella, y que existe aun cuando muchos hombres no la vean o
no la respeten.
De manera que podrían distinguirse como dos modos, uno
católico y otro protestante, de enfocar la cuestión; venían
a existir, en la esfera de la moralidad de la conciencia
católica y la conciencia protestante.
En primer lugar la conciencia católica: Para
complementar sus esfuerzos íntimos en distinguir el bien y
el mal, se atenía a unas normas que venían del exterior de
la voluntad humana, es decir, que venían de la realidad
misma de las cosas, y, por tanto, en definitiva, de Dios a
través de su creación (revelación natural) y de su
redención (revelación sobre natural); normas que por
proceder del mismo Dios (que habla, con autoridad, no solo
en su encarnación, sino también en esa prolongación de su
vida que es la iglesia), aceptada como infaliblemente
verdaderas.
En segundo lugar la conciencia protestante: En su
sensibilidad a la verdad moral, reconocía aparentemente la
15. 14
ayuda y garantía de una norma externa, objetiva, la de las
enseñanzas divinas de las sagradas escrituras.
Pero, en la practica, esto iba a tener cada vez menos
valor porque la norma “objetiva” del evangelio fue
subordinada al principio protestante del llamado “libre
examen” (al menos en la mayoría de los grupos o sectas
protestantes).
A pesar de este principio, se puede afirmar que en el
momento de la rebelión protestante, y por largo tiempo
después, la ética de las diversas sectas no pretendía negar
la existencia de la verdad objetiva de las normas de la
moralidad, sino que se limitaba a decir que el conocimiento
de estas normas se puede alcanzar por una interpretación
personal o privada y, por tanto, y en ultima instancia, por
una interpretación subjetiva de la doctrina de Cristo.
Nos hallamos, por tanto, ante dos conceptos contrapuestos
de la conciencia y de la relación entre la conciencia y la
verdad. Dos conciencias que contrastan entre si.
Cada una se presenta como norma de la verdad. La
conciencia católica, que tiende a carear cualquier juicio
que se alce desde adentro como voz de la verdad con una
autoridad externa y objetiva; y la conciencia protestante,
que tiende (en ultima instancia) a carear a cualquier voz
16. 15
que le hable con autoridad desde afuera (la sagrada
escritura, la tradición) con su interpretación interior y
personal.
La concia católica, con una tendencia mantenido por
garantía divina; y la conciencia protestante, con una
tendencia, en definitiva, a mirar solo Asia dentro, donde,
en última instancia, la voz de Dios habla en lo más
profundo de cada alma individual.
Es enorme la diferencia entre estos dos conceptos de
conciencia. Sin embargo, coincidían en un tiempo
importantísimo, en la medida en q ambos no solamente
reconocían la existencia de una verdad objetiva, sino que
miraban la conciencia como una facultad capaz de alcanzarla
esta verdad.
Ambos conceptos en otras palabras, consideraban la
conciencia como una facultad hecha para buscar la verdad (y
hecha, naturalmente, para hallarla).
Es un terreno de acuerdo verdaderamente importante.
Quizá no nos damos cuenta de su importancia hasta observar
la situación que se crea cuando desaparece, cuando la
filosofía, del “libré examen” (de la total “independencia”
del juicio privado) llega a un punto (al que tiende
17. 16
inevitablemente) en el que toda creencia en la existencia
de una verdad objetiva ha desaparecido.
En otras palabras simplificando y tratando de resumir
los puntos opuestos, el católico creía que la norma última
y suprema por la que la conciencia individual se puede
orientar, en su afán de interpretar y seguir el evangelio y
la ley natural, reside en una autoridad y una tradición
externas y garantizadas por Dios; mientras que el
protestante, o la mayoría de ellos, creía que era norma
suprema reside en la conciencia misma.
TIPOS DE CONCIENCIA
2.1 LA CONCIENCIA MORAL.
Según el autor Jolivet, Regis; (1982); nos dice que la
palabra conciencia significa saber conjunto; comprende
junto con los principios morales de la ley natural el
conocimiento de las circunstancia determinadas, de hecho, a
las que hay que aplicar aquellos principios. Sin embargo
la ley moral es un conjunto de verdades a las que debe
conformarse el obrar humano; pero como las acciones del
hombre son siempre singulares y concretas, el hombre
necesita aplicar la ley moral a cada acción concreta.
