Este poema describe la muerte de un niño y el viaje de su alma. En cinco estrofas, el poema explora cómo el alma del niño busca un nuevo hogar en la naturaleza, como una flor o un pájaro, y cómo su cuerpo es enterrado bajo tierra mientras las campanas suenan y la lluvia limpia su rostro. Finalmente, el poema concluye que cuando muere la carne, el alma se queda oscura.