La Cuaresma es un periodo de 40 días en el calendario cristiano que comienza el Miércoles de Ceniza y termina antes del Jueves Santo, destinado a la preparación espiritual para la Pascua a través de la penitencia, el ayuno y la oración. Tiene sus orígenes en la tradición bíblica de retiros de 40 días de figuras como Jesús y Moisés, y se consolidó en el siglo IV como un tiempo para la renovación espiritual de toda la Iglesia.