18. 17
En este sentido, la aplicación de la ciencia al acto
se llama conciencia moral. La conciencia no es una facultad
distinta del entendimiento; pues de lo contrario los
juicios morales serian irracionales. Por eso, la conciencia
no es otra cosa que el intelecto en la función especifica
de juzgar acerca de la bondad o malicia de nuestros propios
actos.
Por ello, definimos la conciencia como el juicio del
intelecto práctico, que a partir de la ley natural juzga
acerca de la bondad o malicia de un acto singular.
Así mismo según el autor Ayllón J. Ramón (2002); nos afirma
que necesita una reanimación de la conciencia moral, es así
que la conciencia moral, es decir, el sentido del bien o
del mal, de justo o de lo injusto, es uno de los atributos
fundamentales del ser humano y se encuentra, bajo
modalidades y con ocasiones muy diversas, en todos los
individuos (excepto en los idiotas) y en todas las
sociedades.
Es por eso que la conciencia moral se manifiesta cada día
con una violencia que aleja cualquier idea de
adormecimiento o de reanimación. En conclusión, la
conciencia moral es un instrumento tan sólido como difícil
de regular: jamás esta fuera de uso y casi siempre se
encuentra estropeada.
19. 18
Mientras que el autor Rodriguez, A. (19891); dice que
la conciencia moral tiene un carácter prevalentemente,
aunque no exclusivamente congnocitivo. La conciencia moral
es un acto; no un habito. La conciencia es un juicio de la
razón que se puede realizar en diversos momentos. La
conciencia moral esta se puede definir como la presencia de
si mismo a si mismo, es una forma de conocimiento; la
conciencia moral expresa un juicio de valor.
Además el autor Gorman, B (1276); la conciencia moral
puede ayudarnos a comprender mejor su naturaleza y su
funcionamiento. Y también se ha considerado la conciencia
moral como una expresión de la ley divina. La conciencia
moral al ser humano para que pueda reconocer la ley
natural, que es el desarrollo de la ley de Dios en este
mundo. Finalmente la conciencia moral es una función de la
persona humana.
2.1.1 MODALIDADES DE LA CONCIENCIA MORAL.
Según Jolivet, Regis (1982); la conciencia presenta
diferentes modalidades según a lo que se refiere.
Estudiaremos ahora los tres casos más comunes.
20. 19
a) Por su relación al acto:
Antecedentes: Es la que juzga sobre un acto
que se va a realizar mandándolo o prohibiéndolo y
otras veces, aconsejándolo o discutiéndolo.
Consecuente: Es la que aprueba o desaprueba
un acto ya realizado produciendo auto probación o
remordimiento.
Concomitante: Es lo que acompaña a la
realización del acto, es decir, el darse cuenta, de
que se realiza.
b) Por la conformidad con la ley moral:
Verdadera: Es aquella que juzga como bueno a
aquello que es realmente bueno, o como malo a
aquello que es realmente malo; es decir, juzga
conforme a la ley moral.
Errónea o falsa: Es aquella que juzga como
bueno lo que es en realidad malo y como malo lo que
en realidad es bueno. Es decir juzga con desacuerdo
a la ley moral.
c) Por el tipo de asentimiento:
Cierta: Es la que juzga sin temor a la que
la posibilidad de la contraria pueda ser verdad. Es
decir juzga con firmeza.
21. 20
Dudosa: Es aquella que suspende el juicio de
la conciencia por que la inteligencia no ve motivos
entre las dos posibilidades de actuar. Cuando
admite con probabilidad una de ambas
probabilidades, admitiendo que la opuesta sea
cierta, se llama conciencia probable.
d) Por relación a la formación o deformación:
Conciencia laxa: Es aquella que quita razón
de pecado a cualquier acción que realmente la
tiene, sin fundamento alguno. Esta a su ves se
puede dividir es cauterizada y farisaica. Se llama
cauterizada cuando por la frecuente repetición de
un cierto tipo de pecado no llega a advertir su
maldad. La farisaica es aquella que sensibiliza a
la persona ante algunos actos externos, pero peca
sin escrúpulo es materia de gran importancia.
Conciencia escrupulosa: Es aquella que teme
cometer pecado en ocasiones sin ningún tipo de
motivo fundado. La conciencia escrupulosa atormenta
al que la posee suscitando dudas que ya fueron
eliminadas anteriormente. Y esta escrupulosidad
llega a la ansiedad neurótica que constituye más un
estado enfermizo que ético.
22. 21
Recta o delicada: Es la que juzga rectamente
con verdad o certeza. Esta conciencia se puede
adquirir con una cuidada formación de la misma.
