La Constitución de 1999 de Venezuela fue el resultado de una crisis en el sistema de partidos políticos dominantes y de un estallido social, lo que llevó a la necesidad de un cambio en el liderazgo político a través de una Asamblea Nacional Constituyente en 1999. El objetivo fue reconstituir el sistema político para que fuera más democrático y crear un Estado Social de Derecho con mayor participación ciudadana y derechos sociales y políticos.