El documento narra las experiencias de Luna y su padre Pedro en un día. Pedro recuerda su infancia en el campo y cómo un día él y su amiga Antonia encontraron un perro perdido y pasaron el día buscándole un hogar en lugar de ir a la escuela. Finalmente encontraron a alguien llamado Jacinta dispuesta a cuidar al perro. Pedro terminó agotado después de ayudar a su padre a cosechar maíz todo el día. Pedro ahora está cansado de trabajar en la ciudad y se durmió junto a Luna recordando su infancia en el campo
3. En una mañana como cualquier
otra, Luna se despertó y se
encontró con la tajada de pan de
todas las mañanas.
4. Cuando su madre la llevaba al
colegio, veía a muchas madres
haciendo lo mismo, a Luna le
gustaba mirar los buses llenos de
gente y como se intentaban
montar en estos.
Al llegar al colegio la profesora
Claudia les contó la historia de
un perro que, persiguiendo un
carro, se perdió en un lugar
verde y sin ruidos.
5. En clase de matemáticas, los
computadores no funcionaron y
el profesor los dejó salir al patio.
En Educación Física los pusieron
a dar vueltas a la cancha de
fútbol, felicitaban siempre al que
lo hiciera más rápido.
6. En el recreo Andrea, una amiga
de Luna, hizo un escándalo
porque le salió una papa negra en
el paquete. Cuando Luna llegó a
ver, ya habían botado todas las
papas que quedaban a la basura.
7. Para clase de Biología habían
comprado diez pollitos iguales,
los abrían para mirarlos por
dentro y ya solo quedaban dos.
En el almuerzo, como era
habitual, Luna se comió el arroz,
la papa y el pedazo de carne,
dejando lo verde en el plato.
8. Al llegar a casa, su madre le tenía
listo su plato de pasta. Al observar
a su padre viendo televisión se
sentó a su lado y se durmió.
...Luna estaba cansada.
10. Pedro, el padre de Luna, se
acordó de un día en el que su
mamá lo levantó temprano con
el desayuno: arepas, huevos, café
y calentao, un gran desayuno
como pretexto para ponerlo a
moler maíz hasta la hora de salir
a la escuela.
11. Pedro se encontró con su vecina
Antonia para caminar hasta la
escuela. En el camino hallaron un
perro que estaba perdido y le
insistieron hasta que los
acompañó a la escuela. Al llegar,
los perros del lugar, no lo dejaron
entrar y le ladraron hasta que el
perro salió corriendo de miedo.
Pedro y Antonia, acordaron que
le iban a buscar casa y decidieron
no entrar a la escuela. Hablaron
con la señora de los dulces, con el
dueño de la carnicería, con la tía
de Antonia, y todos ellos se
negaron a recibir al perro. No
conocían a muchos más en el
pueblo y decidieron ir rumbo a
sus casas.
12. En el sembrado de Don Alberto
había dos conocidos entre la
papa, que estaban cosechando. El
perro no sabía por dónde pasar la
cerca, y tuvieron que ayudarlo.
Al caminar entre los surcos, el
perro se veía asustado. Ninguno
quiso al perro, pero los
convidaron a seleccionar papa; la
gusaneada se apartaba de la
comible. Salieron de allí con el
perro y una bolsa de papa.
13. Se dirigieron a donde doña
Bárbara. Ella los recibió con un
café y dos panes, pero negó
también al perro; les dijo que la
acompañaran hasta donde
Jacinta que estaba buscando uno.
14. El perro ya estaba cansado, a
mitad de camino les tocó arrearlo
porque ya no quería andar.
Cuando llegaron Jacinta los
regañó por no estar en la escuela,
pero al ver la causa por la que
habían llegado hasta allí, decidió
dejarlos tranquilos y darles
almuerzo para que pudieran
volver tranquilamente a sus
lugares. Jacinta necesitaba un
perro y se lo iba a quedar, pero
dijo que le iba a tocar duro
porque ella vivía muy arriba y el
perro era “fino y flojo”.
La misión de Pedro y Antonia
había concluido, le dejaron la
papa a Jacinta, que se quedó
hablando con Bárbara del perro.
15. Se despidieron de las abuelas y
bajaron la montaña para ir a la
escuela. Cuando llegaron ya
habian acabado las clases;
perdieron un día de escuela, pero
habían pasado un gran día gracias
al perro perdido.
Salieron de nuevo para sus casas.
16. Pedro entró a su casa, su papá
casi no lo deja ni tomar un
respiro cuando se lo llevó a
terminar de coger el maíz.
Estuvieron cogiendo maíz hasta
que anocheció y volvieron a casa
para comer; ese día, Pedro estaba
realmente cansado.
...También estaba cansado de
trabajar en la ciudad, y se
durmió al lado de Luna.
PDF
http://www.slideshare.net/villegacion/volveralatierra29228016