2.1.2 PRUEBAS DE LA EXISTENCIA DE LA CONCIENCIA
MORAL.
Según Gay Bochaca; (1998); nos dice que la conciencia
que la existencia de la conciencia moral es algo
experimentable por cada uno de nosotros, además de darse
en todas las religiones y culturas. No obstante lo más
evidente es que cada hombre puede reflexionar y ser
consciente de la actividad que realiza. En un primer
estadio se puede afirmar que el animal siente, pero no
siente. Es decir, no tiene conciencia de las propias
sensaciones. En cambio el hombre. Por ejemplo, si se enfría
y se siente enfriado, lo vive. En otro estadio, nos damos
cuenta de que el ser humano tiene también conciencia
intelectual, racional, es decir, la reflexión se da,
además, en el nivel intelectual. Es el caer en la cuenta,
cuyo significado es mas intima que la mera sensación.
En un ultimo estadio el ser humano reflexiona sobre lo
que realiza y emite un juicio practico al que denominamos
conciencia moral, y así al hombre le recrimina su
conciencia, si a hecho mal o le alaba, si a hecho bien.
23. 22
2.2 LA CONCIENCIA PSICOLÓGICA.
Además Jolivet, Regis; (1982); la conciencia
psicológica se ha considerado como una cualidad del ser
vivo que distingue el orden de lo sensorial del
perteneciente a los procesos vegetativos o biológicos. La
conciencia exige una diferencia orgánica en los animales,
pero como los órganos de los sentidos varían en numero y
capacidad funcional revela que el conocimiento no depende
de exclusivamente del objeto. Lo que esta fuera del
individuo se incorpora sin que este sufra una
transformación esencial.
Lo percibido se hace conciencia psicológica no es un
mero espejo de la realidad, si no una operación realizada
por la propia naturaleza del individuo, y el común
denominador de esta operación en su originalidad creadora y
su carácter unitario. Por eso se distingue entre contorno
(el conjunto de lo que forma parte del espacio vital del
individuo) y mundo circundante (la parte del contorno capaz
de ser experimentado íntimamente). La conciencia ha de
concebirse como la relación que se establece entre el
sujeto y el objeto. Psicológicamente, no puede haber sin
sujeto capaz de conocerlo, ni sujeto sin referencia real
significativa.
24. 23
Así que De Torre, J. M; (1990); la conciencia
psicológica es un darse cuenta de la presencia de si
mismo; de las cosas y de los hechos que se encuentran
fuera del yo, y de la reflexión resultante de los propios
actos y de las realidades existentes en el mundo que le
rodea. De este aspecto psicológico resulta la
concientizaciòn. Mediante proceso de enseñanza o de
sensibilidad, las personas se dan cuenta de lo que acontece
en el mundo natural y social.
Sin embargo según Castellote, J. (2002); con el fin de
aclarar el concepto de la conciencia psicológica nos
serviremos de nuestra experiencia diaria. Observados, por
ejemplo, una puesta del sol, una serie de sensaciones, de
percepción, de imágenes, de recuerdo, de afecto nos
invaden. Nos sentimos felices. Todo esto constituye en ese
momento nuestra conciencia psicológica. Podemos, pues,
legítimamente, decir que la conciencia psicológica es un
conjunto de experiencias psíquicas inmediatas y actuales
que en un cierto momento aprendemos de nuestro yo.
Mediante la conciencia psicológica no solo nos damos
cuenta de lo que pasa dentro de nosotros en un momento
dado, si no que también nos damos cuenta de nuestra propia
experiencia. La conciencia psicológica nos permite captar
los fenómenos psicológicos como nuestros; a la vez dichos
25. 24
fenómenos psicológicos constituyen una unidad que forma el
yo de cada uno de nosotros.
2.2.1. CARACTERES FUNDAMENTALES DE LA CONCIENCIA
PSICOLÓGICA.
Según el autor Jolivet, Regis; (1982); los caracteres
fundamentales de la conciencia psicológica son:
Dinamismo: Como acción de lo anímico hacia
la realidad.
Totalidad: Como creación de conjuntos
dotados de unidad.
Subjetividad: Como operación perteneciente a
un yo concreto.
Intencionalidad: Como función reveladora del
sentido de la realidad.
2.2.2. PSICOLOGÍA DIFERENCIAL DE LA CONCIENCIA
PSICOLÓGICA.
