Este deporte extremo involucra deslizarse a alta velocidad sobre un monopatín de 2 metros de largo y ruedas sobre asfalto, controlando la velocidad y trayectoria con la posición del cuerpo. Las velocidades alcanzan los 130 km/h y se requiere equipo protector como casco y rodilleras para evitar lesiones al practicarse en carreteras cerradas.
2. Cada persona se desliza recostada sobre un “carrito”
que mide alrededor de 2 metros de largo y 40
centímetros de ancho con ruedas preparadas sobre el
asfalto, con la gravedad como único empuje.
En algunas ocasiones las velocidades de estos
monopatines alcanza una velocidad de hasta 130 km/h
3. La velocidad se controla con la posición del cuerpo (al mejor
estilo del luge que se realiza sobre nieve). Para frenar se utilizan
los pies, por eso es fundamental que la suela sea buena, puede ser
una con goma anti abrasiva o un pedazo de neumático ya que no
se permite el uso de un freno adicional
4. Para trazar las curvas hay que tener presente:
La frenada se realiza al final de la recta anterior, luego
la curva se traza sin frenar.
Evitar los giros bruscos y derrapes que restan velocidad
Si el giro es muy cerrado, es frecuente el “descolgarse”
por el interior de la tabla.
5. La reducida altura a la que se pilota, unos 7-8 cm. del
suelo hace sea un vehículo extremadamente estable.
Siempre debe de practicarse en carreteras cortadas al
tráfico.
6. Además, no olvidarse de: casco, rodilleras y todo
elemento protector para no lastimarse.