Por lo tanto según Jolivet. Règis; (1982); la
conciencia se muestra tanto como un hecho vital como una
operación de la mente. Como hecho vital, hablamos de la
conciencia de los animales y de los hombres. Como operación
de la mente tiene un aspecto exclusivo del hombre. Al darse
26. 25
cuenta, que atribuimos a todos los animales, el hombre
agrega la reflexión. La reflexión agrupa a la imagen
externa en un centro que contrapone al mundo exterior (ese
centro se llama espacio interior). A ese espacio interior
es a lo que se conoce como conciencia psicológica.
27. 26
Conclusiones
1. El ser humano, en su condición actual está
espiritualmente "dormido" e "inconsciente", por lo que es
el causante de la situación tan lamentable a la que se
enfrenta la humanidad.
2. Creer que estamos conscientes y mentir son los dos
grandes obstáculos a los que se enfrenta todo ser humano
que inicia este proceso de "despertar" y "conocerse a sí
mismo".
3. La meditación y reflexión en la palabra sagrada revelada
por Dios a través de sus Profetas, permite limpiar el
corazón y la mente a fin de captar las realidades
espirituales, adquirir conocimiento de sí mismo y lograr la
autenticidad con la cual el creador dotó a cada uno de los
seres humanos.
4. El creer que sabemos y conocemos la verdad o sea creer
que estamos conscientes, el mentir (hablar de cosas que no
conocemos), hablar mucho, etc. son obstáculos que hay que
superar para lograr "despertar" y elevar el estado de
conciencia.
28. 27
5. Para escapar de la prisión necesita la influencia de
pensamientos de mentes superiores. La palabra sagrada de
Dios a través de sus Profetas tiene el poder de despertar
al ser humano y hacerlo consciente a su realidad
espiritual. La reflexión y la meditación contribuyen a
liberarlo.
6. La conciencia es obviamente unas de las maravillas del
ser humano y es lo que realmente nos permite darnos cuenta
de lo que somos realmente, criaturas especiales, resultado
de una mente inteligente.
7. la conciencia moral es un instrumento tan sólido como
difícil de regular: jamás esta fuera de uso y casi siempre
se encuentra estropeada.
29. 28
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICAS
1.- Castellote, cubelles, salvador (2002); comprendido
de ética filosófica e Historia de la ética;
Valencia; Edicep.
2.-Gay Bochaca, José; (1998); curso básico de ética
cristiana; Madrid; Ediciones; Rialps, S.A.
3.- Sayes J. (2002); antropología y moral de la “nueva
moral” a la Veritatis Splendor ; Madrid; editorial
Palabra.
4.-Jolivet, Règis; (1982); curso de filosofía
(tratado Completo); buenos aires; editorial; club de
lectores.
5.-Monge Miguel Ángel (1991); Ética, salud y
enfermedad, Madrid, editorial; Palabra.
6.-Gorman, B (1276); conciencia y libertad. Traduc,
Bañares; Madrid ediciones rialps S.A.
7.-Ayllón José Ramón (2002); entorno al hombre
“Introducción a la filosofía; Madrid, editorial;
Ediciones es rialp.
8.- Rodriguez, LLuño, Ángel; (1991); ética, (1era ed.)
España; Edición, Universidad de Navarra.
9.- De torre, José María; (1990); Filosofía cristiana:
Madrid; editorial: ediciones palabra.
30. 29
Índice.
Introducción 2
Sumario 4
CAPITULO I: Conciencia 5
1.5 Que es la conciencia. 5
1.6 Conciencia y verdad. 8
1.7 Conciencia humana. 10
1.8 Conciencia católica y conciencia protestante. 12
CAPITULO II: Tipos de conciencia 16
2.1 La conciencia moral 16
2.1.1 Modalidad de la conciencia moral. 18
2.1.2 Pruebas de la existencia de la conciencia
Moral. 21
2.2 La conciencia psicológica 21
2.2.1 Caracteres fundamentales de la conciencia
Psicológica. 24
2.2.2 Psicología diferencial de la conciencia
psicológica. 24
Conclusión 26
Bibliografía 28
Índice 33
Anexos 34
31. 30
Cronograma
Elección del tema, fundamentación 26 de
debidamente. Agosto.
Presentación de fichas bibliográficas en
(APA), y material bibliográfico necesario.
2–9 Sept.
Identificación de las ideas principales en el
material bibliográfico presentado.
16–23 Sept.
Elaboración de un esquema del trabajo con 30 Sept. –
secuencia lógica, (organizar la información 07 Oct.
en capítulos, temas sub temas).
Elaboración del plan de investigación 14-21 Oct.
Presentación del borrador (todo a mano). 28 Oct.- 11
Novi.
Presentación final del trabajo concluido y 18–16 Dic.
correcciones.
Sustentación final del trabajo de 2_16 Dic.
investigación.
32. 31
Instrumento para evaluar el informe final de la
investigación.
PUNTA
Aspecto INDICADOR CALIFICATIVO
JE
Contiene las verdades elementales del 1
tema tratado.
Sumario
Esta estructurado en capitulo y sub 1
capítulos.
Tienes un Orden lógico es su 1
estructuración.
Señala de qué trata el trabajo de 1
investigación.
Introducc
ión
Señala la importancia o relevancia del 1
trabajo de investigación.
Precisa el propósito del trabajo de 1
investigación.
La redacción de las ideas es clara, 2
Desarroll
inteligible, y ordenada.
o
Hace uso de una buena ortografía. 1
Sustenta los temas con suficientes 2
citas textuales, haciendo la referencia
bibliográfica en forma adecuada.
33. 32
Considera conceptos o ideas esenciales y 1
fundamentales en el trabajo.
Elabora comentarios personales a cada 1
cita textuales.
Son enunciados que derivan en forma 1
consecuente del desarrollo del trabajo
Conclusio
de investigación.
nes
Son claras, coherentes e inteligibles. 1
Son suficientes. 1
Las referencias bibliográficas estas 1
técnicamente elaboradas.
Bibliogra
fía
Son suficientes. 1
Material bibliográfico utilizado 1
(separatas).
Anexos
Están registrados los datos 1
bibliográficos en cada separata.
Otros 1
Elementos La presentación es adecuada. 1
Formales
Hace uso adecuado de márgenes. 1
Total. 20
34. 33
Instrumento para evaluar la sustentación del informe de
investigación
Indicador puntaje calificativo
Expone las ideas con claridad y 1
precisión.
Demuestra dominio de marco teórico. 1
Responde las interrogantes 3
planteadas con claridad y
precisión.
Hace referencia a las fuentes 1
bibliográficas, mencionando autor y
titulo de la obra consultada.
Su tono de voz es adecuado. Llega a 2
todos los estudiantes.
Hace uso de material didáctico, 2
elaborado correctamente.
Su presentación personal es 2
adecuada.
Tienes dominio emocional. 1
Acepta sugerencias y observaciones 1
al trabajo.
Total 20
35. 34
Anexos.
Castellote, cubelles, salvador (2002);
comprendido de ética filosófica e
Historia de la ética; Valencia; Edicep.
Punto claves:
Definición de la conciencia.
Clases de conciencia.
Gay Bochaca, José; (1998); curso básico de
ética cristiana; Madrid; Ediciones; Rialps,
S.A.
Puntos clave:
Conciencia moral.
Conciencia en moral cristiana.
Conciencia y ley.
36. 35
Sayes J. (2002); antropología y moral
de la “nueva moral” a la Veritatis
Splendor ; Madrid; editorial Palabra.
Punto claves:
Conciencia moral.
Conciencia humana.
Jolivet, Règis; (1982); curso de
filosofía (tratado Completo); buenos
aires; editorial; club de lectores.
Punto claves:
Conciencia psicológica.
Caracteres fundamentales dela conciencia
psicológica.
Psicología diferencial de la conciencia
psicológica.
Continuidad de la conciencia psicológica.
Modalidades de la conciencia moral.
37. 36
Monge Miguel Ángel (1991); Ética, salud y
enfermedad, Madrid, editorial; Palabra.
Punto claves:
Concepto de conciencia.
Gorman, B (1276); conciencia y libertad.
Traduc, Bañares; Madrid ediciones rialps S.A.
Punto claves:
Definición de la conciencia.
Cuando la conciencia protesta.
Conciencia y verdad.
Conciencia católica.
Conciencia protestante.
38. 37
Ayllón José Ramón (2002); entorno al hombre
“Introducción a la filosofía; Madrid,
editorial; Ediciones es rialp.
Punto claves:
Concepto de conciencia.
Conciencia moral.
Rodriguez, LLuño, Ángel; (1991); ética, (1era
ed.) España; Edición, Universidad de Navarra.
Punto claves:
Conciencia moral.
Modalidades de la conciencia.
De torre, José María; (1990); Filosofía
cristiana: Madrid; editorial: ediciones
palabra.
Punto claves:
Concepto de conciencia.